Hisui

Me encuentro cuidando a mi hija hoy, ya que Moroha está de camino a donde estaba su padre, y este se encontraba entrenando un poco lejos de aquí, ¿Recuerdan que les comente que Inuyasha iba a decirle algo importante? Bueno, ella fue para que él le dijera de qué se trataba todo el asunto y me dejó a la niña porque en sí donde se encontraba Inuyasha no era un ambiente muy agradable como para ir con niños, es riesgoso, pero nada que mi amada no pueda manejar por sí sola, además que últimamente ha entrenado mucho con sus primas, no sé qué se trae entre manos, pero algo me dice que tiene que ver con lo de Sesshomaru y el embarazo de Towa; aunque en estos momentos puedo esperar cualquier cosa de ese trío.

Hoy Kirara no estaba conmigo ya que le dije que fuera con Moroha, no hay nadie que distraiga a la pequeña así que como el buen padre que soy, me puse a jugar con ella lo que sea que estaba jugando, eso parecía hacerla muy feliz y eso me pone feliz a mí también porque provocarle alegría a un hijo es lo mejor que puede pasarte.

— Creo que ya deberías de darle un hermanito para que se distraiga — Se escuchó de repente y mi mirada se fijó en la dirección de la que provenía esa voz.

— Habías tardado en aparecer... Setsuna — Le contesto mientras busco en mi mente una excusa que pueda tener ella para aparecerse por estos lados, ya que desde que anda con mi tío casi no viene a vernos.

— Pues lo que pasa es que necesitaba decirle algo a Moroha, pero por lo que veo no está — Me da la espalda.

— Si, lo más probable es que venga esta noche o mañana — Le dije puesto que sé que no me lo preguntará pero sé que quiere saberlo igual.

— Tenemos un gran problema y solo ella es capaz de ayudarme para salvar a Towa de la desgracia — Suspiró.

Mi mente se aclaró y un sentimiento de preocupación apareció de repente al recordar que Towa estaba embarazada de Riku y que si su padre la descubría era capaz de matarlos a los dos — No me digas que... — Iba diciendo y me interrumpió.

— Exactamente — Me mira nuevamente — Mi padre tiene una gran sospecha, está por venir a ver a mi hermana, necesitamos que esté Moroha, ella y yo somos las únicas en esta aldea que podemos llegar a detenerlo ahora que Inuyasha-Sama no está.

— Precisamente ella está con él — Le comenté — Deberías ir a buscarla, quizás con suerte le pidas el favor a Inuyasha y acepte.

— No creo que sea buena idea dejar sola a Towa, recuerda que no sé en qué momento pueda aparecerse mi padre — Empuña su mano — Y no voy a dejar que la lastime, y no me refiero a golpes sino emocionalmente.

Menudo día el que vino a escoger mi amada para salir a ver a su padre, justo el día que sus primas la necesitan, roguemos para que a Sesshomaru-Sama no se le ocurra venirse todavía y le dé chance a mi esposa de llegar para que les ayude en ese problema — Pobre Towa... Su padre aún no entiende que lo que yace en su vientre es producto de un amor sincero — Pensaba en mis amigos mientras veía a Setsuna marcharse a casa de la anciana Kaede — Aún no se ha puesto a pensar que sus hijas ya están haciendo su propia vida con los hombres que aman.

Solo espero que Towa se encuentre bien si llega a tener una fuerte impresión como la que puede provocarle la ira de su padre, recuerden que las mujeres embarazadas son muy delicadas (Si lo sabré yo, aunque Moroha es muy fuerte, hubieran visto cuando estaba en ese estado, se me puso muy frágil y eso me llegó a preocupar en varias ocasiones) No creo que Sesshomaru sea capaz de hacerle algo así a su hija mayor... No lo creo, si bien tiene un carácter muy fuerte, sabemos que ama a sus hijas con toda el alma, no creo que no sepa que si hace eso, puede dañarla.

. . .

— Ya sabía sobre eso, papá — Dijo Moroha mientras se estiraba un poco — Lo que me sorprende es que tú lo sepas.

— Lo sabe toda la región — Bufó — ¡KEH! No sé quién fue el gracioso que lo contó, pero el punto es que ahora todo el mundo sabe que Towa espera un hijo y no me sorprendería que Sesshomaru ya ande detrás del padre.

— Si Hisui abrió la boca... ¡LO MATARÉ! — Resopló fuertemente por la nariz — En fin, aparte de eso... Lo otro que me comentaste, me parece perfecto... Solo que me gustaría esperar a que Sayuri esté un poco más grandecita.

— No creo que el inepto de tu marido lo haya dicho — Rodó los ojos — Sabes muy bien que lo tengo vigilado, si hubiera sido él... ¡YA LO SABRÍA!

Moroha se sonroja inmediatamente ante el comentario...

— Entonces... ¿Siempre estás vigilándonos? — Baja la mirada con mucha vergüenza — Papá...

— ¡NO! — Gritó de repente — Si estás pensando en lo que estoy pensando... La respuesta es ¡NO! Soy un padre sobreprotector, pero no llego a esa clase de espionaje.

Ambos se miraron a la cara nuevamente y viendo lo sonrojados que estaban, soltaron una gran carcajada larga y tendida, dando a entender que era una idea absurda de todas formas y que Inuyasha tenía razón, por más sobreprotector que él sea, no puede llegar a esos extremos, además que Kagome lo matará si eso llegaba a ser cierto.

— Y respecto a lo que te dije de Sayuri — Dijo para desviar el tema y salir de aquella incomodidad en la que se habían hundido ambos por causa de las suposiciones de Moroha — La verdad si me gustaría que entrenara conmigo, no será Hanyo, pero es mi nieta y no quiero que ella sea una debilucha como las demás humanas corrientes.

— Ten por seguro que así será — Le sonríe — Aunque... Tan corriente no es que digamos...

— ¿A qué te refieres con eso? — Decía intrigado — Moroha... ¿Qué no me has dicho?

— Ya te había comentado algo, que Sayuri ha estado un poco extraña — Le recordaba — Se percata de la presencia de su papá desde que está cerca de la aldea, no estoy segura, pero creo que ella o posee un buen olfato o tiene un oído muy agudo.

— Tendría que estar para averiguarlo — Se hace el pensativo — Cuando quieras me aparezco y vemos si es cierta tu teoría.

— Pues si quieres nos vamos ya — Le sugería — ¿O aún necesitas quedarte a entrenar?

— No, ya creo que he entrenado lo suficiente — Coloca a Colmillo de Acero en su hombro — Andando, que ya me dio curiosidad averiguarlo también.

Dicho eso, tomaron sus cosas y abordando a Kirara, pusieron en marcha el retorno a casa donde no se esperaban lo que iba a suceder...

. . .

Sayuri estaba dormida, ya era hora de que descansara puesto que había pasado toda la mañana durmiendo y Moroha me ha dicho que cuando es así le toca dormir en la tarde unas horas, entonces aproveché para hacer unas cosas. Estaba cortando un poco la maleza de alrededor de la casa, luego me puse a reparar unas cosas, trataba de no hacer mucho ruido que digamos pero me era imposible, no quería despertar a mi hija... Entré a corroborar de que todo anduviera bien y al parecer eso no le afectaba seguía bien dormida — Así de cansada andarás traviesa — Sonreí mientras la veía dormir — Eres lo más valioso que tengo. Hija mía.

Todo iba tranquilo, hasta que de repente veo pasar a Ah-Uh por encima de la casa en dirección hacia la casa de la anciana Kaede. Mi cuerpo se erizó por completo ya que eso solo podía significar una cosa, y esa era que Sesshomaru-Sama estaba aquí y eso no es bueno — ¡MALDICIÓN! — Exclamé — Moroha aún no regresa y no me puedo mover de la casa hasta que ella no aparezca, no puedo dejar a mi hija sola.

Confío en que Towa estará bien, Setsuna debe estar con ella, además que no creo que Sesshomaru le haga nada, él es prudente... No la lastimará, mientras a mí me toca observar de lejos a ver que procede, a menos que se despierte Sayuri. Estoy un poco inquieto porque han pasado varios minutos y no se escucha nada y quiero saber que pasó, solo me paseaba de un lado para el otro y colocándome en la puerta de mi casa, veía en dirección a donde estaba la casa de la anciana Kaede pero no se veía nada aún.

Las horas seguían pasando y ya iba a oscurecer y no había señales de nada, hasta que de repente mi pequeña hija por fin se despertó — ¡MAMÁ! — Exclamó — Y en efecto, me asomé por la puerta y me encontré con que mi esposa ya estaba de regreso con mi suegro, honestamente creí que vendría mañana, tampoco esperaba que viniera con Inuyasha incluido, pero no me molesta... Más bien me alegra, porque así pedo ir con ella a ver por fin qué fue lo que pasó. Ella se bajó de Kirara y Sayuri corrió rápidamente a recibirla, la cual tomándola en sus brazos la llenaba de besos por toda su carita.

Ellos al ver mi expresión, prosiguieron a preguntarme si había pasado algo, a lo cual asentí rápidamente explicándoles que no he ido a averiguar porque no quería dejar a la niña sola lo cual agradecieron, si les dije que había visto pasar a Ah-Uh y que creía que Sesshomaru estaba allá, lo cual negaron al instante puesto que su olor no estaba en el ambiente — Quien está aquí, es Rin-Sama — Dijo Moroha olfateando un poco — Y si ella está aquí, el tío Sesshomaru no tarda en llegar a formar pleito.

— Entonces no me equivoque en la corazonada — Dijo Inuyasha-Sama mirando a Moroha a los ojos.

— Vamos a donde está Towa — Dijo mi esposa mientras tomaba su arco y flechas, pero mi suegro la detuvo al instante.

— Tú te quedas aquí con tu esposo — Le regaña — Yo me encargaré de este espectáculo.

Moroha dio fuertes pisotones ya que no estaba de acuerdo con lo que su padre le estaba ordenando hacer ya que ella personalmente quería intervenir en ese asunto, pero otra vez salía su padre con sus "ARGUMENTOS MATRIMONIALES" de que ella debía cuidar de nosotros (Cosa que me ofende muchísimo, porque está diciendo que soy "'DÉBIL" o algo así y me duele, me quema ¡ME LASTIMA!), Luego de tomar aire prosiguió a decirle — No puedo quedarme aquí de brazos cruzados — Rueda los ojos — Le prometí a Setsuna y a ella que no dejaría que el tío se precipitara con esto y lo pienso cumplir.

— No podrán solas con Sesshomaru — Le decía mi suegro — Ciertamente has mejorado MUCHO, al igual que Setsuna, pero aún no es suficiente.

— No la subestimes — Intervine — No sabes del todo bien de lo que ella es capaz cuando se trata de cumplir una promesa.

Ambos quedaron en silencio mientras se decidía que hacer por fin, pero... Se nos estaba agotando el tiempo, es más en un parpadeo todo el silencio que había en el ambiente se esfumó al escucharse un grito proveniente de la casa de Kaede — ¡Sesshomaru! — Exclamamos todos y antes de que Inuyasha pudiera objetar, Moroha me entregó a Sayuri y salió disparada en dirección hacia el lugar, donde en efecto ya se encontraba la situación prendida, yo no me iba a quedar de brazos cruzados mientras ellos estaban por allá, así que Sayuri, Kirara y yo nos fuimos detrás de ellos hasta allá.

— ¡Papá! ¡Puedo explicártelo! — Decía Towa toda nerviosa — No fue mi intensión de...

Sesshomaru la mira imponente mientras se iba acercando poco a poco...

— ¿Dónde está Riku? — Preguntó.

— ¡JAMÁS! Te lo voy a decir — Respondió de malas ganas — Vas a matarlo y no voy a permitirlo.

— ¡Mi señor! ¡Por favor! No siga alterándola así — Intervino Rin-Sama — Puede hacerle daño.

— Ese pirata es un cobarde — Exclamó de — Ni siquiera tiene el valor de darme la cara por lo que hizo.

Inuyasha salió del lugar bufando, dice estar decepcionado porque esperaba un poco más de acción, pero a según él eso es algo que las chicas pueden manejar solas, el problema no es Towa en sí, sino Riku ya que si él lo mata ahora, no sabremos que va a pasar con Towa y su bebé...

— ¡ESPERE TÍO! — Moroha sale en persecución de Sesshomaru seguida de Setsuna y más atrás Towa quien estaba con su madre buscando la forma de alcanzarlos.

— ¡AL FIN! — Exclamó Inuyasha al ver la escena — ¡UN POCO DE ACCIÓN!

— Si encuentra a Riku... ¡LO MATARÁ! — Pensaba.

Sesshomaru se desplegaba por los aires buscando captar el aroma de su presa, hoy tenía planeado destruir a Riku por haber profanado a su hija, por haberse atrevido a tocarla sin haberse casado con ella siquiera, aunque en ese caso tampoco iba a permitir que se casara con su hija, cosa que me parece un poco exagerado de su parte, yo ya lo viví y ahora verlo allá me resulta un poco... No sé, doloroso ya que se trata de unos amigos muy queridos que digamos y no me parece que los separen de esa forma, espero que las chicas le hagan entender a Sesshomaru.

Pasado un largo rato, por fin logró dar con su presa, a la cual logró rodear de una vez por todas; Riku sabía que llegaría ese momento, así que aunque estaba muerto de miedo por dentro, intentaba no darle a demostrar que estaba asustado — ¡DEMONIOS! ¡Va a matarme! — Pensaba él muy inquieto al ver como Sesshomaru sacaba su Colmillo Explosivo y se iba acercando más a él — Creo que voy a morir antes de poder conocer a mi hijo/a — Estaba esperando que diera el tiro de gracia pero no pasaba nada, dudo mucho que no le haga absolutamente nada; desde aquí puedo observar que repentinamente guardó nuevamente su espada para luego decirle:

— No utilizaré mi arma para destruir a una escoria — Lo mira fijamente mientras se encargaba de sacar su látigo venenoso, no sé qué es lo que pretende y la verdad me inquieta no poder hacer nada — Voy a jugar contigo antes de matarte.

Y dicho eso, empezó a arrojarle ataques, uno tras otro los cuales Riku esquivaba de a pocos saltos mientras que Sesshomaru-Sama iba aumentando la velocidad cada vez más — Quiere cansarlo, supongo — Pensaba — ¡DENSE PRISA! O va a suceder una tragedia. En una de esas, logró darle un par de fuertes azotes que lo lanzaron al suelo de una sola sentada, lo cual me preocupa ¡AHORA SI VA A MATARLO!

— ¿Por qué no te defiendes? — Le pregunta sacando nuevamente la espada.

— No tengo por qué hacer nada, sabiendo que por donde me meta ¡USTED GANA! — Dijo poniéndose en pie nuevamente — Ya terminemos con esto de una vez por todas...

Como era de suponerse, no dijo nada, pero justamente antes de que fuera enserio a usar la espada... Se escucha un grito desde el fondo que hizo que la escena se paralizara por completo — ¡NO TE ATREVAS A LASTIMARLO! — Sí, así como están pensando, por fin aparecieron toda la patrulla defensora de Riku, Towa no pensó dos veces y saltó desde Ah-Uh y corrió rápidamente hasta interponerse entre su padre y su prometido.

— No te atrevas papá — Le decía Towa en un tono un tanto rebelde.

Este queda en silencio mirándola fijamente a los ojos como es su costumbre.

— Si haces esto porque estoy esperando un hijo de Riku sin haberme casado — Frunce el ceño — ¡PARA TU INFORMACIÓN! Si no vamos a casar ¡TE GUSTE O NO!

— Apártate.

— ¡NO! — Exclamó — No te dejaré hacerlo.

— ¿Por qué no admites de una vez que te equivocaste Sesshomaru? — Intervino Inuyasha-Sama quien estaba ayudando a Riku a levantarse — ¡NO SEAS ORGULLOSO!

— ¡NO TE METAS HÍBRIDO! — Le regaña.

— Les agradezco mucho que hayan querido venir a ayudarme — Les dice Towa mirándolos — Pero, creo que esto es algo que debo solucionar yo misma. Llévense a Riku y déjenme aquí.

— ¡DE NINGUNA MANERA PIENSO DEJARTE AQUÍ SOLA! — Dijo Riku soltándose de Inuyasha-Sama — No voy a largarme como un cobarde... No lo hizo mi compadre, no lo voy a hacer yo.

Me sentí un poco avergonzado, ya que sé muy bien a qué se refiere con eso y no es del todo cierto ya que no escapé porque me tenía sujetado por el cuello... Ya si se refiere a mi tío Kohaku es un cantar muy diferente, así que es mejor que piense que el comentario es hacia mi tío y no hacia mí que digamos.

Sesshomaru apartó a Towa rápidamente y en un abrir y cerrar de ojos agitó su espada para dar el tiro de gracia el cual Riku logró esquivar, pero ¡NO CREAN QUE NO LO TOCÓ! La realidad es que si le cortó unos cuantos mechones de cabello... Créanme que si Riku hubiese tropezado... Lo hubiera matado al instante. Rin-sama y Towa se encontraban angustiadas por la situación y Towa sujetada por su madre, no le permitían intervenir en el asunto ya que eso le haría demasiado mal por su estado.

— ¡YA BASTA SESSHOMARU! — Seguía diciendo Inuyasha — ¡YA ACEPTALO Y DEJALOS EN PAZ!

— No haré lo mismo que tú — Le dice imponente.

Todos se quedaron observando la escena en silencio ya que no esperaban siquiera que este respondiera al asunto planteado por su medio hermano. Ya lo decía yo, que esto era por cuestiones de ORGULLO y no otra cosa... Pero como no se puede decir nada en estos momentos, es mejor ir confirmando mis teorías desde aquí.

— De haber querido largarme — Decía Riku — Me hubiera largado y la hubiera dejado sola... Pero no lo hice.

— Le tocaste sin haberte casado con ella, IMBÉCIL — Le regaña — Eso no te lo perdonaré nunca.

Moroha se me acerca en ese momento y luego de jalarme las orejas y de regañarme por haberme venido aquí con Sayuri me dice en un susurro — Me parece estar viendo a mi padre regañándote a ti por lo mismo — Rueda los ojos — Solo que con el tío no se sabe que pasaría después. Yo asentí ante el comentario y seguimos observando la escena desgarradora.

— ¡QUE ACEPTES LA REALIDAD NO TE HACE IGUAL A MÍ! — Le seguía diciendo Inuyasha — Solo le estarías haciendo un favor a tu hija... ¿O prefieres que sea infeliz por el resto de su vida?

— Inuyasha-Sama tiene razón — Decía Rin desde lejos — Solo acéptelo y no haga sufrir más a Towa ¡POR FAVOR!

Volvimos otra vez a caer en un silencio incómodo, con la diferencia de que esta vez pareciera que Sesshomaru-Sama iba a dejarlos en paz, o al menos eso es lo que todos esperamos. Rin-Sama se acercó a él para volverle a pedir que por favor no hiciera más grave el problema de lo que ya es — Usted es sensato mi señor — Decía tomando la mano que tenía libre — Yo sé muy bien que usted entiende la situación, pero por su orgullo no se ha apartado.

— Mamá... — Dijo Setsuna quien estaba detrás de ella.

— Sé que amas a Towa y que por eso haces esto — Le seguía diciendo — Pero no es la forma de arreglar las cosas mi señor.

Pasaron unos instantes de indecisión más y por fin vimos que guardó a Colmillo explosivo, lo cual hizo que todos diéramos un suspiro de alivio en cuestión, pero nadie se atrevía a acercarse a Riku, NADIE, ni siquiera la propia Towa ya que no sabíamos si podría cambiar de opinión y no queremos que nos lleve por el medio de aquel cataclismo.

— Una cosa Riku — Se le ocurre hablar de repente.

— Dígame usted — Decía poniendo atención.

— Si la haces llorar... Ahora sí que no habrá poder que te salve.

No dijo más nada y empezó a retirarse, Rin-Sama se fue tras él mientras que nosotros nos quedábamos a ver como se sentía Riku en si ya que no creo que no le haya roto nada, aunque por lo visto se encontraba perfectamente bien...

— No estoy bien — Dijo y quitó su mano desde el costado donde había pasado el látigo, tenía la ropa rasgada y...

— ¡ESTAS SANGRANDO! — Dijo Moroha algo preocupada — Debemos curarte eso pronto.

— No es grave, va a pasar pronto — Se ríe y de pronto cae al suelo.

— Maldición — Dijo Inuyasha-Sama — Logró herirlo después de todo.

Mi suegro lo trajo hasta la casa, donde hicimos de todo para frenar la sangre y lo conseguimos después de tantos intentos, ahora se encontraba descansando y Towa se encontraba a su lado, no se ha movido del sitio ni un segundo — Tranquila — Le decía Moroha — No se va a morir ya. Ella asiente sin dejar de verlo ni un segundo; yo también estoy preocupado por mi compadre, espero que si salga vivo de esta, porque Towa no se lo perdonará a Sesshomaru si Riku llegase a morir.

Ahora solo nos toca esperar a que todo pase y que sea lo que Dios quiera, yo espero que sea su recuperación, lo espero de verdad — ¡VAMOS COMPADRE! — Pensaba — Tú puedes salir de esta... ¡NO TE RINDAS! Towa y tu retoño te necesitan.

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LA AUTORA:

La cosa se está poniendo GRAVE, si ven a Riku, este fue herido y se estaba desangrando, Towa está alterada y el ambiente está muy tenso, más que la gente se encuentra hablando mucho sobre lo que pasó. Lo importante es que Sesshomaru entendió que ya las gemelas no son niñas chiquitas, que ya están haciendo su vida.

¿Creen ustedes que ahora si entendió o está planeando otra cosa para deshacerse de Riku?

¡NOS VEMOS EN LA PRÓXIMA ACTUALIZACIÓN!

¡LOS/AS LEO!

- Kirara 💅🏻✨.