La noche había llegado, y con ello el festival de Ink, el soberano del reino de la creación.
Era un lindo ambiente, la gente bailando y riendo, degustando los bocadillos servidos en la gran mesa, una celebración plenamente hermosa, el cielo nocturno estaba despejado y le daba un aura magica al lugar.

Vinieron varios vecinos, del reino destructor, del reino soñador, e incluso, hasta varios condes del reíno de la guerra, era curioso e intrigante que hubieran llegado, muchos de los campesinos creían rotas las relaciones con aquel reino problemático y sombrío, la gente era grosera y tosca, sólo los ancianos y chamanes de las afueras tenían los recuerdos, los recuerdos de como antes eran las cosas, que todo era un sólo terreno y no había discordia, sólo abundante felicidad y los lords, eran los encargados de mantener todo en equilibro, pero desde la ultima sequía que hizo llorar al pueblo, las decisiones tomadas por los de arriba, eran injustas para algunos y beneficiarias para otros, causando problemas y separación entre los cuatro lords.
La única solución para que no hubiera una guerra interna fue la división, a cada uno le tocó parte del extenso terreno, tenían la obligación de estar comunicados entre si, y hacer negocios entre ellos para que los pueblos no pasen hambre ni desdicha, fue duro e incómodo al principio, pero poco a poco lograron mantener el orden otra vez. Pero, los autoproclamados pueblerinos de guerra, se cerraron, aislandose y no dejando pasar ni salir a nadie, desde entonces las relaciones con aquel reino se vieron afectadas, definitivamente era raro ver a esos condes por ahí, identificables por el sello personal de aquel lugar.

Centrándonos en la fiesta, cada quien con su pareja de baile celebraba la maravillosa cosecha obtenida, los aldeanos del reino de la creación estaban muy agradecidos, su actual rey hacia mucho por ellos, todos ansiaban saber que sorpresa les tenía para ellos.

A media noche la música cesó y en el escenario de madera se pudo ver al rey del lugar, la gente le aplaudió.

-quiero agradecerles, mi amado pueblo, por creer en mi palabra y en mis deciciones- comenzó a hablar, alzo la vos para que pueda ser escuchado en cada rincón- en esta celebración agradecemos a todos nuestros campesinos, por estar trabajando día y noche para traernos la comida de todos los días, por favor un aplauso por el sacrificio- alago a la gente de su pueblo, que aplaudió emocionada, con regocijo- además, quiero agradecerles a nuestros reinos vecinos, por todo su apoyo y colaboración, propongo un brindis, por favor levanten sus copas- aviso, la gente del lugar algo sus copas de cristal con el más exquisito vino, producido por el reino destructor. -por muchos más años de armonía, y que las relaciones nunca quiebren- celebró, cada aldeano e invitado levantó su Copa.

-viva!!- alabaron todos en la multitud, haciendo sonar las copas, al chocarse unas contra otras, los aldeanos sonreian con sinceridad, parecía perfecto todo, más aún, el discurso no había terminado, todo el mundo estaba a la espera de la noticia.

-esta bien, está bien el pueblo es paciente- dijo sabiendo lo que su gente esperaba- hay algo más, como sabrán, he cumplido mis veintiún años de edad, y me apego a la tradición, de contraer matrimonio- comenzó a decir, el pueblo guardo absoluto silencio, ya sabiendo lo que esperaba, sólo falataba saber quien...- quiero decir, mi amado pueblo, que hay alguien, que ha tocado mi corazón en lo más profundo de mi ser, hay alguien que logró dejarme a mal traer con sus encantos y hermoso carácter, asique, anunció públicamente, que desde el día de hoy, me he comprometido con el primogénito segundo, del reino destructor- terminó de anunciar, el pueblo dio un suspiro profundo, mientras el prometido de su rey subía al escenario, colocándose al lado de Ink, traía una sonrisa nerviosa y sus mejillas estaban sonrojadas, los prometidos guardaron silencio.

Nadie hablaba, el corazón, tanto de Ink, como el de Error latian con fuerza esperando la reacción de los habitantes, nadie hablaba pero.... -¡¡Aleluya!!- grito el pueblo alzando nuevamente sus copas, una señal de que aceptaban el futuro matrimonio, Ink dio un suspiro y sonrio, su mirada se dirigió a su amado y tomó una mano de este.

- el pueblo lo quiso mi amor- comentó con una sonrisa y algunas lágrimas salían de sus ojos, pero no tantas como a Error, que lloraba con plena felicidad.

- el pueblo lo quiso mi Kiki- suspiro dejando salir el aire, su amado tomó una de sus manos, depositando un suave beso en ellas que hizo que sus pómulos se sonrojaran aún más, dejo un hermoso anillo de oro en su dedo anular y le sonrió.

- te amo mi Ruru-

-y yo a ti, mi Kiki-

Ambos enamorados profesaron su amor mutuo, uniendo sus labios al final, en un beso sincero y hermoso, compartiendo su amor mientras el pueblo les aclamaba.

Por que el amor, y la Unión de ambos reinos podría traer nuevamente la paz y la Unión de los cuatro territorios.
El pueblo lo sabía, se vendría una nueva era de reinado, y sus plegarias pedían, que sea próspera y llena de paz, así lo quería el pueblo.

Adivinen quien regresó de la cueva?.... io :"3
Lo se, lo se, tardo años luz en mis publicaciones, y estuve desaparecida por mucho, pero es que la escuela me tenía más presa que condenado a cadena perpetua :"v
Estoy en vacaciones de invierno, y quiero aprovechar a adelantar un nuevo proyecto, mo prometo mucho
Gomen Sinners
Sin nada más que decir BYE! (He vuelto yeiii :] )