Shinobu: tengo que llegar lo más rápido posible... ese es el hombre del que hablo Yue

Se decía así mismo mientras cabalgaba a todo galope en busca de ayuda, al llegar no le importo que los guardias lo detuvieran reparo en el mismo caballo y entro; al llegar bajo del caballo y comenzó a buscar a alguien que lo ayudara, pero lo único que conseguía era que las demás personas lo tomaran de a loco e incluso una de las sirvientas del palacio le dijo que se fuera porque el rey no tenía la paciencia suficiente para tratar con niños, eso hizo que ardiera en coraje y desesperación; como última opción se paró en seco y a todo pulmón grito.

Shinobu: ¡MALDITA SEA NECESITO AYUDA ANTES DE QUE SEA DEMASIADO TARDE!... (tanto era su coraje de no ser escuchado que cayó de rodillas y comenzó a llorar por sentirse tan impotente) ¿Por qué no me escuchan?

Hiroki: oye niño deja de armar tanto barullo (lo miro con los brazos cruzados) que no ves que aquí la gente trata de trabajar en paz.

Shinobu: (levanto la cara y con pocas lágrimas en los ojos se colgó de la chaleco café que llevaba en ese momento) por favor, tienes que ayudarme... uno de los príncipes se volvió loco y acaba de matar a una niña... si no lo detienen, matara a todos.

Hiroki: (miraba sorprendido a aquel rubio que lo miraba suplicante) ¡¿pero qué dices?!... esas son tonterías nada más... ninguno de los príncipes podría hacer semejante cosa (se dio la vuelta y se dispuso a irse) aquí nadie está para bromas así que regresa a tu casa.

Shinobu: ¡estoy diciendo la verdad!... ese hombre mato a la niña porque según él es la hija de la luna (dijo casi sin voz)

Hiroki: (paro en seco y abrió los ojos a mas no poder, lo que Nowaki le dijo que ocurriría, estaba pasando) ¿Qué dijiste? (regreso hacia él)

Shinobu: el mato a la pequeña... bebió su sangre... quiere a Misaki (trataba de hablar pero todo se encontraba hecho un desastre en su mente haciendo que solo dijera cosas incompletas)

Hiroki: te ayudare pero tienes que explicar todo esto (toma al chico de la mano) le explicaras todo al comandante de la guardia real... él sabrá que hacer (caminaban rápidamente en dirección a la oficina de su superior) Miyagi sabrá que hacer, mientras tengo que buscar a Nowaki, es sabrá como detener todo esto... solo espero que para cuando lleguemos no sea demasiado tarde (se decía para a sus adentros)

Al llegar localizaron de inmediato a Miyagi el cual se encontraba en el patio trasero entrenando con algunos de sus hombres, Miyagi al ver a
Hiroki detuvo el entrenamiento y se lanzó al castaño.

Miyagi: HI MY SWEET HONEY (decía sofocando al castaño)

Hiroki: ¡¡haaa!! Comandante por favor aléjese de mi... tenemos una emergencia... (dijo serio mientras se zafaba de los brazos de su comandante) lo que Nowaki nos dijo la semana pasada está ocurriendo... tu sabes de lo que hablo

Miyagi: con que tu novio tenía razón ¿eh?... (dijo ya en un tono más serio mientras comenzaba a caminar en dirección de sus demás hombres y el rostro del castaño se tiñe de un color carmesí) ¿Pero cómo puedes estar tan seguro de lo que dices?

Shinobu: el no miente... yo vengo de ver lo que acabo de hacer uno de los príncipes (mantenía la miraba en el suelo) deben detenerlo antes de que se cumpla lo que Yue dijo

Miyagi: (detuvo sus pasos y se dio media vuelta para ver la persona que le hablo, por un momento se quedó anonado ante la belleza del chico y aun que solo miraba el suelo este rubio tenía algo que hacía que no le quitara los ojos de encima; cuando se dio cuenta de que no
dejaba de verlo se zarandeó así mismo y se dispuso hablar) ¿Quién ese Yue de quien hablas?

Shinobu: es... (pensó un momento y comprendió que si decía que Yue es un espíritu solo lo tomarían a loco y no lo ayudarían así que solo se limitó en sus palabras) es una amiga mía, es muy sabia, puede predecir las cosas y lo que me dijo no es nada bueno... tenemos que hacer algo antes de que sea demasiado tarde (decía de una manera insistente y preocupada a la vez)

Hiroki: bueno ustedes vean que es lo que se tiene que hacer, tenemos que movernos rápido (dijo rápido para poder irse)

Miyagi: oye Kamijou ¿A dónde vas?

Hiroki: Nowaki sabrá que hacer... necesitamos toda la ayuda que sea posible, también tengo que hablar con el rey para solicitar su permiso... aunque no lo tomara nada bien (esto último se lo dijo a si mismo) muévanse rápido... los veo en 30 minutos

Miyagi: ¡¿Qué?! 30 minutos no serán suficientes

Hiroki: no me importa... tienes 30 minutos

Dicho esto el castaño se fue en busca del médico-brujo, mientras que Miyagi y Shinobu comenzaban a preparar todo para detener al príncipe
Haruhiko, los soldados y guerreros ya estaban más que listos para partir la media hora había pasado como se debía pero cierto castaño no llegaba como era acordado, sin más tuvieron que partir sin el.

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Las cosas no iban de la mejor manera, Akihiko luchaba con todas sus fuerzas, su espada chocaba con gran estruendo con la de su hermano evitando que este se acerque a su querido niño, Usagi-san no sabía si podría aguantar más tiempo luchando ya que la diferencia de fuerza era notable y aunque no lo quisiera admitir necesitaba ayuda, rogaba porque alguien lo ayudara y como si hubiese sido escuchado ambos hermanos se detuvieron al ver una flecha pasar en medio de la imparable lucha.

Takahiro: ¿necesita ayuda majestad? (sonrío de medio lado mientras baja su arco y después se dirigió a Manami) ve adentro y busca a Misaki y a Lucy

Manami: ¡sí! (mientras afuera se desataba una lucha por detener a Haruhiko, Manami al entrar a la cabaña se quedó en shock) mi Misaki... ¿Qué, que le paso a Lucy? (decía ya con lágrimas en los ojos)

Misaki: (levanto la mirada pero, su mirada estaba perdida e inundada en lágrimas) lo siento (dijo en un susurro y en seguida dejo ver el cuerpo de Lucy el cual de apoco iba perdiendo el color plateado de su cabello) yo debía protegerla (su voz se escuchaba quebrada por tratar de aguatar el llanto)

Manami: Lucy (se acercó poniéndose de rodillas mientras tomaba a su hija en brazos) mi pequeña... tienes que despertar... tienes que vivir para ver crecer a tu hermano (ya no había nada que hacer su hija poco a poco abandonaba el mundo de los vivos)

Lucy: m ma mami (decía en un hilo de voz que apenas era audible, que Misaki llego a es cuchar)

Misaki: mira... aún sigue con vida (la esperanza de que la pequeña viviera volvió aparecer en el castaño)

Manami: no hables mi vida... tenemos que curarte... Misaki tú, tu puedes salvarla ¿verdad? (con desesperación trato de saber si aún había esperanza de salvarla)

Misaki: si (dijo serio y tomo a la niña en brazos para subirla en una mesa) Manami, tráeme agua... necesito limpiar la sangre

Manami: ya la traigo (salió rápidamente)

Misaki: lo siento Lucy... Haruhiko tomo lo que te mantenía con vida, si sigue utilizado tu poder acabara contigo... mierda ¡debió tomar mi sangre y no la tuya! (decía mientras apretaba las manos y se esforzaba por no llorar una vez más y hubiera sido así de no ser por una mano que sostuvo la suya)

Lucy: n no... es... tu culpa (su voz cada vez sonaba más débil y su respiración más lenta pero eso no le impidió que le diera una sonrisa, una muy débil sonrisa)

Misaki: claro que es mi culpa, y ya no hables... necesitas ahorrar fuerzas

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Manami: agua... solo en el pozo... pero... la pelea... no importa la conseguiré (se decía así misma mientras veía la intensa lucha, un peli-negro y un peli-plata luchaban con mucho esfuerzo para no ser derrotados por Haruhiko, cuando vio la oportunidad se lanzó a un costado del pozo y lo más rápido posible saco el agua, cuando pensó que la tenía, levanto el rostro y observo como Haruhiko derribaba a Takahiro al suelo y se dispone a dar el golpe final, en un acto corre con la cubeta de agua y se la deja caer)

Haruhiko: ¿pero qué? (voltea a ver quién se atrevió a mojarlo) TU IDIOTA... PAGARAS POR ESO (su mirada ardía en furia y enojo, levanto la mano y la derribo en un solo golpe haciendo que sangrara por la comisura su labio)

Akihiko: te haces llamar caballero cuando golpeas a una mujer... no hay más bestia que el que no tiene respeto por una dama (se tambaleaba ya si fuerzas, con una gran herida en su brazo y su ropa desgarrada con pequeñas manchas de sangre)

Haruhiko: ¿aún no te rindes?... (sonrió sínicamente) deberías rendirte ya... no tienes oportunidad de ganarme (levanto los brazos y a su alrededor se levantaron varios objetos) tu llevas las de perder date cuenta

Akihiko: eso... eso jamás (ya con el cuerpo cansado y adolorido, empuño su espada y se puso en defensa)

Haruhiko: jaja me das risa (dicho esto comenzó atacar nuevamente, para el eso es lo más divertido)

La ayuda no tardará en llegar y con ella el final de los planes de Haruhiko, Misaki está apunto de salvar la vida de Lucy... ¿pero... a qué precio?...