Capítulo 6: Tratar con dragones

Hermione se pasó la lengua por los dientes frontales mientras yacía despierta en su cama con dosel. Podía escuchar a Lavender y Parvati arrastrando los pies, preparándose para su estancia en Hogsmeade, preguntándose mutuamente su opinión sobre qué deberían ponerse. Y, sin embargo, lo único en lo que Hermione podía pensar era en la terrible experiencia de sentir cómo le crecían los dientes y luego tener que hacerlos encoger por Madame Pomfrey.

Con un profundo suspiro, finalmente se sentó para comenzar su propia tarea de encontrar algo que ponerse para el día. No es que importara; ella sólo pasaría tiempo con Harry, quien era básicamente su hermano. Y además, parecía que a los chicos que la rodeaban nunca parecía importarles lo que ella usara de todos modos.

—Chicos—refunfuñó mientras pensaba en un chico específico que le causaba mucho dolor.

Hermione no era estúpida y se dio cuenta de que Malfoy estaba siguiendo el juego cuando comentó sobre tener que ducharse cuando chocó con él en Cuidado de Criaturas Mágicas. Por supuesto, eso no le impidió sentirse herida, pero no lo habría considerado una violación de sus términos.

Peor el maleficio, fue un paso demasiado lejos.

Una vez más, Hermione fue lo suficientemente consciente como para ver que Malfoy nunca había tenido la intención de golpearla con el maleficio. Pero aun así sacó su varita hacia Harry y planeó golpearlo con el terrible hechizo que le haría crecer los dientes. Aunque, para ser justos, también estaba decepcionada de Harry porque intentó maldecir a Malfoy. Y si iba a ser justa, no podía atribuirle el maleficio a Malfoy si no iba a aplicárselo también a Harry.

Pero eso no significaba que no pudiera hacer sudar un poco al rubio.

En lo que a ella concernía, COÑO estaba oficialmente cerrado por hoy, y Malfoy tendría que hacer arreglos para reunirse en otro momento. Si realmente sentía remordimiento, con suerte, acudiría a ella. No tenía absolutamente ninguna intención de perseguir al estúpido chico, sin importar la curiosidad que tuviera sobre él y su misterio.

Espera no. No él y su misterio. Sólo el misterio... para la investigación.

No necesitaba más información sobre el propio Malfoy. Sus burlas y comentarios hirientes se habían convertido en un elemento básico durante el tiempo de Hermione en Hogwarts, y aún no se había disculpado por nada de eso. No es que ella realmente esperara que él lo hiciera. Además, este extraño acuerdo que tenían era sólo temporal. Pero aún así, era difícil no hacerle ilusiones de que este extraño descubrimiento de su estado sanguíneo lo ayudaría a convertirse en una persona decente. Desafortunadamente, Malfoy era inmaduro con respecto a sus emociones.

O tal vez simplemente inmaduro en general.

También se enfadaba rápidamente y era muy egocéntrico. Hermione sospechaba que en realidad nunca había aprendido a hacer amigos. Los Slytherin con los que pasó tiempo se conocían porque todos crecieron juntos. Sus relaciones parecían tener más que ver con alianzas y creencias compartidas que con una amistad real. Hermione tuvo que aceptar que si continuaba trabajando con Malfoy, tendría que abordar todo desde una perspectiva diferente. El chico podía ser impredecible y a menudo le recordaba a un dragón dormido esperando ser provocado.

Y si iba a trabajar con un dragón, tendría que esperar quemarse de vez en cuando.

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Una vez dentro del Gran Comedor, Hermione se sentó junto a Harry, quien fruncía el ceño mientras leía la última incorporación del Diario El Profeta. También notó que Ron no estaba por ningún lado.

—¿Todavía no te habla?—cuestionó Hermione. Harry empujó el papel frente a ella y suspiró mientras se pasaba una mano por el cabello desordenado.

—Él piensa que esto sólo prueba que yo quería ser seleccionado.

Hermione tomó el papel en su mano. Rita Skeeter había escrito un artículo completo dedicado a Harry, mientras que había poca o ninguna mención de los otros tres campeones de los Tres Magos.

—Esa mujer es la peor—se quejó Harry.—Nada de lo que ella escribió es verdad, ¡y ciertamente yo nunca dije esas cosas!

Harry no estaba equivocado. Hermione lo conocía lo suficientemente bien como para que la forma en que Rita Skeeter lo presentó en el periódico estuviera muy lejos de la de su mejor amigo. Hojeó las líneas y se detuvo cuando se encontró mencionada. Aunque no fue por su nombre, simplemente la 'increíblemente linda nacida de muggles' con la que Harry tenía una relación sentimental.

Ella no pudo seguir leyendo.

—Rita Skeeter es una amenaza—dijo Hermione con confianza.—A ella no le importa nada más que vender historias. ¿Qué pasó con la integridad periodística?—cuestionó molesta.

Harry dejó escapar una pequeña risa.—No creo que la mujer sepa lo que eso significa, Hermione.

Ante eso, ambos comenzaron a reír.

Después de terminar su desayuno, el dúo comenzó su caminata hacia Hogsmeade. Fue un poco incómodo porque Harry insistió en usar la capa de invisibilidad. Pero no podía culparlo por querer evitar más burlas. Harry simplemente quería alejarse de todo el lío del torneo. Después de caminar unos minutos en pacífico silencio, Harry finalmente habló.

—¿Estás bien?—ella lo escuchó decir. Hermione fue a mirarlo a la cara pero se encontró mirando a la nada.

—Es un poco extraño hablarle al aire—se rió entre dientes.—Pero sí. Estoy bien. Madame Pomfrey me cuidó muy bien. Como nueva—dijo mientras le dirigía una sonrisa. Al menos, supuso que le estaba sonriendo. Por lo que sabía, podría haber estado mirando su espalda.

—Bien, porque Malfoy es un verdadero imbécil. Debería haber sabido que intentaría hacer algo fuera del aula de clases si no hubiera dudado en hechizarme por la espalda.

—Tú le apuntaste con tu varita primero—dijo Hermione, sorprendiéndose a sí misma y por el jadeo a su izquierda, sospechó que Harry también estaba sorprendido.

—¿Lo estás defendiendo?—cuestionó. Hermione supo por el tono de su voz que no estaba enfadado, sólo confundido.

—¿Qué? No. Sólo quiero decir que no podemos darle ninguna razón para contrariarnos.

Podía oír a Harry suspirar.—Tienes razón. Estoy tan tenso con todo lo que está pasando. Cuando todos esos idiotas viscosos de Slytherin nos rodearon, vi rojo. Estoy tan cansado de que la gente se enfade conmigo por algo que no hice. Ojalá supiera quién puso mi nombre en la copa. Probablemente le hechizaré por la espalda—refunfuñó.

—O a ella—dijo Hermione, haciendo que Harry se riera.

—Probablemente hechizaré a él o a ella por la espalda—corrigió.

Mientras continuaban caminando, Hermione metió las manos en los bolsillos para mantenerlas calientes. Como era noviembre en Escocia, casi parecía que el invierno estaba en pleno apogeo, aunque todavía les quedaban algunas semanas más. Finalmente, Harry comenzó a hablar de nuevo, discutiendo su extraña salida con Hagrid y cómo le había mostrado los dragones. Aparentemente, la primera tarea consistía en "superar uno". Ambos reflexionaron sobre lo que eso podría significar y cómo uno podría lograr tal tarea sólo con su varita y su ingenio. Pero a medida que se acercaban al pueblo, Hermione casi tropezó cuando vio el familiar cuerpo desgarbado de Draco Malfoy dirigiéndose hacia ellos. Parecía estar solo y caminaba con la cabeza gacha y las manos en los bolsillos. Nunca lo había visto tan encorvado.

Probablemente por el frío...

Con suerte, la dejaría en paz, ya que estaba con Harry. Pero entonces Hermione recordó que Harry era actualmente invisible.

Mierda.

Desafortunadamente, antes de que ella pudiera sugerir desviarse en otra dirección, Malfoy levantó la cabeza y aceleró el paso, caminando directamente hacia ella.

Esto no saldría bien.

—Mierda, es Malfoy—escuchó a Harry maldecir debajo de la capa.—Podría enviarle una maldición y él ni siquiera sabría que fui yo.

—Entonces pensará que fui yo, idiota—siseó Hermione por un lado de su boca.

—Granger—llamó Malfoy mientras corría hacia ella. Antes de que ella pudiera decirle que se fuera, el niño levantó las manos en un gesto apaciguador y habló.

—Mira, lo siento mucho. No fue mi intención golpearte con esa maldición...—continuó balbuceando una disculpa y cómo había querido maldecir a Harry. A Hermione le preocupaba que él estuviera a punto de caer de rodillas y comenzar a humillarse en cualquier momento.

¿No sería eso un espectáculo?

Pero por mucho que a Hermione le hubiera encantado ver a Malfoy finalmente expiar algo que había hecho, no podía arriesgarse a que él dijera algo más sobre su relación... no una relación... sobre su alianza. COÑO.

Rayos.

—¡No quiero oírlo, Malfoy!—Gritó con voz frustrada que no necesitaba fingir. Malfoy afortunadamente cerró la boca.—¿Crees que es mejor que quisieras maldecir a Harry? Eres increíble.

—Está bien, me lo merezco, ¡pero escúchame!—suplicó.

—No necesito escuchar nada de lo que tengas que decir—escupió. El rostro de Malfoy parecía afligido cuando una vez más cerró la boca.

Hermione tuvo que pensar rápido. Por un lado, ella no estaba dispuesta a perdonarlo y permitir su comportamiento. Pero, por otro lado, no quería descartarlo por completo y que él no quisiera que ella lo ayudara a investigar.

¡Maldito sea su cerebro curioso!

—¡Eres un verdadero idiota, Malfoy! ¡Pobre del COÑO de tu madre por darte a luz! ¿Por qué no pasas el resto del día en la biblioteca investigando como ser un ser humano decente? Tal vez algo atraviese esa cabezota tuya.

Malfoy le dio una mirada burlona.

—Rita Skeeter—afirmó luego. Si Hermione alguna vez iba a estar agradecida por la horrible mujer, sería ahora. Inclinó la cabeza en dirección al otro lado del camino y Malfoy se giró para ver a la periodista caminando por el sendero.

—Correcto—dijo, entendiendo que Hermione no quería que la mujer los viera juntos. Él asintió hacia el castillo.—Estaré en la biblioteca... investigando—dijo antes de agregar.—Por petición de una increíblemente hermosa hija de muggles—sonrió Malfoy antes de dirigirse en la dirección opuesta.

Hermione permaneció en su lugar, preguntándose si el silencio indicaba que Harry se había escapado a alguna parte. Pero entonces su cabeza salió de la capa, haciéndola saltar.

—Eso fue... extraño—dijo Harry, luciendo confundido.—¿Malfoy acaba de disculparse contigo?

—Creo que no quiere que hable mal de él y se encuentre transfigurado en un hurón otra vez—dijo Hermione, tratando de minimizar la incómoda interacción.

Harry asintió lentamente como si absorbiera la información antes de soltar una carcajada.—Lo llamaste idiota— se rió entre dientes.

Hermione se encontró riendo genuinamente.—Bueno, lo es.

Harry se cubrió la cabeza nuevamente mientras reanudaban su caminata, todavía riendo.

—Tal vez el hecho de que Moody lo golpeara hizo que algo se soltara—añadió.

—Tal vez—dijo Hermione con seriedad, pero entonces la cabeza de Harry apareció justo frente a ella.—¡Merlín!—jadeó Hermione, agarrándose el pecho.

—Te llamó hija de muggles increíblemente hermosa—afirmó, sin emoción.

Hermione se rió nerviosamente.—Sólo se estaba burlando. ¿Recuerdas el artículo? Sólo estaba citando a Rita Skeeter, se estaba burlando de mí.

—Oh, claro—dijo Harry.—Deberías haberme dejado maldecirlo—añadió molesto.

Cuando finalmente entraron a Las Tres Escobas, Hermione sintió que su cuerpo se relajaba instantáneamente ante el calor mientras seguía pensando en el comentario. Finalmente concluyó que Malfoy simplemente se estaba burlando de ella, dado que Rita Skeeter había estado allí. Pero mientras se sentaba, se le ocurrió algo. El artículo la había llamado una 'increíblemente linda hija de muggles'. Malfoy dijo, 'increíblemente hermosa'.

Curioso.

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Después de separarse de Harry unas horas más tarde, Hermione regresó sola al castillo. Esperaba que Malfoy entendiera que quería encontrarse con ella en la biblioteca. Pero eso fue hace horas, así que estaba preparada para que él no estuviera allí.

Al entrar a la biblioteca, notó que solo había unos pocos estudiantes dando vueltas, ya que la mayoría todavía estaba merodeando por Hogsmeade. Hermione pasó por algunas mesas y consideró irse, dado que nunca le dio a Malfoy una hora determinada. Probablemente se fue después de cinco minutos, si es que había venido a la biblioteca.

—Joder—escuchó a alguien decir con voz áspera.

Hermione siguió la voz a través de las estanterías para encontrar a Malfoy sentado en el alféizar de una ventana, luciendo como si estuviera sufriendo.

—¿Malfoy?—cuestionó suavemente.

La cabeza del chico se levantó de golpe y Hermione se sorprendió al ver el alivio que inundó su rostro. Pero luego ese alivio fue rápidamente reemplazado por lo que sólo podía suponer que era una gran irritación. Se puso de pie y comenzó a caminar hacia ella.

—¡Te tomo bastante tiempo!—susurró con dureza mientras la empujaba agresivamente.

—¿Espera, a dónde vas?—ella cuestionó confundida.

—No sabía cuándo estarías aquí y no quería irme en ningún momento por si al no verme te ibas, así que literalmente he estado esperando desde que regresé al castillo, y si me disculpas, ¡estoy a punto de mearme!—dijo con enfado mientras desaparecía por el otro lado de la estantería. Su cabeza volvió a girar.—¡No te vayas!—ordenó.

Hermione se quedó congelada por un momento antes de dejar escapar un suspiro exasperado.—Los chicos son tan raros.

Decidió sentarse en la repisa cerca de donde Malfoy había dejado su mochila y esperó. Unos minutos más tarde, regresó, luciendo más tranquilo mientras ocupaba su lugar cerca de Hermione.

—¿Supongo que llegaste a tiempo?—cuestionó, tratando de no reírse.

—Sí—respondió.

—Sabes, podrías haberme dejado una nota o algo así.

Malfoy puso los ojos en blanco—Sí, y entonces algún primer año al azar lo encontraría—resopló.—Mi querida Hermione Granger, tengo muchas ganas de ver algo de COÑO detrás de los estantes, pero tuve que correr al baño. Vuelvo en un momento, atentamente, Draco Malfoy—dijo sarcásticamente.

Hermione se encogió de hombros.—Puede que tengas razón— Pudo ver cómo la irritación lentamente desaparecía de su rostro y se convertía en otra expresión que nunca había visto antes.

—Realmente lamento lo...—señaló sus dientes.

Hermione se cruzó de brazos y dio un profundo suspiro.—Mira, Malfoy. Creo que realmente lo sientes y acepto tus disculpas...— el chico la miró esperanzado.—Sin embargo, no estoy lista para simplemente perdonarte. Has sido un completo imbécil conmigo desde el primer año, y aún actúas como si tus sentimientos y deseos fueran los únicos que importan. Si vamos a trabajar juntos, necesito saber...—hizo una pausa, preparándose para lo que estaba a punto de preguntar.—¿Todavía me odias?

Malfoy la miró con el ceño fruncido y finalmente se pasó una mano por la cara con un suspiro.—Mira, yo... yo no te odio, Granger. Pero, siendo brutalmente honesto, lo hice. Pero, era más que odiaba la idea de ti. Quiero decir, nunca te conocí realmente, así que afirmar que te odié a ti alguna vez sería una mentira.

—Entonces, ¿por qué sigues siendo tan hostil conmigo todo el tiempo?—Hermione no estaba segura de hasta dónde debía tirar, pero sentía que él le debía al menos algo de honestidad después de todo.

—Como dije, no te odio, pero tú... simplemente me irritas—dijo honestamente.

Hermione se rió de eso.—Bueno, supongo que tú también me irritas—Pudo ver el labio de Malfoy levantarse ligeramente.—Pero, sinceramente, necesito saberlo. ¿Todavía crees que los sangre pura son superiores? ¿Que yo... nosotros... somos inferiores?

Draco dio otro suspiro.—Granger, ¿realmente quieres mi respuesta honesta?

—Sí—dijo, sintiendo que la decepción ya se estaba instalando en la boca de su estómago.

—La verdad es que ya no sé qué creer—Malfoy miró hacia otro lado, aparentemente más interesado en las ranuras del muro de piedra a su lado.—¿No vas a ayudarme más porque todavía no comparto tus creencias?—preguntó, con voz vacía de emoción.

—Por supuesto que no. Aún te ayudaré, Malfoy— dijo sin dudarlo mientras comenzaba a hurgar en su bolso.—Te pedí que fueras honesto, y lo fuiste. Y, francamente, está bien si no lo sabes. En realidad, sería extraño si aceptaras todo tan fácilmente de una vez. Quiero decir, fui una tonta al haberlo esperado en primer lugar.

Malfoy simplemente asintió con la cabeza. Era difícil evaluar sus sentimientos, pero se dio cuenta de que estaba reflexionando sobre las cosas en su mente.

—Yo diría que es suficiente introspección por un día—dijo en voz baja, sacando un montón de pergaminos.—Ahora—golpeó la pila en su mano.—Es hora de COÑO.

—Salazar—se rió Malfoy, sacudiendo la cabeza.

Hermione tomó su diversión como una buena señal y se sumergió en sus hallazgos.

—Me tomé la libertad de investigar las costumbres mágicas, la historia y demás de Suecia. Pensé que podría ser un buen lugar para comenzar.

—Claro, sí—respondió.

—¿Y?—señaló hacia la mochila escolar de Malfoy. Él miró su bolso y luego nuevamente a ella.

—¿Y?—repitió.

Hermione puso los ojos en blanco.—¡Malfoy! ¿En serio me estás diciendo que no has investigado nada? ¿Realmente esperas que yo haga todo el trabajo por ti?—dijo mientras le golpeaba el brazo con el montón de pergamino todavía en la mano.

Inmediatamente se echó a reír.—¡Qué violenta!—Hermione estaba a punto de sermonearlo, pero luego tomó su bolso y sacó su propia pila de pergaminos.—Por supuesto que no. Pero no pude resistirme a ver tu nariz arrugada con indignación a punto de sermonearme sobre cómo hacer mi propio trabajo.

—Idiota—resopló.—¿Qué investigaste?—cuestionó, ahora curiosa.

—Bueno—comenzó con altivez.—También pensé en investigar la política y la historia mágica de Suecia, pero alguien ya había agarrado todos los libros—dijo mientras le lanzaba una mirada penetrante. Luego le entregó su investigación. Al revisar sus notas, Hermione vio que había tomado un camino diferente. Todas sus notas trataban sobre el nórdico antiguo y la magia antigua.

—Esto... esto es fascinante—dijo mientras hojeaba su perfecta letra.—Según esto, los vikingos ejercían su magia de manera muy diferente a la bruja o el mago moderno.

—Los vikingos fueron algunos de los primeros pueblos mágicos en usar un conducto para su magia—dijo Draco en voz baja.—Si bien todavía dependían en gran medida de la magia sin varita, también usaban armas hechas de elementos específicos, como una espada o un martillo—Draco agitó su brazo con una mirada lejana en sus ojos, como si se imaginara empuñando algo así en lugar de un pequeño palo. Hermione no pudo evitar sonreír. Por supuesto, el chico se concentraría en eso, pero ella no podía culparlo. Era genial.

—Thor—dijo. Aunque su conocimiento de los dioses nórdicos antiguos era limitado, se había topado con el nombre varias veces.

—Exactamente—dijo.—Supongo que los muggles eventualmente empezaron a referirse a los antiguos magos y brujas como dioses y embellecieron un poco la historia.

—Sabes, Suecia fue uno de los últimos países en someterse al Estatuto del Secreto—Hermione movió su pergamino para que Malfoy pudiera verlo.—Según la mayoría de los libros de historia, el Estatuto Internacional fue aplicado oficialmente en 1692 por todos los Ministerios de Magia.

—Cierto, lo sabía—dijo Malfoy.

—Pero...—hizo una pausa mientras su dedo recorría sus propias notas (mal escritas a mano).—Suecia no cumplió plenamente hasta finales de la década de 1920, cuando Grindelwald se volvió loco.

Miró a Malfoy, quien parecía intrigado. Podía ver sus ojos recorriendo las páginas de notas mientras Hermione continuaba hablando.

—Suecia se había resistido al Estatuto del Secreto durante tanto tiempo porque los escandinavos no diferenciaban entre personas que tenían magia o no. Era una persona que extraía magia de su núcleo mágico o una persona que extraía "magia" de los elementos. Como aprovechar el viento en un molino o el flujo de un arroyo en un remo. Básicamente, usar medios prácticos para realizar tareas: herramientas y demás—Señaló los toscos dibujos que había hecho del antiguo lenguaje rúnico.

ᛈᚺᚤᛋᛁᚲᚨᛚ ᛗᚨᚷᛁᚲ

—Significa 'magia física'. Con el tiempo, los suecos lo consideraron simplemente como 'Ciencia'. Una persona a la que tú y yo nos referiríamos como Muggle era llamada Vetenmagi. Básicamente significa Ciencia Mágica—Ella suspiró.—Pero el daño que Grindelwald había causado ya estaba en efecto. Su esfuerzo por gobernar a los muggles fue suficiente para que Suecia abrazara plenamente el Estatuto del Secreto para proteger tanto a los Vetenmagi como a los mágicos.

—Y una vez que eso sucedió, los ideales de sangre pura también se abrieron camino hacia el Norte—agregó Malfoy. En ese momento, había tomado las notas de Hermione y las tenía en sus propias manos.—Dice que Suecia finalmente dejó de usar el término Vetenmagi y comenzó a llamarlos Mugglas, además de adoptar la idea de Squibs.

—Exactamente. Pero por lo que he deducido, la superioridad sanguínea en Suecia se parece más a una... bueno, como rivalidades entre equipos de Quidditch que a la terrible intolerancia aquí en Gran Bretaña.

Malfoy le devolvió el montón de pergaminos a Hermione mientras miraba por la ventana.—Eso realmente tiene sentido—dijo suavemente antes de volver su mirada hacia ella.—Un Tapiz de Sangre no diferencia entre un Squib o un Muggle. Sólo toma en cuenta si alguien tiene un núcleo mágico o no. Entonces, un Squib aparecería como un Muggle. Por eso ya nadie los usa.

Hermione pensó que lo había escuchado mal por un segundo.

—¿Espera qué?—ella jadeó en estado de shock. Pudo ver una sonrisa comenzar a extenderse por el rostro de Malfoy.

—¿Quieres decirme que Hermione Granger participó en un proyecto de investigación experimental con alguien a quien odia sin saber todo lo que hay que saber al respecto?

—¡N-no!—ella farfulló.—Leí todo lo que pude encontrar en esta maldita biblioteca sobre Tapices de Sangre—Se giró hacia una de las estanterías y pasó el dedo por la veta de la madera.—Traición—siseó con fingida molestia.

Ver a Hermione acariciar la propiedad de la biblioteca fue suficiente para hacer que Malfoy se echara a reír.

—¿Debería dejaros a los dos solos para que habléis de ello?—dijo con una sonrisa maliciosa.

—Eres repugnante—resopló.—¿Pero en serio? Malfoy, ¡eso significa que aún podría tener un pariente cercano que sea un Squib! ¿Por qué me cuentas esto ahora?

Malfoy pareció estar sobrio ante eso.—Bueno, sinceramente, no lo sabía en ese momento. No fue hasta después. Estaba un poco en negación...

Hermione resopló.

—Está bien, mucha negación—resopló.—Comencé a buscar Tapices de Sangre en libros de la Mansión. Pensé que tal vez el mío era un error. Pero... bueno, de todos modos. No esperaría que la biblioteca de Hogwarts tuviera esa información porque fue eliminada por los sangre pura. 

—¿Por qué?—cuestionó, pero ya podía entender las razones.

—Ya era bastante malo que una familia de sangre pura produjera un Squib. Si la verdad era que esencialmente dieron a luz a un muggle, eso... no lo sé—suspiró.—Supongo que significa que un núcleo mágico es más como un rasgo aleatorio. Que tener magia simplemente... sucede y los linajes significan nada.

Hermione le dio a Malfoy una mirada mordaz.—¿Estás seguro de que ya no sabes lo que crees?

Malfoy la miró con expresión irritada.—¡Bien!—Él escupió.—Lógicamente, lo sé. ¡Joder! Lo sé, Hermione—Luego enterró su rostro entre sus manos y habló con voz apagada.—No soy estúpido. Es obvio que todo lo que he conocido es una completa tontería, y soy un idiota—Finalmente la miró, luciendo angustiado.—Pero...—puso su mano sobre su corazón.—No es fácil. Todavía estoy confundido. Y...—se interrumpió.—Hábitos y esa mierda—susurró.

Hermione no sabía qué decir. Le sorprendió que finalmente admitiera que estaba equivocado: que el estatus sanguíneo era una construcción social. Pero lo que la dejó sin palabras fue que él había usado su nombre.

'Lo sé, Hermione.'

—Mira, entiendo la verdad en mi cabeza, pero yo... necesito tiempo. Es difícil no seguir creyendo que los sangre pura son superiores. Quiero decir, mi padre debe saber que algo anda mal conmigo porque...—apretó la boca.—Creo que ya he tenido suficiente COÑO por hoy—dijo mientras recogía sus pertenencias.

De repente oyeron risas provenientes del otro lado de las estanterías. Hermione miró a través de los libros sólo para ver a un grupo de chicas comiéndose con los ojos a Viktor Krum sentado en una de las mesas.

Hermione puso los ojos en blanco.—A veces me siento como otra especie—suspiró mientras empezaba a recoger sus propias pertenencias.

—¿Porque eres nacida de muggles?—cuestionó Draco. Ahora estaba de pie con su mochila colgada del hombro.

—Oh, no—se rió.—No es eso. Sólo quiero decir que no entiendo a otras chicas. Siempre he luchado por hacerme amiga de ellas. Incluso antes de Hogwarts. Es como... como si a cada chica le dieran un libro sobre cómo actuar, y de alguna manera el mío se perdió—Levantó la vista para ver a Malfoy todavía de pie escuchando. Inmediatamente se sonrojó al darse cuenta de que estaba hablando de algo que nunca le había contado a su madre. Y ahora se lo está contando a Malfoy, precisamente.

—Debería irme—dijo apresuradamente, sintiéndose cohibida.

—Bueno, cualquier libro de chicas que aparentemente se te haya perdido parece un poco basura, de todos modos—dijo, mirando a las otras chicas que estaban a la vuelta de la esquina mientras seguían a Krum fuera de la biblioteca.

Hermione le dio una mirada curiosa.—¿Eso es un cumplido, Malfoy?

Ella había esperado que él se indignara o se sonrojara o algo así. Pero en cambio, él simplemente la miró y se encogió de hombros, diciendo:—Si quieres.

Sin saber cómo responder, Hermione pensó que lo mejor era dejar las cosas como estaban. Pero cuando pasó junto a Malfoy, se dio la vuelta.

—¿Sabes algo sobre dragones?

Malfoy se burló.—Bueno, compartimos nombre. ¿Por qué?

—¿Cómo pasarías uno?—ella soltó. No había manera de que ella le dijera que estaba tratando de ayudar a Harry.

Malfoy entrecerró los ojos mientras la estudiaba, luego inclinó la cabeza.—Yo volaría—dijo simplemente.—En mi escoba de carreras—añadió con un movimiento de la mano como si volara por el aire.

—¿Pero qué pasaría si no tuvieras una escoba? ¿Qué pasaría si solo tuvieras tu varita?

Riendo, Malfoy habló de nuevo.—Todavía usaría una escoba.

Hermione miró confundida hasta que finalmente se dio cuenta.

Un hechizo de invocación.

—¡Eso es una genialidad!—dijo ella emocionada. Tendría que avisarle a Harry lo antes posible. Luego, mientras comenzaba a alejarse, escuchó a Malfoy gritar.

—¿Eso es un cumplido, Granger?

Hermione se giró y le dedicó una sonrisa.

—Si quieres.

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Nota de la TRADUCTORA:

¡Feliz año nuevo!

Por un 2024 con más salud física y mental para todo <3

*Pobre del COÑO de tu madre por darte a luz: Eso me lo saqué yo de la manga para que entendierais la referencia que le estaba haciendo Hermione a Draco, porque en la obra en ingles simplemente dice, en vez de idiota: "Your're a right twat, Malfoy!" que se traduciría como "realmente eres un coño, Malfoy" y en Inglaterra es un insulto, pero en español no tiene mucho sentido, así que tuve que darle un poco de contexto para que se entendiera y justificara el uso de la palabra coño.

*Lo llamaste idiota: Como ya dije arriba, en inglés Harry decía "You called him a twat" que sería "lo llamaste coño" pero lo cambié por idiota porque no veía a Harry mencionar nada del coño de alguien, que fue la línea que añadí para justificar la palabra coño en la conversación.