Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Alastor/Lucifer

En el corazón del infierno, donde los destinos están forjados y las almas se retuercen en tormento, se alza majestuoso el Happy Hotel en este peculiar establecimiento, dirigido por la encantadora demoníaca Charlie, se acogía a los pecadores en busca de redención, pero entre los muros del hotel, se cierne una sombra de tensión que amenaza con oscurecer incluso el más brillante de los días infernales.

Alastor, el enigmático Overlord conocido como "El Radio Demonio", deambulaba por los pasillos del Happy Hotel con su típica sonrisa inquietante pintada en el rostro pero a pesar de su carácter afable, Alastor era un ser de doble naturaleza, con un lado oscuro que se escondía detrás de sus encantadoras maneras pero sin embargo, incluso su aura de confianza y seguridad no podía ocultar el dolor que latía en su pecho y por otro lado Lucifer, el mismísimo gobernante del Infierno, conocido por su excentricidad y volatilidad, también residía en el Happy Hotel, aunque su presencia era más bien un espectáculo raro ya que desde su separación de Lilith, Lucifer se había sumido en una profunda depresión, dedicándose a la fabricación compulsiva de patos de goma y evitando cualquier contacto con el mundo exterior, incluyendo a su hija, Charlie.

Un silencio incómodo colgaba en el aire cada vez que Alastor y Lucifer se cruzaban en los pasillos ya que con el desconocimiento de todo hacía tiempo que habían compartido algo más que amistad, pero los recuerdos amargos de una traición pasada habían dejado a Alastor con el corazón destrozado y a Lucifer con la necesidad apremiante de disculparse.

Charlie, siempre atenta a las tensiones que bullían bajo la superficie, observaba con preocupación la tensión entre su padre y el misterioso Overlord y decidida a desentrañar el misterio, se acercó a su padre en su habitación, donde lo encontró absorto entre montañas de patos de goma.

"¿Papá?", preguntó Charlie con ternura, rompiendo el silencio opresivo que reinaba en la habitación.

Lucifer levantó la vista, sorprendido por la presencia de su hija. "Charlie, querida, ¿qué haces aquí?", dijo con voz melancólica, apartando a regañadientes su mirada de los patos.

"Algo pasa entre tú y Alastor, ¿verdad? ¿Qué ha pasado entre ustedes dos?", inquirió Charlie, con una mezcla de curiosidad y preocupación en su voz.

Lucifer suspiró, su expresión tornándose aún más sombría. "Hemos tenido... problemas en el pasado, cariño, pero ahora me doy cuenta de que necesito arreglar las cosas".

Charlie asintió con comprensión. "Tal vez sea hora de que hables con él, papá y quizás puedan encontrar una forma de superar lo que sea que haya pasado".

Con un nudo en la garganta, Lucifer asintió. "Tienes razón, hija, gracias por recordármelo". Se puso de pie, decidido a enfrentarse a su pasado y buscar la redención que tanto anhelaba.


Mientras tanto, Alastor se encontraba en su propia habitación, absorto en sus propios pensamientos, la aparición inesperada de Lucifer en el Happy Hotel lo había sacudido hasta lo más profundo de su ser, desenterrando emociones que había enterrado hacía mucho tiempo y de repente, hubo un golpe en la puerta. Alastor frunció el ceño, preguntándose quién podría interrumpir su soledad y al abrir la puerta, se encontró con la figura inconfundible de Lucifer, con una mirada de determinación en sus ojos.

"Alastor, necesito hablar contigo", dijo Lucifer, su voz cargada de emoción.

Alastor apretó los dientes, luchando contra la oleada de sentimientos que amenazaban con desbordarse. "No tengo nada que decirte, Lucifer. ¿Qué más hay que hablar después de lo que hiciste?".

Lucifer bajó la mirada, sintiendo el peso de sus errores sobre sus hombros. "Lo sé, Alastor. Sé que te hice daño, más de lo que puedo expresar con palabras pero quiero intentar arreglar las cosas, si me lo permites".

Alastor vaciló por un momento, su corazón luchando entre el dolor del pasado y la posibilidad de un futuro diferente y finalmente, dio un paso adelante, sus ojos encontrando los de Lucifer con una intensidad sorprendente.

"Tal vez...", murmuró Alastor, antes de que sus labios se encontraran en un beso desesperado, cargado con años de dolor y anhelo reprimido.

En ese momento, entre las paredes del Happy Hotel, dos almas rotas se pusieron en camino de la redención que tanto anhelaban, en los brazos el uno del otro hablando del pasado y del futuro y mientras el infierno seguía girando en su eterna espiral de caos y tormento, Alastor y Lucifer encontraron un atisbo de paz en medio del caos, unidos por el poder del perdón y el amor.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro