Alrededor del mundo había intriga entre los gobiernos del mundo, el caos se estaba esparciendo y pronto se llegaba a un estado donde los gobiernos eran incapaces de mantener unido a su pais, estaban alejándose mucho de su zona de seguridad y la paranoia se apodero de las mentes de muchos lideres.

Un pais culpaba a otro de amenazarlo con armamento nuclear, las mismas organizaciones como la SCP y la COG estaban rodeados de enemigos, ahora no solamente eran organizaciones como la Luna Roja, la Insurgencia del Caos y la Mano de la Serpiente aumentaron mucho sus actividades alrededor del globo y la Iniciativa de las Tres Lunas comenzaron a hacer movimientos peligrosos.

Hasta ahora Purple había guardado silencio y les dijo a sus socios que el mundo estaba hundiéndose en la anarquía porque un ser peor que el Rey Escarlata y el Devorador de Mundos, estaba tratando de no nombrar a Zero, conocía a la humanidad y por mas inteligentes que fueran estaba seguro de que si sabian de la existencia de su jefe entonces podrían hacer algo tan estúpido que volvería su dimensión un infierno inimaginable.

Ahora mismo estaba activando la siguiente fase del protocolo purpura, los gobiernos ya no servían en muchos casos, ahora mismo tenia reportes de que todas las potencias nucleares del mundo estaban preparando misiles para destruir a sus enemigos antes de que pudieran ser atacados en momentos de debilidad.

Cerro los ojos y pronto apareció ante sus ojos la imagen de todos sus asesinos infiltrados en los gobiernos globales, los Templarios heredaron su inmenso poder político y ahora los asesinos podían eliminar las amenazas para el mundo en general.

Ahora mismo se enfoco en un avión presidencial donde se escuchaban los gritos de los agentes al tratar de detener el avance de diferentes infectados en el interior de la aeronave, en la oficina principal se veía a los guardias vigilando la entrada mientras el secretario de seguridad le suplicaba al presidente.

Secretario: señor, tiene que dar la orden, los enemigos de nuestro pais están por comenzar la guerra y lanzar un ataque total —El hombre tocio sangre y su piel se estaba tornando gris, levanto la mano y se alejo del hombre— por el amor al creador, por favor de la orden

El presidente vio como el hombre al final pereció como fruto de una mordida, el presidente observo un maletín donde se encontraban los códigos nucleares, con solo dar la orden entonces podría hacer que los paises enemigos fueran reducidos a polvo radioactivo.

Estaba pensando en ese escenario y tomo el maletín, lo abrió y considero activarlo, coloco la clave y el maletín fue abierto, pero cuando estaba por dar la orden escucho como un ruido sordo golpeaba el piso, todavía temblando observo a un agente del servicio secreto con la mano ensangrentada.

Presidente: ¿Qué esta haciendo agente? —El agente tenia una cuchilla ensangrentada saliendo de la parte inferior de su mano y despues tomo una pistola de su compañero asesinado— ¡Esto es alta traición! ¡Guardias!

Asesino: señor presidente, le informo que su pueblo agradece todos sus años de servicio a la patria, pero iniciar una guerra nuclear es demasiado peligroso y a sido removido de su puesto por la Hermandad Templaría —La puerta se abrió y varios hombres entraron, el hombre se alegro, pensando que su vida se había salvado—

Pero los recién llegados tomaron pistolas y le apuntaron, oprimieron los gatillos varias veces dejando que una lluvia de balas cegara la vida del dirigente, cuando termino el acto los hombres comenzaron el descenso repentino de la aeronave para estrellarla en alguna parte del océano pacifico.

Cuando Purple abrió los ojos tacho otro nombre de un pais, con ese ya eran todos los lideres mundiales que representaban una amenaza para el mundo, había eliminado cadenas de mando completas y también tomo la precaución de convertir todo el uranio enriquecido del mundo en cosas inofensivas.

Observo una fotografía en su escritorio donde se veía a él con su esposa y despues observo el techo, en realidad hizo lo mejor que podría haber hecho, redujo todo lo posible las posibilidades de bajas humanas y si hacia lo correcto en unas cuantas décadas todo se habría reparado para que comenzara una nueva era de la historia humana.

Purple: señor Smith, es extraño verlo en mi oficina, la gente de su cargo normalmente prefiere evitarme porque temen que influya en sus mentes, como si no pudiera hacerlo desde distancia —El hombre solamente se rio un poco mientras se sentaba en una silla y Purple le serbia un trago—

Sr Smith: solamente me quedo de paso y pensé en saludar a un viejo amigo, el mundo esta en el infierno y para nosotros es un día mas de oficina —El hombre de sombrero de copa se rio un poco por el comentario— a veces los hijos parecen una maldición, años atrás nada me perturbaba, ahora me preocupa Alexandra y como se encontrara

Purple: lo son, esos muchachos yo no queria ni verlos, pero ahora estoy haciendo lo posible para evitar que se active una peor anomalía que tengan que enfrentar —Observo al hombre frente a él y despues suspiro cansado— tu hija estará bien, si el hombre de navidad no la mato dudo que un montón de no muertos lo logre

Sr Smith: como te envidio, todo poderoso y pudiendo vivir prácticamente por siempre —Se levantó de su asiento para ir a la salidas, tenía que ir a una reunión con la SCP para poder controlar problemas de una gran prioridad—

Purple: yo envidio tu mortalidad hasta cierto punto, ahora estoy comandado por reglas que yo inventé y que no rompo por los vestigios de humanidad que tengo —Se rió un poco de manera sarcástica y caminó con el hombre para dirigirse a otra reunión—

A medida que pasaban los días era evidente la perdida de la civilización humana como tal, cada día las anomalías aparecían, el control humano de la superficie estaba desapareciendo y la capacidad de las organizaciones para mantener el orden global pronto se vería reducido a unas cuántas franjas de territorio.

En la actualidad los gobiernos estaban logrando evacuar de manera exitosa a las personas a zonas delimitadas por sus fuerzas militares, pero debido a la aparición de los infectados mutantes y las anomalías que aparecían esas zonas seguras seguramente caerían en cuestión de tiempo a menos que pudieran poner un alto definitivo.

Lugar desconocido 

Se podía ver una zona militar japonesa destruida por completo, los cuerpos estaban destrozados por armas de filo y en algunos casos había agujeros de bala, se apreciaban varios agujeros de bala en los vehículos  blindados y como algunos vehículos fueron partidos por la mitad.

Se podía ver como un joven soldado se escondía tras unos escombros, temblaba de miedo al escuchar como el metal se movía a su alrededor y como la carne era cortada por diferentes criaturas que habían ido a ese lugar únicamente para matarlos a todos.

El soldado pronto escucho que estaban alejándose de la zona y de inmediato corrió para salvar su vida, su arma se había quedado sin balas por lo que solamente tenia una pistola como forma de defensa, pero mientras corría una mano lo tomo por el cuello y lo levanto por los aires.

La criatura era un gigante que media al menos dos metros y medio, quizás mas, vestía una armadura samurái del periodo feudal, en su mano sostenía una katana bañada en sangre y era casi imposible observarle la cara por el sombrero que tenia sobre la cabeza.

Soldado. ¡Muere! —Le disparo a la cabeza varias veces con su pistola hasta que se quedo sin balas, pero la criatura no se molesto en defenderse— quiero ir a casa

Sus ultimas palabras se las llevo el aire y en ese momento su cabeza rodo por el piso, la criatura gigante observo a su alrededor y sus dos compañeros se acercaron a donde se encontraba, en total eran tres samuráis demoniacos, que habían sido liberados de su sello y estaban ansiosos por luchar. 

En total eran tres samuráis demoniacos los que estaban destruyendo la ciudad, el primero era el líder, portando con orgullo su katana, su cabeza estaba cubierta por un gran sombrero de paja de forma cónica con una visera que le permitía ver el exterior, su aparentemente vieja armadura estaba cubierta de sangre y marcas de haber sido alcanzado por disparos y explosiones,

El segundo era un samurái un poco mas alto, con una gran Naginata de hierro que estaba posada sobre su hombro, su principal característica era su mascara de Tengu, con un casco que cubría por completo su cabeza y con la decoración de dos cuernos sobre ella, los cuales recordaban un poco a los cuernos de los insectos.

Al final estaba el samurái mas peculiar del grupo, su casco tenia cuernos como de toro que se levantaban a ambos lados de su casco, su mascara era la cara de un demonio, pero lo mas particular era su arma, la cual era un cañón giratorio que tenia la capacidad de atravesar incluso grandes blindajes, al igual que las armas de sus compañeros.

Las criaturas continuaron caminando por la ciudad, los muertos vivientes los ignoraban, por lo que pasaban a su lado sin hacer nada mas que perseguir a los humanos, estaban matando todo a su paso y no les importaba el oponente, querian luchar y cualquiera era un buen objetivo en ese día.

Durante su camino observaron varios vehículos avanzando por los edificios, corrieron contra el convoy y el monstruo de la Naginata tacleo un camión para volcarlo, el líder ataco un vehículo aparentemente blindado y lo corto a la mitad, matando despues a varios de sus atacantes.

???: ¡Que los vehículos con los civiles escapen a la mansión! —El hombre se quedo atrás y disparo un rifle contra las criaturas, pero las balas rebotaban en sus armaduras— ¡Monstruos hijos de...!

Sus palabras fueron silenciadas por la ráfaga de disparos de la Minigun que abrió fuego contra todos, el camión volcado fue su principal objetivo y debido a que eran balas incendiarias el vehículo se comenzó a quemar, pero de todas maneras el gigante de la Naginata seguía perforándolo con su arma.

Solamente tres camionetas y un camión lograron escapar, dejando detrás cuatro camionetas y dos camiones que fueron alcanzados por las balas, las criaturas olfatearon el aire y lograron ver exactamente el rastro que sus presas habían dejado, corrieron tras los vehículos a una velocidad asombrosa para su tamaño.

Los infectados comenzaron a acercarse al lugar y a bloquear el paso, la sangre estaba siendo derramada y era imposible impedir que se acercaran, planeaban terminar el trabajo, pero en ese momento el líder impidió que siguieran con su ataque al convoy, teniendo una vision perfecta de su próximo objetivo

En ese momento aplico un concepto bastante bueno de la casería, dejo a un herido escapar con pánico en el corazón, para que lo guiaran directamente a su fortaleza, pero eran inteligentes, sabian que era necesario ser mas inteligentes que sus enemigos, por lo que se prepararían para atacar la mansión sobre la colina.

Mansión Takagi

En la mansión de la familia Takagi la situación era muy tensa para la población en general, los problemas con Proxy seguían siendo constantes y el texano estaba comenzando a perder la poca paciencia que tenía,  debido a varios problemas que tenía con los civiles en la zona segura.

Desde que Marcos se fue Pablo tomo el lugar para dirigir al grupo en esa situación era cada vez mas intolerable, las personas en muchos aspectos los miraban mal y mas de una ocasión tuvo que impedir que Proxy siguiera una pelea a golpes y la terminara a tiros.

Estaba considerando seriamente el dejarle ese trabajo a Gabriel, pero su hermano mayor le dejo en claro que si era el líder mandaría al hospital a cualquiera que se metiera con ellos, lo cual era su manera de protestar por dejarle la horrible tarea de cuidar de todo el equipo en ese terreno hostil.

Pero nos vamos a enfocar en una oficina donde se encontraba la cabeza de la familia Takagi, sentado en cuclillas con Pablo frente a él, el asesino no se inmuto y mantuvo su mente fría, con una mirada indiferente ante los ojos depredadores de aquel imponente que tenia de frente.

El patriarca de la familia analizo al muchacho frente a él, buscando defectos físicos o de comportamiento, pero no encontró nada llamativo, sus manos no temblaba, su mirada no tenia miedo y llego a incomodarlo la manera que lo veía, como si no le importara para nada su autoridad.

Sōichirō: recientemente supe que tu eres novio de mi hija, solamente te vi una vez y realmente no estoy seguro de que esperar de ti, dado que no eres precisamente lo que esperaba que trajera mi hija a casa —La mandíbula del mas joven se movió un poco y despues apareció una sonrisa socarrona, como si le divirtiera escuchar esa afirmación y se regocijara de eso— me gustaría que me hablaras de ti

Pablo: soy de la hermosa isla esmeralda, para ser especifico de Dublín, fui adoptado por Purple Custode y tome su apellido, en la academia tengo notas mas que aceptables y en cuestiones físicas tengo capacidades muy buenas, aunque no es eso lo que usted busca —Su sonrisa se engrandeció, mostrando una expresión casi angelical— usted no esta conforme con que yo sea extranjero y no sea japonés

El hombre se crispo in poco, era cierto, no estaba para nada feliz de que su hija hubiera elegido a ese sujeto por encima de otros pretendientes, había visto a muchos muchachos que le agradaban mas que Pablo, seguían tradiciones, eran disciplinados y respetuosos, cosas que no apreciaba en ese irlandés.

Pablo: usted estaba interesado mas en que Saya tuviera un novio japonés tradicionalista, aburrido y que tuvieran su concepto de masculinidad y honor —Levanto sus dedos para hacer comillas y despues su rostro se torno serio, sus ojos calmados y fríos tomaron una mirada de un asesino— 

Sōichirō: tienes razón, quiero que mi hija este con alguien que la proteja, ahora en estos tiempos de crisis eso es mas importante, observe como tu grupo piensa de manera individual en lugar de priorizar la supervivencia del grupo —Se levanto de donde estaba y fue al escritorio, de donde tomo una pistola Glock que había recibido de regalo en el pasado— escuche que eran un gran tirador, me gustaría una demostración con esos blancos

El muchacho tomo la pistola y observo los blancos a través de una ventana, estaban a una distancia de treinta metros, sonrió de lado y cargo la primera bala en la recamara, disparo tres veces contra los blancos y derribo a todos de disparos a la cabeza, devolvió el arma y despues volvió a sentarse.

Pablo: dado que no nos llevaremos bien nunca, diré la verdad, soy un asesino bien entrenado, elimino pandillas antes de desayudar y en las noches elimino cultos —Bajo el protocolo purpura estaba permitido hablar sobre el mundo real al que se enfrentaban en la realidad— e visto cosas que le pondrían los cabellos de punta y las mate, protegí a Saya cuando usted solamente salvo a sus seguidores y a ella la dio por muerta

Toco una fibra sensible y el hombre se levanto para tomar su arma, pero Pablo se levanto igual para encararlo, no tenía la intención de dejar que nadie le pasará por encima y menos alguien tan arrogante como ese sujeto, quería a Saya, pero no dejaría que ese hombre lo fastidiara.

Estaba por aumentar el furor de la discusión cuando un hombre llegó corriendo dónde se encontraba su líder, Sōichirō estaba por reclamar la interrupción cuándo recibió la noticia de una gran cantidad de cajas que recibieron por parte de un ataque de monstruos, por lo que corrió para ver qué había sucedido.

Pablo: genial, más buenas noticias —Salio del lugar caminando en dirección a la salida para poder saber que se suponía que había pasado—

En la entrada a la zona de la mansión Gabriel estaba matando a los infectados que estaban en el interior de un camión, había impedido que pudieran entrar y al parecer Proxy también había escuchado los disparos por lo que fue a ayudar.

Gabriel: estos idiotas atrajeron un grupo demasiado grande —Obdervo como se acercaba un gran grupo de al menos cincuenta infectados—

Pablo: no disparen, van a atraer todavía más —El muchacho tomo su cuchillo táctico y corrió con su hermano mayor para poder eliminar a los infectados— Proxy elimina a los que se logren escapar

El vaquero solamente asintio y se quedó en su posición para impedir que se acercaran, los guardias vieron impresionados como los dos hermanos eliminaban a los infectados con gran facilidad, el hacha atravesaba el hueso como si fuera mantequilla y la espada atravesaba la carne como si fuera papel mojado.

Cuando Sōichirō llegó al lugar fue solamente unos minutos más tarde que la llegada de Pablo al lugar, pero cuando llegó se dió cuenta que realmente no estaba frente a un humano normal, esquivaba los ataques con facilidad, se movía más rápido que cualquier persona y su misma fuerza era suficiente para levantar a un infectado como si fuera un muñeco de trapo.

Solamente faltaban diez infectados, pero fueron arrollados por un gran camión de hierro, los dos apuntaron sus armas esperando a que atacarán, pero cuando la puerta se abrió vieron el logo de su equipo, la insignia de Black Flag, al bajar vieron a Alexandra y a Marcos estirando sus piernas tras conducir por varias horas desde las montañas.

Marcos: ¡Papá está en casa! —Grito a todo pulmón mientras pisaba una cabeza para que el cuerpo dejara de moverse— chicos, hay que empacar nuestras cosas e irnos a...

Observó a su alrededor y pudo ver los impactos de bala en las camionetas y el camión, no sabía que decir acerca de ese tema, pero entendió se algo no estaba bien, necesitaban irse antes de terminar de nuevo en el fuego cruzado de una batalla.

Alexandra: chicos, creo que tenemos algunas anomalías entre manos —Ella reconocía cuando algo era producido por humanos y cuando algo era una acción de anomalías, de acercó a uno de los heridos y lo tomo de la camisa para que le viera a la cars— dime qué viste

???: Eran monstruos ¡Mataron a la mitad de nuestro grupo y no pudimos hacer nada! —Ella lo soltó y caminó de regreso con el equipo Black Flag, quienes estaban entrando al camión para hacer cambios en su equipamiento—

El jefe de la familia observó como ellos habían llegado en ese camión, escuchando que hablaban de monstruos y criaturas, no quería hablar ni admitir sus pensamientos, pero necesitaría ayuda para saber a qué se estaban enfrentando y como combatirlo.