Peligroso [Jikook +18]
Con lo fácil que es que se te escape el amor, Jeon JungKook siente una paz estúpida y una seguridad francamente graciosa allí mismo donde está, como está y con quién está.
No es para nada sexy, como hacen creer, el sexo de playa. Y se arrepiente de haberlo sugerido, pero, por otro lado, condenado sea si hubiera podido detenerse de saltar sobre Park Jimin cuando apenas lo vio salir del mar. Ah, otra cosa, no es en absoluto delicioso el sabor de mar, aunque sí que sabe rico Jimin en su lengua, tanto, que todavía saborea el trago blanco que obtuvo por ser un buen chico y portarse educado al pedir "Jim, ¿puedo chupartela, por favor?". Y va a contradecir la creencia de que no es genial tragar, pero respeta a los que escupen, por supuesto.
Como venía siendo esta narración ciertamente sencilla sobre el amor escurridizo y, por lo que parece dentro del tormentoso estado inseguro en el que suele caer JungKook cuando se compara con otros, peligroso. Peligroso porque sabe que si lo pierde, si de pronto Jimin dejara de amarlo, le va a doler. Peor de lo que le duele el culo, aunque este no le escoce tanto porque, precariamente aunque con mucho cariño, Jimin lo preparó. Deja caer de su opinión, ya que está, que la saliva resuelve mucho, es jodidamente bueno cuando le comen el culo, mas no se negará jamás a un buen lubricante. Ojalá haberlo traído, ¡maldición!
Si su amor se va, JungKook no cree poder recuperarse. O lo hará, eventualmente, tras haber sufrido como un malnacido. Por eso es peligroso amar. Y por eso está contento, a gusto y satisfecho donde está, como está y con quién está. Al punto de que no desea moverse, pese a que el aire arrastra arena, y él está desnudo, sobre una manta que es de esta tela extraña que le da un poco de comezón, pero a la vez le genera una cosita sensual en sus pezones.
Además, escucha el mar que barre el viento con un anuncio de pode. Otra cosa poderosa, cabe decir, es la resistencia y creatividad que tiene Jimin para calentarlo al extremo de que no le importó a JungKook que sean las cuatro de la tarde de un viernes cualquiera, que a setenta metros, aproximadamente, detrás del saliente de roca, haya personas conviviendo en un día de familia mientras a él le taladraban el culo con un pene bonito y ensalivado.
Y es en cavilaciones tales que comprende que el amor, ¿por qué siempre el amor? ¿Y por qué mierda no? ¿Eh? Okay. El amor, entiende este JungKook que siente aún su orgasmo sobre la piel, húmedo y de cosquillas hermosas en todo el cuerpo... el amor es esto. Es tener con quien perderte un rato de la realidad, del mundo, de la vista y ojos de otros y ser tú mismo. Y es así Jeon JungKook, el chico que está irremediablemente enamorado de un Park JiMin que dice amarlo con la misma intensidad.
¿Y no es loco y absolutamente temerario creer en el amor? ¿No es peligroso confiarse en la palabra, gesto y acción de otro que dice amarte? ¡Obvio que lo es! El amor es peligroso, ya tiene que quedar claro. Pero si fuera de otro modo, si fuera seguro al punto de no cuestionarse nada, sería aburrido. Insulso. No tendría vértigo. Ni riesgo. Ni a un JungKook feliz de que lo aplaste Jimin, todavía con el pene dentro, aunque más blando, mientras recuperan el aliento y tratan de no tragar tanta arena y se convencen a la fuerza de que tener sexo en la playa es sexy.
Y la paz de este momento narrado, de estar en la playa, como está de agotado, y con quien dice que lo ama tanto como él promete que lo ama, es algo que una vez se obtiene no se debe dar por seguro. Aunque tampoco vivir angustiado, no, no hay que pisar la tragedia anticipadamente. Sino amar como si no hubiese fin, porque tal vez no lo haya; aunque en la narración sí lo haya, porque no tiene mucho de interés contar que Jimin se retira suavemente, con su miembro flácido ya, y a JungKook le escurre un poco el semen, algo a lo que no se termina de acostumbrar incluso si en pleno acto lo pide.
Entonces, tomándose de las manos, en un gesto tierno y cursi, son dos afortunados. También exhibicionistas, seamos sinceros y confidentes, pero amantes al fin y al cabo.
:)
Dije que haría todos los shipp, y este es mi primer Jikook y me ha gustado. Advertí ya en el título por mera cortesía al lector, pero si eh, no esperabas esto: sorry, así es el amor de estos dos(?
No sé cuál será el siguiente shipp, acepto sugerencia jaja no prometo que se haga, you know?
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