Minho ingresó a su habitación casi corriendo y con las lágrimas al borde de salir. Que vergonzoso había sido todo eso. Tuvieron que apartar a Chan y acabar con todo de golpe, se disculpó mucho con Felix, quien había llorado del susto y Jisung junto a Yoojung tuvieron que llevarlo al departamento de la chica para que se calmara antes de llevarlo a casa. Se Rim hablaba con Chan en la sala, el castaño juraba no saber qué le había pasado tan de pronto, Hyunjin y Jeongin acabaron yéndose tan pronto Chan estuvo más relajado.

¿Agredir a un extraño? Eso no era algo de Bang, siempre era una persona tan tranquila y amable. Intentaba entender que tal vez había sido un arranque de esos que solían darle. Como la vez que Minho comió algo que le cayó mal, había sido una simple comida de la calle que su estómago no resistió, pero Chan actuaba muy nervioso y no dejó de cuidarlo hasta que mejoró, constantemente preguntaba si sentía mareos o taquicardia pero siempre respondió que no, era solo vómito. En ocasiones se angustiaba de más, pero esto había excedido todo límite, era tan bochornoso, ¿Cómo iba a mirar a Felix en clases? Tal vez lo alcanzaba en casa de Yoojung, debía disculparse.

Se levantó para poder salir del lugar pero apenas llegó a la sala, Chan se levantó para ponerse frente a él intentando que se detuviera para hablar aún cuando Park le decía que no era el momento. Pero había pasado tanto tiempo, ya no quería esperar al tiempo.

— Minho, hablemos.

— No, déjame, debo ir a hacer otras cosas.

— ¿Otras cosas?

— Disculparme con Felix por ambos, por ejemplo, después de todo es lo prudente—respondió el menor de mala gana.

— ¡No puedes ir con él!

Chan sintió una sensación de impotencia en su cuerpo, ¿Por qué iba a ir con él? Era Lucas, el imbécil que lo había traicionado. Claro, Minho no lo sabía y no había poder humano en la tierra que hiciera al explicarle la situación, lo entendiera. Pero ahí estaba, su príncipe de pie frente a él con una expresión de enfado y determinación a hacer lo que quería incluso si eso significaba desobedecer a Chan. Recordó lo terco que era Minos, una vez que tenía una idea en mente era difícil sacarla de su cabeza y no ceder a ello acabaría enojando al príncipe, siguiendo ese instinto, el castaño dejó salir un suspiro de frustración mientras se quitaba del paso del menor. Minho quiso sonreír agradecido por su comprensión pero tenía que mantenerse firme y no flaquear ahora que había conseguido lo que quería, así que se despidió de Se Rim y salió hacia el departamento continuo.

— Por Dios, Bang, ¿Seguro que estás bien? —preguntó Park con preocupación mientras le hacía sentarse nuevamente en el sofá—. Luces tan pálido.

— ¿Has tenido la sensación de que estás viviendo algo que ya viviste?

— Los déjà vu son comunes, Chan —respondió el mayor colocando el dorso de su mano en la frente de su amigo.

— No solo uno, toda tu vida.

Bang apoyó sus codos en sus piernas mientras escondía su cara en sus palmas, todo era demasiado bello para ser verdad, había encontrado a Minos pero al parecer aquel estúpido de Browning los seguía, ¿Qué buscaba? ¿Volver a joder su felicidad? ¡No! Siempre fue así, arruinando todo, de no haber sido por su odio habrían podido vivir una vida juntos, una, no todas esas que Bang Chan estaba soportando para volver a encontrar al amor de su vida. Tanto dolor, carencias y dificultades, no quería que todo fuese en vano.

Recordó las palabras del viejo sabio de aquel tema y sintió su corazón encogerse dentro de su propio cuerpo, no podías coincidir con tres personas, eso significaba que dejaba de ser una casualidad y algo estaba destinado a repetirse. Minos, Erzsbet y ahora Lucas. Rodó sus ojos antes de mirar hacia el techo, ¿La muerte se estaba riendo en su cara? Tantas vidas y justo cuando encuentra a Minos se le ocurre hacer esas cosas. Necesitaba arreglarlo, no podía dejar que esa confianza que le brindaba empezara a caer pero tampoco deseaba que estuvieran juntos, no, había la posibilidad de que un lazo emocional los uniera otra vez, los llamados "siento que te conozco de toda la vida" que bien podría no ser de toda esa vida pero sí de alguna.

— Mira, Chan —habló Se Rim—, tal vez solo estás cansado, necesitas relajarte y pensar en una solución a lo que te esté afectando, no es bueno cargar emociones negativas o puede ocurrir esto.

Park dio una palmada en el hombro de su amigo antes de salir, tal vez darle tiempo consigo mismo para reflexionar lo ayudaría, pero la mente de Bang viajaba a otros lados, aquellos donde su posición de defender a Minos reaccionaban antes que la cordura. Una solución, ¡Eso era! La vida era eso, buscar respuestas y Chan tenía la suya para su problema, debía encargarse de Felix.