Me desperté en medio de la noche con un sentimiento inquietante de que algo no estaba bien. Aunque estaba en mi habitación familiar, algo parecía fuera de lugar. Mi mirada se dirigió instintivamente hacia mi escritorio donde mi computadora de escritorio se encontraba en reposo.

La luz de la luna se filtraba a través de las cortinas y bañaba la habitación en una tenue iluminación. Fue entonces cuando noté un resplandor suave y pulsante proveniente de la pantalla de mi computadora. Sin que yo la hubiera encendido, la computadora emitía una tenue luz, como si estuviera tratando de llamar mi atención.

Mi curiosidad se mezcló con un dejo de aprensión mientras me acerqué al escritorio. El resplandor destellante proyectaba sombras inquietantes en las paredes, creando formas indistintas que parecían acecharme. A medida que me acercaba, el sonido de un susurro 

tenue y distorsionado parecía escapar de los altavoces de la computadora.

Intrigado y algo asustado, decidí tocar el mouse para activar la pantalla. En lugar de la interfaz familiar de mi escritorio, fui recibido por una serie de imágenes y archivos extraños 

y perturbadores. Iconos distorsionados, documentos encriptados y fotografías inexplicables llenaban la pantalla. El resplandor pulsante se intensificaba a medida que exploraba los contenidos, como si la computadora estuviera respondiendo a mi presencia.

De repente, una imagen horripilante parpadeó en la pantalla: un rostro desfigurado que 

me miraba fijamente, ojos vacíos y una sonrisa retorcida. Un escalofrío recorrió mi cuerpo y un sentimiento de peligro inminente se apoderó de mí. Sentí como si la presencia en la pantalla quisiera arrastrarme hacia dentro, como si estuviera atrapado en una pesadilla digital.

Desesperado por escapar, desconecté el cable de alimentación y la computadora se apagó 

abruptamente. El resplandor desapareció y la habitación volvió a sumirse en la oscuridad. Me encontré jadeando, con el corazón palpitante y una sensación de alivio.

Me desperté abruptamente, con el corazón latiendo desbocado y el sudor empapando mi cuerpo. La oscuridad de la habitación me rodeaba, y me di cuenta de que había sido solo un sueño. Tomé una bocanada de alivio, agradecido de que todo lo que había experimentado fuera solo una creación de mi imaginación.

Traté de calmar mi mente agitada y me levanté de la cama para tomar un vaso de agua y tranquilizarme. Mientras caminaba hacia la cocina, pasé frente a mi escritorio, donde mi computadora de escritorio descansaba silenciosamente.

Sin embargo, algo me hizo detenerme en seco. Una sensación de inquietud recorrió mi espina dorsal y mi atención se centró en la pantalla apagada de la computadora. Mi mente intentó descartar cualquier conexión con el sueño que había tenido, pero algo me impulsó a acercarme.

Con manos temblorosas, presioné el botón de encendido y la pantalla cobró vida repentinamente. Lo que vi ante mis ojos me dejó sin aliento: una mano grotesca emergió de la pantalla, extendiéndose hacia mí como si quisiera arrastrarme hacia su dominio. La voz distorsionada de la computadora resonó en la habitación, pronunciando frases inquietantes y macabras.

Aterrorizado, retrocedí rápidamente y desconecté la computadora de la corriente eléctrica. La mano desapareció instantáneamente y el silencio llenó la habitación. Me encontré temblando, incapaz de asimilar lo que acababa de presenciar.

Intenté convencerme de que todo era producto de mi imaginación, pero las imágenes y las sensaciones seguían arremolinándose en mi mente. Fue entonces cuando finalmente desperté, esta vez de verdad, en mi cama, el sudor frío pegado a mi piel.

El alivio me inundó mientras me di cuenta de que todo había sido un sueño dentro de otro sueño. Agradecido de estar despierto y lejos de la pesadilla digital, respiré profundamente, asegurándome de que todo lo que me rodeaba era real.

Pero las imágenes y el terror persistieron en mi memoria, dejándome con un sentido inquietante de vulnerabilidad y la pregunta incómoda de si lo que había vivido en mis sueños tenía algún tipo de conexión con la realidad.

SI, otra historia sobre un sueño mío, mejor dicho, doble sueño XDD, es la primera vez que me paso. Bueno, publicare el otro borrador así que adiós gente. Claro, si están aquí.