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4 | Lo logramos

Los rayos del sol entrando por la ventana me habían despertado, aún me costaba un poco de trabajo adaptarme a la luz, para mi sorpresa Juls seguía tan quieta a mi lado que ni siquiera le molestó toda esa luz iluminando su rostro, me giré lentamente para no despertarla y tomé mi celular, eran las diez de la mañana... ¡¿Eran las diez de la mañana?!

Tenía cientos de llamadas perdidas de los chicos y mensajes con amenazas de Chloe, insultos por parte de Donovan y ni siquiera sabía si algunos existían en verdad, Jonathan después de insultarme como cien veces decidió preguntarme si estaba bien y no dejaba de decir que todos estaban preocupados por mí mencionando que de seguro se acercaba el fin del mundo porque no había sido puntual, solo era un ensayo, no es para tanto.

Sí, siempre encontraré alguna justificante, lo siento, soy así.

Ya era tarde, necesitaba ducharme, total, ya me esperaron dos horas, que no me esperen un par de minutos más. Entré al baño con toda la tranquilidad del mundo, había estado toda la noche con la chica que amo, nada ni nadie arruinará tal felicidad, le marqué a Chloe mientras observaba qué shampoo usaría el día de hoy

—¡Escúchame, desgraciado! —gritó del otro lado—. Más te vale que tengas una muy buena razón para no haberte presentado al ensayo, ¿tienes idea de lo mucho que me costó llegar temprano? Sabes que odio los jueves, tienes suerte de que Marcus esté de viaje, pero espera a que llegues, te juro que apenas te vea voy a cortarte los malditos tes

—¡Ya para, por favor! Entendí la amenaza, Chloe.

—Explícame entonces, ¿dónde coño estás?

Cuando se molestaba le cambiaba el acento. Me quité la camisa y abrí la llave de la

—¿Me estás jodiendo, Adam? ¿Te vas a duchar? Eres un idiota, ¿lo sabías?

—No me dices nada nuevo —aclaré la garganta—. Ya voy para allá, no tardaré tanto, pero necesito que me hagas un favor.

—No te presentas ¿y todavía quieres que te haga un maldito favor?

—Tienes un problema con la palabra maldito, pero eso no es importante por ahora, necesito que compres algo por mí, bueno, solo que lo recojas, hice el pedido ayer en la noche.

—Eres un

—Sí, lo sé —interrumpí—. Soy lo peor, luego me das detalles.

Terminé de explicarle lo que necesitaba y me duché, en realidad no tardé demasiado, salí del baño con el pantalón puesto y sin camisa, Juls ya había despertado y estaba terminando de ponerse su blusa, hizo un nudo con los listones que aquel idiota había rasgado y arregló un poco la prenda, yo seguí secándome el cabello con la toalla cuando ella me miró.

—Adam —sus ojos cayeron a mi abdomen desnudo y permaneció callada.

—¿Quieres una foto, Juls? —negó rápidamente.

—Ya me iba —frunció el ceño al notar que la miraba confundido—. ¿Qué?

—Nunca sales de casa sin bañarte.

—No es mi casa, Adam.

—¿Y? Tampoco te prohibí que usaras la ducha —ensanché mi sonrisa—. De hecho, si quieres para ahorrar agua podemos entrar a la ducha juntos.

Era divertido ver lo nerviosa que se ponía, aunque tratara de disimularlo.

—Tú ya terminaste de ducharte.

—Un famoso debe estar limpio todo el tiempo, no me molestaría entrar de nuevo.

—¿Ahora eres un famoso? —se cruzó de brazos y me miró fijamente.

—Depende.

—¿De qué?

—Si soy un famoso, ¿entrarás conmigo a la ducha?

—Eres increíble —negó con la cabeza como si yo no tuviera remedio, tomó una de mis camisas y me la aventó.

—Llegarás tarde a tu ensayo.

—Llevo dos horas de retraso —añadí entre risas—. Creo que pueden esperarme unos minutos más, te llevaré a casa.

—Tienes que irte —insistió.

Siempre tan testaruda.

—Te dejo en tu casa y de ahí me voy al estudio, ¿te parece?

Se quedó callada unos segundos probablemente pensando que decirme para que me marchara, aunque si por mí fuera me quedaría aquí con ella toda la tarde, al demonio el ensayo no desaprovecharía esta oportunidad, era todo lo que quería.

—Ve al estudio antes de que te maten, me ducharé. Sin ti —enfatizó—. Y después iré a casa, estaré bien lo prometo.

—¿Estás segura? —se acercó a mí y me quitó la toalla que colgaba de mi hombro, besó mi mejilla.

—Completamente —entró al baño mirándome de reojo.

Dios, quiero casarme con ella.

—Si necesitas algo llámame —agregué mientras cerraba la puerta del baño.

—Eres un idiota —juraría que estaba sonriendo.

Tomé las llaves de mi auto y conduje hasta el estudio.

«Me refiero a que no quiero que te vayas nunca»

No podía sacarme sus palabras de la cabeza, como dije, esta mujer tiene un fuerte impacto en mí, lo que tengo con Juls siempre ha sido algo que he considerado especial, único, completamente diferente a lo que he tenido con otras chicas en todos los sentidos, desde el momento en que empecé a charlar con ella en ese bar, la charla que tuvimos en mi auto cuando me detuve frente a mi casa, en un principio estaba decidido a que ella sería alguien más de la lista.

Fueron sus palabras, su actitud, su forma de ser lo que me obligaron a cambiar de opinión, todo el tiempo que estuvo apoyándome cuando Landon tuvo una recaída, y cuando él se fue. Ha estado todo el tiempo para mí sin importar cuanto tratara de alejarla, pero muchas veces así es el amor ¿no? Nos rompemos a nosotros mismos para darles nuestras piezas a otras personas en un intento desesperado por ayudarlas.

Jamás llegaremos a entender cuán grande puede ser el sacrificio que estamos dispuestos a hacer por una persona hasta que llega el momento de hacerlo.

Para mi sorpresa, cuando entré al estudio con una gran sonrisa, todos corrieron a abrazarme, noté una expresión de alivio en sus rostros cuando vieron que me encontraba bien. Seguro los insultos no tardan en llegar.

—¿Es un abrazo de despedida? Porque Chloe dejó en claro que cuando me viera me cortaría...

—Y todavía tengo intenciones de hacerlo —añadió—, pero primero queremos saber qué te pasó.

—Bueno —no sabía cómo empezar.

—No quise ofenderte, Adam, si te soy sincero muchos de los insultos que te dije ni siquiera existen.

—Solo estábamos preocupados por ti.

—Chicos —los reprendió Johnny—, cállense y déjenlo hablar —me miró—. Continua.

—¿La versión corta o la larga?

—La larga, dame una buena razón para no asesinarte —me pidió la castaña.

—Bueno, me quedé ensayando hasta tarde, caminé un rato saliendo del estudio y pasé cerca del bar donde tocamos.

—Club —aclaró.

—Es un bar, Chloe, el punto es que vi a Juls, unos chicos la estaban molestando y —reviví la escena en mi cabeza, no quería ni imaginar qué hubiera pasado si yo no hubiera llegado —un idiota trató de abusar de ella, rasgó su blusa y le solté un puñetazo, el muy cobarde se largó, pero Juls seguía asustada, no quería ir a su casa, así que la llevé a mi apartamento y nos quedamos dormidos hasta tarde, perdí la noción del tiempo y por eso llegué tarde con un ustedes.

Omitamos la parte en donde sonrío como idiota porque sé que ahora estamos juntos, aunque no hubo una declaración de amor normal, sé que estábamos juntos, muchas veces no requieres de una etiqueta, esas solo son normas absurdas de una sociedad que quiere tener todo bajo control.

Al diablo la etiqueta, la amo, me ama ¿Qué más necesitamos? No tengo que hacer todo un espectáculo ridículo frente a varias personas pidiéndole que sea mi novia, cuando hay confianza de por medio y amor, lo demás sale sobrando.

—No puede ser. ¿Está bien? ¿La lastimaron? ¿Dónde está ahora?

—Sí, está bien. La vi más tranquila esta mañana, se quedó en mi apartamento.

—Chloe, nos acaba de decir que llegó con ella a su casa, es claro que está bien.

—No, Johnny, no me vengas con eso, no tienes ni idea de lo que ella debió sentir, podrá haber llegado a salvo con Adam, pero eso no quita que el idiota la haya dejado asustada, insegura y quizá mortificándose con lo que pasó constantemente, madre mía, ustedes nunca entenderán a las chicas.

—Yo no dije nada. —Se defendió Donovan levantando las manos en señal de rendición.

—Así que lo que me pediste que pasara a recoger era para ella —le restó importancia a la discusión y se centró en mí—, supuse que el color rosa no era para ti, uní las piezas y lo envié a su departamento, si ella va para allá seguramente lo recibirá.

—Te debo una, en serio.

—Si quieres compensarnos empecemos a grabar —comentó Trevor sentándose mientras comía un hot-dog—. Te esperamos dos horas.

—Te esperamos dos horas —repitió burlón Donovan—. Sí, ajá.

—Estos dos desaparecieron en tu ausencia —aclaró Johnny—. Sabrá Dios qué estuvieron haciendo.

—Los ruidos debieron ser claros —se notaba la molestia en la voz de Dono.

—Bueno, chicos, dejémonos de detalles y entren a la cabina —se ruborizó un poco—. Tenemos que grabar una canción, hay que tener esto preparado para la conferencia de hoy, justo después de la entrevista la subiremos a la plataforma de la empresa. ¡Sorpresa! estará al alcance de todos ténganlo por seguro y será una prueba del material que se viene para la banda, todo debe salir de acuerdo al plan.

Me costaba creerlo. ¿Hablaba en serio? ¿Trackmind? Estaba que no cabía de la emoción, esto era más de lo que hubiera imaginado.

—¿Te...? ¿Te refieres a que nuestra canción estará esta noche en Trackmind? —quise ocultar mi asombro, pero fue imposible.

Trackmind, es raro que alguien no conozca la plataforma, los grandes artistas tienen sus álbumes ahí, no importa la discografía con la que hayan firmado, si realmente tienes talento tus canciones se encontraran ahí, antes de que desapareciera Spotify los artistas podían publicar sus canciones, aquí no —hay otras aplicaciones en donde la gente puede subir sus canciones para despegar su carrera musical —pero aquí no cualquiera puede subir su material y es un verdadero privilegio para los que aparecen dentro de esta plataforma; todos la adoran y la gente está fascinada con poder escuchar a sus artistas favoritos en la app.

Es como un sueño hecho realidad, una vez mandé una propuesta a Trackmind esperando que aceptaran la canción que compuse y la añadieran, creo que nunca se dieron el tiempo de revisarla o quizá no era tan buena como yo pensaba.

—Así es. —Sonrió—. Hablamos con la prensa y les dijimos que el sencillo que subiríamos a la plataforma era completamente diferente a lo que se había visto de ustedes en internet y en los conciertos que han dado, es una canción lenta de principio, pero es algo fuera de su zona, les mostré un pedazo y quedaron fascinados sobre todo con tu trabajo —me señaló.

Oh-por-Dios

—¿Mi trabajo? —parecía idiota repitiendo todo.

—Les dije que eras tú quien traía el material para trabajar y la banda te ayuda a desarrollar el resto, les gusta lo que hace Hidden, aunque se sorprendieron con tu habilidad para tocar la guitarra y el sentimiento que pones al cantar, admiran la visión que tiene la banda y que sean ese toque fresco que la música actual necesita.

—¡No es cierto! ¡Esto es muy bueno para nosotros! La oportunidad que necesitamos para convencer de una vez a todos que somos buenos en lo que hacemos —habló Dono.

—¡Aaaaaaah! —comenzó a gritar como loca—. Madre mía, es que ¿os lo podéis imaginar? Que Trackmind se haya fijado en nosotros, no puedo creer que nuestra música estará en la plataforma —se tumbó en el sillón sin creer lo que ocurría—. Decidme que es real.

—¿No estás jugando con nosotros verdad, Trevor? Dime que esto no es una broma, que está pasando en verdad —se quejó cuando lo pellizqué—. ¿Qué haces?

—Es para que sepas que esto es real —aclaré con una sonrisa.

—Chicos, les juro que jamás había hablado más en serio como ahora, entiendo su emoción, no cualquiera llega tan rápido a donde están ustedes.

—Esto es como las grandes ligas.

—Y les esperan más cosas, Adam. Hoy es Trackmind y una sola canción, después serán álbumes completos, podrán tener su primera gira, los ingresos mejoran, entrevistas, autógrafos, la fama es suya, Hidden.

Todos nos quedamos callados, como si estuviéramos analizando lo que ocurría, tengo que admitir que también me pellizqué con fuerza tratando de convencerme de que esto en verdad estaba pasando, es que todo parecía tan irreal, que una de nuestras canciones fuera a publicarse en Trackmind, como dije no cualquiera está ahí, nos habíamos ganado cierto reconocimiento, pero jamás creí que el suficiente como para estar dentro de la plataforma, una cosa era escuchar música ahí y otra muy diferente ser parte de los artistas que la gente escuchaba, esto era una completa locura.

—Pero quiten esas caras de asombro y denme la mejor versión de Slow —se sentó en su silla y anotaba algo en su tableta—. Dense prisa, no tenemos todo el día —nos indicó.

Como si fuéramos niños a quienes les habían dado dulces, entramos alegres a la cabina y comenzamos a grabar, una, dos, tres, todas las veces que fueron necesarias hasta que finalmente la canción quedó lista, perfecta, esta sería nuestra versión definitiva. Seguía sin creer que durante las grabaciones no nos equivocamos ni una sola vez lo cual facilitó el trabajo para Trevor, lo único que hicimos fue agregar un par de arreglos más y ya.

Nos acercamos con él a la consola para escuchar el resultado de lo que habíamos hecho, estábamos encantados con lo que habíamos logrado, mientras escuchamos la canción pude notar que Trevor sostenía la mano de Chloe, algo que muy rara vez ella deja que los chicos hicieran. Con que solo sexo ¿eh?

Cuando terminamos de escucharla, Trevor la guardó y la envió a un administrador de la plataforma, él se encargaría de que al término de nuestra conferencia la canción ya estuviera disponible.

Trevor nos había explicado que entre más reproducciones y descargas tuviera Slow más ingresos podríamos estar generando, si a la gente le gustaba la canción entonces tendríamos bastante trabajo porque ahora tendríamos que desarrollar nuestro álbum y prepararnos para el primer concierto que daríamos, Marcus nos decía que ese concierto sería nuestra carta de presentación para el resto del mundo, si lo hacíamos bien entonces tendríamos un gran futuro por delante.

Habíamos pasado por tantas cosas para poder estar aquí, gritos, peleas, conflictos, problemas familiares, duelos, pero sin importar todo eso, nuestra motivación siempre había sido la pasión que teníamos para con la música, a Jonathan su padre lo obligaba a ser contador y su madre fue la única que lo apoyó cuando se enteró que se dedicaría a la música, sus papá en el fondo me odiaba porque creía que yo le había metido esas ideas a la cabeza, el padre de Chloe estaba de acuerdo en que su hija siguiera su sueño, pero con tantos ensayos y eventos a los que asistir se había alejado de la única familia que le quedaba, Donovan había discutido con sus padres y se alejó por completo de ellos dedicándole todo su tiempo a la banda y bueno, ya conocen al chico que tuvo que alejarse de su madre y tomar un curso para ser contador cosa que dejé tan pronto pude hacerlo, además de que fui rechazado por siete productores de diferentes disqueras escuchando siempre lo mismo «no eres bueno para esto»

Trevor debía organizar todo lo relacionado con la entrevista ahora que Marcus no se encontraba así que nos dio el resto de la tarde libre, tendríamos que vernos en la noche en otro estudio donde Maya, una chica de una revista y programa de televisión importante nos entrevistaría. Regresé al apartamento, agotado aventé mi chaqueta y antes de girarme una persona aclaró su garganta provocando que diera un pequeño salto sobre mi lugar, me giré para ver quién era.

Juls.

—Demonios, Juls, me asustaste —llevé una mano a mi pecho.

—¿Qué acaso nunca revisas el apartamento cuando llegas? —se cruzó de brazos, estaba sentada frente a la barra.

—Pues no es muy normal que haya una persona dentro —y es que no debería haber nadie—. Un momento ¿cómo entraste? —me mostró la llave.

—Debajo de la maceta, ¿es enserio? Tienes que ser un poco más original.

—Menos mal que no eres delincuente.

—Podría llevarme tus cosas y venderlas con facilidad.

—Buena suerte con eso.

—¿Te imaginas? La camisa de Adam, las chicas pagarán demasiado por eso, mejor aún, los boxers de Adam Stone —remarcó la oración en el aire—. Me volverás millonaria.

—Creo que las chicas estarían aún más interesadas en pagar por una foto mía en bóxer —bromeé recordando que sí existe tal foto.

—Ah, sí, Landon me la enseñó.

—¿Qué? El maldito hizo muchas cosas a mi espalda —se encogió de hombros—. ¿Llevas mucho tiempo esperándome? Porque podría acostumbrarme, me refiero a que sería lindo que cuando llegara de los ensayos lo primero que viera al entrar fuera a ti, no me desagrada la idea —solo me sonrió—. Ya sé, no tengo remedio, no me molesta verte, pero ¿qué haces aquí?

Se levantó de la silla y se acercó a mí, traía en la mano una caja. Oh, era eso.

—Vengo a devolvértelo —estiró la caja para que la tomara, pero se la devolví.

No ganarás esta vez, Juls.

—Es de mala educación devolver un regalo, Juls.

—Adam, no puedo aceptarlo, es un celular no un dulce.

—Te dije que si necesitabas algo me llamaras, ¿no entendiste que me refería a esto? —contuvo una risa.

—Estoy hablando en serio, Adam.

—Yo también, además no puedes devolvérmelo. ¿Qué haré con un celular rosa?

—No es rosa.

—Juls, sé que eres chica.

—Gracias por notarlo —ironizó.

—Y sé que conoces miles de tonos diferentes de rosa, no me interesa cuál es el cuál en realidad, para mí, eso —señalé la caja—, es rosa.

—Adam.

—Deja tu orgullo un poquito de lado, sé que estás aquí porque estás pensando en el dinero, pero en este momento te juro que es lo que me sobra, nos dieron un adelanto con la firma del contrato y créeme, no me afecta habértelo comprado, por favor acéptalo —pedí.

—Es que —pasó sus manos por su rostro, frustrada.

—¿Es lo que quieres?

Las personas a mi alrededor odiaban esa pregunta, sin embargo, los allegados sabían la importancia de la misma, siempre he sido una persona de todo o nada, no hay medias tintas, no conmigo, si les pregunto si es realmente lo que quieren es porque saben que deben darme una respuesta sincera, si me dicen no, es no y no trató de hacer que cambien de opinión, nunca le he suplicado a nadie para que lo haga, y si dicen que sí, entonces respeto esa decisión.

Es sencillo, no tenemos tiempo suficiente en esta vida para andar de indecisos, es todo o nada.

—Bueno —jugaba con su pie. Perfecto está cediendo—. Supongo que ahora podré molestarte un poco más.

—Sí, Por favor.

—Puedo llegar a ser muy molesta.

—Deja que yo lo averigüe.

—Gracias. —El contacto visual con ella siempre me hacía olvidarme de todo a mi alrededor—. En serio, no tenías que hacerlo.

—Sí, sí tenía —me acerqué a ella y coloqué un mechón de su cabello detrás de su oreja—. ¿Qué clase de novio sería si no me comunico contigo?

—Novio —repitió feliz.

—Espero ser el oficial, no me digas que soy el otro, Juls.

—Eres el único, Adam —se inclinó un poco más para poder besarme.

En serio no me cansaría de esto, de estar con ella, de tenerla entre mis brazos, de besarla y de escuchar cuán perfecto suena mi nombre cuando ella lo dice.

—¿Tienes hambre? —hablé apoyando mi frente en la suya.

—Demasiada.

—¿Qué te preparo?

—Músico y chef, lo había olvidado.

—Debe ser por eso que te vuelvo loca.

—Y con el ego hasta el cielo, no te emociones, Stone.

—Ya es tarde. ¿Y bien? ¿Qué te cocino?

—No lo sé, sorpréndeme.

—Sí, señora.

Mientras cocinaba ella estaba sentada del otro lado de la barra, me contó que se estaba preparando para la audición de una película, no dejaba de repetir que le parecía tan interesante el hecho de que puedes tener a la persona con la que en verdad necesitas estar justo frente a ti y no notarlo, asegura que la escritora es bastante talentosa y que es un libro tan conocido que la gente se volvió loca cuando se enteró que harían una película, Juls realmente quería el protagónico, había tenido papeles pequeños en algunas obras y protagonizó al menos dos de ellas, pero esta película podía ser su oportunidad para triunfar y obtener lo que siempre ha querido.

—¿Cómo se llama la película? —pregunté mientras terminaba de añadir algunas especias al sartén.

—Amor de dos palabras, la chica se llama Mia Campbell y cuentan su vida, debe ser halagador que hagan una película de uno de tus libros, Sara Rufino, la escritora debe estar muy emocionada, la historia puede ser inspiradora para muchas personas.

—O deprimente, depende qué parte de la historia cuentes. Es mexicana la escritora ¿no?

—Sí, es mexicana. ¿La conoces?

—Te sorprendería cuánto.

—Vino a una firma de libros hace poco.

—¿Y fuiste?

—Por supuesto que sí, era la quinta edición de la novela y yo necesitaba tener ese libro en mis manos, aunque ahora todo lo encuentras en internet.

—Cierto, pero mira el lado positivo, aunque todo sea digital ahora, siguen existiendo los aficionados de los libros físicos.

Terminé de cocinar, serví la comida y dejé nuestros platos sobre la barra, el olor solo provocaba que tuviera más hambre, apenas Juls lo probó cerró sus ojos para disfrutar aún más del sabor, muy al estilo Ratatouille.

—¿Qué ves, Remy?

—Adam, eres buenísimo haciendo esto —solté una carcajada.

—Si lo dices de esa forma y la gente no sabe que hablas de comida podría malinterpretarse, pero tienes razón, soy muy bueno.

—¿En qué sentido?

—En el que quieras.

—Me fio de ti.

Seguimos comiendo y me sentí satisfecho al ver que le había gustado, quizá no era un profesional, pero sabía defenderme.

—¿Dónde aprendiste a cocinar?

—No recuerdo —nos estaba sirviendo un poco de vino, a ella le encantaba.

—Oh, vamos no seas modesto.

—Hablo en serio, antes de aprender a cocinar quemé cientos de veces mi comida, tuve que aprender ya que mamá se la pasaba viajando todo el tiempo y no quería abusar de la madre de Landon, así que investigué un poco, vi un par de tutoriales y después la comida no se quemó más, cocinaba todo el tiempo me ayudaba a desestresarme, con algo de practica todo se volvió fácil, aunque mi especialidad es la repostería, pero me defiendo con la comida.

—Es que en serio, esto es delicioso —habló degustando el último pedazo de comida que aún tenía—. No sabía que cocinaras tan bien.

—Cocino por lo general solo para mí, no quiero que la gente piense que lo hago bien y después haga comentarios tontos diciendo que lo mío es ser chef y no músico, nunca complaces a las personas en su totalidad.

—Podrías ser lo que quisieras ser.

—Dice Barbie que le devuelvas su frase —se empezó a reír.

Podía estar escuchando el sonido de su risa por horas y no me cansaría de hacerlo.

—¿Por qué músico y no chef? —levantó en señal de rendición—. Solo es una pregunta.

—No lo sé —me encogí de hombros —creo que es porque nada me llena más que la música, no cambiaría mi guitarra por un sartén eso es obvio —sonreí de lado —cuando mi padre nos abandonó, jamás creí que tendría que crecer tan rápido, no tienes idea de lo frustrante que fue ver que aun siendo un niño no tenía la atención suficiente de mi madre, para ella su prioridad siempre fueron los viajes, el dinero, los hombres —Juls tomó mi mano y comenzó a hacer pequeños círculos con su pulgar prestándome toda su atención—. No sé qué hubiera sido de mi vida sin Landon, para su familia siempre fui como un segundo hijo, cuidaban de mí, me llevaban a la escuela, muchas veces me alimentaron.

» Siempre tuvieron dinero, así que una boca más para ellos no fue problema y menos considerando que era el mejor amigo de su hijo, pero me cansé, obvio que aprecio todo lo que hacían por mí, pero no quería seguir sintiendo que era un estorbo y tampoco quería la lástima de las personas, un día desperté diciendo «wow, tengo ocho años y me siento tan vacío» No era un lindo sentimiento.

Quise hacer algo por mi cuenta que valiera la pena, convertí mi sótano en mi nueva habitación, no me gustaba mi recamara en el segundo piso, el sótano fue una mejor opción e incluso pusieron una cama extra para Landon, ya has estado ahí, sabes bien que el lugar es increíble, la gente se sorprende por cómo convertí un sótano lleno de polvo en una increíble habitación, mientras arreglaba el lugar encontré una guitarra vieja y empecé a tocar, sonaba horrible, pero me creí un profesional y entonces dejé de sentirme tan solo, no me importaba si mi mamá o mi papá no estaban ahí, tenía una guitarra y a mi mejor amigo, no podía pedir más, empecé a practicar, juntar dinero y después de que Landon me regalara una guitarra en mucho mejor estado que la que tenía decidí tomar clases, mejoré mi técnica y, aunque muchas veces me frustré créeme que disfruté cada momento, eso me trajo aquí. Cocinar no me llena como la música lo hace y ahora mírame, cumpliendo mi sueño, no cambiaría eso por nada.

—No conocí a tus padres.

—Deberías estar agradecida por eso.

—Pero sé que estarían orgullosos de ti y ni qué decir de Landon, has pasado por mucho, pero mira hasta dónde has llegado, cada logro, cada error, todo tuvo una razón de ser, y no sé si lo escuchas a menudo o no, pero, Adam, estoy muy orgullosa de ti, no ha sido en vano cada sacrificio que has hecho —rodeó la barra y al llegar a mí me abrazó y acaricié su cabeza—. Gracias por contármelo, significa mucho para mí.

—Hablar contigo es fácil, expresarme aún más.

Terminamos de comer y nos quedamos sentados un rato en el sofá, después de algunos minutos Juls recordó que tenía que ensayar y me pidió ayuda con eso, sabía de memoria sus líneas así que me entregó su libreto y solo me pidió que dijera los diálogos del chico, lo crean o no traté de entrar en el papel, yo era Alex, el chico que estaba siendo un idiota con la protagonista para después rogar por su perdón, se querían, después ya no, se enojaban y luego el chico desaparecía o actuaba raro con ella, vaya vida tuvo la dichosa Mia.

—No. Hay más Alex, sé que hay más —habíamos empezado con la escena.

Hola, yo seré Alex.

—Porque estoy enamorado de ti, desde hace dos años cuando ni siquiera sabias de mi existencia—respondí mientras leía el libreto.

—¿Por qué?

—¿En serio preguntas? ¿Qué chico no se enamoraría de ti? Eres atenta, inteligente, creativa, tienes una forma de pensar tan brillante y los sentimientos más genuinos que haya visto en una persona, no das nada a medias tú lo das todo, ¿cómo podría decirte que estaba enamorado si sentías algo por Liam? Además, me aterra no ser la persona que necesitas, vamos, ¿alguien como yo con alguien como tú? Es sin duda increíble.

—Y si te digo que siento lo mismo ¿me creerías?

—¿Qué?

Esta historia se estaba poniendo interesante.

—Estuve pensando, y tuvimos muchos acercamientos siempre los frené yo por alguna razón, tú fuiste el que estuvo a mi lado sin esperar nada a cambio, me cuidaste, me apoyaste, sigues aquí después de todo.

A veces yo me sentía como Mia.

—Quizá no he actuado como me siento.

—Ni yo —responde centrando su atención en mí —pero sería un error que creyeras que no siento nada por ti.

—Te sientes mal, Mia, no sabes lo que dices.

—¡No! —exclama molesta—. Soy consciente de cada palabra, las veces que charlamos, las salidas que teníamos, la pelea en el café con Liam, dime que no sentiste que estaba de tu lado o cuando te busqué como loca por tres días, o la emoción que tuve al verte cuando regresaste después de una semana, cuando charlamos con Gael y —se había metido tanto en la piel del personaje que incluso creí verla más pálida—. Y en el viaje me tomaste de la mano —su respiración se estaba acelerado—, y hablé con mi mejor amigo y, y él estaba —empezó a balbucear.

Esta era la escena que Juls presentaría para la audición así que se esforzaba demasiado, ya había leído el libro, sabía cómo entrar en personaje, terminamos en esa parte.

—Ataque de pánico —aclaró mientras hojeaba el libreto.

—¿De qué hablas?

—Mia va a tener un ataque de pánico, puedo estudiar cuanto quiera, pero nunca he tenido uno, es claro que no es algo agradable.

—No, no lo es —sentencié.

—¿Cómo lo sabes? ¿Alguna vez has tenido uno?

Me veía tentado a mentirle, decirle que no, tal vez se asustaría y se alejaría, no es bonito lidiar con los ataques de una persona, pero es que ella me transmite tanta calma que siento que merece saberlo, es libre de tomar la decisión de quedarse o alejarse con lo que le diga sobre mí.

—Sí, sufría de ataques de ansiedad desde pequeño y rara vez llegué a tener ataques de pánico.

Para mi sorpresa se veía tranquila como si lo que le dije fuera lo más normal del mundo.

—¿Es diferente?

—Sí, un poco —tomó mi mano y nos sentamos en el sillón.

—¿Por qué?

Creo que era la primera vez que alguien se interesaba —después de Landon y su familia —en querer saber más sobre lo que me pasaba.

—Es complicado.

—Inténtalo.

En realidad, no sabía que palabras usar

Dijiste que expresarte con ella era fácil.

Sí, pero no cuando debo explicarle lo mal que me siento con los ataques.

Solo sé tú mismo.

Bueno, lo intentaré.

—El ataque de pánico termina cuando superas la situación que lo provocó, es una sensación que puede durar minutos u más tiempo, tus palpitaciones se vuelven aceleradas, tienes miedo, no puedes respirar, no escuchas a nadie más y llegas a sentir que estás al borde del colapso. Puedes sentir lo mismo con un ataque de ansiedad con la diferencia de que este no es momentáneo —seguía teniendo su entera y completa atención—. Es posible controlar un ataque de ansiedad, pero eso no significa que el miedo desaparece, a veces el dolor en el pecho es difícil de soportar, tienes pesadillas, miedo incluso de salir de tu casa, te puede incomodar de momento a otro estar rodeado de personas, aunque sean tus amigos. O, todo lo contrario, y solo sentirte mal cuando estás solo.

Juls me miraba de una manera diferente, pero no era lástima. ¿Tal vez preocupación? ¿Sorpresa?

—No puedo creer que hayas estado pasando por eso, debió ser horrible.

—Lo fue por mucho tiempo, menos mal que Paul tiene especialistas en el hospital y varios contactos, me ayudó bastante, Landon le pedía a su padrastro hasta el cansancio que hiciera lo posible por ayudarme, y lo hizo.

—¿Cómo te sientes ahora? ¿Mejor?

—Sí, los ataques ya no están presentes en mi vida, necesitaría pasar algo muy malo para que regresaran, claro que la pérdida de mi mejor amigo sigue siendo un golpe duro, pero trato de sobrellevarlo.

—Perdón si toqué un tema muy sensible.

—Descuida —le resté importancia—. Me siento mejor después de habértelo contado.

—No estás solo, yo estoy contigo.

Creí en sus palabras, si la tenía a mi lado me sentía invencible, ella era lo que siempre necesité, pero que por idiota no había buscado, después de la emotiva charla, regresamos a ser Mia y Alex, y al terminar un agotador ensayo volvimos al sillón más cansados que antes, en nuestra defensa era muy cómodo, su cabeza estaba sobre mi pecho y podía sentir la tranquilidad de su respiración.

—Eres muy buena en esto ¿lo sabías?

En serio que su actuación podía convencer a cualquiera, tenía un gran futuro por delante, lograría cualquier cosa que se propusiera, yo confío en ella.

—Es lo que me han dicho —con su dedo trazaba líneas sobre mi playera.

—Solo espero que no termines conmigo de una manera cliché, sé más original que eso.

—¿A qué te refieres?

—Terminarás enamorándote de otro actor, conozco estos casos créeme, te volverá loca un chico rubio de ojos azules que sea más alto que tú —hablé divertido.

—No lo creo, me gusta un chico más alto que yo, rubio, pero de ojos verdes, aunque tal vez termine enamorada del director de la película y no de un actor, hay que pensar en grande, Adam.

Aunque ahora tenga el cabello pintado de negro, pero bueno.

No lo negaré, me tensé un poco y en cuanto lo notó me miró y trató de cambiar el tema.

—Entonces yo debería preocuparme porque seguramente te enamorarás de una fan loca y obsesionada contigo —me sonrió.

—Tienes razón.

—¿Qué? —se apartó y me empujó causando que me riera.

—Tú eres una fan de la banda y terminé enamorado de ti.

—No estoy loca por ti, ya quisieras tener tanta suerte.

—Aja, sí, lo que tú digas —esta vez me empujó para que quedara acostado en el sofá y ella estuviera sobre mí.

Su cabello castaño a los lados de mi cara, sus ojos cafés fijos en los míos y sus labios a centímetros de los míos, esta chica me volvería loco.

—No estoy loca por ti.

—De acuerdo, yo quiero ser contador.

—¿Qué? —tuve tan cerca de mí esa sonrisa.

—Oh, pensé que estábamos diciendo mentiras —tomé su cintura y la pegué más junto a mí, nuestros cuerpos encajaban a la perfección—. ¿Sigues creyendo que no te vuelvo loca? —acomodé su cabello y acaricié su mejilla.

—Me estás volviendo loca justo ahora —acortó la distancia entre nosotros juntando sus labios con los míos.

Había que reconocérselo, besaba muy bien. Solo que no fue un beso lento o suave, fue uno demandante, lleno de deseo, de excitación, algo que era inevitable, pero para mi sorpresa se apartó de mí, nuestros pechos subían y bajaban, pero el brillo en sus ojos seguía ahí, ella quería más.

—Deja de torturarme, Juls.

—Tienes que asistir a la entrevista —habló incorporándose y yo hice lo mismo.

—La entrevista puede esperar —tomé su muñeca y la jalé hasta que quedó sentada en mis piernas—, pero nosotros no.

—Llegaras tarde —acarició mi cabello —recuerda que dijiste que tenías que estar ahí antes de las nueve y señor perfección odia la impuntualidad.

—Prefiero no ir, así no me reclamarán.

—Adam —advirtió

—Bien —respondí entre dientes—. ¿Verás la entrevista?

—No me la perdería. ¿Hablarás de mí?

—Solo si preguntan, no quiero gritar a los cuatro vientos que tengo novia, de hacerlo, perderé a mis fans y no gracias.

—¡Oye! —se apartó de mí —ellas deben saber que estás conmigo.

—Nah.

—Eres un tonto —se rio.

—Lo sé, pero este tonto te llevará a casa —estiré mi mano para que la tomara—, porque si te quedas me preocupa que termines vendiendo mi ropa —soltó una carcajada y aceptó mi mano.

Agarré mis llaves y la llevé a su departamento, no dejaría que tomara otro taxi, su auto se había descompuesto y estaban tardando más de lo que creían en arreglarlo, antes de bajar del auto me besó y me pidió que pusiera mi mejor cara en la entrevista, sí que me conocía.

Para cuando llegué los chicos ya estaban ahí en el estudio, nos dieron indicaciones de qué hacer y cómo responder ante ciertas preguntas, era importante que no reveláramos que pronto trabajaríamos en nuestro álbum, la gente solo debía saber de nuestro nuevo sencillo y nada más. Trevor insistía en que debíamos hacer que la gente se interesara más y más en nosotros y darles toda la información que conocíamos no sería una buena jugada.

Antes de empezar con el programa nos ofrecieron algo de beber y detrás de las cámaras había una mesa con comida, había hamburguesas y Chloe no lo pensó dos veces para tomar una y devorarla al igual que Donovan.

—¿No comerás? ¿Desde cuándo Adam Stone no come?

—Comí algo tarde con Juls.

—Perdón, ¿qué? ¿Qué te comiste a Juls? —me miró con diversión y le dio una mordida a su pan.

Saludable hasta el final.

—Idiota —le sonreí.

—Las cosas van bien con ella ¿eh?

—Creo que sí, solo espero que todo se mantenga igual.

—Verás que sí, se nota que no es como otras chicas que has conocido, ahora sí supiste elegir a tu chica porque lamento decirte que tus gustos iban de mal en peor.

—Las chicas que me gustaban eran bastante lindas y de buen cuerpo, ¿te creías que me importaba antes la personalidad?

—Ahora creo que es todo lo que te importa.

—Juls es diferente.

—Me alegra que te sientas bien con ella, bueno —aclaró su garganta—, siento que no te lo dije, pero en serio lamento mucho lo que pasó con la banda, sé que debí contarte lo que quería y que, de alguna manera te afectó que dejara la guitarra, lo que menos quiero es perjudicar a la banda o nuestra amistad, si me dices que quieres que regrese a tocar contigo créeme que yo

—Basta —interrumpí—. Creo que fue egoísta de mi parte tratar de convencerte de algo que no querías hacer, la idea inicial era que tú fueras el pianista de la banda y fue justamente por la amistad que tenemos que hiciste a un lado tu sueño solo para hacerme sentir mejor, estuviste todo este año tocando la guitarra, es tiempo de que cumplas ahora tu sueño, no el mío.

—No solo fue por hacerte sentir mejor, quise estar desde el principio contigo en esta banda, además, era necesario que alguien más tocara los solos de guitarra o tu ego crecería —bromeó.

—Es una pena porque ahora que no estarás supongo que mi ego crecerá.

—Ya lo veremos. Entonces ¿todo bien entre nosotros?

—Mejor que nunca.

A lado de nosotros había un chico y una chica, la chica sonó su nariz y el chico nos miró con ¿cariño?

—¿Por qué demonios estás llorando, Chloe?

—Es que, no entiendes, Adam, esta es una muy linda reconciliación —volvió a sonarse —ya somos una familia feliz de nuevo, ay, vengan acá.

Se acercó a nosotros y nos abrazó, Donovan no pudo resistirse y se nos unió. Sí, habíamos formado una familia un tanto disfuncional, pero en serio nos queríamos, habíamos pasado por muchas cosas juntos y aún no nos matábamos, eso ya era un verdadero logro.

—Chicos, ya los van a presentar.

La voz de Trevor nos trajo de vuelta a la realidad, ah, sí, la entrevista.

Claro que Chloe se arregló como si no hubiera estado llorando hace tan solo unos instantes. Maya, la entrevistadora ya estaba hablando de nosotros, estábamos al aire y en cuanto nos vio supo que era momento de presentarnos.

—Pero los detalles nos lo darán ellos —habló sonriente—. Es un honor tener a una banda que se está ganado el cariño de cientos de personas, con ustedes ¡Hidden!

La gente empezó a aplaudir emocionada, con nuestra mejor sonrisa nos acercamos y algunas cámaras nos enfocaron, tomamos asiento y le agradecimos a la chica por habernos invitado, obvio que no pasamos por alto la energía con la que nos recibió la audiencia.

—Cuéntennos, ¿cómo se sienten? Esta debe ser una noche muy importante para ustedes, un punto clave en su carrera, díganle a sus fans el motivo.

Todos teníamos un micrófono y fui yo el que habló.

—Bueno, como saben hoy a las diez se estrena en Trackmind nuestro primer sencillo, nos emociona mucho que puedan disfrutar de esto con nosotros, el logro es de ustedes y nuestro.

—Así es, no estaríamos aquí de no ser por su apoyo, estamos muy contentos de por fin mostrarles este nuevo sencillo —agregó Johnny.

—Se los debemos, además es algo muy diferente a lo que solemos hacer, estoy segura que les gustara.

—Y de ser así, entonces se vendrán más sorpresas para ustedes —Donovan fue el último en hablar.

—Ya escucharon chicos, Hidden viene con todo, ahora si no les molesta tengo algunas preguntas de los fans para ustedes, ¿están listos?

Todos asentimos y así fue como la entrevista continuó, la gente quería saber más de nosotros, como es que empezó la banda, quién era el líder, la forma en la que ensayábamos, los consejos que teníamos para los chicos y chicas que también querían dedicarse a esto entre otras cosas, las cosas fluyeron de buena manera y respondimos con gusto a cada pregunta, se sentía como una charla más entre amigos. Maya se aseguraba de tener un buen ambiente, de vez en cuando escuchábamos los gritos de la audiencia diciendo cuanto amaban nuestra música, el tiempo se estaba agotando así que llegamos a las últimas preguntas de la noche, cada una enfocada a uno de nosotros.

—Bien esta es para ti Donovan, ¿por qué no haces coros? Y, ¿te gusta realmente tu instrumento?

—Bueno —se rascó detrás de la oreja—, digamos que toco mejor de lo canto y sí, en definitiva, me gusta mi instrumento, aunque son pocas las veces que el resto de la banda se equivoca en el escenario, me siento orgulloso de decir que ante esos detalles solo toco un par de redobles y ellos vuelven a tomar el ritmo de la canción, mantengo un equilibrio.

—Interesante, oh, ya están llegando los comentarios —se mostraba en una pantalla los comentarios que hacían de nosotros en la cuenta de Maya en My Story—. Donovan es el salvador, Donovan te amamos —leyó—, sí que tienes admiradoras, Donovan. Ahora esta es para ti, Johnny, ¿cómo fue el cambio de guitarrista a pianista? ¿Será que tendremos un álbum pronto?

Claro, para sacar información se fueron a lo seguro, Johnny siempre habla bajo presión.

—En realidad domino el piano desde hace años por lo que no me costó trabajo adaptarme, llegamos a un acuerdo y es que la banda necesitaba dejar de usar la secuencia de piano y tener realmente a un pianista.

—Pero ¿y las canciones que ya tenías grabadas en guitarra?

—Esos cambios los hicimos para que Adam y yo trabajáramos por igual, pero no notarán la diferencia cuando escuchen las canciones, él seguirá haciendo los solos y por ahora estamos centrados en este sencillo, no sabemos qué pueda suceder en un futuro, la idea de sacar un álbum está pendiente.

—¿Pendiente tipo dentro de unas semanas? ¿O pendiente tipo dentro de varios meses?

—Pendiente —sonrió—, es todo lo que puedo decir.

—Bien, chicos roguemos para que sí tengamos un álbum —sonrió ante la cámara—. Chloe, ¿qué se siente ser la única chica de la banda? ¿Siempre has tocado el bajo?

—Cualquiera pensaría que es un sueño, pero estos chicos pueden volverse insoportables —Maya empezó a reírse—, pero la verdad es que no cambiaría a estos chicos por nada, me siento cómoda con ellos, es cierto que a veces discutimos, pero no sabes cuánto me ha ayudado tenerlos cerca, me acoplé con ellos y me siento cómoda trabajando así, al principio me asustaba la idea de ser la única chica, creí que sería acosada o algo por el estilo —empezó a reírse—, afortunadamente eso no sucedió, somos como hermanos.

—Veo que ustedes son muy unidos, últimamente las bandas de ahora son solo chicos y chicas trabajando juntos, ustedes tienen algo especial. ¿Qué hay del bajo?

—Empecé tocando la batería, pero cuando tuve el bajo en mis manos me sentí diferente, mi padre me pagó clases con un maestro particular y desde entonces solo me enfoco en tocar el bajo.

—Qué bueno que encontraste tu pasión. Ahora, el momento que todas las chicas han estado esperando, Adam ¿cómo te sientes al ser líder de la banda? Y, ¿por qué un chico tan apuesto como tú está soltero?

—Siempre he dejado claro que no es mi banda, todos aportamos algo y tomamos las decisiones juntos, creo que la etiqueta de líder me fue puesta porque represento de alguna manera a los chicos, soy la voz principal y me encargo de algunas otras cosas, no ha sido tan sencillo porque como dije, todos tomamos decisiones y ponernos de acuerdo es sumamente complicado —añadí divertido—. Me siento tranquilo porque sé que sin importar lo que haga ellos me respaldan.

—Aww, veo porque te adoran las chicas.

—Sí —sonreí—, aunque la verdad es que no estoy soltero.

—¿Qué? —la sonrisa que tenía Maya desapareció para dar paso a una mirada de confusión.

—Tengo novia.

Ni Maya ni los chicos lo podían creer, esto daría de que hablar así que Trevor a la distancia me levantó el pulgar y leí sus labios diciendo «bien hecho»

—Bu-bueno, lo siento chicas ya no podremos hacer nada

¿Podremos?

—Ha sido un honor tenerlos aquí hoy, ellos son Hidden. No olviden estar al pendiente de su nuevo sencillo que estará disponible dentro de unos minutos, sigan nuestra página oficial para estar al tanto de más noticias y de nuestros siguientes invitados, esto ha sido todo por el programa de hoy. ¡Nos vemos mañana a la misma hora!

Apenas las cámaras se apagaron nos indicaron que era todo por hoy, estábamos contentos de haber terminado con la entrevista y teníamos quince minutos al menos antes de que fueran las diez. Trevor dijo que podríamos celebrar en un bar, yo propuse ir con Zach, ahí en el sótano del bar y el pequeño escenario que tenía comenzó todo, queríamos compartir ese logro con él.

Al llegar nos recibió con esa alegría que tanto lo caracterizaba, había reservado una mesa para nosotros apenas le dijimos que iríamos, Chloe se encargó de presentar a Trevor y el resto nos fuimos a sentar, nos trajo unas cervezas y en la pantalla se transmitiría nuestra canción, había sido divertido grabar el vídeo, había quedado genial.

—¿No pensabas decirnos que ya era oficial?

—Donovan, creí que era obvio.

—Pues no lo fue, solo creímos que estabas probando el terreno —intervino Johnny—. Nos alegra que al menos las cosas estén saliendo bien, te lo mereces, amigo.

—Más te vale que la traigas a los ensayos —amenazó Chloe quien llegó de la mano con Trevor—. Una chica más en este grupo selecto es todo lo que necesito.

—Lo que necesitas es una aliada.

—Tú me entiendes.

El sonido de mi celular me distrajo, era un mensaje de ella, me envió una foto, estaba en su cama con una taza de café y se veía en la laptop que tenía en sus piernas que estaba esperando a que Trackmind publicara nuestra canción y el vídeo.

Juls: A tu salud, con que el gran Adam Stone tiene novia ¿eh? No recuerdo haberte dado el sí.

Yo: Al diablo las etiquetas, Juls. Lo que importa es que sabemos que lo que sentimos es real y mutuo, ahora, si quieres puedo ir a tu casa con un inmenso peluche, rosas y un cartel con la gran pregunta.

Juls: Dios, no, ni se te ocurra, asustarás a los chicos que están detrás de mí.

Yo: Con mayor razón. Espero que te guste la canción, está por comenzar, te veré mañana. Descansa, Juls.

Juls: Descansa, Adam.

Diez en punto, en la pantalla apareció el logo de nuestra banda, comenzaron a sonar todos los celulares de las personas que se encontraban ahí recibiendo la notificación de que ya se estaba estrenando la canción, como dije, era raro que alguien no estuviera registrado en Trackmind, estábamos observando el vídeo, a la gente le estaba gustando y dentro de la plataforma los números que indicaban las reproducciones y descargas no dejaban de incrementar.

—Salud chicos, este es su momento de gloria —levantó Trevor su cerveza.

—¡Salud! —hablamos a una sola voz y chocamos nuestras bebidas.

Tenía razón, este era nuestro momento, el primero de muchos, al fin estaba pasando, estábamos cumpliendo nuestros sueños.

Lo logramos, Landon.


Que bonito que cumpla sus sueños :')

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