Nunca había visto el cielo tan gris como esa tarde... Mi abuela había cerrado sus ojos para siempre.

Quiero simplemente llorar pero no puedo, una parte de mí se siente tan culpable de su muerte, siempre fuí un niño caprichoso y mimado... Que si tal ves hubiera hecho caso, ella hubiera sido feliz y no tendría este final.

[ ... ]

Veo a mi abuelo sentado viendo por la ventana, ¿Realmente la extraña o solo es un capricho?

—¿Qué haces aquí? ¿Cómo puedes tener el descaro de venir aquí? ¿No te dije que no compartimos la misma sangre? Me das vergüenza

¿Enserio mi abuela amaba a este hombre? Me siento a su lado de rodillas, con la única esperanza de hacerlo cambiar, mi abuela no merece morir sin una dísculpa.

—Yukio-san... Yo no te odio... Al contrario, quiero que esto termine bien, mi abuela no merece morir triste...

Tomé su rostro, él ha estado llorando todo este tiempo, está frío.

—Mi abuela te amaba... Por qué tu eras diferente a aquellos hombres... Eres el único que la endulzó con acciones y detalles pequeños... ¿Por qué le hiciste daño? ¿Por qué la encadenaste a un amor amargo?

—Mi amor nunca fue amargo

¿No lo fue? Entonces... ¿Por qué mentías? Yo también estoy llorando, pero algo en mí me hace romper en risas, las lágrimas se deslizan hasta mi boca y siento el sabor salado de estas, no puedo dejar de reír.

—Sino fue amargo... ¿Por qué le destruíste lo único que ella amaba? ¿Por qué le destruíste a su familia?

Golpeó mi mejilla y eso me hace callar, yo por otro lado solte su rostro... Él ya no va a cambiar.

[ ... ]

Me siento tan débil, tan inútil y decepcionante.

Yo no asistí al funeral de mi abuela, yo no me despedí de ella... Tenía miedo de Yukio, él me daba miedo, pero ahora lo único que siento es lastima por él.

—Abuela... ¿Puedes perdonarme por hechar tu vida a perder?

Me siento débil.

—¿Puedes perdonarme por no dar la cara?

No puedo ver su foto de ella, me duele.

—¿Puedes perdonarme por no despedirme? ¿Por no estar ahí?

Siento que me estoy ahogando.

—Lo siento... Soy tu peor nieto.

Cierro mis ojos y me dejo caer al suelo, Yukio... Me das lastima.

—¡El Joven se desmayó!—gritó la doncella—.

[ ... ]

Ha pasado un tiempo, ahora vivo en otro país, desde la muerte de mi abuela no he visitado lo que fue mi hogar, el último día me desmayé...

Yukio me mando a envenenar.

—Joven, llegó la noticia... De que Hamada-san falleció

¿Así querías terminar? Solo y sin nadie más... Encadenaste a mi abuela a algo tan amargo e injusto, espero en otra vida te alejes de ella... Y no puedas acercarte.

—Mi sentido pesame joven

—Está bien... Él no iba a cambiar, yo no soy su sangre y no tengo por qué preocuparme

Cargo con mucho dolor... Pequeña ave, ¿Puedes levantarte? Has dormido bastante... Por favor, se que también la extrañas, después de todo... Ella fue la única en aceptarte como familia, ella es nuestra única familia.

Hana Ozora fue la única que consintió al ave como un niño... Y la única que cuido de una familia que no era suya, pero que ellos siempre la amaron más que a nada.