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Dos semanas después de aquel incómodo momento, Jimin se las arregló perfectamente para poder esquivar al mayor las veces que se encontraron dentro del horario de clases establecido y las prácticas dictadas. Los finales se encontraban a la vuelta de la esquina y Jimin no podía evitar sentir un poquito de ansiedad ante los resultados de estos.

Una mala nota sería un retraso y eso es algo que no se permitiría. Incluso con su desastrosa vida había logrado llegar al tan anhelado final de meta, -aun cuando a veces podía pasar prácticamente arrastrando en algunas ocasiones- solo tendría que elegir un tutor para su tesis y todo estaría listo.

Por su mente brilló el nombre de Min YoonGi de primero, sabía perfectamente que él sería un buen tutor durante su tesis así como lo había sido con las pequeñas tutorías de ayuda que fueron ofrecidas por el decano, pero la tensa situación que los unía lo hacía ver muy lejos de sus aspiraciones. No creía que Min quisiera compartir más tiempo con él, más del establecido en las horas de clases por lo menos.

— ¿Qué te tiene tan perdido en alguna parte del universo? — Preguntó TaeHyung tomando asiento al lado de Jimin. El pelinegro suspiró pesadamente mientras aceptaba el vaso de café que se le estaba otorgando. Eran pasadas las seis de la mañana y Jimin lo único que necesitaba en ese momento era que el reloj marcara las siete de la mañana para poder irse a su apartamento y dormir largamente hasta la tarde casi noche. — ¿No me vas a decir? — Cuestionó su mejor amigo dibujando un puchero en su rostro.

— Hay muchas cosas que debo contarte, quizás eso me ayudaría a despejar un poco el peso sobre mi espalda. — Suspirando Jimin tomó un trago del café mientras veía con el ceño fruncido a su mejor amigo. — ¿Estás tomando café? — Cuestionó con asombro. TaeHyung observó su vaso en mano y negó.

— Es té. — Anunció. — Y no me cambies el tema, te he visto demasiado extraño y no soy estúpido, hay algo entre tú y el doctor Min, esa tensión la puedo sentir incluso a metros de ustedes.

— ¿Recuerdas la vez que les pregunté cómo se dieron cuenta que les gustaba un hombre? — TaeHyung asintió recordando aquella tarde.

— Recuerdo que tuve pesadillas. — Exageró TaeHyung. Jimin rodó los ojos ante lo exagerado que podía llegar a ser su mejor amigo. — Pero no entiendo que tiene que ver esto con el doctor Min, al menos que... — TaeHyung abrió los ojos de forma exagerada mientras veía la leve capa de rubor en las mejillas del mayor. — ¿Me estás jodiendo Park Jimin? — Cuestionó señalándole. Jimin negó.

— El doctor Min y yo... No nos acostamos. — Aclaró al ver el gesto sorprendido del menor. — Solo nos besamos una que otra vez y quizás fueron los mejores besos que alguna vez he dado y recibido. — Confesó aquello escondiendo su rostro entre sus manos para que TaeHyung evitara ver la frustración en su rostro.

— ¿Me estás diciendo que te comiste la boca del doctor Min? — Jimin asintió sin querer ver al menor. — ¿Desde cuándo? — Inquirió.

— ¿Importa? — Indagó Jimin confundido. — Solo pasó. — Mencionó intentando restarle importancia a ese hecho. TaeHyung le observó fijamente y Jimin se maldijo al haber descubierto su rostro.

— ¿Te gusta Min? — Cuestionó serio. Jimin desvió la mirada.

— Eso no tiene importancia. — TaeHyung negó tomando un sorbo de su té.

— La tiene y mucho. — Aclaró el menor. — ¿Por qué no me dijiste antes lo que estaba pasado? — Cuestionó con una pequeña mueca. — ¿Acaso no confías en mí? — Preguntó dolido. Jimin negó de inmediato.

— Eres mi mejor amigo Tae, nos conocemos desde pre-escolar y ya eso es mucho. — Sonrió el pelinegro. — Has estado ahí conmigo en cada momento, es solo que me sentía tan confundido y desorientado. — Confesó en medio de un suspiro pesado. — Tenía todo claro en mi mente, conocía mis gustos y veía lo que me gustaba, estar con mujeres siempre había sido lo mío, pero ahora no veo lo mismo que antes, no siento interés por nadie más que no sea...

— Min YoonGi. — Completó TaeHyung comprendiendo el sentimiento del mayor por escasos meses. — Te gusta el doctor Min. — Mencionó aquello más como una afirmación que como una pregunta. — Quizás me di cuenta de tu brusco cambio el día que lo vimos en el bar con aquel chico bonito. ¿Recuerdas no? — Jimin asintió con desagrado, recordar la forma en la cual YoonGi había estado tan cerca de aquel castaño hacía que algo dentro de él se incomodara, quizás los llamados celos estaban haciendo presencia en su interior. — Me di cuenta de cómo los mirabas, al principio creí que estabas molesto porque eran dos hombres sin pudor alguno en medio de tantas personas. — Rió secamente el menor. — Luego recordé que eso no tenía por qué incomodarte si tus dos amigos son gays. — Suspiró el menor. — Entonces siempre estuvo en mí esa duda de saber... ¿Por qué Jimin estaba molesto de ver a Min con alguien más? ¿Por qué desapareciste al instante que él fue a los baños y regresaste actuando tan extraño?

— Estoy jodido. — Expresó el mayor desordenándose el cabello con sus manos.

— ¿Y JungKook lo sabe? — Preguntó TaeHyung. Jimin se tensó incómodo ante la mención del nombre de su otro amigo. — Se había dicho que él y Min tenían algo. — Recordó. — Aunque en estos días que estuve trabajando con ellos, creo que es algo más de admiración y respeto a que exista una posible relación entre ellos. — Comentó el menor. Jimin negó.

— Yo los escuché hablando de mí. — TaeHyung le observó con interés. — Ellos estaban burlándose de mí. — El menor frunció el ceño negando.

— Eso es imposible. — Aclaró de una vez TaeHyung. Jimin le ignoró.

— Antes JungKook estuvo detrás de mí preguntándome si realmente me gustaban las mujeres, si estaba seguro.

— Cualquiera lo pensaría. — Mencionó encogiéndose de hombros el menor. — No duras mucho tiempo con ellas y simplemente se define en dos cosas, o eres un jodido rompecorazones que de por sí, lo eres. — Señaló Tae con obviedad. — O simplemente no te sientes completo con ellas y por eso vas cambiando tanto de pareja. — Suspiró. — Y eso me da a entender que por la forma en la que estás que no has salido con nadie más, te gusta Min.

— Se burló de mí. — Comentó. Tae negó.

— ¿Conoces a JungKook desde cuanto tiempo Jimin? — El mayor resopló recordando ocho años de amistad que sostenía con el menor. — ¡Nunca te haría algo así! — Exclamó por lo bajo. — Y nunca nos mentiría o haría algo para dañarnos, el único secreto que nos tuvo fue que tenía un hermano. — Señaló. — ¿Hablaste directamente con él o con el doctor Min? — Jimin negó. — ¿Por qué? — TaeHyung no lo dejó terminar para luego empezar a negar.

— Tenía miedo de confirmar lo que pensaba. — Susurró el menor. — Cada vez que lo veo recuerdo ese día en donde los escuché hablando de mí, también recuerdo que el mismo día que lo vieron junto a YoonGi por el estado de salud del decano, YoonGi fue a buscarme al apartamento buscando compañía, y son tantas cosas que me tienen confundido. — Expresó frustrado.

— ¿Y por qué Min te trata como lo hace ahora? — Jimin no comprendió la pregunta del menor. — No me digas que hiciste una tontería. — Comentó llevándose la mano a la frente en gesto de frustración ante el asentimiento del contrario. —¿Qué hiciste?

— El mismo día que los escuché me reuní con Solar una tarde antes de la tutoría con Min. — TaeHyung empezó a negar. — Él nos vio, luego yo lo seguí y quizás lo insulté. — TaeHyung rodó los ojos mientras negaba.

— ¿Qué le dijiste? — Inquirió con apremio. El pelinegro contrario le ignoró. — Dime Jimin. — Mencionó ante la renuencia de este por hablar.

— Dije que lo acusaría de acosarme y que... — Jimin inhaló aire profundamente antes de hablar nuevamente. — Le dije que era un asqueroso marica. — TaeHyung negó riendo sin gracia alguna.

— Bueno Jimin, la jodiste bien feo. — Mencionó el menor. Jimin asintió sabiéndose conocedor de ello. — Si yo fuera Min, te metiera una patada en el culo cada vez que te viera.

— Lo sé, sé que la jodí en grande. — TaeHyung asintió.

— Quisiera animarte y decirte que no, pero es la verdad. — Susurró el menor viendo la hora en su teléfono. — Vamos por nuestras cosas, no se ha presentado ninguna emergencia y ya faltan diez para las siete. Jimin asintió levantándose de su asiento.

— TaeHyung. — El mencionado volteó hacia el pelinegro. — Gracias por escucharme.

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Saludito especial para ViluArmy por hacerme reír con su comentario en el capítulo pasado.