✨DINAMICA DE ESCRITURA IMPROVISADA✨

OBJETIVO:
•Ayudar a escritores a pensar rápidamente y crear nuevas ideas.
•Incentivar a lectores a escribir.
•Formar equipos de lectores y escritores en los que se ponen en marcha sus capacidades imaginativas y redacción.

Líder de equipo: LDPDJK-97

Miembros del equipo:

tDiwrnod_

SenioritaRMDeJeon

Lulisaeth_3

LizaParkdeJeon

Natidolly7

Los íncubos son seres extraordinarios que buscan saciar su deseo en las personas con sed de lujuria y pasión, otorgándoles el placer que ansían muy a fondo de su ser.

Cada ser humano cubre cierta necesidad gracias a la pirámide de Maslow, donde dicho autor cita la parte fisiológica donde recalca que el sexo es un factor importante para cubrir el deseo que la persona anhela.

Así que, tanto como un incubo y el ser humano, ambos quieren cumplir el mismo objetivo, tener los mejores orgasmos.

─────────── 😈

Un día, en un pueblo alejado de la ciudad, una joven llamada Mariel Scott se sentía muy sola y desesperada. Pues sus relaciones pasadas habían sido insatisfactorias y ella anhelaba con muchas ansias, experimentar un placer más profundo y significativo.

Una noche, mientras dormía, sintió una presencia extraña en su habitación. Al abrir los ojos, se encontró con un hombre de belleza sobrenatural, sus ojos brillaban con una intensidad que la atrajo de inmediato. El hombre, se presentó como un íncubo, un ser mítico que se alimentaba de la energía sexual de las personas.

La joven de cabelleras doradas, sintió un escalofrío recorrer su cuerpo al ver al misterioso íncubo frente a ella. A pesar de sentir una mezcla de miedo y excitación, no pudo apartar la mirada de los penetrantes ojos del ser sobrenatural frente a ella

El íncubo, con una sonrisa seductora, le susurró palabras al oído que hicieron que la piel de Marie se erizara.

—Te ofrezco un tipo de placer que nunca antes has experimentado cariño, te prometo un éxtasis que te llevará a un lugar de satisfacción inimaginable.

Aunque parte de Marie sabía que enfrentarse a un ser tan oscuro podría tener consecuencias desconocidas, la atracción y la curiosidad la empujan cada vez más a aceptar la oferta del íncubo.

Sin embargo, mientras se adentraba en la oscuridad de la noche con ese misterioso ser, una sensación de inquietud comenzó a crecer en su interior.

¿Qué secretos ocultaba el íncubo?

¿Qué precio debía pagar por el placer prometido?

Marie se encontraba en una encrucijada entre la tentación y el miedo, sin saber realmente qué camino tomar.

La noche se volvía más densa y el aire se llenaba de un aura de misterio y suspenso. Los susurros del íncubo resonaban en la mente de Marie, mientras su corazón latía con fuerza ante lo desconocido que se avecinaba.

─────────── 😈

El estruendoso sonido del despertador de Marie la hizo despertar de golpe. Su cuerpo sudado adhería la fina tela de su vestido de dormir a su piel de porcelana, su pecho subía y bajaba debido al sueño que recién acababa de tener, o eso creía ella. Sus cabellos de oro, estaban desgreñados y debajo de sus ojos había unas, apenas visibles, ojeras.

Ella se pasó las manos por el rostro como si de esa forma consiguiese espabilarse y en cuestión de segundos, unas imágenes llegaron a su mente haciéndola recordar aquellos bonitos ojos que había estado mirando la noche anterior, y a pesar de creer que había sido un sueño, ella lo había sentido demasiado real, aquella presencia, había sido demasiado real.

Se levantó de la cama y se dirigió al baño dispuesta a iniciar con su rutina diaria.

Durante todo el día estuvo pensando en si cuando volviera a dormir se encontraría con ese hombre nuevamente o si todo lo que había pasado había sido tan solo un sueño que había producido su imaginación.

—Ya se puede ir a casa, señorita Scott. —Pronunció la voz gastada del mayordomo.

La cosa era que Marie trabajaba en una vieja mansión de limpia piso, ya que había sido el único sitio donde le habían dado trabajo y se preguntaba por qué se empeñaban en conservar aquella mansión si era fea y fuera de época. Solo habitaba la servidumbre allí, porque nunca había visto ni oído hablar de los dueños de la casa.

—¿Me ha oído señorita Scott?

—¿Eh? —Inquirió ella saliendo de sus pensamientos.

—Le he dicho que mañana no es necesario que venga.

—Ah, muy bien.

—Eso es todo.

Dicho aquello, el hombre de avanzada edad pero de figura esbelta y vestiduras finas, le dió la espalda y se retiró seguramente a la cocina. La joven solo hizo una reverencia por respeto al hombre que ni siquiera le prestó atención y decidió salir de aquel fúnebre lugar lo más pronto posible, pues estaba cansada y a su vez, estaba muy curiosa por descubrir si lo de anoche había sido solo un sueño o suceso real.

Al llegar a su pequeño departamento y tras cerrar la puerta, se recargó de ésta con pesadez, estaba realmente cansada de realizar la limpieza de 17 habitaciones y 11 baños ¿Quién mierdas era el dueño de aquel lugar tan exagerado? Se sacó los zapatos con mala gana y dejó caer su bolso al suelo para dirigirse a su humilde baño para tomar una ducha y luego acostarse a dormir con un juego de pijama limpio y calentito.

Realmente quería volver a ver aquellos ojos que le prometían muchas cosas pero a su vez le gritaban "huye mientras puedes"

─────────── 😈

Su mente estaba cegada del placer que sentía por como aquel ser la tomaba con posesión, tocando sus puntos débiles con fervor, era como si aquellas grandes manos supieran tocar perfectamente cada punto de su ser. Pero por alguna razón se sentía que su cuerpo actuaba sin su consentimiento, como una marioneta en las manos de aquel hombre de rasgos impecables.

Aunque por naturaleza, cada tacto del ser, hacía que se le erizara la piel, sus gemidos no tardaron en salir al sentir la lengua del íncubo en su cuerpo, haciéndola inclinar su espalda dándole más acceso a sus pechos, grandes y redondos. Sus shorts de pijama ya no los tenía puestos, ni tampoco su ropa interior, lo que la dejó descolocada.

¿En qué momento aquellas prendas desaparecieron de ella?

Él era el culpable, estaba ansioso de tomarla que le desprendió cada prenda, como ahora, que le había quitado aquella camiseta, haciéndola pedazos.

Marie se encontraba desnuda, su cuerpo lechoso brillaba con la pequeña luz de la Luna, a lo que el pelinegro logró causarle un efecto, sus ojos se habían puesto rojos, su cuerpo vibraba por lo que no tuvo cuidado de abrirle las piernas a la fémina, mostrando su parte íntima.

—¡¿Q-qué haces?! —Pregunta exaltada la rubia, viéndolo con terror.

Su mente le decía que huyera, que se fuera de ahí, pero aún así, el cuerpo de ella no reaccionaba más que al tacto de el.

—Tranquila, lo disfrutarás. —Susurró de vuelta, con aquella voz profunda y varonil.

Acarició su cuerpo para tomar sus caderas con fuerza, las marcas de iban haciendo notorias por cada tacto que él dejaba en ella.

—Te voy a follar tan bien, que solo sabrás gritar de lo mucho que te gusta. —mencionó con esa voz profunda cargada de deseo.

Ella no respondió nada, no podía, era como si aquel ser le hubiera cerrado la boca.

Poco a poco la temperatura de su recámara se sentía más caliente, no entendía el porque, era como si estuviera en la olla donde hirviera agua o en un sauna para relajar su cuerpo.

El tiempo transcurría lento, pero las acciones del íncubo eran rápidas y precisas, pues ahora lamía su intimidad con precocidad, algo muy erótico, una imagen digna para una película porno.

Las piernas de Mariel estaban abiertas a la par, rodeando la cabeza del demonio.

La fémina se retorcia del placer al sentir los primeros espamos de su orgasmo, Jungkook sabia tocar los lugares exactos que la hacían delirar, sus gemidos eran agudos y a la vez altos al sentir su lengua penetrar su interior.

—¡Ah! ¡Dios, sí!—gimió alto al sentir su orgasmo.

El íncubo sonrió ladino al ver lo que ocasionaba en la mujer que tenía sobre la cama, con un leve sudor en su cuerpo por el reciente orgasmo, mordió su labio inferior al verla así con las piernas abiertas, lista para ser tomada por él.

La noche era larga, así que aprovecharía para profanar aquel hermoso cuerpo la cual se había interesado como nunca antes.

__________________😈

A partir de esa noche, los días de Marie se volvieron una tortura. Durante las horas de luz no podía concentrarse en nada más, sus pensamientos siempre volvían a ese hombre misterioso que, cada noche, aparecía en sus sueños, que la volvía loca y se apoderaba de su ser con tan solo mirarla. Marie no se daba cuenta, pero lo deseaba tanto que no pensaba en nada más que no sea el. Sus encuentros se volvían cada vez más intensos, como si él se alimentara de su miedo, su deseo.

Marie comenzó a temerle a la noche, y a la vez, la esperaba con un anhelo desesperado. No podía escapar, no podía resistirse. Sabía que él estaba tomando el control de su vida, y aunque su conciencia luchaba por liberarse, su cuerpo y su voluntad ya no le pertenecían.

Y entonces, entendió una verdad inquietante: aquel hombre no era un simple sueño, era real. aquel hombre era dueño de su vida y de su cuerpo para siempre, ya no tenía salida.

•Esta historia no fue corregida, ni elaborada por las administradoras de CMBS, cualquier error y todo mérito dentro de la historia es propio de los miembros de cada equipo.