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—Hansel, Hansel, mi amor ¿Dónde estás?—gritaba una mujer cuya voz me sonaba mu familiar.

Fuera quien fuera esa mujer sonaba preocupada. No se por qué pero esa voz me sonaba demasiado conocida, de alguna manera y por alguna extraña y desconocida razón cuando la escuché sentí mi corazón latir con mucha fuerza. ¿Quién era ella?

Yo no podía ver nada, estaba todo oscuro.

—Hansel pequeño ¿Dónde estás? Sal tenemos que huir de aquí antes de que...

No se escucho ningún ruido por unos cuantos segundos, hasta que de un momento a otro el fuerte llanto de un bebé rompió el enorme silencio que invadía el lugar y unos gritos muy débiles y ahogados se escuchaban al fondo.

¿Qué está pasando? ¿Dónde estoy?

No sé donde estoy, está todo oscuro y estrecho, traté de pararme y sentí algo suave sobre mi cabeza. ¿Qué es? Levanto mi mano para descubrir que es... ropa, es ropa. Estoy en un armario, pero ¿Dónde? ¿Qué hago aquí? ¿Quién está afuera? ¿Quién es esa mujer' ¿De quién es ese bebé? ¡oh dios! ¿Qué está pasando?

Demasiadas preguntas inundaban mi cabeza. Tenía la necesidad de salir de allí, de ver que era lo que estaba pasando, pero algo dentro de mi me advertía que no lo hiciera, que era peligroso, así que no lo hice, me quedé encerrado en el armario.

El llanto del bebé se escuchaba más y más fuerte, pero ¿Y la mujer? ¿Qué había pasado con ella?

Mi cabeza seguía atacándome con preguntas que no podía responder, que no sabía como responder. Seguí pensando y pensando atormentándome a mi mismo hasta que... la puerta del armario se abrió de repente y...

—Hola pequeño Hansel.

***

—¡No! — abrí los ojos de golpe con la respiración irregular. Me senté en mi cama con mi pecho subiendo y bajando por el sobresalto.

¿Qué estaba pasando conmigo? Todo era muy confuso no tengo idea de por qué.

Otra pesadilla, no, más bien la misma que he estado teniendo repitiéndose noche tras noche esta última semana, pero ¿Por qué? ¿Cuál era el punto? ¿Qué significa?

No sé que me pasa pero siento... no, estoy seguro de que esto tiene algo que ver conmigo, que se conecta conmigo de alguna manera. Tengo un fuerte presentimiento de que yo era una de las razones principales de esos sueños.

¿Qué significan? No lo sé y no voy a averiguarlo, al menos no por ahora.

No le si mucha importancia al tema de los sueños y me dirigí al baño para alistarme, tenía cosas más importantes que hacer que tratar de descubrir que eran esos sueños.

Tenía que hablar con Lola y pedirle perdón por lo que le hice, le pegué y se que no tengo justificación, pero no lo hice con intención, al menos no con la intención de golpearla a ella. Es que el hecho de que alguien más la llamé de ese modo o le hable de manera coqueta me afecta, me molesta demasiado, me enoja a tal grado que los celos toman el control de mi y me ciegan.

No me importa que Tyler sea su mejor amigo, yo soy su novio y ella es sólo mía y si la única manera de hacerlo entender que me pertenece sólo a mí es. golpeándolo, lo haré todas las veces que sea necesario.

Sé que suena demasiado autoritario, pero esa es la verdad, ella es mía y no permitiría que nadie me la quitara después de todo el tiempo que tuve que soportar sin ella por no haberle dicho antes que me gustaba.

Pensando aún en mi novia me baño y me visto lo más rápido posible para llegar al instituto lo más pronto posible.

***

Llegué al instituto y sin siquiera detenerme a pensarlo un poco me dirigí a los casilleros a buscar a mi novia. Cuando fui a los casillero la vi allí acompañada de las gemelas, Luis y el estúpido de Tyler.

Luis tomó su brazo para ver más de cerca el moretón que se había formado por el golpe que le dí, ella se quejaba de dolor y en ese momento quería morirme porque eso fue mi culpa, quería regresar el tiempo atrás y haberme controlado, haberme fijado y no haberla golpeado.

Fui un estúpido y aunque no halla sido a propósito me odio por ello. Me dolía verla así por mi culpa, se supone que debo cuidarla y no hacerle daño.

Poco a poco me acerco hacia donde está y logro ver con más claridad el enorme moretón en su brazo.

Tyler se percata de mi presencia y dice:

—Oh, pero miren quien llegó, el señor "yo si puedo y tú no". ¿Qué se siente haber golpeado a tú novia, mi mejor amiga? — el escuchar esas palabras viniendo de él me hizo querer golpearlo más fuerte y esta vez arruinarle su otro ojo, ya que apenas podía abrirlo por los golpes de la noche anterior.

—Tyler por favor. — le reprendió Lola.

Los chicos me miraban con desaprobación y eso me hizo sentir aún peor.

—Hola hermano. — dijo Luis a lo que yo respondí con un simple asentimiento de cabeza.

—¿Cómo pudiste golpearla Jordan? Nunca creí que pudieras ser un abusivo.— exclamó Leticia de pie frente a mi casi propensa a golpearme.

—No lo puedo creer. — dijo Marian de acuerdo con su hermana.

Yo no dije nada ante las acusaciones de las gemelas y me dirigí directo hacia mi novia.

—Lola debemos hablar. A solas. — dije mirando en dirección a nuestros amigos y Tyler.

—Ja, estás loco. Ni de broma te dejaremos a solas con ella. — dijo Leti mirándome con mucha rabia.

—No sabemos que es lo que paso chicas y además ellos son pareja, deben resolver sus asuntos solos. ¿Entienden eso? — musitó Luis dándome una mirada de comprensión.

—Bueno está bien. — dijeron ambas gemelas resignadas.

—Pues yo si no me iré a ningún lado. — rebatió Tyler.

—Tyler por favor. — intervino mi novia.

—Pero pequeña yo...

—Nada Tyler, no va a pasar nada, solo deja que hablemos . ¿si?

—Bueno está bien. — dijo Tyler para luego retirarse de allí.

—Lola yo... lo siento, sé que fui un idiota y que debí detenerme cuando te interpusiste entre Tyler y yo, pero es que estaba demasiado celoso, no pude controlarme y cuando tú interviniste la rabia que tenía era tanta que no logré detenerme antes de... de golpearte. Sé que eso no me justifica y se que debes estar demasiado enojada conmigo, pero...

—Shh. — expresó ella con calma poniendo su dedo índice sobre mis labios para que dejara de hablar

Ella no se veía para nada enojada, al contrario, estaba súper calmada. Muy diferente a la Lola que me echó de su casa anoche. No sé por qué pero su expresión me dejaba en claro que me entendía, que sabía todo lo que le diría, que no tenía de que preocuparme.

—Tranquilo Jordan, no tienes que decir nada, no tienes que disculparte, bueno al menos no conmigo.— dijo en referencia a lo golpes que le propiné Tyler y a que arruiné la cena con su mamá. — Además también tengo algo de culpa por haberme interpuesto.

—No, tú no tuviste la culpa de nada, yo fui el impulsivo y celoso. Tú solo trataste de detenerme y yo... te golpee. Te golpee y lo siento mi amor. — dije con los ojos cristalizados por la impotencia y ella colocó su mano en mi mejilla tratando de calmarme.

Subió su brazo lastimado lo mejor que pudo hasta tocar con su mano mi otra mejilla, me guió hacia ella teniendo que ponerse en puntillas por ser más pequeña que yo y me dio un suave cálido beso. Se alejó unos cuantos centímetros sin despegar las manos de mi rostro y me observó unos instantes.

—Está bien, sé que no fue tu intención y te perdono. Eso no va a hacer que deje de quererte, nada cambiará entre nosotros, pero sólo quiero que trates de controlarte, que no seas tan celoso. Se que lo haces porque me quieres, pero Tyler y yo hemos sido amigos desde que tengo memoria y no había hablado con él desde que iniciamos la secundaria. ¿Sabes lo bien que me sentí cuando me pidió que arregláramos nuestra amistad? Feliz, muy feliz porque había recuperado a mi mejor amigo. Debes entenderlo, yo te amo a ti porque eres mi novio, pero también lo adoro a él, mucho más de lo que crees, pero es solo como mi mejor amigo, es un amor de hermanos. Debes confiar en que yo no estaré con nadie más, porque solo me gustas tú, pero debes confiar en mi.

—Yo confío en ti y... trataré de controlarme, por ti. Porque te amo y no quiero tener que vivir con el miedo a la posibilidad de perderte por mis estupideces.

—Gracias Jordy.

—No, gracias a ti monita preciosa.

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