El semáforo estaba en amarillo, y fueron ralentizando hasta detenerse porque no podrían pasar.

Taehyung supo que era amor cuando no le importó que lo vean casi cayéndose en esa pequeña motocicleta scooter.

Componían la clichelera pareja del niño de papis ricos y el muchacho rudo de tatuajes y motocicleta. Solo que Min YoonGi tenía apenas un tatuaje de Toy Story en su antebrazo, concretamente a Woody, y su transporte consistía en una scooter colorada que conjuntaba con un casco del mismo color.

Era amor, supo YoonGi porque no le interesaban las burlas de sus amigos, ni las advertencias de que tenga cuidado, de que el amor de un "niño bien" podría ser apenas un intento de llenar vaya a saber qué vacío de su, a ojos de los menos privilegiados, paqueta vida.

Taehyung, por su parte, aprobaba como el típico jovencito que cae en las tentaciones del bajo escalafon social porque intentaba duramente no evidenciar la bien acomodada posición en la que está inserto como hijo de un CEO de telecomunicación y una cirujana renombrada. Incluso hasta se dejó crecer el cabello contradiciendo los deseos de sus padres de que se recorte esas "greñas".

Era amor porque no había una razón válida, ni que justificara siquiera ser protagonistas de un libro, película, o inspiración de una canción melosa, simplemente era. No rivalizaba su cariño con las supuestas felices y consolidadas parejas que en redes posteaban en redes cuanto absurdo se les ocurriera para aclamar que se quieren.

Era amor. Así, simple. De cuatro letras, de dos sujetos y de un solo deseo: estar juntos. Y si no bastaba para creer que era amor, pues, lo sentían mucho, porque ninguno de los dos estaba dispuesto a buscar aprobación, porque están más ocupado queriéndose, amándose con todo de sí. Con lo que son y con lo que no. Porque ni a Yoongi le sobra capital para grandes gestos amorosos, ni a Taehyung se le viene a la mente con qué cuantificar una mínima parte de lo que ama a YoonGi.

Era amor, de brazos que rodean en anhelo de cercanía y contención al chico que maneja la scooter con una sonrisa gummy. Era amor, de ese que en cada semáforo suelta el manubrio para posar las manos propias sobre las ajenas que lo abrazan. Era amor, de dos sujetos y un solo deseo: estar juntos. Amor, cuatro letras, solo eso, ¿para qué más?

:)

Por alguna razón recordé a YoonGi en la scooter (creo que es una scooter, sino eh, me tiran el dato) y bueh, aquí un toquecito de amor.