CAPITULO 6: UN SOBREVIVIENTE... UNA PROMESA DE AMOR
La guardia real cabalgaba a todo galope sin rastro de él príncipe fugitivo, mientras que uno de los soldados buscaba indicios de los fugitivos escucho unos pasos y algunos crujidos que aseguraba que alguien se escondía en la dirección que el buscaba, por inercia aviso a sus compañeros y los demás lo siguieron. Después de estar dando vueltas el comandante se estaba desesperando.
Aio: oye kamijou ¿estas seguro que es por aquí?
Hiroki: s si... eso creo... (hablo bajito para no ser escuchado)
Aio: tsk... ¡busquen bien!... (grito a sus subordinados, quien también se encontraba buscando, a unos cuantos metros escucho el crujir de una rama que fue rota, sonrió para si mismo y al acercarse un lobo blanco salto frente a el dando un sonoro grito) ¡AHH!
Todos al escucharlo fueron a verlo pero cuando iban en camino mas lobos salieron de la nada bloqueándoles en paso, poco a poco todos fueron separados los unos de los otros. Lo que mas le sorprendió a hiroki es que los lobos solo acorralaban a sus compañeros pero no atacaban. Intento hacer algo pero era como si su cuerpo no le respondiera o más bien como si alguien no se lo permitiera. Uno de sus compañeros intento atacar pero... fue inútil, el comenzó a gritar que no podía moverse y su mano soltó la espada que empuñaba en ese momento, cuando hiroki estaba pensando en como hacerle para poder ayudar a sus compañeros escucharon a lo lejos el canto de una mujer que para sus oídos era una hermosa melodía, para los demás era como escuchar a kotomi ichinose (es la chica que toca el violín en clannad), quienes se retorcían al escuchar esa melodiosa canción para los oídos de hiroki. Busco de donde surgía ese sonido hasta que vio una hermosa mujer de cabello rubio y ojos grisáceos, el quedo embelesado ante esa mujer quien, cuando llego con aquel grupo de hombres quedaron de igual forma que hiroki.
Muri: bienvenidos caballeros...
Aio: ¿Quién rayos eres tu?... ¿y por qué esas bestias no te atacan?
Muri: ¿Cómo que bestias?... ellos son mis mas fieles compañeros en este lugar (acaricia a uno de los lobos quien ante el contacto de la mujer, parecía ser el mas manso de los cachorros)
Hiroki: *no entiendo... por que a ellos los lobos los vigilan como si... como si... ellos fueran el peligro*
Aio: ahh... explicate por favor, no entiendo nada.
Muri: dime algo... ¿te gusta como canto?... puedo hacerlo de nuevo si gustas
Todos: ¡no! (todos gritaron a excepción de hiroki)
Muri: jaa... que malos... (Volteo a ver a hiroki) dime... ¿a ti si te gusto? (este solo asintió con la cabeza)
Aio: ¡¿acaso estas sordo o loco?!...
Hiroki: ninguna de las dos cosas... a mi si me gusto a decir verdad
Muri: ya lo sabia (se acerca y acaricia su rostro de una manera tierna dándole una sonrisa) tus ojos me dicen que eres alguien de buen corazón... (voltea a lo demás y cambia por completo su actitud a una fría, seria y seca) pero ustedes... no son mas que basura... son una porquería de hombres
Aio: ¡ja! ¿Quieres ver que lo buen hombre que soy? (le lanzo una mirada seductora a muri quien solo puso una cara de asco y repulsión)
Muri: no creo que eso le guste a tu esposa o a ninguna de las dos mujeres con quienes sales... (aio palideció al momento ya que nadie sabia de eso)
Aio: ¿Qué?... como es que sabes...
Muri: no solo se de ti... si no que también se de todos ustedes... se de ti akira, tu que por tus celos dejaste a tu hermana morir en el desierto... también se lo que tu hiciste ibuki, sé que hiciste que tu mejor amigo pagara con la muerte algo que tenia que ser tu castigo... se todo de ustedes...
Aio: ¿y que piensas hacer?... no creo que una mujer como tu tenga las agallas para matar a alguien
Muri: tienes razón, una mujer no tiene las agallas suficientes como para hacer algo así... pero (se acercar a la cara de aio) yo no soy cualquier mujer... (sonrió maliciosamente, levanto los brazos y los lobos comenzaron a atacar a los soldados)
Hiroki no podía creer lo que veía, todos sus compañeros estaba siendo masacrados por aquellos lobos blancos que después se tiñeron de color rojo. El solo se mantenía estático sus ojos estaban abiertos a mas no poder, pensando que el seria el próximo en morir o que el seria la persona que aquella mujer mataría con sus propias manos, su rostro se fue manchando de sangre al igual que su ropa, solo escuchaba los gritos y los gruñidos de los lobos, lo cuales fueron cediendo poco a poco.
Aun no podía creer lo que veía, de los cuerpos salía una pequeña llama la cual se hacia mas grande y de ella surgia un nuevo lobo blanco, cuando por fin reacciono subió a su caballo y se aferro a él comenzando a galopar lo mas rápido posible y no paro hasta llegar al castillo, quien para su suerte no fue percibido por nadie puesto que ya era noche y la mayoría estaba en su casa o en cantinas, cuando por fin llego al castillo, el caballo por inercia se dirigió a los establos en donde se encontraba un joven medico brujo de cabello negro-azulado, dándole una manzana a uno de los caballos. Cuando vio que llego el caballo al establo vio que no llevaba a nadie, se le hizo raro y fue a ver. Grande fue su sorpresa cuando vio al castaño aferrado al caballo con una cara de terror, pero mas terror le dio al ver que este venia cubierto de sangre.
Nowaki: ¿hiro-san?... ¿Por qué vienes así? (quiso acercarse pero cuando lo intento, el castaño saco una pequeña daga y trato de herirlo)
Hiroki: ¡ALEJATE NO TE ACERQUES!... (sus ojos comenzaron a derramar lagrimas, su rostro no cambiaba aun mostraba miedo)
Nowaki: hiro-san ¿Qué paso?...
Hiroki: ¡ALEJATE HE DICHO!... maldito moustro, has matado a mis compañeros... no te acerques, vete, vete, vete (se bajo del caballo como pudo y se acurruco en un rincón meciéndose) vete, vete, vete, vete
Nowaki: hiro-san... tranquilo ya estas a salvó... (se acercó al castaño y lo abrazo, el oji-avellana al sentir los brazos del azabache, lo ataco hiriéndolo en el brazo) auch... duele
Hiroki: (aun seguía con la daga en mano, aun tenia miedo) ¡TE DIJE QUE TE VALLAS!... vete, vete, vete, vete... no quiero morir
Nowaki: (al azabache le dolió ver a su hiro-san de esa forma, no sabia que hacer en un momento así, no se le ocurrió otra cosa mas que quitarle la daga que no quería soltar, una vez que se la quito el castaño comenzó a patear y forcejar por que lo dejaran, pero nowaki no lo dejaría a si de fácil, así que lo abrazo fuerte y firmemente para poder tranquilizarlo) hiro-san tranquilo, soy yo nowaki...
Hiroki: (al escuchar el nombre de nowaki se tranquilizo un poco y voltea verlo, al darse cuenta de que de verdad era él, se aferro a su cuerpo) nowaki tengo miedo (decía casi en un susurro mientras temblaba de miedo)
Nowaki: tranquilo ya estas a salvo... ¿dime que fue lo que paso?...
Hiroki: en el bosque... todos murieron... algo los mato... (cada vez mas se aferra al cuerpo de nowaki)
Nowaki: tranquilo... ya nada te pasara estarás bien... aquí, conmigo (le sonrió cálidamente mientras poco a poco se fue acercando a sus labios para así darle un cálido y tierno beso) recuerda que yo siempre estaré contigo
Hiroki: ¿me lo prometes?
Nowaki: claro que si... recuerda que eres y serás la persona más importante para mí... te amo
Hiroki: yo... también (una vez mas se fundieron en un beso lleno de pasión en donde ninguno de los dos se quería separar, ese era el momento donde quisieras que el tiempo de detuviera y poder estar con la persona que mas amas, eso era lo que estos dos querían solo que por falta del aire se tuvieron que separar)
Nowaki: estas temblando... ¿tienes frio o miedo?
Hiroki: ... las dos cosas... (se ruborizo al pensar que nowaki se dio cuenta que aun estaba temblando)
Nowaki: jum... ven... tenemos que quitarte ese frio (lo carga al estilo princesa)
Hiroki: ¿Qué haces mocoso? (frunció en ceño)
Nowaki: valla, tu humor ha vuelto a ser el mismo de siempre hiro-san... y no te preocupes solo te llevare al baño para que te des una ducha... o ¿quieres hacer algo mas? (sonríe maliciosamente)
Hiroki: no... yo... solo tengo frio (se volvió a carrucar en los brazos de aquel medico brujo) solo eso
Nowaki: ok... ya entendí (comenzó a llevarlo en sus brazos hasta llegar a sus aposentos donde se adentraron en el baño y nowaki comenzó a desvestir a hiroki, este no puso mucha resistencia ya que tenia miedo de quedarse solo y que lo fueran a buscar para matarlo, cosa que no pasara puesto que el es de corazón puro, después de desvestirlo lo metió a la tina)
Hiroki: waaa... esta fría
Nowaki: ¿enserio?... jum tranquilo (metió la mano dentro de la tina)
Hiroki: o oye que haces...
Nowaki: dijiste que esta fría... (en el momento que nowaki sumergió si mano en el agua esta se comenzó a calentar, dejándola a la temperatura perfecta) ¿así esta bien? (el castaño quien solo tenia la cara mas roja que un tomate asintió con la cabeza) bueno... mientras terminas de bañarte yo preparare una muda de ropa para que te vistas (justo cuando estaba pensando en salir sintió una mano que lo detenía)
Hiroki: ... no te vallas... tengo miedo
El solo sonrió y al poco rato ya estaba junto con hiroki acompañándolo en la tina, lo que primero comenzó con pequeños besos terminaron siendo besos apasionados acompañados por caricias de ambos amantes sintiendo y disfrutando de ese calor que hacia que el corazón se les derritiera y fundiera en uno solo, tanto los gemidos como los gritos aparecieron junto con las lagrimas pero el ellas solo se podía sentir el amor junto con la pasión que hacia enloquecer al extremo a estos dos amantes lo cuales no se cansaron de demostrarse su amor por toda la noche hasta quedar sin aliento.
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