Dos semanas después.

Kim NamSoo observó con curiosidad mal disimulada al pálido. Para el hombre mayor, la actitud del menor era extraña, siempre que lo había visto YoonGi reflejaba un aura dominante y desafiante, ahora que lo observaba con detalle, parecía un poco confundido y tenso y aquello sin duda alguna había llamado su atención.

— ¿Hay algo que te perturbe? — El pálido saltó del susto en su lugar, después de recobrar la tranquilidad desvió la mirada hacia el hombre. NamSoo rió divertido por la acción del menor de ambos mientras tomaba asiento a su lado.

— Me acabas de perturbar ahora mismo. — Respondió naturalmente el pálido. — ¿Ya te fue NamJoon con el chisme? — Inquirió con fingida molestia. El hombre rió divertido.

— Hijo, hoy me he divertido más que lo que llevo en sesenta y nueve años de vida y es gracias a ti y tu visible incomodidad, te conozco desde que llegaste a casa con NamJoon, no puedes mentirme. — Mencionó con obviedad. — ¿Qué te pasa? ¿Qué o quién te tiene así? — Cuestionó curioso. YoonGi sonrió con cariño mientras veía al hombre a su lado.

El padre de NamJoon había sido su mayor apoyo después de la muerte de su padre, el hombre prácticamente lo había adoptado y lo había impulsado a lograr su sueño de ser médico cuando nadie más creyó en él.

— Es algo complicado. — Mencionó en medio de un suspiro. El mayor negó.

— Nada en lo vida es complicado, todo tiene solución excepto la muerte. — Comentó el hombre. — Lo que sea que te tiene así puedes contármelo. — Ofreció el viejo hombre. — Estas canas que adornan mi cabeza son signo de notable experiencia y vida que he tenido.

— Hay muchas cosas rondando en mi cabeza, mamá quiere que vaya a visitarla, JungKook piensa que debería ir con ella aunque sea para saludarla.

— ¿No quieres ir? — YoonGi negó mientras veía la vacía cafetería en donde estaban. Eran las tres de la mañana y el movimiento dentro del hospital estaba controlado por las enfermeras y algunos residentes que vigilaban a cada paciente. — Tu mamá debe pensar que no la quieres.

— Es lo mínimo que se merece. — Comentó encogiéndose de hombros. — Papá murió y ella no tardó demasiado en conseguir a un buen hombre para ella, pero un pésimo padre para mí. — Gruñó aquellas palabras con resentimiento. NamSoo suspiró comprendiendo el sentir del menor. — JungKook es lo único que me une a esa mujer, ni más ni menos.

— La vi recientemente en el supermercado, me dijo que estaba arrepentida de muchas cosas. — YoonGi negó.

— ¿Estará por morirse? — Cuestionó sin emoción. — Es lo único que encuentro razonable para que esté buscándome con tanta insistencia.

— ¡Min YoonGi! — Exclamó NamSoo viendo al menor. — Es tu madre, quizás solamente quiere arreglar las cosas.

— Vino dieciocho putos años tarde. — Gruñó el pálido molesto. — Pasé casi toda mi vida solo y a ella solo le importaba simpatizar con el hombre que había metido a la casa. — Mencionó molesto mientras se levantaba de su asiento y veía por última vez en esa noche al mayor. — Iré a pasar guardia con el grupo de residentes que están a mi cargo, que tenga una buena noche señor Kim.

— YoonGi. — Llamó NamSoo ignorando el pequeño dolor que estaba sintiendo en su pecho, el menor se detuvo a mitad de camino. — Lo siento hijo.

...

— ¿Cómo se dieron cuenta que les gustaba un hombre? — Tanto JungKook como TaeHyung se ahogaron con el agua que estaban tomando. Jimin rió divertido de las muecas de confusión en ambos rostros. — Ya dejen la exageración par de tontos. — Se quejó con una mueca divertida adornando su rostro. Ambos menores negaron.

— ¿Sabes lo que preguntaste? — Inquirió TaeHyung. — Eso no es sencillo viniendo de una persona hetero.

— Yo veo que es una pregunta sencilla. — Comentó encogiéndose de hombros restándole importancia al tema. JungKook rió.

— No estás preguntando por el clima, no seas idiota. — Mencionó el menor. — Cuando tuve dudas, acudí a la única persona que podía ayudarme. — Comentó. — Mi hermano me dio el apoyo que necesitaba y se ofreció a patearle el culo a cualquier idiota que me rompiera el corazón.

— No sabía que tenías un hermano. — Comentaron al mismo tiempo Jimin y TaeHyung. JungKook sonrió.

— En realidad, es mi hermanastro. — Susurró. — No teníamos relación hasta hace dos años que insistí en meterme en su vida. — Movió las cejas de arriba abajo con un gesto triunfador en su rostro. — Sin embargo, todavía no somos lo que esperaba al inicio, pero me he ganado un lugar en su vida y soy feliz con eso.

— ¿Es guapo? ¿Cuántos años tiene? ¿Qué estudia? ¿Dónde vive? — Cuestionó curioso TaeHyung. JungKook rió divertido mientras veía a Jimin.

— No te responderé nada. — Taehyung puchereó indignado. — Y tú, Jimin-hyung... — El menor le observó fijamente. Jimin carraspeó ante la intensidad en la mirada del pelinegro. Tenía la misma fuerza que la de Min y aquello lo hizo sentir un tanto incómodo. — La mejor manera para que te des cuenta si te gusta es que lo beses.

— ¿Qué? — Cuestionó incómodo. — No me hago a la idea de que me guste un hombre y tú... ¿Quieres que lo bese? — JungKook asintió.

— Es la única forma para que veas cómo reacciona tu cuerpo ante su cercanía. — Mencionó encogiéndose de hombros. — Mi hyung me dio ese consejo.

— Por lo menos ya sé que es mayor que tú. — Puchereó TaeHyung trayendo de nueva cuenta el misterio sobre el hermano de JungKook. — Y volviendo al tema Jimin-ssi, con razón te he notado tan extraño. — Comentó. — Tiene días que no sale con nadie.

— Eso no quiere decir nada, quizás solamente no quiero estar con nadie. — Comentó encogiéndose de hombros.

— Puede que sea así. — Mencionó JungKook dándole la razón. — Pero también puede que ese hombre que te hace dudar esté en tu cabecita creando discordia con lo que crees correcto. — Jimin iba a responder cuando la voz de YoonGi se escuchó detrás de ellos.

— Park, Kim, Jeon. Dejen de cotorrear y muévanse, tenemos trabajo que hacer. — Los tres se levantaron de forma inmediata y siguieron el camino por el cual el pálido los guió. Jimin estuvo callado todo el camino mientras meditaba las palabras de JungKook y veía al mayor de todos ellos explicar lo que harían.

...

Cuando el reloj marcó las seis de la mañana, YoonGi respiró un tanto aliviado pero al mismo tiempo cansado. Había sido una larga noche y lo único que tenía en mente era caer en un estado de coma y no despertar más hasta setenta y dos horas. Estaba terminando de guardar sus cosas personales en el bolso que había traído cuando la puerta detrás de él se abrió.

— Doctor Min. — Saludó Jimin ahogando un bostezo. — ¿Más tarde tendremos tutoría? — Preguntó acercándose solo un poco al mayor para intentar ubicar su propio bolso y sus pertenencias.

— Si estoy despierto a esa hora iré, honestamente no creo tener las fuerzas necesarias para salir del apartamento hoy. — Comentó dándose la vuelta para ver al menor de ambos. — Podemos dejarlo para otro día. — No fue una sugerencia, fue una orden que Jimin entendió claramente. — Que tenga un buen día Park. — Mencionó despidiéndose mientras sostenía entre sus manos su bolso y pasaba a un lado del menor. Las palabras de JungKook hicieron acto de presencia en la mente de Jimin y antes de que este se fuera lo sostuvo del brazo. YoonGi volteó a verle con el ceño fruncido y aquello fue lo que necesitó Jimin para impulsarse hasta el mayor y probar castamente los labios contrarios.

— N-No sentí nada. — Mencionó tratando de convencerse así mismo mientras sentía el latir desesperado de su corazón. YoonGi sonrió de medio lado mientras dejaba caer el bolso al piso y veía con diversión al menor de ambos.

— ¿No? — Cuestionó roncamente. — Quizás de esta forma si logres sentir algo. — Y al término de aquellas palabras avanzó hacia el menor como todo un depredador hacia su presa. Jimin quizás lo vio venir pero no hizo nada para detenerlo. Las grandes manos del pálido se aferraron a su cintura mientras su boca era presa fácil del mayor. Y para sorpresa de Jimin, aquel beso fue diferente a cualquiera que hubiese dado o recibido alguna vez. Dejando de lado la fuerza que transmitía y la absoluta posesión que el pálido tenía sobre él, aquello se sentía como un reencuentro, algo que no estaba en sus planes y que se sentía con la misma intensidad con la cual besas a alguien que anhelas y deseas. Min YoonGi lo besaba fiera y seductoramente, recorriendo cada espacio libre de su cavidad y llevando el ritmo de la danza entre ambas lenguas que se fundían en un solo ritmo y a una sola tonada.

Sin embargo, aquel momento se vio interrumpido cuando el sonido de la puerta abriéndose llegó hasta ellos. Jimin se apartó rápidamente del mayor y desvió la mirada mientras este volteaba para encontrarse con una enfermera.

— D-Doctor Min. — Saludó Solar observando desde Jimin hacía el pálido. — Lo buscan con urgencia. — YoonGi frunció el ceño. — El decano sufrió un paro cardio-respiratorio, está en quirófano ahora mismo. — Y solo esas palabras bastaron para que YoonGi saliera corriendo de la habitación sin ver hacia atrás en ningún momento. Por su parte Jimin simplemente agarró su bolso y metió sus cosas bajo un tenso silencio que fue roto por la voz de la castaña.

— ¿Q-Qué hacías con el doctor Min? — Cuestionó confundida.

— Nada que te importe. — Respondió Jimin sosteniendo su bolso y saliendo de la habitación.

...

¡Hola mis amores! ¿Se esperaban lo último? Jajaja.

Gracias por leer, por votar y por comentar. ¡Alegran mi corazón sin internet!

Estos días han sido muy difíciles para que la laptop se conecte con el wifi de la vecina, quizás es que el aparato está muy lejos y por eso la señal no llega como tiene que ser. Necesito un teléfono, pero de aquí a que logre reunir el dinero del teléfono y no gastarlo, serán unos largos años. Pinche Venezuela y su patria socialista.

Pinche cantv meco y mugroso, te odio y te desprecio x1000.

Primer acercamiento del YoonMin, primer vistazo a la vida familiar de YoonGi y el decano quien cabe destacar, ha sido un motor de apoyo para YoonGi. ¿Qué pasará en el capítulo 10?¿Leyeron esto con voz de comercial? Ah no, perdón.

Si alguien ha mandado solicitud a mi Facebook, lamento no responder las solicitudes, no tengo internet, recuerden ;;

Disculpen realmente cualquier error, hago lo mejor a la hora de releer, pero siempre me doy cuenta de algún error cuando ya publiqué.

¡Hasta la próxima! Por favor no olviden seguirme, igualmente mi cuenta de respaldo.