KAPITEL 60:WO BIST DU?
Hanna y Robert en la foto(L)
Último capítulo que os dejará...sin palabras...
HANNA
El movimiento del coche balanceaba mi cabeza cubierta de analgésicos para el dolor de cabeza; desde luego el alcohol había hecho su efecto.
Alexa estaba sonriente y tranquila, parecía mentira lo que la había cambiado Colin desde que estaban juntos. Mientras que el tráfico parecía detenerme y que llegase tarde al juzgado, mi teléfono vibró con un mensaje:
"Te prometí que estaría aquí y he cumplido mi promesa"
Cuando justo pensé que iba a ser Robert y uno de sus amorosos mensajes, Jordan volvía a aparecer en otro de los momentos claves de mi vida. Era como una señal que no paraba de aparecerse ante mí pero no era el faro al que quería llegar.
Debía de no contestar al mensaje porque las cosas podría malinterpretarlas y bastante tenso iba a ser. Estaba tan enfrascada en mis pensamientos que no me di cuenta que acabábamos de parar en el aparcamiento. Alexa se giró hacia mí y me dijo:
-Quédate aquí hasta que abra la puerta; no vaya a ser que te caigas del coche y te rompas algo antes de entrar.
-Adoro tu sutileza Alexa-Le dije mientras ella salía del coche.
-Siempre a tu servicio.
Alexa me ayudó a bajar del coche y ambas caminamos a la puerta del edificio. Me dijo que esperara un segundo para dar el aviso y ver que todo estaba en orden para comenzar, pero lo que más me sorprendió fue escuchar música rock que venía del interior del edificio. Cuando Alexa salió, no me dejó si quiera preguntar y entonces entramos lentamente al edificio.
Todos me miraban asombrados con las miradas brillantes de felicidad. Miré al frente donde mi marido me miraba con el mayor de los orgullos y yo sentía un nudo de emoción dentro de mi estómago. Cuando miré a su derecha, pude ver la figura de Colin y de Jordan mirándome con una media sonrisa; parecían tan sorprendidos como el resto de invitados.
Pero mi mirada insistió más en Jordan que en Colin, sintiendo un enorme frío en mi corazón.
"Estoy aquí", ese mensaje casi podía escucharlo con su voz...
Mientras que pronunciábamos los votos, mi angustia iba creciendo más y más. Retazos de la noche que pasé en brazos de Jordan iban apareciendo en mi mente.
"Atrévete a decirme que no me has mirado una sola vez con deseo"
Mis ojos comenzaban a estar llorosos ante esas palabras, ante esas caricias que permití sentir. Lloraba por él porque nunca podría estar conmigo y él sufriría por mi culpa. Cuando llegó mi turno para dar el sí quiero, mis ojos se deslizaron furtivamente hacia Jordan y ví como una enorme sonrisa se dibujaba en el rostro. Casi podía leer que se alegraba por mí y que no sintiera pena por él sin necesidad de que él dijera nada pero su mirada húmeda y sus ojeras me decían más bien lo contrario.
-Sí, quiero.
Con la voz temblorosa, acepté a mi nuevo marido y con ello, una nueva vida que estaba dispuesta a vivir. Todos celebraron a pleno pulmón mientras que Jordan se quedaba un poco alejado del resto de los invitados.
-Atrévete a decirme que siempre me has visto como un simple amigo"
Robert y yo nos fuimos en un coche precioso que había alquilado para la ocasión. La celebración se haría al aire libre con un pequeño buffet que incluía todo lo que más nos gustaba comer en el mundo. Había hasta una barbacoa por lo que era como una boda tipo cumpleaños y eso me encantaba.
La música sonaba por todos lados incluso Alexa y Colin se atrevieron a tocar algo para nosotros. Robert me tomó de la mano mientras estábamos sentados en la mesa con el rostro lleno de amor.
-No te imaginas las ganas que tengo de irme mañana de viaje contigo; te tengo reservado una habitación de hotel que va a hacer que me quieras más.
Comencé a reírme sin saber dónde iríamos de luna de miel. Él me dijo que sería una sorpresa porque tenía algo especial preparado por lo que no pregunté más para no chafar la sorpresa.
Antes de acabar con la fiesta, Jordan pidió un baile conmigo y yo acepté con la voz temblorosa. Tenía un enorme miedo de que él perdiera el control y dijera algo que no debía pero parecía demasiado tranquilo como si no pasara nada. Ambos estábamos en silencio hasta que él decidió hablar:
-Gracias por darme este pequeño momento; significa mucho para mí.
-Nos tenías a todos preocupados porque no contestabas a las llamadas-Le dije con un susurro.
Él me tomó más fuerte de las manos y me dijo al oído:
-Tenía mucho que asimilar; no todos los días la mujer de tu vida se casa con otro.
Intenté soltarme pero Jordan no me dejó. Con voz dulce me dijo:
-Tranquila, no voy a decir nada porque me importas y quiero que seas feliz; sé perder y no me arrepiento de nada de lo que ha pasado. Que seas muy feliz, Hanna.
Y con un beso en la mejilla, se marchó con el resto de invitados dejándome con una gran sensación de vacío.
Robert me tomó de la mano y ambos fuimos a casa. En unas pocas horas estaríamos tomando un vuelo, por lo que teníamos que preparar las maletas en seguida para poder llegar a tiempo al aeropuerto.
ALEXA
Habían pasado varios días desde que Hanna se marchó con Robert de viaje de novios y los muy bribones no habían llamado por teléfono. Recordando cómo se miraban, de seguro estarían dándolo todo en la cama del hotel.
La noche de la boda de Hanna, Jordan se apareció por casa visiblemente atormentado y nos contó lo pasado con Hanna.Colin le dijo que pasara la noche en casa con nosotros e incluso que pasara varios días si lo necesitaba, pero él solo accedió a pasar la noche porque no quería molestar.
Lo sentía muchísimo por él porque era un gran hombre que nos había ayudado mucho a Colin y a mí. Él me confesó que estuvo vigilando la entrada de casa por seguridad y me contó las peripecias que hizo para poder descubrir a Sarah en toda la mierda que estaba metida. Me sorprendió muchísimo hasta donde había llegado esa mujer y cómo lo había ocultado todo durante todo ese tiempo.
Los días al lado de Colin eran maravillosos y nuestra relación mejoraba cada vez más. Tras la noche que se quedó Jordan, él nos pidió que lo dejáramos solo por un tiempo para poder recuperarse de lo que había pasado y nosotros lo apoyamos al cien por cien.
Quedaba muy poco para el concurso de música de la ciudad, por lo que los ensayos habían empezado y todo estaba saliendo mejor de lo que pensábamos. Todos nos entendíamos a la perfección y compartíamos gustos musicales muy parecidos, cosa que era beneficiosa a la hora de componer. Pero una noche de madrugada, unos terribles golpes acompañados de los gritos de Jordan, nos hicieron levantar de golpe de la cama.
Cuando abrimos la puerta, lo vimos llorando y con una ansiedad que no podía hacerle hablar. Colin le ayudó a sentarse mientras que sujetaba algo entre sus temblorosas manos.
-¿Qué es eso, Jordan?-Le pregunté, pero él se limitó a darme el recorte de periódico que tenía abrazado.
Cuando leí el titular, el peor de los miedos se instaló en el cuerpo haciéndome convulsionar:
"El famoso ex productor musical Anthony Carles, ha relegado la compañía a su hijo Robert Carles para que pueda manejarla en ausencia de su poder debido a su cadena perpetua. Desde ahora, todo el patrimonio queda en manos de su hijo, que posa sonriente junto a su padre en la sala de visitas de la cárcel estatal"
En esa foto...era Robert...Robert....
Hanna se había ido con el hijo de mi violador...
Fin de la primera parte
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro