Shizuka estaba esperando, veía el reloj y las agujas estaban por marcar la hora acordada, se había arreglado con un vestido azul bastante modesto, incluso para su gusto, llevaba un suéter blanco delgado, el calor en la noche era mucho menor al del día y se peino de la manera mas atractiva que imagino, con dos mechones a lo lado de la cabeza y trenzo su cabello, acomodándolo para que quedara acomodado de manera adecuada.

el vestido llegaba unos cuantos centímetros arriba de la rodilla, llevaba un pequeño bolso negro y solo quedaba esperar, reviso esa delgada capa de maquillaje en su rostro, la sombra sobre sus parpados y el rímel en sus pestañas.

Sus zapatos eran unos tacones azules no tan altos, al fin se escucho el sonido del timbre y bajo para ver a János, tras algunos minutos bajando se encontro con János, llevaba una chaqueta negra, una camisa azul y corbata oscura, con un pantalon negro de tono mas claro, sus zapatos eran formales, con un logo dorado que no entendia que era, eran legras de occidente, además de estar peinado con gel y su barba estaba recortada. 

"Wow, te ves hermosa" —Ella cerro la reja tras de si, viendo a János , quien saco una caja negra de su bolsillo y le mostro un broche de una libélula azul, con un marco dorado— "Te traje esto" 

"Tu también te ves muy guapo, te recortaste la barba, que galán ¿Fue solo para mi o temias ser como Santa?" —Se inclino un poco, ya que con los tacones de 6 centímetros ella media 1.82, mientras él se quedaba con su 1.68— ¿Me puedes poner el broche?

"Fueron las dos cosas, se veia descuidada ya y despues de limpiar un salon... Mejor te cuento despues" —Se acerco a ella, colocando el broche en su sueter, mientras él le daba un beso corto en los labios— "¿Esta lista?"

La tomo del brazo y camino a su automóvil, le abrió la puerta del automóvil y la ayudo a entrar a su lugar, entro al asiento del conductor y manejo por las calles de la ciudad, ella le contaba historias del pasado, algunas eran divertidas y otras solo eran anécdotas entretenidas, cosa que él también imito. 

Avanzaron por una hora hasta que llegaron a un gran restaurante, se estaciono cerca y bajo con ella del auto, el lugar era grande y emitía un aire de elegancia digno de un lugar de etiqueta.

Al llegar a la puerta dio su nombre y uno de los meseros los llevo hasta una mesa en el segundo piso, junto a una ventana, mostrando una bonita vista a un parque cercano.

"¿Como fue tu día?" —Fue el primero en preguntar, mientras el mesero colocaba copas y platos en la mesa, dando una carta a cada uno para que vieran el menú—

"Fue un dia tranquilo, bloque el teléfono, tome una larga ducha y vi varias series que tenia pendientes, aunque dudo que sean interesantes para ti, no pareces del tipo que ve romance" —No tan lejos de la realidad, pero decidió que ella termine de hablar antes de intervenir en la conversación— "No creí que el lugar fuera tan bonito"

"No, no soy mucho de romance, aunque no me impide disfrutar de una gran historia romántica, después de todo, el amor motiva muchas cosas y grandes historias se mueven con eso" —Tomo un palito de pan y lo comenzó a mordisquear, algo que ella también hizo— "Lo encontré hace tiempo, pensaba en venir si tenia visitas que necesitaran alguna clase de elegancia o formalidad"

"No debiste molestarte, no se, una cena de hamburguesas, sushi o algo asi, no soy exigente" —Se sintio un poco avergonzada por esta situacion, pero eso le gustaba, se sentia especial— ¿Y como estuvo tu dia?

"Fue un día tranquilo, casi terminan las clases antes de las vacaciones, nadie quiere hacer nada, pero también estoy iniciando un grupo de Orientación, lo disfrace de Club y aun nadie sospecha, quiero ayudar a jóvenes con potencial, tanto de alcanzar grandes metas asi como de posibilidad de querer cambiar" —Eso la sorprendió mucho, no esperaba que él quisiera pasar tanto tiempo en algo asi, aunque también hablaba de su carácter—"Por desgracia solo aceptaron 2 de cinco, de seguro después atrapo a alguien mas, Kohta va bien, pero Yuki es a veces problemática, tendrá que trabajar duro o terminara muy mal" 

Ella de verdad esperaba que no estuviera hablando de la misma Yuki Miku que ella pensaba, pero no dijo nada mas, solo dejo que pasara, no echaría a perder ese momento, así que tomo la carta y comenzó a ver todo, notando que esta no tenia precios.

"Pedí que cubrieran los precios, no te preocupes, todo corre por mi cuenta" —Miro diferentes partes del menú y parecía animarse cada vez que veía cierta sección, hizo una seña y llego un mesero— "¿Ya quieres pedir?" 

"Me gustaría Sushi, pero también suena bien el ramen especial que preparan aquí" —No quería ser abusiva, pero no había comido ese día por arreglarse asi que ahora estaba hambrienta— 

"Entonces pide los dos, yo pediré el popurrí de sushi, algunos tipos no los pruebo desde que estaba en Nueva York, también quiero una copa de este vino francés, es delicioso, me alegra que lo tengan aquí, y si gustas, Shizuka si quieres esta bien" —Ella asintió y el mesero se fue con el pedido escrito en una tableta electrónica, mientras ellos continuaban con su platica— 

Las cosas continuaron con un ritmo agradable, hablando de cosas como sus pasados, Shizuka era bastante abierta con sus ideas, y le hablaba acerca de su infancia y juventud temprana, hasta que llego a la Universidad y hablaban de una etapa con mucha actividad. 

"Y entonces yo estaba viendo como el pobre chico estaba en pánico, con una vena sangrando y el enfermero sin saber que hacer" —Una historia sangrienta para liberar la tención, y en lugar de asquearlo lo hizo reír— "Por eso es importante que la gente supere su miedo a la sangre, solo quedo un poco mareado el chico, pero mi compañero se desmayo"

"Jajaja, no puedo creer que pasara eso, yo esperaba que en esa carrera todos ya tuvieran la mentalidad para superar el miedo a la sangre, aunque no los culpo, una compañera de trabajo debía reparar una pintura, se especializaba en eso, creo que era un retrato de la mamá de alguien, no sabemos como, pero se disolvió la cara, ella tuvo un ataque nervioso y... mira esto" —Tomo su teléfono y le mostro una imagen de una carita de palitos y una mano con un pulgar arriba— "La fui a buscar, por suerte el daño, aunque inmenso, lo pudo reparar antes de que se dieran cuenta, pero la suspendieron un mes y la supervisaron por dos" 

"¿Tu nunca te equivocaste o algo así? Yo lo hice algunas veces, como ese termómetro, deberían ser mas cuidadosos con la etiquetas de la caja" —János casi grita entre risas, imaginando lo que dijo ella, no quería imaginar al paciente que recibió la noticia— 

Pero entonces pensó en algún error grave que pudiera ser comparable, además de errores de traducciones no resulto en nada malo a largo plazo, pero entonces recordó algo, un desafortunado evento que resulto afortunado.

"¿Recuerdas esa foto en la revista? Tiene una historia graciosa de fondo" —Eso hizo que ella asintiera, así que decidió contarle la historia, ahorrando algunos detalles— "Yo estaba en esta excavación en el desierto de Sudan, revisábamos unas pirámides, pero entonces yo estaba sin dormir, llevaba tres dias trabajando, cuando me recargue en una pared con letras y la rompí, destruí un texto milenario en un segundo" 

Al escuchar eso Shizuka no supo que decir, no podía creer que eso hubiera pasado, le dio un pequeño trago a su copa de vino y escucho lo que dijo, la comida había llegado y ahora estaba comiendo otra pieza de Sushi.

"Una momia me cayo encima, así que ahora allí estaba yo, cubierto por una momia, polvo y algunos ladrillos ¡Pero! Ahora viene la parte interesante, resulta que no habían visto esa cámara mortuoria, descubrí a un antiguo rey regional antes de que fueran conquistados por los egipcios, por eso los errores no siempre son malos" —Aunque salto la parte donde estaba gritando en pánico, mientras una momia se quedaba sobre su cara y se orinaba del miedo, eso mejor que se olvide— 

"Jejeje, no puedo negarlo, no lo se ¿Qué te parece si hablamos de lo que nos gusta?" —Eso parecía normal, le esperaba que no pareciera aburrido ese tema de conversación— "¿Cual es tu color favorito? A mi me gusta mucho el azul, es muy calmado y relajante solo verlo, aunque el rosa y negro son una combinación que me encanta"

"Depende, me gusta mucho el color rojo, combina bien con el negro y puede ser formal, pero me gusta el color marrón, es neutral y apropiado para muchas ocasiones" —Bueno, aquí iba una diferencia, el prefería los colores funcionales en lugar de gusto, al menos en su mayoría— "¿Cual es tu tipo de ropa favorita? Si estoy fuera me gusta ropa como esta, zapatos comodos pero formales, aunque en la comodidad de mi casa me gustan las camisetas y pantalones de tela suave"

"Eso es difícil de decidir, quizás podria ser mi falda larga y una blusa cómoda, me mantiene fresca y me veo bien, pero si estoy en casa podria ser un short corto y una camiseta holgada, estar cómoda" —Termino su comida y termino su segunda copa de vino, viéndose un poco roja, mientras János aun permanecía sin cambios, ya que no se ponía rojo por la bebida—

Es entonces cuando llego el postre, ella había pedido una rebanada de pastel selva negra, mientras que él pidió una porción de Carlota de Limón, esperaron a que se fuera el mesero y continuaron hablando un poco mas.

La platica era amena y a veces se reían, él se sentía cada vez mas fascinado a medida que la conocía, la figura mental que tenia de ella era la de una mujer que desde joven a batallado de diferentes maneras, desde la perdida de su familia hasta el acoso social, pero que continuaba adelante, sonriendo y siendo una persona alegre que no se dejaba amargar. 

Era decidida y no se rendija, quizás un poco despistada casi todo el tiempo, pero cuando pasaba algo importante era capas de estar a la altura de los problemas para superarlos, era una persona excepcional, y sentía que quería conocer todavía mas de ella. 

En cambio, ella estaba enamorada de esa apariencia, era un hombre fuerte, culto, con la voluntad de hacer lo necesario para los fines, pero no eran malos, solo lo había visto ayudar a la gente a su alrededor, tratando de que quienes parecían necesitarlo pudieran contar con él.

Un hombre que la veía a los ojos, que lograba ver en ella mas allá de su apariencia, que le mostraba cariño y educación, le gustaba mucho también como era físicamente, podria ser mas alta que él, pero eso le gustaba, cuando lo abrazo sintió que ocultaba mas de lo que aparentaba debajo de ese saco y chalecos, sus lentes lo hacían ver listo y aunque nunca fue fanática de las barbas le gustaba como se veía János.

Comieron el postre tras algunos minutos y él pidió la cuenta, el mesero llego con la terminal y coloco su tarjeta, tras teclear un numero se levanto y la tomo del brazo para caminar, en Japón no era para nada común ver a gente así, incluso tomarse de la mano era visto como algo poco recatado, pero a ella le gustaba esa muestra de cariño de János, quizás por ignorar ese hecho social o porque no le importaba. 

Fueron al automóvil y el manejo durante algunos minutos en dirección al centro de la ciudad, vio algunos anuncios en la calle, también estuvo interesada en saber que había preparado, dijo que había una sorpresa, pero quería saber que era.

Fue hasta una zona en el parque con una fuente danzante, él miro su reloj por algunos minutos y entonces comenzó a escucharse una canción, ella la reconoció, era su canción favorita, una canción Pop que escuchaba cuando estaban solos en la enfermería, y con la música el agua salía a ese ritmo.

"Tuve que ponerme de acuerdo con un encargado, pedir permiso y otras cosas, pero valió la pena" —Ella sonrió cuando lo dijo y se acerco abrazándolo con fuerza, algo que él contesto de la misma manera— "Shizuka ¿Te gustaría ser mi novia?" 

"¿Si me gustaría? Me encantaría que fueras mi novio" —Sin importarle la mirada de la gente beso sus labios un segundo, para después dedicarse a ver la fuente hasta que termino la canción, y el agua regreso a la normalidad— 

Se quedaron por el parque un rato mas, caminando y platicando de temas triviales, como las series que había visto Shizuka o el aparente amor de János por el teatro, tanto clásico como moderno, pensando ya en que podrían ir al cine en el futuro.

La velada fue todo un éxito, y al fin estaban regresando a casa de Shizuka, János se estaciono frente al edificio en un espacio disponible, la ayudo a bajar y camino con ella hasta la reja. 

La enfermera busco en su bolso y saco sus llaves, abrió las llaves y le dio un ultimo beso en la mejilla a su novio, aun era nueva sintiendo eso, se sentía raro, pero no raro malo, era algo que le gustaba sentir, János como un caballero se despidió y estaba por retirarse, cuando ella lo tomo del brazo.

"¿Te gustaría pasar a tomar un café?" —Él se detuvo para ver a la enfermera, aun estaba un poco roja, pero reconoció que no era por el vino, ese color se había ido hace tiempo, pero entendió lo que decía y no la hizo repetirlo—

"Me encantaría" —Entro con ella y subieron las escaleras, Shizuka quería llegar y quitarse esos tacones que estaban ya matándola, aunque a la vez sentía su corazón latir muy rápido—

Entraron al departamento y ella cerro tras de si, se quito su delgado suéter blanco y lo dejo en un perchero, mientras él se quitaba su saco y lo dejaba al lado del suéter de ella, se sentó en el sofá y ella paso frente a él.

"Voy a refrescarme, ya regreso" —Entro al baño y cerro tras de si, mirando su reflejo en el espejo y se hablo a si misma en voz baja— "Es ahora, tranquila, ya a pasado antes y él es diferente, será un gran final"

Sonrió y tras usar un poco de perfume salió, János estaba sentado viendo una pequeña figura de un gato de la suerte, la volteo a ver y sonrió, ella se acerco con paso lento, se sentó junto a él en el sofá y le dio la espalda, dejando a la vista una pequeña bragueta.

"¿Me podrías ayudar? No alcanzo muy bien" —Con dos dedos bajo ese pequeño cierre, revelando una espalda suave y lisa, además de un brasier azul de encaje, se acerco a ella por la espalda y beso lentamente su cuello, hasta su espalda— "Jan Jan, eso se siente muy bien"

"Y aun no has sentido nada" —Susurro mientras quitaba las mangas del vestido y la ayudaba a quitarlo, hasta que estaba libre la parte superior, y después lo quito para dejarlo a un lado del sofá— "Eres muy, muy hermosa" 

Ella llevaba puesto un cachetero de tela azul, y un bracear de encaje del mismo color que cubría casi toda su copa, dejando ver esos pechos que tanto llamaba la atención a la gente, pero ella entonces tomo la iniciativa, tomando los botones de su camisa y se acerco a el abriendo la tela y rebelando una camisa interior de tirantes.

"No es justo que solo tu puedas tener una hermosa vista" —Le ayudo a quitar la camisa y después la camiseta, dejándolas tiradas por allí, sonriendo ante lo que veía— "No esperaba esto, pero tienes muchas sorpresas esta noche" 

Frente a ella estaba el torso desnudo de János, un cuerpo bien entrenado, con pectorales y abdominales marcados lo suficiente por el entrenamiento, ella noto algunas marcas, parecían cicatrices, zonas un poco mas blancas en la piel, pero también noto los tatuajes que tenia en el brazo izquierdo, dándole una apariencia mas ruda de lo que esperaba.

Se acerco y lo beso, comenzando por sus labios, siguiendo por su mandibula y despues bajo por su mandibula, su cuello se esforzo en hacer que se escucharan mas, dejando un rastro humedo por el cuerpo de su novio, hasta que llego a su estomago bajo.

Esa noche estaba de humor para tomar el control, y veía a János mas que dispuesto a dejarla divertirse un poco antes del gran evento, desabrocho su cinturón y al fin bajo los pantalones, encontrándose un bóxer de tela blanca, el cual mostraba ya un bulto considerable. 

"¿Te gusta la atención, Jan Jan?" —Él se sentó en el sofá, separando un poco sus piernas, mientras ella quitaba el bóxer y quedaba sorprendida de lo que veía, su mano tomo con cuidado el pene de su novio y beso el costado— "No me lo imaginaba así"

"¿Que pasa, tiene algo de malo?" —Tenia experiencia con mujeres, pero sabia que cada pareja podria pensar diferente y las impresiones y necesidades de cada persona eran distintos— 

Era un pene recto, alargado hasta poco mas de 22 centímetros, ella de inmediato se emociono, tenia un abundante vello púbico sobre la base de su pene, un par de testículos de tamaño adecuado, parecían muy suaves y de alguna manera no había vellos allí, ella se acababa de sacar la lotería, tenia que aprovechar al máximo, y sabría como.

"No, solo pensaba que no creo que tengamos problemas en la cama" —Beso otra vez un costado y lo apoyo contra su mejilla, mientras su mano daba suaves caricias para mantenerlo duro, pasando su lengua un par de veces su pene, sintiendo la combinación del sudor y el aroma natural, no a todas les gustaba, pero a ella le encantaba— "¿No preferirías llevar esto a la habitación?"

"Creo que si, será mas cómodo y si algo se ensucia son menos explicaciones" —Se levantaron del sofa y sus pasos se dirigieron a la puerta, al entrar encontró que el Futon ya había sido puesto desde antes en la habitación— "¿Ya habías previsto esto antes?"

"No suelo aceptar en la primera cita o cualquiera, pero pensé hasta donde quería llegar contigo" —Ella se acerco a él, queriendo besarlo, pero recordó que había lamido su pene antes y creyó que la rechazaría, era algo que había pasado antes— "Quizás debería primero lavar mis dientes"

"Ya en el juego quien se fija en esas cosas" —Se acerco y la beso apasionadamente, abriendo su boca y su lengua presionando sus labios, algo que ella acepto y sintió como su lengua envolvía la de ella, tomándola por el trasero, apretando sus nalgas—

Los dos fueron descendiendo hasta quedar recostados en el futón y con la luz apagada, una mano de él se deslizo por su espalda y le desabrocho el brasier, quitando los seguros, aunque tuvo algunos problemas con el ultimo, liberando al fin ese enorme par de pechos, escuchando un suspiro de satisfacción de ella.

De nuevo lo beso, y las manos de la mujer bajaron hasta llegar a su pene, moviéndolas lentamente, sintiendo como palpitaba, János no se quedo atrás y bajo besos hasta su pecho, donde con una mano amasaba su pecho derecho con cuidado y con su boca chupaba su pezón, haciéndola sentir como sus pezones se endurecían hasta quedar completamente erectos.

Al fin se separo un poco y bajo lentamente hasta quedar frente a frente con ese hermoso pene, de piel apiñonada y cabeza rosada, beso desde la base a la cabeza, dando lenguetadas para dejarlo muy humedo, escuchando como jadeaba de gusto, por lo que ella bajo su mano y comenzo a acariciarse a si misma.

Chupo la cabeza con cuidado, sorbiendo y haciendo que se escuchara a proposito, sabia lo que a muchos los exitaba eso, asi que continuo lamiendo por casi diez minutos, y eso la sorprendio ya que mucho no llegaban a tanto cuando se lo proponia, pero esperaria un poco mas.

"Eres muy buena en esto" —Bajo la mirada y vio como ella misma se acariciaba con una mano, algo que le hizo tener una idea— "¿Por que no me dejas ayudarte con eso? Parece que necesitas una mano"

"¿Crees que puedes manejar todo esto?" —Se levanto del suelo y sacudió su trasero frente a él bajando lentamente su cachetero, se inclino sin doblar sus rodillas, dejándolos caer al suelo y con un pie los lanzo a un lado— "No me quise afeitar, me suele picar un poco, pero la siguiente quizás podria"

"¿Afeitar? te vez perfecta así" —Con la escasa luz que entraba por una fisura en la cortina pudo ver por completo esa entrada al templo que era el interior de Shizuka— "Toda tu eres una obra de arte"

"Deja de mirarme el coño de esa manera, me estas avergonzando un poco" —No lo hacia, pero quería  ver que tan bueno era en la charla sucia su nuevo novio, ella mientras tanto le dio una lamida mas, comenzando a engullir solo la punta del pene— "Me encanta el sabor de tu polla" 

De inmediato se sumergió en la vagina de Shizuka, sus labios mayores eran grandes, carnosos y suaves, daban ganas de mordisquear un poco, eran rosados y la piel parecía suave, cuidada con esmero, tenia una sana capa de vello púbico rubio, y para coronarlo había un clítoris que ahora sobresalía y el cual lamio con esmero.

"¿Como es que eres tan dulce? Tu coño debe ser el mas delicioso que allá comido" —Ella se rio, moviendo su cabeza de arriba a abajo, dejando que el glande tocara la parte inferior de su mejilla, tratando de no gemir por la manera en que la estaba lamiendo—

Ambos se complementaban muy bien, tenían practica suficiente y estaban en ese momento tratando de mostrar todas sus habilidades, Shizuka sentía como su vagina lubricaba ante la excitación, sentía como usaba su lengua y como un dedo estimulaba su clítoris, logrando que se mojara mucho, algo que János noto. 

Ella siempre se caracterizo porque cuando se excitaba su coño lubricaba demasiado, se volvía un desastre húmedo, a algunos les gustaba y a otros no, pero le agradaba que su novio parecía disfrutarlo, ya que no dejaba de lamer y dar pequeñas mordidas juguetonas, logrando que gimiera fuerte y soltara su presa.

"¡Ahhh! Es-Espera un momento, estas tocando un lugara muy sensible" —Pero parecia que estaba alentándolo, ya que aumento su ritmo, introduciendo uno de sus dedos y moviéndolo en su interior, buscando ese lugar sensible—"¡Me estoy corriendo!"

Y con eso sintió como todo su cuerpo se estremecía, sintió su interior contraerse y por un momento sintió que sus ojos iban a la parte trasera de su cabeza, se quedo recostada en el Futon, mientras él se sentaba y se acerco a ella, acariciando su cabeza, mientras ella se recuperaba de ese orgasmo.

Espero un minuto o dos y al fin se incorporo, sonriendo al muchacho y lanzándose a sus labios, mientras lo dejaba debajo de ella y con una de sus manos lo masturbaba, era un movimiento rápido, escuchaba como jadeaba y dejaba las manos atrás de él para apoyarse, mientras ella aumentaba el ritmo con el que lo masturbaba. 

Vio como él cerro los ojos e hizo la cabeza hacia atrás cuando se corrió al fin, solo vio un chorro de semen ser disparado, pero no dejo que nada mas se desperdiciara, se inclino rápido y en un movimiento de flexibilidad engullo hasta la mitad del pene y succiono cada gota, dejándolo en su boca, ella estaba acostumbrada a un sabor salado o amargo, incluso algunos tenían un sabor demasiado amargo, pero esta vez era diferente. 

Sabia dulce, lo saboreo un par de veces y noto que la estaba mirando, sorprendido de que lo hiciera, a lo cual abrió la boca y mostro el liquido blanco, para después cerrar la boca y tragar.

Se acosto sobre a él y lo abrazo, acomodando su cabeza en el espacio entre el hombro y el cuello de János, quien se estaba recuperando apenas de su clímax.

"Wow, esto... fue intenso" —Una gota de sudor caía de su mejilla y beso su mejilla, la abrazo y ella soltó una risita al ver como se comportaba— "No es por ofender, pero no esperaba nada de esto, creo que a sido el mejor oral que me han hecho"

"Y aun no has visto nada, tu también eres muy bueno con esa lengua" —Le beso el hombro y con su mano toco el abdomen de János, sintiendo la firmeza del musculo, se notaba que era mas que solo cargar pesas el motivo de ese cuerpo— "Me alegra que seamos tan compatibles" 

Vio la expresion de él, una combinacion de confusion e incredulidad, eso lo esperaba, movio un poco su pelvis y sintio que el pene de János aun necesitaba un descanso, estaba bien, le daria tiempo para hablar con él.

"¿Esperabas que fuera una chica que no sabe casi nada del sexo? Bueno, en realidad disfruto mucho mi sexualidad, disfruto del sexo, cuando es alguien que me importa" —Él la abrazo y ella movio sus cadera un poco, ya estaba regresando la sangre a donde debia— "¿A ti te gusta? ¿O prefieres que sea algo de vez en cuando?"

"Tambien lo disfruto, pero es mejor cuando esta el elemento emocional, me gusta cuando tengo un lazo con la otra persona, eso es lo que lo hace especial" —Beso sus labios y ambos se sentaron separados, viendo que al fin le habia vuelto la ereccion— 

"Note que te gusta comer frutas, espero que sigas asi, disfruto mucho eso" —János no entendia de que estaba hablando, bueno, siempre disfrutaba dar algunas lecciones— "El semen dice mucho sobre ti, normalmente si es dulce es porque comes muchas frutas, ya sabes, dicen que comer piña ayuda a mejorar el sabor"

"Eso si es sorprendente, Shizuka Marikawa, la maestra de sexología" —Ella se rio por lo bajo, con un ligero rubor en su cara, por el titulo y el alago a su capacidad de conocimiento—  

"Bueno, estudiar medicina ayuda porque asi  puedo disfrutar mucho mas, y escoger una buena pareja, muchos lo niegan, pero aunque si es bueno el lado sentimental, una buena follada ayuda a que puedan tener una relacion mas sana" —Le encantaba hablar sucio en esas situaciones, cuando ya tenia confianza— "¿Que opinas?"

"Creo que tienes razón, al final del día, es como una unión, necesitas muchas cosas, romance, sentimentalismo y cariño" —Se levanto y ya con su pene erecto le sonrió a ella, y presiono la punta de su pene en los labios de la rubia— "Pero como dices, follar como un loco hace que todo se vea con mas luz"

Ella se rio y abrió su boca, dejando que introdujera su pene en su boca, él sabia como moverse, no tocaba su garganta y evitaba sus dientes con facilidad, cerro los ojos y disfruto de la sensación en su boca, mientras se masturbaba con la mano derecha.

János continuo con ese movimiento hasta que salió de su boca, ella respiro fuerte, viendo esa polla brillante por su saliva, unida a su boca aun por un único hilo de saliva, el sabor se quedo en su boca y paso su lengua por sus labios, recogiendo la combinación de saliva y pre eyaculación que había dejado.

"Rayos, no traje condones" —Ella ya había previsto esa situación, así que fue a un  cajón y saco una linea de condones de látex, lo abrió y se acerco a el, tomándolo de la polla y cubriéndola con el objeto— "Quien diría que tengo una novia tan maravillosa"

"Nadie, por eso soy la mejor, siempre te sorprenderé" —Se recostó boca arriba y separo sus piernas, extendió sus brazos, dándole la bienvenida para unirse— "Siempre me gusta que la primera vez sea con el misionero, es un clásico, y me gusta verte a los ojos"

Se se posiciono entre sus piernas, roso su polla sobre el coño de Shizuka, moviéndose un poco, mientras ella disfrutaba esos pequeños toques, hasta que sintió como su cabeza se alineaba en su entrada, entro lento, era tortuoso, sentía como abría su interior y gimió feliz de sentir como lograba llegar a un lugar que pocos llegaban.

Se movió a un ritmo lento al comienzo, ella no era de quedarse solo de piernas abiertas mientras el hombre hacia todo, asi que también movió sus caderas y hacia que su interior se contrajera, sus gemidos se escuchaban en toda la habitación.

Sentina que su trasero se mojaba hasta llegar a la tela de su Futón, pero no le importaba, solo deseaba que ese momento durara lo mas posible, sus pechos se sacudian de un lado a otro, arriba y abajo, el sudor le recorria todo el cuerpo y sentia que su cerebro se sumergia en el extasis.

No sabia cuanto tiempo abría pasado, pero ya se corrió dos veces y se acercaba el momento final, sintió como aumentaba su ritmo, así que ella misma bajo una de sus manos y acaricio su Clítoris con gran velocidad, gimió muy fuerte y llego su momento. 

Tuvo un Squirt, no era tan común y era una sensación que disfrutaba demasiado, su lengua salió de sus labios un momento, su cara se volvió roja y sintió que sus ojos ce cerraban, mojo la pelvis y abdomen de János, quien se movió mas rápido hasta que también se corrió, pero no solo se quedo quieto, también se seguía moviendo con cada chorro.

Hasta que los dos se quedaron quietos, él se acostó a su lado y trato de recuperar el aliento, los dos estaban cubiertos de sudor, se quito el preservativo y tras amarrarlo lo dejo en una papelera que estaba cerca, la abrazo y ella se acomodo contra él, era una situación muy buena.

"Eres fantástico" —Susurro suave mientras sentía sus ojos volverse pesados, cansada después de tal esfuerzo y de todo el día— "No te vayas, quédate conmigo esta noche"

"Eres estupenda" —Le dijo al ver como los ojos de Shizuka se cerraban con cansancio, él solo los cubrió con la manta superior del Futon y cerro los ojos, dejando que ganara el cansancio— "Seguiré aquí al despertar"

Sin mas, los dos se quedaron dormidos, su amor fue sellado en ese momento único, era el inicio de una relacion, seguro habría problemas, abría pruebas y situaciones difíciles, pero los dos tenían la misma idea en mente, mientras estuvieran juntos serian invencibles y no dejarían que el mundo los aplastara o los obligara a cambiar para mal.