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Solo es curiosidad

-el peliverde extrañado por el comportamiento del celeste solo le quedaba ladear la cabeza levemente a un lado mientras que miraba como los brillos le rodeaban como estrellas en el cielo nocturno, sin saber que responder dejo las manos en sus bolsillos.-

Mido: no se realmente de que hablas...

Kaze: no vayas a creer que no lo sé porque esta pasando.

-el peliverde todavía estaba confundido, mas si eso es posible a lo que el celeste no vio de otra que contarle.-

Kaze: dime solo una cosa ¿cuanto es que se conocen?

Mido: ¿de quienes estas hablando?

Kaze: oye no sigas poniendo "la burra al trigo" sabes de quien hablo.

Mido: ¿de kiyama-kun?

-el celeste con los brazos cruzados asintió con la cabeza esperando respuesta.-

Mido: hace apenas hoy nos vamos conociendo.

Kaze: ¿y que opinas sobre el?

Mido: pues es bastante agradable y curioso, solo espero que no se haya perdido saliendo de aquí.

-soltó una pequeña risa mientras que el celeste seguía en lo mismo.-

Kaze: ¿eso es todo?

Mido: si, eso es todo.

-un silencio aterrador hundió el lugar, el peliverde no sabia como reaccionar.-

Kaze: y... ¿te gusta?

Mido: ¿ah?

-eso si le dejo confundido, pero la mirada fija y penetrante del celeste le dio a entender que era lo que quiso decir a lo que rápidamente negó con la cabeza.-

Mido: por supuesto que no.

Kaze: ¿seguro?

Mido: ¿cómo vas a pesar eso si tan solo apenas nos conocemos?

kaze: quien sabe, a veces pasa el amor a primera vista~

Mido: no es así.

Kazd : eso dices ahora, luego ya pasará ~

Mido: no va a pasar.

-el celeste solo se puso a reír, atrajo al peliverde con un brazo al rodearle por el cuello con este.-

Kaze: bueno lo que digas, entonces, ¿es un nuevo amigo?

Mido: puede ser.

-luego de unos minutos se escucharon pasos cerca de ellos, cuando voltearon era el albino que se les acerco con calma.-

F: aquí estaban, ¿todo bien?

Kaze: así es

Mido: ¿ya nos vamos?

F: si, ah por cierto kaze-chan Endou te busca.

Kaze: ¿hum?

-en ello cayo en cuenta lo que estaba por hacer cuando salieran de clases, entonces soltó al peliverde para acariciarle la cabeza.-

Kaze: ya voy, pero que no se te olvide Mido-san, puedes invitarnos a la boda cuando quieran~

-el peliverde fruncio el ceño en un puchero.-

Mido: ¡Que eso no va a pasar!

-el albino extrañado solo observo, el celeste se alejaba entre risas mientras que el peliverde solo pucheaa con las mejillas infladas.-

F: ¿puedo preguntar que pasó?

Mido: no, mejor no.

F: de acuerdo.

-y así los dos caminaron saliendo del instituto mirando alrededor que hacer, mientras que el pelirrojo estaba llegando al edificio hasta que logrando ver a lo lejos una silueta familiar no dudo en acelerar el paso.-

H: no pensé en verte por aquí.

-el joven elevó la mirada para encontrarse con los ojos jade ajenos, dejando sus manos en sus bolsillos.-

G: podría decir lo mismo de ti

H: ¿alguna novedad que hay que saber?

G: ninguna, solamente estaba buscando donde almorzar por la ciudad.

H: ¿quieres compañía?

G: no es necesario, se a donde poder ir no debes preocuparte.

H: (incluso tratando de ser amigable no cambias.)

-pensó para si mismo antes de suspirar levemente.-

H: la verdad es que también estoy algo aburrido y puede que nagumo no quiera acompañarme caminando de nuevo por la ciudad.

-el moreno guardo silencio con su típica mirada, suspiro algo leve para seguir el camino.-

G: de acuerdo, pero ¿nada mas iras tu?

H: no me tomes por kira.

G: entonces vamonos.

H: ¡gracias!

-ambos partieron de camino a la ciudad, conversando temas que eran de familia para cuando llegaron a cercanías de una cafetería que para el pelirrojo le era extraño, el moreno no era de ir a lugares "comunes" a menos que no sea por algo en especifico, entonces tomando una mesa aparte del resto de loa otros no aguantó la curiosidad.-

H: ¿hay algo que te ha llamado la atención?

G: no es material por si acaso.

H: ¿entonces quien? A ver... ¿nueva compañía?

G: claro que no.

-muy extrañado miro alrededor de reojo pero enfocando la mirada en donde su amigo estaba mirando encontró a un albino recién llegando al local saludando al resto.-

H: aaah... Con que era eso.

-cuando regreso a ver al moreno este tenia la mirada fija en el muchacho quien no se daba cuenta de eso, lo que se puso a pensar después de unos minutos para luego reír levemente.-

G: ¿qué es tan gracioso?

H: nada, solo ¿de verdad esta pasando?

G: ¿ah? ¿de que hablas?

H: creo que ya lo se, no sera necesario que me tengas que decir.

-antes de que el moreno hiciera o dijera algo el albino se había acercado a ellos para pasarles el menú lo que provoco que el moreno saliera de su trance rápidamente.-

F: buenas tardes, ¿desean ordenar algo?

H: vaya, no sabia que trabajabas aquí, Shirou-san

F: de hecho si jejejej en tiempo libre vengo aqui

H: ustedes están llenos de sorpresas de verdad.

F: no lo creo.

H: bueno... Supongo que un café con tostadas estaría bien.

F: de acuerdo, ¿y tu Goenji-kun?

G: aah si no es molestia me gustaría uno de los postres de tu preferencia.

F: ¿de verdad?

G: si, el que mas te agrade.

F: esta bien, ¡no tardo!

-una vez que se fue el moreno miro fijamente al pelirrojo y ninguna sonrisa.-

G: ¿tú desde hace cuando lo conoces?

H: hump? Desde ayer, el y sus amigos me ayudaron y a nagumo a llegar al hotel mas cercano.

G: ¿hotel?

H: ¿no te dijeron? Nos quedaremos aquí un tiempo.

G: ah, que sorpresa.

H: así es, nos perdimos ayer y nos encontramos en el camino esa noche.

G: ¿en la noche?

-eso despertó mas la curiosidad del moreno, no recordaba que en todo momento de la noche hubiese visto al pelirrojo ya que si fuera así se lo hubiese encontrado.-

G: ¿a que horas fue eso?

H: eeemmm casi a las 12:30, o algo así.

-justo hora y medio después de haberse ido, seguía con el ceño fruncido sin apartarle la vista.-

H: ¿sabes que cuando miras así das miedo?

G: pues debería, ¿que mas hicieron?

-en el momento llega el albino con los pedidos.-

F: ¡aquí tienen!

H: eso si fue rápido jajaj

-el moreno salio de su trance, aunque no aflojaba el ceño.-

G: gracias.

F: de nada.

-volvió a retirarse para dejarlos solos, un silencio enorme y una angustia interna emanaban en todo momento.-

G: dime solo una cosa.

H: ¿cual?

G: ¿no lo jalaste tu a ese hotel verdad?

-el pelirrojo de la sorpresa se confundio mas que un loco en un hospital.-

H: ¿que dices? Claro que no. ¿por que lo preguntas?

G: solo quería saber...

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