Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 19

— Bien Ana, ¡cuéntamelo todo! — insiste Mía.

— Creo que no hay mucho qué contar — me río — apenas nos conocemos hace dos semanas.

— Qué rápido Grey — Mía arquea una ceja hacia Christian.

— ¿Yo? — Responde haciéndose el ofendido — ¡Elliot conoce a Kate hace una semana!

— ¡Claro que no Elliot Grey! — lo regaña Mía.

— De nuevo Mía, gracias por la ayuda — ríe nervioso — no estamos aquí por mí, sino por él.

Elliot señala nuevamente a Christian y yo me río. Es divertido ver a este par pelear como niños pequeños. Ojalá yo hubiera tenido hermanos.

Mía me pregunta sobre mi familia y mi trabajo. Ella me platica que quería ser Chef y fue a París a estudiar, pero regresó hace poco. Al parecer su famoso maestro era un hombre insoportable.

— ¡Por Dios! Tengo tanta hambre — dice Elliot.

— Tú siempre, glotón. Hola, guapo... ¡Queremos ordenar! — grita Mía hacia un camarero.

— Mía, baja la voz — la regaña Christian.

— Bienvenidas damas, caballeros, ¿qué van a pedir? — dice el chico demasiado sonriente.

— Yo quiero una hamburguesa y refresco, y ella un sándwich de pavo y ensalada — señala Elliot.

— Yo quiero... Todo se ve bien... No sé — dice Mía sonriéndole al chico.

El camarero sonríe a Mía, pero luego me mira y me guiña un ojo. Yo me sonrojo y miro el menú. Cuando levanto la vista hacia Christian, él tiene el ceño fruncido.

Me giro cuando escucho a Mía decirle algo en francés a Christian. No sé qué dice, pero parece burlarse. Christian sigue con el ceño fruncido, y le responde algo en francés, parece molesto.

— ¿Qué dicen? — Le pregunta Kate a Elliot.

— No lo sé — dice Elliot intrigado.

Mía dice algo más y se ríe muy fuerte. Voltea nuevamente a ver al camarero, que nos mira confundido.

— Quiero filete de pollo con aderezo aparte — dice finalmente Mía.

— ¿Y tú? — el chico me mira otra vez y sonríe.

— Ana — me dice Christian inclinándose hacia mí.

— ¿Qué? — me inclino más hacía él.

— Nada — me susurra al oído — solo quiero que deje de mirarte.

Me quedo inmóvil un momento, estoy sonrojada y no quiero que lo noten. Christian se ríe en voz baja. Levanto la cabeza pero mantengo la vista en los ojos grises que adoro.

— Yo pediré lo que tú pidas — le digo un poco más fuerte.

— Bien — me sonríe y luego lo mira — tráenos dos filetes de pollo a la plancha, en salsa de tomate y ensaladas. Y una jarra de agua del día.

Yo evito mirar al camarero de nuevo, estoy apenada. Supongo que el chico termina de anotar los pedidos y se va.

— Eso no fue nada incómodo — dice Elliot y todos reímos.

— Bueno, ya vengo — dice Mía levantándose — voy al baño. Ana, ¿me acompañas?

— ¿Qué? Ahh sí, claro — le digo levantándome.

Elliot y Christian nos miran confundidos. Kate se ríe y abraza a Elliot. Yo camino atrás de Mía hasta el baño.

— Solo quiero decirte lo contenta que estoy de conocerte Ana — dice mientras se acerca a lavarse las manos.

— Te lo agradezco, yo también me alegro de conocerte, pero tengo que decirte que él y yo solo somos amigos... O algo así.

— Bueno, la verdad es que él no ha sido muy claro. Pero como bien dices, apenas se conocen hace dos semanas. Y él siempre ha sido muy reservado con su vida amorosa... Tanto que pensábamos que era gay.

— ¿Qué? — Digo sorprendida — ¿Por qué pensaban eso?

— Como ya te dije, nunca nos ha presentado una chica, ni hablado de una, menos dejarse ver con alguien. Por eso cuando Elliot dijo que Christian estaba viendo a una mujer no le creí.

— Bueno, no es gay — digo muy segura — me refiero a que Kate le preguntó, para una entrevista del periódico escolar.

Mía se ríe. Se acerca más a mí y pone su mano en mi hombro.

— Ana, tal vez sean amigos ahora, pero lo que pasó hace un momento fue una escena que nunca antes he visto. Y como buena hermana, ¡voy a sacarle provecho!

Me guiña un ojo y reímos. Salimos del baño y nos sentamos nuevamente a la mesa. Poco después, el chico se acerca a dejar las bebidas en la mesa y se retira.

— Chicas — nos dice Mía — como mis nuevas amigas, digo que deberíamos salir por unos tragos, ¡hace mucho que no salgo!

— Claro que si — contesta Kate — nos encantaría, ¿verdad Ana?

— Si, sería genial.

— ¿Y a nosotros no nos invitas? — Dice Elliot ofendido — ¿no quieres salir con tus queridos hermanos?

— ¡Claro que no! Ustedes dos espantarían a los chicos y nos quitarían la diversión — le contesta ella.

Christian y Elliot la miran con el ceño fruncido.

— Además, escuché de un bar padrísimo y que la banda que toca es genial — sonríe Mía — yo quiero conocer a la banda y este par de bellezas me ayudará a llegar al Backstage.

— ¡Mierda, no! — Dice Elliot — no usarás los encantos de mi chica para ver a un montón de idiotas en pantalones de cuero.

— ¿Y tú Ana? ¿Irías conmigo? — me dice Mía haciendo puchero.

— Claro, no te dejaré sola — le digo.

— ¡Mía, basta! Por supuesto que no irás, ni Ana... — dice Christian.

— ¿Por qué no? ¡Yo quiero ir! ¡Y conocer a la banda! ¿De qué otra forma podría conocerlos? ¿Quieres conseguirme tú los pases a los camerinos? — dice ella.

— Claro que no — dice serio.

— ¡Ya sé! ¡Tengo una gran idea! Voy a contratarlos para tu fiesta de cumpleaños hermanito — sonríe Mía.

— ¿Tu cumpleaños? — le digo sorprendida — ¿Cuando?

— ¡El próximo mes! La ocasión perfecta, me encargaré de todo — sonríe convencida.

La conversación se ve interrumpida cuando sirven nuestrosplatos, aunque tengo la impresión que este tema no acaba aquí.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro