¡Hola! Ha pasado más de un año. Aquí Yue con un nuevo capítulo de éste fanfic. Como sabrán, High School DxD no me pertenece, salvo los OC's y alguna que otra parte de la trama

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Al día siguiente, el Club de lo Oculto se reunió con Etsuko y compañía en la entrada del templo. Se notaba la tensión en el ambiente, algo que iba en aumento con la sonrisa que daban Tirani y Etsuko, lo que les daba mala espina.

-Bien. Tenemos 10 días reales para entrenar, así que el objetivo es claro: ¡Haremos el entrenamiento de dos meses en éste tiempo! Y si podemos subir la intensidad... ¡Tal vez el entrenamiento de dos meses y medio! -exclamó Yushiko emocionada, ya que si dejaba hablar a las otras dos, probablemente el Club de Ocultismo se echaría atrás por miedo, aunque ella también tenía sus ideas para torturarlos.

-¿En qué consistirá el entrenamiento? No confío en las sonrisas de ellas. -dijo Rías poniendose azul.

-No será muy complicado, a menos que no controleis vuestro poder -respondió la pelinaranja aún con ésa sonrisa que prometía dolor y todos tragaron duro- Andando.

Todos caminaron por el templo, rumbo al camino oculto tras el mismo, llegando a otro templo. Una vez allí, el ambiente empezó a sentirse pesado.

-Éste lugar me da mala espina -mencionó Issei.

-Y aún no habéis visto nada -añadió Tirani con una sonrisa que prometía tortura.

Una vez en el interior, se dirigieron a la puerta número uno y antes de entrar Etsuko habló.

-Tenéis dieciséis horas para cumplirlo, si en ésas horas no lo conseguís quedaréis atrapados en éste lugar para siempre. -dijo seriamente mirando a todos.- Entraréis de tres en tres en un margen de un minuto entre tríos, buena suerte. Nosotras tres os esperamos aquí. Dicho ésto, buena suerte y por mucha dificultad que se os presente, jamás retrocedáis.

Con esas palabras, la pelinaranja abrió la puerta y entraron de tres en tres cumpliendo las reglas impuestas por Etsuko, para la chica cerrar la puerta definitivamente.

-¿Creéis que lo lograrán? -preguntó seriamente la chica.

-Más les vale o sufrirán mi ira -habló Tirani irritada.

-¿Por qué tan molesta? -le preguntó Yushiko queriendo confirmar sus sospechas.

-Obvio... Nos habéis apostado a todas con un pollo frito, aunque sea mi descendiente, pero éso no es lo importante. Lo que me molesta realmente es tener que entrenar a Issei, aún cuando hizo llorar a Etsuko.

-Rencorosa -murmuró en voz baja Yushiko entrecerrando los ojos, antes de añadir algo más alto- De todas formas te tienes que aguantar porque él será la llave de la victoria, a menos que ocurra un imprevisto y tenga que intervenir en persona.

Etsuko escuchaba en silencio, apoyada en la pared de forma pensativa. No era para menos, tenía un mal presentimiento tras lo sucedido en los últimos días. El mutismo se hizo en el pasillo, cada cual con sus pensamientos. Unas cuatro horas más tarde escucharon unos pasos y al abrirse la puerta vieron salir a Raynare, Mittelt, Rías, Akeno y Asia. Las dos primeras con algunas heridas y mojadas, la pelirroja y su reina completamente mojadas, mientras que la rubia estaba herida. Etsuko sonrió.

-Y... ¿Cómo os sentís ahora? -preguntó divertida. Las recién llegadas no entendieron la pregunta hasta que notaron como sus reservas mágicas eran mayores que antes.

-Habéis tardado mucho en daros cuenta -afirmó Tirani dando una media sonrisa.

-Nunca pensé que la clave para salir de ahí fuera creando un camino de luz con tu energía mágica. Mucha cantidad era absorbida y usar poca era inútil. Había que regularla conforme avanzabas -dijo Raynare con tono agotado.

Con el paso del tiempo, poco a poco aparecieron el resto, saliendo Issei a sólo cinco minutos de hacer las dieciséis horas límites.

-Bueno, por desgracia y por cinco escasos minutos, estamos todos. -habló Tirani mirando al castaño con el ceño fruncido, de tal forma que si las miradas mataran y enterraran, el chico estaría sepultado en lo más profundo del núcleo terrestre.

-Ignorando a Tirani, tenemos que ir al siguiente lugar, la sala número dos. Realmente no sé qué nos vamos a encontrar allí -dijo Yushiko seriamente.

Tirani suspiró y se relajó, caminando al frente del grupo.

-Yo sé qué hay. Uno de mis hobbies es leer, y la primera vez que vinimos encontré un libro donde explicaba las características de cada sala. Lamentablemente no pone cómo superar cada prueba. Esta segunda habitación es, casualmente, un cobro de Elie a Chronos tras ganarle de forma consecutiva a cinco partida de 'Mus', quince partidas del 'Mentiroso' y tres al 'Chinchón' -explicó la peliazul sacando el asombro del grupo y una risa nerviosa a Etsuko.

Salieron del pasillo, giraron hacia arriba y llegaron a la puerta de la segunda habitación.

-Podrían haber puesto la puerta de la primera habitación aquí, sólo habríamos tenido que entrar y no girar en la esquina -protestó un Motohama empapado de agua, antes de mirar a Etsuko y preguntarle.- Además... ¿A quién se lo ocurre crear una cueva que te quita los sentidos justo debajo de un templo antiguo?

-A mí no me mires, cuando renací como humana, esto ya estaba aquí -respondió la pelinaranja con un tierno puchero.

-Atentos. Esta habitación es del tiempo, las reglas son simples. Pueden entrar un número ilimitado de personas pero el mínimo son tres, que son las más importantes. Obviamente seremos Etsuko, Yushiko y yo -explicó Tirani- La primera persona en entrar establece el tiempo de duración del entrenamiento con sus pensamientos. La segunda, de igual forma, lo hace con la dureza, mientras que la tercera establece el límite de personas, una vez las tres entremos, ya podréis entrar. Una vez que salgamos, la tercera habitación... No, mejor lo digo después.

Yushiko se puso frente a la puerta y la abrió.

-"Una semana fuera, que sea un mes en la habitación" -pensó entrando a ella.

Tirani se colocó frente a ella, y dando una sonrisa maliciosa caminó.

-"Entrenamiento nivel: Extremo" -pensó al entrar.

Finalmente, una nerviosa Etsuko, que fue la única que vio la sonrisa de la peliazul, se colocó frente a la entrada.

-"Número de personas: 19" -pensó al entrar.

Una vez dentro, el resto avanzaron. Al frente vieron una sala enorme. Era una habitación extraña, completamente negra, las paredes eran relojes mágicos como formando una barrera. Lo único que parecía normal era la entrada, que parecía el interior de una casa. Frente a ellos estaba la zona de entrenamiento con los relojes. A la derecha había una cocina, un comedor bastante amplio y otra puerta cuyo rótulo indicaba 'Útiles de entrenamiento' . A la izquierda dos habitaciones, divididas por género, con diecinueve camas entre ambas y cinco puertas con la palabra 'Baño' escrita en un rótulo.

Al fijarse bien, Yushiko estaba sentada en las escaleras que daban acceso a la zona de entrenamiento, mientras que Tirani estaba apoyada en la pared.

-Llegáis tarde -bromeó Tirani con una sonrisa, antes de ponerse seria- ¡A entrenar!

-Lo mejor será que primero se acostumbren. He entrado y lo primero que he notado ha sido la gravedad -explicó Yushiko desde las escaleras- Creo que alguien ha sido estricta con la dificultad.

-No será para tanto -dijo Tirani acercándose, al momento de pisar las escaleras, ésta cayó contra el suelo- Pero... ¿¡Qué!? -con algo de esfuerzo consiguió sentarse al borde de la escalera.- Joder. En el libro no especificaba ésto.

-Según este medidor, la gravedad está a 5 veces el peso del individuo -dijo Etsuko delante del mismo- Lo pondré en 2 veces.

Al hacer eso, Tirani y Yushiko se levantaron con algo de problemas.

-Supongo que lo siento. Entrenaremos primero en 2 veces, exceptuando a Issei. Él tiene que quedarse hecho tortilla y con las tripas fuera, entrenará a la máxima gravedad. -dijo la peliazul mirando mal al castaño.

Etsuko frunció el ceño. No le estaba gustando la actitud de la chica hacia Issei. Suspiró, ya hablaría con ella más tarde, debía centarse en lo importante, instruir al grupo y, de paso, entrenar como loca pues se sentía estancada.

-Empezaremos con algo básico. Ejercicio físico para aumentar la resistencia. Daremos 10 vueltas a la sala, vendrá el desayuno -Explicó Tirani sacando unas páginas de periódicos- Una vez hecho esto, os tocará meditar durante dos horas. En esas horas os iremos atacando con esto de aquí y deberéis esquivar los golpes. Llegará el almuerzo y tras ello, Yushiko os dará lecciones de estrategia para finalmente acabar con clases de magia y control de energía con Etsuko, ya que como habreis notado, vuestra energía ha aumentado bastante y os tendréis que acostumbrar.

-Básicamente lo mismo que hicísteis cuando estuvimos en la réplica de la Torre de Babel -resumió Yushiko dando una sonrisa maliciosa- No penséis que os lo pondré fácil.

-Luego iremos a dormir y el día siguiente más de lo mismo. La dificultad irá en aumento día tras día. -añadió Etsuko de forma seria, aunque pensativa- "¿Esto estará bien? Nunca hemos hecho esto y podremos hacernos más fuertes, pero... ¿Será suficiente? No, ella casi nos mata cuando Millie y yo éramos las líderes y Azael era mi ángel perfecta. La creé con mis habilidades para que se encargara del cielo en caso de que a mí me pasara algo, y Millie al ser mi contraparte maligna era como yo al 100% y aunque obtuvo bondad y su oscuridad se fue desvaneciendo ella era tan fuerte como yo. Temo que..."

-...Ko ¡TIERRA LLAMANDO A ETSUKO! -gritó Tirani frente a la cara de la pelinaranja, provocando que esta cayera al suelo debido al susto.

-¿Qué? ¿Cómo? -preguntó nada más levantarse, volviendo en sí.

-Es nuestro turno de entrenar junto a ellos, ya han empezado y vamos con retraso -habló Yushiko de forma dulce mientras que la peliazul bufaba molesta.

-D-De a-acuerdo -dijo de forma nerviosa yéndose a entrenar- "No puedo concentrarme. ¡Joder! Rayos, ya me parezco a Tirani y sus palabrotas"

-"Conozco esa mirada. Yo también estoy asustada. Por primera vez estoy frustrada, no se me ocurre ningún plan para reforzar los sellos, ni para vencer a ésa mujer. Muchas dimensiones adyacentes a ésta dan miedo" -pensó Yushiko con decepción de sí misma antes de unirse al entrenamiento.

Tirani solo veía a ambas antes de ponerse a correr, cuando alcanzó a Issei, inmediatamente le dio un coscorrón y le adelantó mientras lo miraba con molestia y odio haciendo que el castaño la mirara intimidado. Etsuko suspiró, tenía que hablar con ella antes de que se formara una pelea, o mejor dicho, masacre. Yushiko se detuvo con el ceño fruncido, no le gustaba el rumbo que estaba tomando todo.

-Genial, simplemente genial, como si no tuviéramos muchos problemas que arreglar, o al menos intentarlo, se une otro más -murmuró en voz baja, aunque no lo suficiente como para que Rías, Akeno, Murayama y Katase la escucharan, las cuáles estaban adelantándola en ese momento.

Tras el almuerzo, empezaba la primera lección de Yushiko, la cuál fue a la habitación de útiles, sacando un tablero de ajedrez más grande de lo habitual, además de una pantalla, no como una de cine, pero sí lo bastante grande para que se vea. En dicha pantalla se veía el tablero pero de una forma muy diferente, simplemente era un dibujo de las piezas visto desde arriba.

-Antes de empezar con las clases de hoy, voy a aclarar unas cuantas cosas. Primero, las dudas al final. Segundo, tomad apuntes de todo lo que diga, pero si lo memorizais mucho mejor, ya que en una batalla no tendrás un respiro como para tomarlos. Con ésto claro... Comienza la lección. Como véis, he traído un tablero de ajedrez, al igual que una pantalla donde se verá reflejada la partida. Os preguntaréis ¿Cuándo o en qué momento traje todo ésto? La respuesta es que... Estaba en la habitación de útiles -se encogió de hombros al ver el rostro de los presentes- Los Rating Games son como un simple ajedrez. He preparado varias situaciones posibles. Las blancas serán Raiser, las negras, obviamente sabemos quiénes son. La diferencia es que en el ajedrez tú controlas todas las piezas, mientras que en un Rating Game puedes hacer una estrategia pero cada miembro se mueve por separado. Empezamos por la primera situación -dijo cargandola, Torre en peligro de muerte por caballo, peón bloqueado por otro- Puedes mandar a Kiba a un bosque y a Issei o Koneko a unas ruinas en el mismo bosque mientras que Akeno sobrevuela la zona vigilando posibles trampas, pero resulta que tu rival se te ha adelantado y ve a través de tu plan por ser obvio.

-¿Por qué sería obvio? -cuestionó Issei bastante confundido.

-Es fácil, mira la pantalla. En estos momentos, mi torre negra está a tiro del caballo blanco, el peón que representaría a Issei esta dos casillas a su izquierda y una abajo, no puede matar al caballo en diagonal porque no llega, al mismo tiempo esta bloqueado por otra pieza, otro peón. Si muevo la torre a la izquierda, el peón que bloquea a Issei moriría, pero seguiria en peligro de muerte por el mismo caballo. Mi torre avanzaría hasta matar al peón blanco pero moriría a manos de la otra torre, bye bye Koneko, fuera del juego. ¿Cómo lo arreglaríais?

-Mandaría a la Reina en horizontal a matar al peón blanco que bloquea al negro -respondió Akeno con seguridad.

-Sí, es una posible solución si no fuera porque la Reina estaría a tiro de caballo, bye bye, Akeno. Sí, Issei avanzaría pero caería en diagonal contra la Reina rival o con el Alfil de la casilla blanca, Koneko mataría al peón pero moriría a manos de la torre negra.

-Mandar a Kiba en L matando a la Reina, así Akeno mataría al peón... -habló Rías antes de percatarse de la situación- No dije nada. Quedaría el alfil blanco, además de que el Rey mataría a Kiba.

-Cierto, pero no tanto. El Rey no estaría en peligro, así que se repetiría la misma situación. Sólo piensa, la solución está mas cerca de lo que crees. Kiba mata en L, buscad la solución, ya os di la pista

-Kiba mata a Caballo, Koneko está fuera de peligro, Kiba también y a Issei no pueden tocarlo, pero hay algo que no entiendo. ¿No sería mejor que Koneko avanzara una casilla en vez de mover a Kiba que está por matar a la Reina? -meditó Raynare viendo la pantalla.

-Nop. Está el Alfil, Koneko seguiría estando muerta.

-Cierto. Negras moverían a la Reina en vertical lista para hacer un jaque a Rías, pero Asia avanzaría en diagonal protegiendo al Rías. Si Reina mata a Asia, Rías avanzaría matando a la Reina.

-¿Éso no significaría sacrificar a Asia? -interrogó Issei- Debe haber otra manera.

-La hay, mover a Koneko en horizontal y matar al peón que te bloquea el paso. Ahí está la partida.

-Pero el Alfil o la Reina matarían a Koneko, sería lo mismo que antes. -cuestionó Irina

-No, si bien parece que la situación parece desfavorable para Koneko, el negro sacaría a otro peón avanzando una casilla, probablemente el que protege su casilla en vertical. Issei mataría en diagonal, colocándose a dos casillas del Rey, que se movería una casilla abajo bloqueándole el paso. Así el rey protege a la reina de una muerte asegurada, además de evitar la promoción a Reina. Issei estaría en peligro, Asia avanzaría en diagonal poniendo en jaque al rey, el cual se vería obligado a retroceder. Kiba avanza en L poniendo en jaque a la Reina. -explica viendo la simulación en la pantalla- Ahora sólo habría una opción, la reina avanza una casilla hacia abajo bloqueando a Issei impidiendo su promoción. Koneko avanzaría una casilla en vertical cubriendo la línea que antes ocupaba la reina. Ahora solo habría tres opciones. Primera, mata a Issei y muere en diagonal contra Akeno. Dos, retrocede y se fuerza a ser destruida por Koneko o con Issei promocionándose a Reina y la tercera, avanza dos casillas en diagonal abajo hacia la derecha. No está ninguna en peligro. Koneko retrocederia en vertical una casilla. Ahora dos opciones. Primera, la Reina retrocedería una casilla para no ser destruida por Koneko ni por Asia, o segunda, haría un jaque a Rías, la cuál avanzaría una casilla a la derecha. La reina movería a la derecha y Asia mata a la Reina. Rey avanzaría en vertical, Asia nuevamente en diagonal, jaque, Raiser retrocede. Koneko avanza hasta el final, Rey está en jaque mate. Si mata a Koneko, muere a manos de Kiba o de Issei, si avanza y bloquea a Issei, muere a manos de Asia.

-Pero... ¿Y la torre negra no podría matar a Koneko? -preguntó Xenovia

-Sí, pero eso haría que Issei promocione a Reina. Rey quedaría en jaque mate nuevamente. Aún si omitimos que Koneko avance hasta el final, y se quede a dos casillas, el Rey no podría hacer un enroque por haberse movido. Kiba retrocede en L, Torre en jaque. Torre avanza a la derecha hasta la posición de inicio de la Reina, Koneko avanza, mata a Torre y jaque mate. Como veis, el Alfil blanco queda inutilizado, no puede matar en diagonal y tampoco puede hacer jaque o proteger al Rey. Si mata a Koneko muere a manos de Issei. El error de esa partida es mandar a Koneko a abrir la puerta de las ruinas, en ese caso es mejor enviar a Kiba. Caballo contra caballo -termina explicando Yushiko- Éso si fuera una partida de ajedrez normal, pero hablamos de un Rating Game. Dado que es la primera vez que participais en un juego, tal vez os den ventaja en un entorno conocido. -presionó una casilla del tablero de la mesa, y en la pantalla cambió todo, siendo una vista aérea de la Academia Kuoh- Las negras en el club de ocultismo, las blancas en el consejo estudiantil.

-Destrozarán la Academia si lo hacen aquí -se alarmó Motohama.

-Nop. Los juegos se hacen en una copia creada en una sección de la grieta dimensional protegida por una barrera. -aclaró Tirani seriamente.

-Bien, conociendo el entorno, tocaría la estrategia. Olvidemos el ajedrez por ahora. -dijo Yushiko con una leve sonrisa pulsando otro botón, para inmediatamente la pantalla cambiar al Age of Empires 3 sentandose junto a los demás- Vamos a simular un Rating Game aquí. Rías, por favor, vete al tablero de ajedrez. El Rey es el botón izquierdo, la Reina es el derecho y el peón frente al Rey es la rueda del ratón. El juego está en el mayor nivel de dificultad posible. Debes intentar ganar una partida en el tiempo que queda antes de las clases de Etsuko.

En las 3 horas restantes, Rías jugó 7 partidas perdiendo de forma aplastante.

-Aggh... -se quejó frustrada, solo para escuchar una risa de parte de Yushiko- ¿¡De qué te ríes!?

-De nada. -le respondió la chica- Es sólo que has cometido 5 errores graves que te han costado las partidas.

-Demasiado defensiva -habló Murayama.

-Recursos desaprovechados -añadió Mittelt.

-Infantería debil -mencionó Aika.

-Nula expansión por el mapa -dijo Koneko.

-Edificios demasiado cerca entre sí- completó Akeno.

-Bien visto -sonrió Yushiko- Me alegra de que estuviérais atentos. Por mi parte esto será así todos los días. Cada quién jugará un total de 3 partidas diarias durante mis lecciones.

-¿Por qué todos? ¿No sería mejor que lo hiciera Bucho? -preguntó Issei confundido.

-Verdad a medias. En un Rating Game, cada pieza puede pensar por sí misma. Da igual que se haga una estrategia colectiva previamente, al final, llegará un momento en que cada uno de vosotros tenga que pensar por sí mismo. ¿Qué debo hacer ahora? ¿Voy al terreno rival y promociono? ¿Ayudo a Koneko? ¿Voy al gimnasio con Kiba y ataco por ahí? Como ves, no es tan simple. -le contestó Yushiko- Simplemente se trata de es...

-No hace falta que se lo expliques, es una pérdida de tiempo hacer que su única neurona procese toda esa información -la interrumpió Tirani molesta- Ahora, todo el mundo con Etsuko ¡Ya!

Ante la orden de Tirani, se pusieron a meditar mientras que la peliazul era la encargada de atacar, al perder en el clásico juego de 'piedra, papel, tijeras', haciendo que Yushiko y Etsuko entrenen al mismo tiempo que los demás, al menos en ése día. Lo más destacable era una nueva discusión entre la pelinaranja y Akeno, sobre su avance hacia el cuarto paso del ejercicio de control.

Ése mismo día, por la noche, Etsuko se encontraba meditando, creó una pequeña esfera dorada y se puso a jugar con ella, pasandola de un lado a otro sin usar sus manos, pero un ruído hizo que perdiera la concentración haciendo que la bola casi explotara en su cara. Al voltear su rostro vio a Tirani molesta, la cuál no reparó en su presencia. Cogió un maniquí de entrenamiento, sacó una foto de Issei y se la pegó al muñeco, para posteriormente comenzar a golpearlo.

-¡Esto por hacer llorar a Etsuko! ¡Toma! ¡Toma! ¡Cómete esto! ¡Ruin the Extinct! -con el ataque característico de Sirzechs destruyó el maniquí- ¡No es bastante! ¡Debe ser el verdadero! Tsk...

-¡Suficiente, Kyoko! -gritó la pelinaranja frunciendo el ceño- ¿Por qué actúas así? ¿Que crees que ganas haciendo éso?

-¡Qué te importa! -le respondió cabreada mirando hacia donde estaba el maniquí- ¡No pasa nada!

-Pues no lo parece -contradijo la otra.

-No te metas donde no te llaman, Etsuko -le respondió girándose molesta.

-Entiende que no lo hizo queriendo, fue el calentón del momento. No es como para que lo odies al punto de que deseas que muera. No me gusta que actúes así -dijo la chica acercándose a la peliazul.

-No solo odio éso, también odio que lo justifiques y no, no deseo que muera, quiero que se muera -respondió la peliazul envolviéndose en aura de la destrucción.

-Kyoko... ¿Por qué...? -no pudo terminar de hacer la pregunta porque tuvo que esquivar un ataque de la contraria.

-¿Por qué? ¿¡Qué!? No seas tonta, deberías saberlo. -cargando una esfera de la destrucción- Sabes cuando pararé... De tí depende.

-"No se puede razonar con ella" -pensó alarmada Etsuko, abriendo mucho los ojos mientras unas lágrimas caían por sus mejillas- "No... Ella está descontrolada. ¿Tanto odia a Issei? ¿Qué hago? Si luchamos, ninguna de las dos sobreviviremos, y si no la detengo se descontrolará aún más. No queda otra, lo siento Tirani, perdón por dejarte toda la carga, Yushiko. Os quiero."

La chica se envolvió en un aura dorada mirando fijamente a la chica mientras cargaba una esfera del mismo color. Ambas lanzaron sus ataques al mismo tiempo, una explosión sacudió el lugar haciendo que todos despertaran asustados mientras Yushiko se percató de algo y salió corriendo deseando que no fuese lo que creía. Poco a poco el resto se iba asomando. Viendo la pelea tan intensa, Issei habló.

-250 yenes a que gana Etsuko. Anótalo, Yushiko. -todos miraron a la chica al ver que no respondía.

La pelirroja estaba de rodillas, muy pálida y temblaba ligeramente mientras sudaba, pero era un sudor frío. Aún temblorosa, se puso en pie.

-E-Ellas s-se e-están a-atacando... ¡A-A M-MUERTE! -gritó asustada por posiblemente perder a sus amigas.

Ante eso, todos se alarmaron pero tuvieron que cubrirse de una ola de viento, fruto de la onda expansiva tras la colisión los ataques. Etsuko estaba bastante malherida, al igual que Tirani, la cual seguía atacando a matar.

En lo más profundo del Mar Rojo, algo comenzó a brillar en un tono morado, provocando que los animales huyeran hacia otras zonas como indicando un peligro inminente.

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Bueno, bueno. Espero que la espera haya merecido la pena. La cosa se pone calentita.

¿Qué creen que le pase a Tirani?

¿Etsuko podrá pararla o morirá en el intento?

¡Se aceptan teorías!

Nos vemos en el próximo capítulo. ¡Se despide Yue!