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CAPITULO 4 Día de Estudio

Logro dar sus clases con relativa normalidad, aunque sentía que su cuerpo lo golpeaba desde dentro, reclamando no dormir más que tres horas, solo se baño y comió algunas cosas que encontró en el refrigerador, en resumidas cuentas, su cuerpo trabajaba con media hamburguesa y un licuado de chocolate. 

Nadie noto algo fuera de lo común en su comportamiento, había previsto algo así hace ya tiempo, por lo que había diseñado hojas de trabajo para reducir su carga al mínimo y gastar el mayor tiempo posible.

Trato de no bostezar, mientras observaba a su último grupo, el 2A, el grupo en general era muy normal, lo que sobresalía era que tenían ovejas negras muy conflictivas, entre ellos Tsunoda, no sabía si era idiota o solo un holgazán, sin tareas, cero trabajo en clase y en su ultimo examen parcial considero mandarlo a una Clase Especial por lo absurdo de sus respuestas.

Terminó la clase y casi todos se levantaron, no le importo y siguió su camino, sintió que lo miraban, pero supuso que era el cansancio, se daría un baño de agua fría apenas tenga la oportunidad.

Ya era su último hora, así que iba a anotar su salida y se iría al departamento de Shizuka, aunque parecía que ese día sería todo menos simple, el director Ken se metio en su camino, balbuceando cosas como que agradecía su ayuda y el apoyo para el Instituto.

"Este evento será un éxito, profesores de toda la ciudad están peleando por inscribirse a esta capacitación docente, recibí una llamada de un contacto que dice se dará un reconocimiento a la Academia, le agradezco que allá convencido al profesor Parker de asistir, cuando se enteraron de que vendría rogaban venir" —Sonaba a qué le emocionaba sentirse importante y reconocido, aunque no fuera por merito propio— "Muchas gracias profesor, si alguna vez necesita algo no dude en pedirlo"

Se fue del lugar rápido, al parecer llegaba muy prisa, le debía una grande a Peter, su viejo compañero del posgrado al final resultó una eminencia en la Pedagogía, vaya logro, de todos modos solo le quitó una hora u hora y media, venia a Japón para un congreso importante y este evento era un día antes, así que era ganar ganar, por suerte era hasta después de las vacaciones de verano.

Subió las escaleras a la sala de profesores, firmo su salida y bajo las escaleras que llevaban al estacionamiento, otra vez hacía calor y ya había tomado mucho jugo de piña, así que aprovecho para pasar al baño, dejo su portafolio sobre el lavamanos y fue a un mingitorio.

Fue un alivió, se quedó allí parado, disfrutando de ya no sentir que su vejiga estaba por explotar, un par de pasos entraron, no le tomo importancia, solo termino su negocio, acomodo su ropa y se lavo las manos, pero antes de salir se encontró con Shido, solo lo quería esquivar, pero se metio en su camino.

"Hunyadi-Sensei, quería intercambiar algunas palabras con usted, es sobre su alumno, Tsunoda —Así que eso era, no tenía tiempo para perder, así que lo dejo hablar para que termine pronto— "Mire, es una de mis estrellas en el Equipo de Atletismo, y note sus bajas calificaciones"

"¿Bajas calificaciones? Ese examen lo hice tan simple que niños de primaria lo harían bien, pero no le importa" —Shido se molestó por esa interrupción, pero lo dejo pasar, pensando que estaría bien por ahora—

"Cómo sea, yo le quería pedir, que le dé una ayuda a su calificación, ya sabe, rascar mi espalda y yo la suya, la competencia regional es después de vacaciones, y sus calificaciones podrían ser un problema, supongo que no quiere perjudicar a la escuela ¿O si?" —La cara de János permaneció impasible, sin darle alguna relevancia a sus palabras— "Muy bien, ya diga que quiere"

"No quiero nada, aunque..." —Se llevo una mano a la barba y jugo con ella, Shido esperaba la respuesta, sabiendo que las amenazas no eran efectivas y de momento no había encontrado la debilidad en su armadura— "Haga que estudie, no le pido un genio, pero si logra aprobar le pondré 8, y que se aleje de Hirano Kohta, imagino sabe quién es, es todo"

Le extendió la mano, algo que Shido aceptó, apretando con mucha fuerza, pero se desconcertó al ver que no tenía ningún efecto, en cambió János apretó más fuerte y después lo soltó, dejándole la mano adolorida al profesor de cabello negro.

Lo dejo allí y fue a su automóvil, mientras Shido rechina los dientes molesto, tenia que buscar mejor, no podía ser que fuera tan perfecto como se veía, sería paciente, y disfrutaría como nunca el verlo caer.

Desde la distancia, cierta estudiante veía al maestro de barba bajar por las escaleras, parecía prometedor, de momento se aferraba a Shido, en su equipo de Atletismo lograba pasar todas las materias, era conveniente, pero también por su cuenta lograba hacer eso, un poco de trabajo manual y oral para un 10.

No dejaría a Shido por ahora, pero quería saber hasta donde llegaba ese nuevo profesor extranjero, quizás podría ser un pez más gordo que el otro idiota, solo sería paciente y vería que ventaja sacar.

******

En el departamento de Shizuka todo estaba preparado para recibir visitas, se levantó temprano para limpiar, su departamento era un desastre por culpa del estrés y la falta de tiempo, pero ahora era necesario que estuviera todo limpio.

Preparo algunos aperitivos en caso de que tuviera hambre mientras estudiaban, también algunos refrescos en el refrigerador y un pequeño ventilador cercano, aunque por desgracia no podría usarse sin hacer volar sus apuntes.

El apartamento era muy pequeño, por eso le gustaba visitar a Rika, el lugar básicamente eran tres habitaciones, la zona principal donde estaba su sala y una pequeña cocina, había espacio para un sofá de dos lugares y una pequeña mesa de centro, además de una pantalla plana que encontró con descuento, que suerte tuvo ese día.

Había dos puertas mas, una era una pequeña habitación, con un armario donde guardaba algunas prendas que tenían que estar en ganchos, un mueble donde doblaba su ropa y había un espacio especifico para su futón, era cómodo, pero no tanto como una cama, la cual desperdiciaría demasiado espacio.

La ultima puerta era un baño diminuto, apenas espacio para un inodoro tradicional, del tipo donde tenia que estar en cuclillas para usarlo, y una ducha pequeña, suficiente para sus necesidades de higiene personal.

Ese día llevaba un pantalón corto que llegaba a medio muslo, una camisa de tela de algodón, era cómoda, y ya que estaría cerca de János tuvo que usar sostén, por desgracia, ya que aunque normalmente no era incomodo, era siempre mas cómodo estar libre cuando estudiaba.

Fue entonces cuando escucho el timbre, fue al interfon para escuchar el mensaje, oprimió el botón y entonces escucho la voz masculina que esperaba.

"Aqui el tutor János, el mejor profesor que puedes encontrar en esta calle" —Sonaba animado, eso era prometedor, así que tomo la llave y bajo por las escaleras del tercer piso para recibirlo, llego a un portón de metal y allí estaba el varón, viendo su teléfono— 

"¡Si llegaste! Me alegra verte, pasa" —Abrió la puerta y lo dejo pasar, cerrando tras de si, ese día llevaba un pantalón negro, camisa roja con corbata oscura y un broche de corbata dorado con el símbolo de una pirámide—

"¿Por que no llegaría? Cuando hago una promesa la cumplo de una u otra manera" —La siguió de cerca, el edificio ya tenia varios años, pero no se veía descuidado, los pasillos exteriores y escaleras las siguió, hasta llegar al tercer piso de la edificación— 

Ella le abrió la puerta y entro al departamento, más pequeño de lo que esperaba, no había casi decoraciones, algunas réplicas tamaño postal de pinturas, no estaba mal, era un poco parecido a su primer departamento.

"Bonito lugar" —Shizuka le ofreció sentarse y lo hizo, vio los papeles en la mesa y tomo algunos para saber cómo era su método de estudio, lo cual era importante para comenzar— "Bonita letra, tienes una caligrafía muy buena, en varios países lo médicos se caracterizan por tener letras imposibles de leer"

"No creo que pueda ser tan mala, personas tan inteligentes deben tener letras muy bonitas" —Eso sonó a un reto, y él varón fue a su maletín, lo abrió y saco una receta médica de hace años, de un doctor de Estados Unidos— "¿En qué idioma esta esto?"

"Es inglés, es una receta de un doctor de Estados Unidos, imagino que aprendiste inglés básico, y esa es aún la letra bonita" —Le hizo una señal para que se sentara a su lado, mientras acomodaba sus documentos y sacaba el plan de estudios— "Realice una pequeña investigación para el plan de estudio para hoy" 

Saco un libro de no menos de doscientas hojas del portafolio, igual que algunos diagramas en imágenes a color sin nombres de diferentes órganos y seres del microorganismo.

"¿Que tipo de aprendizaje tienes? Están auditivos, visuales y los que aprenden por acciones, sino sabes tengo un examen rápido para saberlo, así será más rápido" —La enfermera miro todo lo que le mostraba, era mucho trabajo, no podía creer que tuviera todo eso preparado desde el inicio—

"¿Tenías todo este material en casa?" —La vio tomar todo entre sus manos, después movió su cabeza y miro a su compañero— "Me gusta más ver y actuar, me aburría mucho tener que escuchar a los profesores, era aburrido"

La siguiente hora fue ella explicando los temas que ya conocía, los que estaba por perfeccionar y varios temas que le eran difíciles aún, János no tuvo problema en eso, aunque no era ni de cerca un medico o alguien con gran conocimiento de esa área, pero sabía estudiar y prepararse.

Solo necesitaba información sobre lo que haría, le explico temas de la manera más mundana posible y accedía a internet cuando desconocía un tema, era una clase entretenida.

Había pasado tiempo desde que Shizuka tuvo clases como esas, le dio algunas secciones de exámenes de práctica, para verificar el estado de lo que conocía, avanzaron mucho en tres horas, y lograba que la confianza de Shizuka subiera.

Él estaba leyendo unos libros sobre el siguiente tema de neurología mientras ella terminaba de completar un diagrama del corazón y el sistema circulatorio, le quedaban pocos minutos, pero respiro y continuo escribiendo hasta que escucho que sonaba la campana de un temporizador con forma de chef.

"¡Tiempo! Bajen los lápices concursantes, veamos cómo resultó está ronda" —Cuando hablo sonaba como esos presentadores en programas de concursos, tomo la hoja de la enfermera y comenzó a leer, paso párrafo por párrafo—

Dejo a Shizuka leyendo un libro para estudiar mientras el profesor usaba un temible bolígrafo rojo para marcar aciertos y errores, tardo quince minutos en terminar de calificar, dejo la hoja en la mesa y coloco su bolígrafo en su bolsillo.

"¡Tenemos una ganadora!" —Los ojos de la enfermera se abrieron mucho y se levantó del asiento, y el profesor hizo lo mismo— "Tras sacar promedio tienes una calificación de 9.3 en esta prueba, con esto, tu promedio general es de 9.2, estas logrando un gran avance, ahora, la prueba final ¿Estas lista?"

"¡Claro que si!" —Bueno, ahora faltaba una hora ultima de estudio, así que siguió con el tiempo para que comprendiera mejor el tema, mas allá de memorizarlo, algo que ayudaría en la parte de casos hipotéticos del examen—

Tras mucho esfuerzo estaba al fin Terminando su ultima prueba de practica, la mujer rubia sentía que el sudor bajaba por su frente, y trataba de terminar, escuchaba ese reloj de cocina avanzar, coloco la ultima respuesta y sonó el reloj, su frente sudaba y sintió que todo estaba volviéndose pequeño, mientras János escribía y marcaba.

Tardo un poco mas que antes, pero era porque ese examen de prueba era mas largo que el anterior, casi no se movía de su lugar, hasta que bajo el examen y mostro un gran 10 en una tinta roja muy brillante, paso la calificación a una tabla y mostro un promedio final de 9.6, superando las expectativas.

"Felicidades, oficialmente, estas preparada para la prueba de mañana" —Cuando lo escucho ella solo pudo reaccionar de inmediato, lanzándose contra él, abrazándolo con mucha fuerza y dejando su cara entre sus pechos, debido a la diferencia de tamaños—

"¡Siii! ¿Es verdad? ¿No estas mintiendo para hacerme sentir mejor?" —Escucho unos balbuceos, al fin dándose cuenta de que había dejado sin aliento a su compañero de trabajo— "Lo siento, es que nucna espere eso"

"Tranquila, no necesito oxigeno tanto tiempo" —Se quedo en silencio mientras respiraba con lentitud hasta volver a la normalidad y la miro con una gran sonrisa— "Y no, no te engañe, revise con el máximo rigor y todo estaba bien, hice notas por si quieres revisar, pero en general eres una estudiante de excelencia"

Al fin ella se dejo caer en el sofá, estaba agotada y debido a que no activo el aire acondicionado para poder concentrarse ahora estaba sudando mucho, János no era diferente y estaba limpiando su frente con un pañuelo, mientras su barba estaba dejando caer una gota de liquido transparente.

"Creo que te ganaste poder tomarte la noche, aun no es tan tarde, tienes tiempo para hacer algo que quieras" —Se había limpiado el sudor y se sentó en el suelo para poder descansar, se quito el saco y quedo en su camisa roja— "Cielos, no estudiaba así desde el posgrado"

"Jejeje, que puedo decir, puedo dar enormes sorpresas a la gente" —Miro a su amigo y bajo del sofá para quedar cerca de él, János se quito los lentes y los dejo en la mesa, mientras se intentaba peinar la barba con las manos— "¿Tienes alguna clase de consejo? Ya sabes, además de preparación"

Esto hizo pensar a János, ya le había dicho sus ideas antes, pero había mas que solo eso, descarto la idea de salir con amigos, no era hora, Rika estaba fuera y dudaba que pudiera venir, asi que decidió hacer algunas cosas que no eran científicas, era mas mental.

"Yo usaba mi ropa de la suerte en exámenes importantes, puede que sea suerte o no, pero me daba la confianza para no dudar de las cosas que ya conocía" —Levanto su pantalón un poco, revelando un par de calcetines negros con líneas azules y rojas— "Estos son los calcetines de la suerte"

"¿Y que los hace de la suerte? Bueno, en general, que puede hacer que algo sea de la suerte —Excelente pregunta, János tendría que pensar sobre una respuesta exacta, ya que era complicado decir todo en poco tiempo—

"No es algo magico que pueda detectarlo, normalmente ropa de la suerte es ropa que asocias con algo positivo, como un regalo de un ser querido, algo que llevabas cuando obtuviste un logro importante, de preferencia debe ser algo que consideras muy especial y te haga sentir segura" —Fue una buena respuesta, pero ella misma no sabia que podria ser, compraba la ropa porque le gustaba, y no recordaba algo que considerara especia—

Entonces tuvo un recuerdo, un festival donde sus padres le dieron un regalo, se levanto de inmediato y fue a su habitación para buscar algo, János se quedo donde estaba y escucho como ella abria el closet para sacar cosas y seguir buscando algo, cosa que Shizuka hizo por diez minutos hasta sacar una caja y revisar que todo estuviera bien en su interior.

Regreso donde su invitado, el cual estaba guardando papeles en su portafolio y finalmente cerro todo con seguro, estaba cansado, y al final lo que buscaba era poder dormir un poco.

"¡La encontré! Resulta que si tengo una ropa de la suerte, gracias por el consejo" —János levanto la mirada y observo a Shizuka sostener una caja pequeña, y solo asintió— "oye... Rika está fuera y no tengo muchos más amigos ¿Te gustaría ver una película o algo antes de irte? Podemos pedir algo y divertirnos un rato"

En realidad preferiría ir a casa y dormir, llevaba pocas horas de sueño, y aunque había pasado varios días sin dormir, podría aprovechar para dormir de manera apropiada, pero al verla tan feliz le fue imposible negarse y acepto.

Ella fue a su habitación y saco una caja con películas, busco hasta sacar una película de melodrama o comedia romántica, no estaba seguro, pero la dejo poner lo que quisiera, ella se sentó a su lado y miro la pantalla, János observo a la enfermera y decidió hablar, ya que se dormiría si veía la película.

"¿Y que tipo de ropa es tu ropa de la suerte? Tengo curiosidad ¿Es un gorro, calcetines? Oh, ya se, quizás zapatos" —La enfermera volteo a verlo, se veía un poco sonrojada, tratando de no contestar, logrando que él se riera un poco— "está bien sino me quieres decir, debe ser personal"

"¡No es eso! Lo que pasa es que... Es un regalo de mis padres, siempre me vieron como su pequeña niña y aunque estaba a mitad del instituto me hicieron un último regalo, fue antes de su accidente" —Demonios, no debió preguntar, pero ya estaña allí, sería mejor manejar esto de manera madura— "Quisiera que me hables de ti, ya sabes, además de lo que todos saben"

"No sé, no es una historia fascinante, nací y crecí por 16 años en Caracas, Venezuela, mi madre murió cuando aún era muy niño y mis abuelos me llevaron a Hungría, estudié allí el resto de mis estudios hasta la universidad, tuve suerte muchas veces, cuando me gradué estudie postgrados y trabaje para la ONU durante algunos años, pero me cansé de viajar y un amigo me dio una recomendación para este trabajo" —Parecía una historia fantástica, y realmente lo era, pero no muchas veces su realidad superaba la ficción—

La habitación se quedó en silencio de sus voces por unos minutos, mientras la película se reproducía, ella miró la televisión y movió sus piernas de forma inquieta, no sabiendo como continuar con la conversación.

"Siempre me pareció curiosa esa clase de películas, recuerdo que me era extraño ver cómo una chica, como la princesa de esta película, se enamoraba de un campesino o gente así, esperaría que buscará alguien más... Capas" —Decidió hablar de la película, la cual estaba cerca de la mitad, pero que se momento serviría de tema de conversación—

"A mí no tanto, siempre e pensado que el amor debe ser algo muy bonito, ya sabe, preocuparse uno por el otro, encontrarse con esa alma que te complementa a la perfección, que me haga sentir segura y nunca me deje, si encuentras algo así nunca lo abandonaría" —Sonaba conmovedor, casi lo conciencia de que vivía en un mundo ideal, él en el fondo era mas amargado que esa fé que ella mostraba, pero le parecía encantador—

Se habían acercando uno al otro demasiado, durante la conversación habían acordado distancias hasta que estaban ya básicamente con una pierna junto a la otra, János le tomo la mano a Shizuka y la levanto, mirando sus ojos, el se acercó mas a ella, estaban muy cerca uno del otro.

Paso un brazo por su cintura, y la abrazó con cuidado, dejando que ella quedara cerca de él, está vez no fue un silencio incómodo, solo fueron ellos dos guardando silencio y viendo el final de la película, ya era tarde y mañana tendrían cosas, él su trabajo y ella el examen.

Comieron unas cuantas galletas que Shizuka había guardado y logro que se fuera cuando ella vio las migajas de galleta en la barba del profesor, las cuales quito con una servilleta, al fin se separaron y János tomo su portafolio, salieron del departamento y ella bajó con él gasta la reja del exterior.

Una vez fuera le abrió el portón metálico y miro al profesor, era más bajo que ella por seis centímetros, pero tras ese día le parecía un gigante en cuanto la estima que le tenía.

"De nuevo, muchas gracias por su ayuda, me siento mucho más segura para mañana, no se cómo podré agradecerle toda su ayuda" —El no negaría que fue un gran esfuerzo conseguir toda la información, pero si admitiría otra cosa— "si alguna vez necesita algo y puedo hacerlo no dude en pedirlo"

"No hay que agradecer, además, lo hice porque me agrada, además, es muy inteligente y fue fácil ayudarla, solo llegue a confirmar información" —Cuando dijo ella lo último pensó que era buen momento para pedirle algo— "me gustaría pedirle que ya no me trate de usted, ya me llama por mi nombre, así que esta bien que nos tratemos de tu"

La enfermera se volvió roja al escuchar eso, se suponía que no se llamaba a nadie por su nombre hasta tener una gran confianza, y ella había estado llamando al profesor por su nombre desde el primer día, esto no podría ser más vergonzoso.

"Nos vemos después, si necesita algo más no teléfono ya lo tiene, le deseo suerte" —Y sin más de fue del lugar, Shizuka lo vio abrir su auto, pero antes de que entrara le gritó—

"¡Y me puedes también llamar por mi nombre!" —El volteo y asintió a sus palabras, entrando a su auto y tras encender el motor se retiró del lugar, la enfermera subió de nuevo a su departamento y cerró con seguro la puerta— "Quizás si sea el indicado"

Guardo las cosas en sus lugares y fue a su habitación, se sentía agotada, solo quería dormir, saco su Futón del closet y lo extendió en el suelo de la habitación, después tomo su cepillo de dientes y fue al baño para su rutina dd higiene antes de dormir, pero entonces sintió el aroma de sudor y se puso roja pensando que la pudo haber olido.

Así que abrió la llave de la regadera y procedió a quitarse la ropa, dejo su ropa sucia en un cesto de lavandería y se colocó bajo el chorro de agua tibia, fue relajante sentir toda esa agua caer sobre ella, lavo su cabello con abundante shampoo, después tomo jabón corporal y lo paso por su piel, disfrutando del contacto y la textura.

Cuando estuvo lista volvió a la habitación, rodeado solo por una toalla y su cabello envuelto en otra para sacarlo, paso frente al espejo, tomando un cambio de ropa, se quitó la toalla, pasándola por cada parte de su cuerpo y después se miro al espejo.

Siempre fue consiente de lo hermosa que era, no era tímida en ese aspecto, siempre supo que tenía un gran atractivo a la vista de los hombres, se tocó los pechos y a veces creía que se hacían mas grandes.

Se quedó frente al espejo, modelando y observando el estado de su cuerpo, sus pechos eran grandes, pero firmes, a sus 27 años aún tenía mucho tiempo, lucían atractivos, su vientre plano, observó sus piernas, largas y torneadas, que llegaban a un trasero grande, sin celulitis o marcas, era piel suave, de carne suave pero no flácido.

Algunos hombres modernos consideraban desagradable el vello púbico, ella en lo personal nunca fue del tipo que se afeitaba esa zona, siempre tuvo piel sensible y se irritaba, así que lo dejaba crecer a menos que fuera a la playa y fuera a usar bikini, los cuales le encantaba como la hacían lucir, se preguntaba si a János le gustaría como se veía.

Fue entonces cuando se dio cuenta de que había pensado, se llevó una mano a la mejilla, pensando en él, bueno, si era atractivo, su barba lo hacía ver muy varonil, sus lentes, esos ojos verdes que son firmes ante el peligro, ya había visto esa camisa, como se ajustaba y por momentos le parecía ver un cuerpo trabajado por el ejercicio.

No, Shizuka mala, primero el examen, después todo lo demás, se colocó la ropa para dormir, apagó la luz y trato de dormir, tardo un poco en conciliar el sueño, tuvo varios sueños esa noche y pudo descansar hasta la mañana siguiente, dónde enfrentaría el examen.

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