-Así, como las noches siguientes transcurrieron a paso lento como los días, estaban todos esperanzados de que las cosas se dieran en buena manera, las coronaciones resultaron ser más diversas que iguales y aunque el albino no ha podido tener la vista de los humanos el moreno trataba de ir a ver todo lo que podía antes de que le jalasen de nuevo a celebrar su propia coronación. El resto de las deidades pudieron enviar sus felicitaciones a ambos por sus nuevos rangos, solo quedaba que sus herencias pudiesen tener el mismo rol protagónico que ellos tienen adentro de la tierra, algunos por la misma excusa de que había demasiado espacio que ocupar llevaron a sus familiares para rellenar esos espacios, sobre todo los que tenían más de 2 familiares como en el caso del peliverde que estaba como una madre pato al guiar a los otros.-

Mido: bien, aquí debe ser. Por amor a Khaos traten de no meterse en problemas ¿vale? No voy a responder si a ustedes les dan cacería.

-Dijo con una seriedad bastante clara además de que los menores lo han tomado como una pequeña broma solo pudieron aceptar las indicaciones dadas por el peliverde mayor que suspiró un poco leve antes de sentir el agarre del pelirosa que con una ampliada sonrisa respiró hondo el nuevo aroma del mar.-

Tsuna: lo estas haciendo bien Midorikawa, parece que ya te estas adaptando a esto.

Mido: no te confíes mucho.

Tsuna: anda! "Sal a gusto no pica, si pica no mortifica" ¿verdad?

Mido: aah supongo que esta vez no.

Tsuna: todo va a estar bien, de cualquier forma me tienes aquí para apoyarte.

Mido: es que eres el único cuerdo de todos, así que no voy a dudar en hacerlo.

Tsuna: ¡así se habla! Ven, vamos a ver que tal el resto del sitio.

Mido: te sigo.

-Los dos no tardaron en emprender el camino a cualquier dirección que les indicaba el viento, mismo el cual tomaba forma materializada en diversos lugares de donde podía detenerse casi de golpe aun cuando esta encima de una palmera.-

Kaze: a fin, moría de ganas por ir y venir de esta manera, ahora sé porque Iris desespera mucho.

-Dijo moviendo sus pies un poco rápido para que al bajar su mirada pudiera ver a los demás en su andar explorativo de aquellas tierras casi desorbitadas por siglos, incluyendo de la misma forma a quienes no pertenecen a las mismas jerarquías pero igual fueron aceptados.-

Tachi: woaaah! Es sumamente grande! Quizás un poco más que Midgard.

E: ya lo creo! El Valhalla estaría encantado de ver este sitio, y quizás podamos adoptar unos gatos para Freyja.

Tachi: oh si, aparte de buscar un sitio donde podamos entrenar sin perjudicar a los otros.

E: creo que allá arriba puede haber un lugar ideal, ¿te parece venir?

Tachi: por supuesto.

-Y así ambos pudieron seguir su camino hacia aquella montaña baja la cual rodeaban amos pelirrojos junto al peliblanco que se les había unido a la charla.-

Nagu: ¿entonces por eso trajiste todas esas cosas?

Tat: era eso o tener que hacer una fiesta sin necesidad.

Suzu: no puedo imaginar como sería eso.

Nagu: ni yo, pero mejor sigamos viendo el sitio, no vaya a ser que tenga que quemar algo sin necesidad y se enojen por eso.

Tat: si, suena bien... Y tal vez veamos a quienes más enviaron acá.

Suzu: ¿lo dices por ti o por Mido?

Tat: ¿eh?

Nagu: no era por el que estas aquí?

Tat: .......

Nagu: tomamoslo como un si.

Suzu: ánimo, algún día lo verás.

Tat: -suspiro suave- espero que si.

-Y mientras tanto los otros estaban también en lo suyo, las nubes estaban esponjosas más que en la tierra, sin saber si es un aviso de que probablemente se haya dado un cambio de clima, algo para que los dos guardias encargados, de hecho los únicos que por hora están presentes, estaban anotando individualmente lo mismo.-

Tora: bueno, el páramo tiene muchos rincones por los cuales aun queda por descubrir.

Tobi: asé es, al menos la mayor parte está estable para ser habitada por alguien.

Tora: eso si, aparte de que el tiempo pasa lento nos queda mucho por recorrer.... Vamos a ver que tal con las plantas que crecen aquí.

-El pelimorado no perdió mucho tiempo en seguir al peiverde en su andar, el viento solo removía sus ropajes en un vaivén que únicamente se podría predecir por el celeste que era el primero en ver los rincones y posibles templos que volverán a ser habitados por ahora la herencia de dioses.-

Haruna: está como Atenea dijo.

Minaho: verdad que si? No quiero saber si este fue o no el que...

K: solo habrá una forma de saberlo, o varias, no toquen nada por si acaso.

-La chica y el búho andante asintieron con la cabeza de no ser que cuando escucharon una voz alzada podrían continuar el paso.-

Fu: vamos holgazanes! Estos sitios no son para jugar, los ejércitos del páramo no se alistarán solos! Si en verdad quieren estar en este lugar deben aguantarse, pero si quieren ir a llorar como bebés ahí tienen la puerta de salida y nunca volver!

-La chica y el búho solo miraron con una gota en la cien en lo que el de rastas estaba normal.-

K: ¿por fin te dignaste a venir?

Fu: solo le pedí la condición de comandar el ejercito, quizás para ser el mejor si no te molesta.

-Dijo con una confiada sonrisa, a lo que el de rastas solo rodó los ojos debajo de sus googles-

K: si tu lo dices... Ya veremos que pasa.

Fu: no tienes que sentir envidia~ puede que te envite alguna vez.

K: lo pensaré.

-Los otros dos se acortaron de hombros siguiendo al mencionado adentro del templo que restaurarían, el otro siguió con el ejército ubicándolos en sus lugares que ocuparan en el páramo hasta entonces poder dar a conocer las posibles nuevas reglas de los cuales solo costaba esperar a los dos principales por dar a conocer.-