— ¡No! ¡No, no, no, no!

Me desabrocho el cinturón y corro hasta la puerta. La azafata se levanta de un brinco y se para junto a mí.

— ¡Abre la puerta!

— Pero señorita...

— ¡Qué abras la puerta te digo!

— Ana, ¿qué mierdas haces? — dice pero lo ignoro.

— No puedo hacer eso, el capitán...

— ¡Pues dile que detenga el maldito avión y me deje bajar! — estoy furiosa.

La azafata mira algo, o a alguien, detrás de mí y abre la puerta de la cabina. Deja la puerta entreabierta así que escucho al piloto cancelar el despegue y avisar que se aleja de la pista.

Tan pronto como el Jet se detiene, la azafata abre la puerta y bajo las escaleras lo más rápido que puedo.

— ¡Ana! ¡Ana! — Lo ignoro — por Dios Anastasia, ¡deja de ser tan necia!

— ¡¿Necia?! ¡¿Necia yo?!

Me detengo para girar hacia él y encarar al idiota que me lleva contra mi voluntad.

— ¿Qué haces? — pregunta con tranquilidad.

— ¡¿Qué haces tú?! ¡¿Qué he dicho para que pienses que quiero ir a Georgia?!

— Ahí vive tu madre — dice confundido.

— ¡Ya lo sé! ¿Por qué crees que quiero verla?

— Pensé que si hablabas con ella y arreglaban las cosas dejarías de tener miedo y te casarías conmigo.

Suena sincero y eso hace que mi enojo disminuya. ¿De dónde saco esa idea tan absurda?

— Yo no quiero ver a mi madre Christian. Ella no solo dejó a Ray, me abandonó a mí también cuando dejó de llamarme y preocuparse por mí.

Me alejo un poco de él para escoger cuidadosamente mis palabras. Cuando me vuelvo para mirarlo, el piloto, la azafata, Sawyer y Taylor nos observan desde la escalerilla del jet.

— No hay nada que yo tenga que hablar con ella, Christian. Mi decisión de casarme contigo tiene que ver con encontrar el momento perfecto ¡y tú pareces empeñado a forzar las cosas!

— ¿Por qué no? Yo quiero casarme contigo, el momento perfecto podemos hacerlo nosotros mismos — dice como si fuera obvio — ¿por qué tengo que esperar más tiempo para llamarte mi esposa?

Sus palabras me conmueven tan profundamente que me lanzo a sus brazos sin pensarlo. Esta vez no es una orden, un capricho o miedo lo que escucho en su voz, sino total y absoluta sinceridad.

— Está bien — suspiro.

— Está bien... ¿Iremos a Georgia? — dice confundido.

— No señor Grey, está bien... Me casaré contigo.

Se aparta para mirarme pero yo vuelvo a atraerlo para besarlo. Me abraza tan fuerte que siento que mis pulmones no obtienen suficiente oxígeno.

Se busca en los bolsillos de la chaqueta una cajita de terciopelo negro y lo veo arrodillarse frente a mí. ¡Santa mierda!

— ¿Qué haces?

— Me arrodillo — dice y abre la cajita.

— ¿Para qué? Ya dije que si...

— Guarda silencio necia, déjame hacerlo como lo tenía planeado.

Aprieto mis labios para no reírme de sus palabras. Creo que por esta ocasión dejaré pasar que me haya llamado necia.

— Anastasia Rose Steele, ¿quieres ser mi esposa?

— Hum — hago una mueca — Claro que sí, sí quiero.

Estiro mi mano para que coloque el anillo y es entonces cuando lo veo. ¡Es una piedra enorme! Debí saber que a ojos grises no se le da la discreción.

Le estiro para que se acerque y volver a besarlo. Recuerdo mi primer día de trabajo en la editorial y cómo salté por todos lados cuando vi las flores que me envió, ¿pero ahora? ¡Rayos! Saltaría todo el camino de vuelta a Escala.

— ¡Se cancela todo! — Les grita Christian — ya dijo que sí.

Los tres hombres sonríen y la chica, bueno a ella prefiero no mirarla. Taylor y Sawyer bajan la escalerilla para llegar a nosotros y nos felicitan.

Puedo ver a lo lejos la suv acercándose. Cuando estaciona a un lado, Dixon baja de ella y le entrega las llaves a Taylor.

— Llévanos a Broadview — ordena Christian.

— ¿Qué hay en Broadview? ¿Es ahí donde te accidentaste, no? Bueno, no fue un accidente, pero fue en esa zona.

— Si, espera a que lleguemos y te digo.

De nuevo Taylor conducen por la carretera a toda velocidad, seguido por Dixon y Sawyer en el Audi. Al cabo de unos minutos, reduce la velocidad y conduce entre las calles de una zona residencial bastante elegante.

Las casas son impresionantes, así que no me sorprendo cuando para frente a una gran reja y pone algún tipo de código para que la entrada se abra. Estaciona y Christian me hace una seña para que baje con él.

— ¿Te gusta?

— Es muy linda.

— Creo que podemos vivir aquí — dice como si nada.

— ¿Crees? Espera, ¿vas a comprar esta casa?

— No, ya la compré. Elliot y yo veníamos a revisarla cuando pasó lo del accidente.

— Emboscada — gruño bajito al recordarlo.

— Es nuestra ahora — me giro para verlo.

— ¿Nuestra? ¡Es maravillosa Christian! — Lo abrazo — ¡me encanta!

— Qué bueno que te gusta, pensé que podríamos casarnos aquí cuando la casa esté lista.

— ¿No está lista? — Digo confundida — Yo la veo bien — él nos guía hacia el interior de la casa.

— Necesita algunas remodelaciones, quiero que Elliot la haga autosustentable y...

— ¿Eso lleva mucho tiempo? — lo interrumpo.

— Creo que sí, y no creo que pueda hacer todo antes de que se case. Seguro va a dejar el proyecto a la mitad por irse a su luna de miel.

— Rayos — susurro.

— Poder casarnos en esta casa requiere por lo menos 6 meses más de tiempo y no quiero esperar tanto. ¿Has pensado ya en una fecha?

— No, pero sé que no quiero pasar por todo ese lío que tiene Kate, yo no necesito una gran fiesta.

— ¿Qué quieres hacer entonces? ¿Huímos a Las Vegas?

— Una pequeña ceremonia está bien, lo único que necesito es a Ray.

— Le diré a Taylor que lo traiga — me mira con los ojos entrecerrados — ¿Qué tan pequeña la ceremonia? ¿De qué estamos hablando exactamente?

— Mi papá, Kate, tu familia — encojo los hombros — no conozco a muchas personas.

— Podría organizar algo para la próxima semana, suponiendo que Ray pueda conseguirte un vestido en un par de días.

— ¿Ray? ¿Hablaste con mi padre sobre casarnos?

— Claro que sí, y para tú tranquilidad tengo su bendición — sonríe.

—¿La próxima semana entonces?

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Dejo el capítulo listo, espero les guste.

Quiero pedirles de su paciencia, estoy pasando por un problema familiar que me distrae completamente. Pero no me olvido de la historia!

Les pido sus buenas vibras para mí y mi familia, un beso! 😘