~10~
-¡Papá no nos atrapas! – Jungkook corrió tomando el brazo de su padre omega quien reía tratando de seguir los rápidos pasos de su hijo.
- ¡Por acá, Kook, por acá! – el menor observó el lugar que su padre omega le indicaba y corrieron hacia una pequeña cueva para esconderse, poniendo a prueba todos sus sentidos para poder escuchar si su padre alfa se acercaba.
- Papá nunca nos encontrará – susurró mirando a su padre quien reía porque Yoongi los iba a encontrar así se encondieran en el más allá, por el lazo con su omega.
Algo que no compartían con su pequeño hijo al no ser hijo de sangre, sus lobos por supuesto que lo adoraban, pero el vínculo era muy débil, podían saber cuándo algo les ocurría, pero no encontrarlo si algo le sucediera.
Un fuerte rugido hizo a Jungkook reír escandalosamente y luego tuvo lamiendo su mejilla a su padre alfa con diversión y a su padre omega hablar a su esposo.
Poco a poco las risas, los besos se fueron esfumando, quedándose completamente solo y entonces cuando abrió los ojos y se encontró con un techo de madera, un aroma extraño, supo que todo fue un sueño.
Y probablemente no vería más a sus padres.
Las lágrimas comenzaron a resbalar por sus sienes, mojando su cabello y la almohada en la que se encontraba. A pesar de ser de día, el resplandeciente sol se opacó con una nube negra y comenzó a llover al compás de los hipidos del niño.
- ¿Jungkookie? – una voz triste y conocida escuchó en toda la habitación
- TaeTae – murmuró levantándose tratando de secar sus mejillas – Estas aquí y estas bien – el castaño mayor suspiró y se acercó para abrazar al menor
- ¿Estas bien, Jungkookie?
- S-si – pero su sollozo no se detuvo. Estaba tan sensible que podía pasar todo el día llorando
- Recuerda Kookie, no te dejaré solo – la voz suave de su mejor amigo hizo que poco a poco calmara el llanto, agradeciendo internamente por tenerlo, no tenía idea que hubiera pasado si se encontraba solo.
- ¿Dónde estamos, hyung? – una suave sonrisa apareció en el rostro de Taehyung al separarse
- Un señor nos salvó. Dice que es igual a ti – Jungkook lo observó con grandes ojos confundidos - Ven vamos
El menor tomó la mano de Taehyung y observó como ambos se encontraban vestidos con prendas un poco grandes pero que podían cubrir sus cuerpos.
-Oh despertaste, dormiste por medio día más que tu amigo – la voz desconocida pero tranquila hizo que el menor se encogiera y mirara a su amigo, pero este solo asintió con su misma sonrisa.
El desconocido se giró y Jungkook pudo observar su rostro, un brillante y alegre rostro con una sonrisa amable y unos curiosos ojos color ámbar demasiado claros, casi llegando al color amarillo, su cabello platinado casi rubio corto y revuelto, y un grande abrigo que cubría sus piernas.
-Hola, me llamo Jung Hoseok, soy hijo del sol – Jungkook abrió en grande sus ojos
"Dice que es igual a ti..."
-¿S-sol...? – el mayor suspiró haciendo señas para que ambos niños se sienten a su lado
- En el mundo, en las vidas pasadas y probablemente en el futuro van a existir hijos de las estrellas. Al parecer en esta vida, nos tocó ser a nosotros – Jungkook no dejó de observar su cálida sonrisa, aquel hombre que le traía una calma increíble
-¿Hijos de las estrellas? Yo...
- Eres hijo de la señora Luna, Jungkook. Es confuso, claro, pero poco a poco vas conociendo todo lo que la luna te ofrece, en este caso, te ha ofrecido el tener dos animales
- ¿El lobo y el tigre? – el mayor asintió
- ¿Qué... le ha ofrecido el sol a usted Hoseok-ssi? – murmuró Taehyung. Hoseok lanzó un suspiro con mirada al cielo
- Me ha dado el poder y de verdad agradezco mucho, de sanar enfermedades, bien sea de animales, omegas o alfas
- ¿Y porque está aquí? ¿Cuál es su clan? ¿Por qué no está con ellos? ¿Con su familia? – habló Jungkook tratando de entender que poder especial era el ser hijo de una estrella.
- Mi clan, la de los tigres me temen. La gente teme las cosas extrañas y trata de huirlas... Y por buscar respuestas mataron a mis padres... Por lo que he tenido que huir... Como tú – el corazón del menor se encogió ante el pensar que sus padres... Hayan muerto
Por favor Luna, no permitas eso.
-Q-que... ¿Qué debo hacer...? Y-yo – dejó de hablar cuando los ojos ámbar lo miraron
- Tienes que educarte, entrenarte y... Volver, volver a tu clan. No te rindas... Como lo hice yo – rogó – Quien sabe que el propósito de la Luna es que tu unas a las aldeas. Quien sabe que tú te vuelvas el líder... No solo de los animales, sino de los lobos y tigres.
Y el clima cambió drásticamente a uno con bastante sol, sin ni una nube gris, ni rastros de volver a llover.
Taehyung observó al menor que miraba el cielo con sus ojos volviéndose grises, y por primera vez, su pequeño lobo en su interior hizo presencia saltando de felicidad, rasgó su pecho ante la vista y quiso tomar su cuerpo para poder acercarse a la fuente de olor que era mucho más llamativa y dulce.
Jungkookie
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