Capitulo 1
Desde pequeños nos conocemos, recuerdo esos días de niños donde permanecía a tu lado. Yo solo era un niño inexperto en entrenamientos. Ahora ya soy tu guardia; Mine, mi princesa.
La expresión fría del peli-negro paseada por los pasillos de donde estada sentado de rodillas sobre el suelo de madera del recinto. Había sido llamado por la princesa del la región, la estada esperando. Este se hacia una rápida idea de que seria, desde hace años tenía una gran amistad con la princesa Mine, las malas lenguas del castillos no tardaban en decir algún chisme sobre su cercanía, mas solo se hacia indiferente. Solo él sabía lo que tenía con la princesa.
Aun con la mirada en el suelo, nota como las puertas se abren, entrando una mujer bastante linda, de largos cabellos negros, recogidos en varias trenzas, adornando varias Yukatas a modo de capa sobre su cuerpo, ocultando su bella figura.
- Cid - Hablo ella, con una voz dulce y gentil. - Puedes levantarte, mírame. Como princesa de estas tierras y mayor de 5 hermanas, tengo que ir a unas tierras algo lejanas a cumplir cierto deber, quiero que seas mi acompañante y escolta a estos meses de viaje.
- Hare todo lo que usted desee mi princesa. - Hombre de pocas palabras siempre. Fue lo único que dijo, dejando su lealtad en la joven.
- Nos vamos en 2 días al anochecer, ya mi padre sabe de mi decisión que seas tú quien me acompañe.
- Entiendo. Si me disculpa.
- Puedes irte.
Sin decir mayo palabra obedeció, dirigiéndose a su recamara a recoger sus cosas que llevaría en estos días con la Princesa en su trabajo. A un lado de su futon estada una espada que Cid no tardo en sostener. Desenvainándola para apreciar su filo, esa arma había sido un regalo luego de terminar su entrenamiento como Guerrero, y un logro al ser el primer extranjero en tierra japonesa en lograr un titulo como el suyo. Sumado, a ser el hombre de confianza de la misma princesa, eso y...
Lo ignoro, esa espada era prueba de todo su esfuerzo y su arma predilecta, se la llevaría con él, después de todo puede que un demonio los ataque en el camino. Busco el resto de sus ropas y las alisto perdido en pensamientos.
Aquellos días de la infancia donde ambos jóvenes, una joven princesa y un joven aprendiz, pequeños niños que a la edad de 12 se vieron por primera vez, un terrible accidente, en las aéreas fuera del castillo en un pequeño prado; un pequeño incendio se desato donde la joven princesa Mine quedo atrapada al estar solo todos se preocuparon con rapidez, buscando estar cerca, en esa misma área, Ferser el generar del castillo, junto a sus aprendices estaban entrenando en combate, armas y demás. Pero al enterarse la noticia fueron al buscar la princesa. Justo en eso Cid la encontró. Fue la primera vez que se vieron, o más bien; Que se hablaron formalmente.
- Princesa. Mi nombre es Cid, venga conmigo la llevare a un lugar seguro - Hablo, ella estada asustada, con fuerza sujeto la mano que su nuevo amigo le dada. Corriendo a un lugar seguro.
- Cuidado - Señalo la joven al ver que un árbol les caía, estaban en un área cerca de un bosque, donde pareciera que se iban a quedar atrapados.
La mente del ese momento joven Cid, buscada procesar información rápido, necesitada escapar antes de morir quemados. En estas áreas Ferser los entrenada y preparada, en magia y entrenamiento. En ese momento por desgracia, Cid no recordada nada de magia para salvarse. - Princesa venga conmigo. -. Con rapidez recordó el área de una cascada donde pensó estarían algo seguros.
- ¿Cómo te llamas? - Pregunto ella, el de pelo-negro no pensó que eso sería una buena pregunta en sus circunstancias. Necesitada encontrar a su maestro y sus compañeros.
- Me llamo Cid. - Respondió serio. - Venga por aquí - Dijo, estaban corriendo a todo los que las piernas daban. El olor a fuego y ceniza perturbada sus sentidos y su respiración, el olor se hacía fuerte y temían quedar atrapados. - Estamos cerca, señorita Mine necesito que se lance al agua cuando estemos cerca, el rio no es muy profundo por lo que estaremos a salvo del otro lado.
Ella asintió. Al llegar vio su voto de confianza y se lanzaron los 2, estaban a salvo.
- ¿Señorita como se encuentra? - Fue lo primero que pregunto Cid al estar los 2 sin mayores preocupaciones. Solo tenían que esperar para volver.
- Estoy bien, solo creo que me torcí el pie.
- Entiendo.
- Cid. - Toda su atención paso a la princesa al ella pronunciar su nombre - ¿De dónde eres? Me resulta rara tu forma de hablar.
- Ahh. Primero; no es correcto que me diga por mi nombre, yo solo trabajo aquí para servirle, no debería tener ese tipo de libertades. Y segundo; Vengo de un poco lejos, de Europa más no me termina de salir el idioma, lo siento.
- Entiendo. Gracias por salvarme.
- De nada para eso estoy aquí.
En la realidad tanto Cid como Mine, estaban en un carruaje que los llevaría a su hospedaje, ya habían salido desde hace tiempo. No era lejos, su destino eran unas tierras vecinas.
Al llegar les prepararon una habitación, como Cid era su acompañante, estada básicamente en la misma habitación pero separados. No se escuchada nadie, la noche estada en silencio, solo se escuchada los grillos afuera.
- Cid - Susurro ella, mirando fijamente a su guardián. Estaban frente a frente, mirándose a los ojos. La mano de ella paso por su hombro quitando la tela de su cuerpo, en este momento deberían estar dormidos, separados por tela y madera.
Los labios de Cid pasearon por su cuello mientras esta misma dejaba caer la tela que la envolvía. Antes de juntar sus labios en beso cargado de amor y pasión.
-*-*-*-*-*-*-*-*-*-
Notas finales: Muchas gracias por leer y haberte interesado en este Fanfic, debo decir de ante mano que este durara poco, y los capitulo no serán largos; de 1500 palabras a lo mucho. Otra cosa es que este fanfic es erotismo, un genero que quiero probar hace tiempo y esta de mas decir que en casi todos los capítulos estarán teniendo sexo, pero descuiden porque si hay trama e historia, quiero crear un balance entre historia y el sexo. Debo decir que me desilusiona la nula cantidad de Fanfic de esta pareja que existen, por lo tanto aquí en primero.
Los espero en el próximo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro