-Dos días más tarde-

Maruo: *Sentado a la mesa frente con Rena* Ya terminé de pagar las facturas pendientes que tenías del gas, la luz, el agua y también los prestamos que solicitaste al banco y caja popular.

Rena: ¿Ya cerraste todas las cuentas?

Maruo: Para eso te dije que revisaríamos los estados de cuentas, ya no debes nada mi amor, así que puedes estar más tranquila.

Rena: Me da mucha pena que me resuelvas prácticamente la vida Maruo.

Maruo: Ya te dije que para mí no es ningún pesar hacerlo, no puedo dejarte pasar por unas malas finanzas si yo puedo apoyarte en ello.

Rena: Es que... somos pobres pero humildes.

Maruo: Rena, quizás ya viene siendo hora de que tú y tus hijas se vengan a Ciudad de México, les puedo conseguir una casa con mejores servicios que esta y... podrán vivir más cómodas.

Rena: Eso sí no te lo puedo aceptar Maruo.

Maruo: ¿Por qué no?

Rena: En primera porque mis hijas ya tienen hecha su vida aquí en Toluca, y en segunda... porque eso sí es demasiado para mí, te puedo permitir las facturas y unos regalos para las niñas, pero de eso a... conseguirnos una casa, no puedo.

Maruo: ¿O prefieres esperarte a que nos comprometamos mejor?

Rena: Algo así.

Maruo: Pero Rena, sabes que yo vivo en Ciudad de México.

Rena: Maruo, es muy pronto para hacerles asimilar un cambio.

Maruo: Si ese es el caso, entonces les consigo un departamento aquí en Toluca, para mí no hay problema.

Rena: Esperemos un tiempo ¿ok?, ahora es muy pronto.

Maruo: Lo que digas, por mientras hay que seguir haciéndote los análisis para que tu cáncer no siga creciendo.

Rena: ¿Cuándo me vuelvo a presentar?

Maruo: Este fin.

Ichika: *Llega con Maruo* Hola buenas tardes.

Maruo: *La voltea a ver* Hola Ichika buenas tardes *le entrega una bolsa de Liverpool (que no me patrocina pero les debo XD)* mira te compré el vestido que me pediste.

Ichika: *Mira la bolsa sorprendida* ¿Eh? *siente algo de pena de tomarlo* Dios.

Maruo: Ten, tómalo hija, lo compré para ti.

Ichika: *Lo toma* Gracias señor, mmm...

Maruo: Vamos ábrelo, espero que sí sea tu talla exacta.

Ichika: *Lo abre y saca un vestido de mucha mejor calidad que el que se le había roto* Guau... nunca había visto un vestido como este.

Maruo: De hecho traté de no excederme mucho, ¿te gusta?

Ichika: *Se lo prueba de perfil* Sí mucho, gracias *se le salen unas lágrimas*.

Maruo: *Siente una dicha como si se tratase de su propia hija* De nada chaparrita *saca otras bolsas* diles a tus demás hermanas que vengan que también tengo algo para ellas.

Ichika: ¿También para ellas?

Maruo: Todas me pidieron ¿no te acuerdas?

Ichika: Sí jeje.

Maruo: Llámalas y dales la sorpresa.

Ichika: Sí *se va por ellas*.

Rena: *Viendo a Maruo: Te digo que puedo aceptarlo, pero... trata de no volverlas dependientes a ti en lo material.

Maruo: Esto es solo para apoyarlas en lo que requieren, créeme que si tú y yo llegamos a vivir en la misma casa también me haré cargo de sus estudios, su seguro médico, su plan dental y todo lo que les haga falta.

Rena: *Sintiendo un pequeño nudo en la garganta* Mmm... quizás, solo quizás si seas un buen padre viéndolo así.

Maruo: Trataré de serlo, pero una cosa si te puedo dejar claro.

Rena: ¿Eh?

Maruo: Podré darles todo lo necesario ya sea para comer o vestirse, pero... créeme que no les podré brindar mucho de mi en casa, tengo un hospital y una enorme responsabilidad sobre los hombros que atender, podremos tener encuentros así de vez en cuando, pero no seré un padre que esté en casa.

Rena: Reconocí esos aspectos antes de aceptarte Maruo, créeme que lo sé, pero no todo se puede, aunque quisiéramos disponérnoslo.

Maruo: Así es.

Las 5: *Llegan emocionadas con Maruo*.

Maruo: *Las voltea a ver* Vengan chicas... jeje.

-Unos meses más tarde-

Maruo: *Las lleva de vuelta a su casa junto con Rena luego de llevarlas de compras* Bájense chicas

Las 5: *Se bajan emocionadas con su ropa nueva* Jajajaja...

Rena: *Lo voltea a ver* Gracias por todo amor.

Maruo: *La mira de frente* Cuando gustes mi vida *le da un beso en los labios*.

Rena: *Lo corresponde* ¿Quieres pasar?

Maruo: *Le sonríe* Nunca te rechazo un café.

Rena: *Le sonríe también*.

-Dentro de la casa-

Ichika: *Presumiendo su ropa* Miren, con eso me voy a ver igualita a Thalía.

Nino: *Haciendo lo mismo que ella* Pues yo me voy a ver como Taylor Swift.

Miku: *Viéndolas* Con que se vistan es suficiente.

Yotsuba: Con que vean que ya no somos tan pobres será lo mejor.

Itsuki: *Viéndola* Yotsuba, seguimos siendo pobres, el novio de mamá tiene dinero, nosotras no.

Miku: Debemos agradecerle por esto, porque sin ser sus hijas aún así nos trata como tal, es bueno con nosotras.

Ichika: Miku tiene razón, no le pesa la mano para comprarnos todas estas cosas, y... todavía serle fiel a mamá a pesar de que solo fue su paciente antes de comprometerse.

Maruo: *Entra con Rena a la casa* ¿Qué?, ¿ya se andan presumiendo?

Ichika: *Lo voltea a ver* ¿Cómo cree?, somos hermanas.

Rena: Váyanse a jugar niñas, Maruo y yo nos vamos a tomar un café.

Maruo: Déjalas un rato mi amor, sabes que no me molesta.

Rena: ¿Seguro?

Maruo: Sí claro *se sienta a la mesa*.

Las 5: *Se ponen junto a él*.

Ichika: Gracias por todo Maruo.

Nino: Quizás ya deberíamos llamarte papá ¿no?

Miku: *Viéndola* Nino tampoco seas tan confianzuda.

Rena: *Las voltea a ver* Oigan niñas no se peleen.

Maruo: *Viéndolas* Pueden llamarme papá si ustedes quieren, se los agradecería.

Yotsuba: *Viéndolo* Pues si ya eres nuestro papá, ya deberías vivir con mamá ¿no lo crees?

Todas: ¡Yotsuba!

Yotsuba: ¿Eh...?, pero ¿qué dije?

Rena: *Le sirve café a Maruo y se sienta con él* Ya estamos pensando en eso, ya llegará el día niñas, pero no se apresuren.

Maruo: *Toma la mano de Rena*.

Nino: *Viéndolos* ¿Y cuándo se piensan casar?

Rena: Niñas, vayan a jugar a su cuarto.

Las 5: Pero mamá...

Maruo: *Viéndolas* Háganle caso a su madre.

Las 5: *Se van a su cuarto*.

Rena: Al fin nos dejaron solos.

Maruo: Solos considerando la necesidad de estarlo.

Rena: Pero la cuestión es que no quiero que se enteren de nada.

Maruo: Sabes que tontas no son, notan que tu situación está empeorando y tu peso ya no es el mismo de antes, estás grave Rena.

Rena: ¿Cómo están mis resultados?

Maruo: *Sacándolos de un archivero* No quería decírtelo antes para no preocupar a las niñas, pero tu cáncer nuevamente volvió a crecer, ya van tres chequeos en donde el nivel se ha superado más que el de los chequeos del año pasado.

Rena: ¿Y ahora qué hago?

Maruo: Lo más probable es que tengas que volver al hospital, trataré de realizar los estudios pertinentes para que no requieras que te mandemos a quimio o te tengamos que entubar, pero lo que sí, es que será una fuerte noticia para tus hijas.

Rena: *Comienza a preocuparse* Estoy cada vez peor, y por habérselos ocultado tanto ahora mis hijas se van a preocupar más, ¿qué clase de madre soy?

Maruo: *Viéndola y tomándola de la mano* La mejor del mundo según tus hijas, todo va a estar bien.

Rena: *Poniéndose a llorar* No, no va a estar bien, los estudios no mejoran, me voy a morir.

Maruo: No, no, no, no digas eso, no voy a permitir que eso pase Rena.

Rena: Maruo, eres el mejor doctor que conozco, pero hasta tus conocimientos y posibilidades tienen sus límites.

Maruo: Yo lucho contra esas limitantes, créeme que no te doy a dejar ir por default.

Rena: Maruo, por favor, ¿te puedo pedir un super favorzote?

Maruo: Lo que sea Rena.

Rena: Cuando muera, por favor hazte cargo de mis hijas, cuídalas como si fuesen tuyas.

Maruo: *La toma del rostro* No digas eso mujer, vamos a salir los dos de esta, no está todo perdido aún.

Rena: Maruo, tú sabes bien que sí, y no tienes por qué ocultarme lo que tú sabes que es verdad.

Maruo: *Se queda callado* ¿Ah?

Rena: Mi estado está cada vez más deplorable, mi vida está cada día más en juego y mis hijas... pronto se quedarán solas.

Maruo: Pase o no pase, por ellas no te tienes que preocupar porque yo estaré para cuidarlas.

Rena: Hazlo una vez que pase esto, pero por lo que más quieras no permitas que se separen, mantenlas unidas y nunca permitas que terminen como yo.

Maruo: Eso nunca; mira, si tú mueres las llevaré conmigo a la capital y tendrán todo lo que necesitan y más.

Rena: No por favor, mantenlas aquí, que se mantengan unidas en el ambiente que siempre han manejado.

Maruo: ¿Por qué?

Rena: Hay más cosas en juego de lo que crees, hasta... algo que probablemente conlleve a su futuro.

Maruo: ¿De qué futuro me hablas?, ¿académico o... amoroso?

Rena: Prométeme que se quedarán en Toluca.

Maruo: Sí, te lo prometo, pero... sabes que de por sí no tengo mucho tiempo libre, si ellas viven en Toluca y yo me la paso trabajando en la Ciudad de México, créeme que nuestra conexión va a ser mucho más difícil.

Rena: *Baja la mirada* Es cierto.

Maruo: Pero no me importa, cambiaré mis tiempos, mejoraré mis horarios... y me vendré a vivir a Toluca para que estemos más cerca.

Rena: *Viéndolo* Puedes hacerlo desde ahora.

Maruo: Mi amor, antes tengo que ver las inmobiliarias, los departamentos disponibles en esta ciudad y ver en cuál las puedo hospedar a ellas y a mí.

Rena: Está bien, pero por favor hazlas a la idea de que pronto vivirán contigo.

Maruo: ¿Quieres que se los diga?

Rena: No se los digas directamente, solo... que se sientan a gusto estando contigo y poco a poco se adapten.

Maruo: Eso requerirá tiempo, y... tu cáncer está avanzando mucho.

Rena: ¿Ahora lo aceptas?

Maruo: *Se cubre un poco los labios* Será algo complicado.

Rena: Ven a vivir conmigo entonces, al cabo no será mucho.

Maruo: Lo haré Rena, pero... no voy a estar muy presente aquí, más que ocasionalmente en la comida o la hora de cenar.

Rena: Empecemos con eso, que se la vayan creyendo, así pronto se sentirán más estables contigo.

Maruo: Será un cambio drástico para las 5, y para mí también.

Rena: *Suelta una lágrima de sus ojos*.

Maruo: Rena...

Rena: *Se acerca a él* Abrázame.

Maruo: *La abraza* Mi amor...

Rena: *Se recarga sobre su pecho y su hombro con fuerza mientras suelta algunas lágrimas* Maruo.

Maruo: *También comienza a llorar* Te voy a extrañar mucho.

Rena: Sé que lo harás, y ellas también lo harán, no podré conocer a mis nietos y no veré a mis hijas crecer, pero confío en ti.

Maruo: Te amo Rena.

Rena: Y yo a ti.

-Tiempo después, el diagnostico de Rena se cumple, es vencida por su cáncer y termina partiendo de la vida de sus hijas-

Itsuki: *Destruyéndose en la sala de la casa* ¡Ajah... mamá...!

-Llora en compañía de sus demás hermanas, pero ella destacando sobre las demás-

Miku: Lo sabía, yo siempre supe que ella estaba empeorando.

Nino: Y ahora ya no está con nosotras.

Itsuki: *Con voz firme* Aún lo está.

Todas: *La voltean a ver* ¿Eh?

Itsuki: Ella sigue aquí, sigue estando dentro de nosotras.

Ichika: No debemos olvidarla nunca.

Yotsuba: *En su mente* -Ahora no podré cumplir la promesa que hice con Fuutarou-.

Itsuki: No me importa lo que pase, pero yo... trataré de tomar el lugar de mamá de ahora en adelante.

Ichika: *La mira* Itsuki.

Miku: ¿Ahora qué pasará con nosotras?

Nino: Podríamos ir a casa del abuelo, solo tomemos un camión a Acapulco.

Ichika: ¿Todas iremos allá?

Yotsuba: ¿A qué te refieres Nino?

Miku: Sería duro para el abuelo, lo mejor sería...

Maruo: *Entra a la casa* Hola chicas, ya terminamos los asuntos funerarios.

Las 5: *Lo voltean a ver sin contestar nada*.

Maruo: Chicas, lo lamento mucho, sé que esto les duele, a mí me afecta tanto como a ustedes, pero... les pido que sean fuertes porque su vida seguirá de esta manera a partir de ahora.

Ichika: Pero ¿qué pasará con nosotras?

Maruo: Yo me haré cargo de ustedes niñas.

Todas: ¿Ah?

Maruo: Se lo prometí a su madre y también... ustedes son mis hijas.

Nino: ¿Eh?

Miku: Se lo agradecemos.

Yotsuba: Papá.

Itsuki: *Se echa a llorar todavía más*.

Maruo: Hagan sus maletas, ya tengo una casa preparada para ustedes.

-Después de esto Maruo las lleva a su nueva casa en el departamento en donde viven sus próximos años de vida- 

(Esta comparativa me encantó, su cambio de niñas a jovenes ;)

-A las 5 les costó asimilar el cambio, pero al entrar a su nueva secundaria poco a poco lo fueron aceptando; mientras el tiempo fue pasando las cinco se volvieron cada vez más diferentes la una con la otra pero sin llegar al punto de separarse ni romper sus lazos así como el señor Nakano se lo prometió a Rena, este último no pudo ser muy cercano a ellas al considerar su trabajo y la distancia que tenía que recorrer para poder verlas-

-En la oficina de Maruo Nakano-

Maruo: *Detrás de su escritorio* Aprecio que haya venido director Hernández.

El director: *Se sienta frente a él* A usted le agradezco por considerar mi institución como plantel de estudio para sus hijas.

Maruo: *Mostrándole una carpeta con las actas de nacimiento de las quintillizas* Tuve que hacer un enorme cambio en sus actas de nacimiento para que las pudieran aceptar, las registré a mi apellido y finalmente la SEP me dio la custodia como padre en su Kardex de estudio *se las entrega*.

Director: *Las revisa* Ciertamente conservan el nombre de su madre, pero cambiaste su primer apellido para poder incorporarlas a la SEP *viéndolo* sabes que te lo acepto no solo como un documento legal si no también porque somos conocidos.

Maruo: Siendo que tu institución es secundaria y prepa creo que será lo mejor para ellas, es escuela exclusiva para mujeres, sus niveles de estudio son de primera calidad y...

Director: No encontrarás nada mejor aquí en Toluca y lo sabes mi amigo, de lo contrario tendrás que llevarlas a Ciudad de México.

Maruo: *Siendo directo* Estoy dispuesto a inscribirlas.

-Meses más tarde-

Ichika: *Entra a su departamento con el cabello corto*.

Las 5: *La miran* Ichika... ¿qué le hiciste a tu cabello?

Ichika: *Sonriendo* Me lo corté, me estorbaba mucho para hacer las actividades del club así que me lo corté.

Itsuki: Vaya, te queda muy bien.

Miku: Se ve menos enredoso.

Ichika: También tiene lo suyo Miku jeje.

Miku: Creo que también me lo voy a recortar un poco *voltea con Nino* ¿qué hay de ti Nino?

Nino: *Sin voltearla a ver* Bueno... preferiría conservarlo como lo hemos tenido siempre, quizás solo sea el fleco para no complicarme tanto.

Yotsuba: *Llega con ellas* Bueno ya estuvo de tanta plática, es hora de ponernos a estudiar.

La voltean a ver: ¿Qué?

Yotsuba: Ya se vienen los parciales, vamos a estudiar.

Miku: *Viéndola* Yo no tengo problemas Yotsuba, quizá esto sea más bien para ti.

Yotsuba: ¿Eh?

Itsuki: Sí, pero tiene razón, vamos a estudiar, los exámenes son importantes.

Ichika: Yo tengo cosas que hacer.

Nino: Y yo me conformo con pansar.

AUTOR: No lo escribí mal, es un dicho muy popular acá por si algunos no le entendieron.

Yotsuba: *Mira a Miku* Bueno, veamos a quién le va mejor de las dos Miku.

Miku: Yo no necesito competir contigo Yotsuba, eres mi hermana.

Yotsuba: Lo soy, pero tal y como dijo mamá, haré relucir el motivo por el cual soy especial.

Itsuki: *Viéndola* Yotsuba, mamá nunca dijo que eres especial por esto, dijo que todas somos especiales a nuestra manera, e incluso papá lo cree.

Yotsuba: Eso lo veremos.

-Minutos más tarde-

Yotsuba: *Toca a la puerta de Miku*.

Miku: *Abre* ¿Sí?

Yotsuba: *Le entrega un par de juegos de Xbox a Miku* Ten, ya no los necesito, me distraen de mis estudios.

Miku: *Algo confundida* Yotsuba, ¿no te gustaba jugarlos?

Yotsuba: Son como trapos viejos que ya no necesito, así que mejor quédatelos, ya sé que a ti sí te gustan.

Miku: *Los toma* Gracias, a ver... *los mira* el Call of Duty y el Assassin's Creed *abraza a Yotsuba* gracias hermana, me han dicho que son muy buenos.

Yotsuba: *La suelta* Ya quédatelos, distráete mientras yo voy a estudiar.

-Pasan las evaluaciones-

Yotsuba: *Sale de clases con sus resultados* Bien, salí con un 71 en historia, pero lo demás sigue estando perfecto.

Miku: *Llega con ella* Yotsuba...

Yotsuba: *La voltea a ver* ¿Eh?

Miku: *Le muestra sus calificaciones* Me costaba mucho la materia de historia pero esta vez saqué un 89 en esa materia, nunca me había ido tan bien, y todo fue gracias a esos juegos que me prestaste.

Yotsuba: *Le sonríe de forma nerviosa, pero sintiendo un enorme rencor por dentro-.

-En la casa-

Yotsuba: *Repasando en su cuarto* -Esto no puede ser, tengo que ser la mejor, en vez de hacer que le fuera mal a Miku le terminó yendo mejor que a mí, pero no me voy a detener, solo necesito sacar una calificación mejor a la de ella; necesito trabajar más duro, estudiaré un montón, me volveré más inteligente y conseguiré entrar a una empresa que me pague muchísimo dinero, yo voy a ser la mejor, así como se lo prometí a Fuutarou-.

-Su estrategia no le sale muy bien que digamos y solo hace que explote de más sus límites en su siguiente año de secundaria; las cinco pasaron sin problemas la secundaria y al pasar a la preparatoria no tienen problemas en adaptarse ya que era la misma institución y los mismos compañeros, por lo que su vida transcurrió de la mejor manera; pero el lapso de la pubertad a la adolescencia las hizo tener mayores cambios drásticos tanto en su personalidad como en su relación familiar al grado de ya casi no coincidir mucho con la otra, algo que tenía que pasar pero sin embargo algunas de ellas como Nino y Yotsuba no eran capaces de asimilarlo, por lo que al llegar a la preparatoria su vida dio un giro inesperado-