La Barrera
-El comité se niega a tomar responsabilidad sobre las expediciones a partir de éste punto.-Deslizó hojas transparentes sobre la mesa ovalada.
-No es una negación total.-Dijo otro miembro del grupo-Solo evaluamos la posibilidad de que tan peligrosa sería una expedición cerca a la barrera negativa. Y con los últimos resultados obtenidos gracias al radiotelescopio temporal POCART, hemos tenido una mejor resolución del campo estudiado.
-No es alentador en lo absoluto.-Dijo el siguiente integrante del comité que se encontraba cerca.
-No exijo muchos recursos, solo una traslasora y equipo para sobrevivir unas cuantas semanas.-Respondió Neyl, tratando de convencer al grupo de hombres envejecidos.
-No es posible. Los hangares cercanos al planeta Montelar han sido deshabilitados, por lo que no dispone de una traslasora. Quizás podría esperar unos ciclos hasta que los recursos cercanos se restablezcan.
-¿Qué hay del equipo de supervivencia? Es casi igual o talvez menos importante que la traslasora.-Volvió a insistir Neyl.
-Puede obtenerlo en las centrales del comité cercanas, pero aún así no dispone del transporte...
De nuevo la sala se escuchó vacía. Con las hojas siendo deslizadas de mano en mano por parte de los tipos de alto cargo. El único exo-explorador presente se encaminó a los cristales que mostraban la luz azul del amanecer temprano en aquella sede del Comité de Colonización.
-Algunos aquí presentes evaluamos posibilidades aprobatorias respecto a su proyecto de investigación.
El exoexplorador y científico además, dio la vista hacia la mesa.
-Con el actual comité de recursos exteriores, se me ha negado igual cantidad de información, crucial para mí y mis investigadores.
-Claro, también se nos sería posible apoyar la última investigación.
Algunos en el lugar gruñeron ante el comentario que inutilizaba negaciones posteriores. La mayoría, se podría decir, estuvieron en contra del explorador y trataban de sabotear permisos y aditamentos vitales. O un vehículo espacial como una exploradora atómica, un tipo de estación espacial trasladable que usando un impulso nuclear relativamente leve era capaz de llegar a un planeta vecino o aún más lejano, lo cual se podía interpretar como una mayor cantidad de combustible que era innecesario al lado del impulso que ofrecían las exploradoras atómicas. Habían sido de las preferidas por la comisión cuando ésta aún demostraba interés en la colonización de planetas, aunque solo se tratase de llegar a una pequeña luna.
-Nos ha pedido demasiado hasta ahora. Y tal vez ni siquiera dispongamos de la autoridad suficiente como para dejarle ir a tal lugar solo a explorar.
-El planeta menos afectado y más cercano a la barrera es el planeta Inartia.-se defendió Neyl-La última revisión con la exploradora atómica Nro. 8 les ha dado detalles del lugar. Tiene suficiente atmósfera como para instalar un hábitat provisional en menos de una semana terrestre.
Uno de los miembro del comité se paró de su asiento, dejando el sitio vacío para luego dirigirse a la ventana extensa y casi invisible que iluminaba el lugar con luz tenue.
-Lo sabemos claramente.-dijo tranquilamente-La última exploradora ha dicho suficiente a éste comité y a sus antecesores de tal posibilidad como para rechazarlo por completo.
El hombre se retiró con un cierre de puertas que hizo eco en el salón y en la cabeza de Neyl mientras pensaba en lo dicho.
-El rechazo fue hace ya bastante tiempo, sin embargo, hubieron muchas oportunidades en que la evaluación de la expedición local al planeta... Inartia fueron solo pequeñas consideraciones. Al fin y al cabo... ,¿qué cree que haya de especial en ese planeta?
Neyl dudó la respuesta, pero entonces observó como los otros también lo veían a él pensando que no diría nada ni nunca lo haría.
-¿Por qué no hacerlo?-respondió él, casi con entusiasmo.-¿Cuántos planetas así podremos encontrar? Además, no hay ninguno otro que haya aparecido tan cerca de la barrera negativa. Si no lo ha destruido, debe de ser por alguna razón. Ya que no lo ha hecho y es comprobable con el equipo que aquí tienen, entonces debemos aprovechar tal posibilidad de habitarlo por completo y averiguar por qué sigue existiendo, podría ser por un campo magnético de fuerza mayor a los que hemos visto.
-Escuche. La barrera no ha sido atravesada por nadie, y no hemos habitado el lugar por obvias razones.
-¿Cuáles?-volvió Neyl hacia el tipo que le refutaba.
-¡Su propia existencia! Por así decirlo, la barrera anti-energía no sólo devora lo que se acerca a ella, sino que expulsa materia en ciertas cantidades cada que enviamos a alguien a verificar. Y si usted ha visto el planeta con sus propios ojos, déjeme decirle que ya ni siquiera está sólo, sino que una estrella acaba de materializarse al lado suyo. ¡Y nadie sabe por qué!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro