32 | Revelaciones
Era notoria la tensión que se creó después de que Marcus saliera de la cabina, casi sentía que podía escuchar el corazón de todos los que se encontraban de pie frente a mí.
—Bueno, creo que tienen mucho de qué hablar, iré por un trago si me necesitan.
Papá salió del estudio y Juls iba tras de él.
—Juls —se giró para verme—. ¿Te puedes quedar?
Asintió como si fuera todo lo que quisiera escuchar, tomó asiento a mi lado y los chicos se sentaron en los sillones de enfrente, todos intercambiábamos miradas, supongo que una vez más tendría que ser yo quién hablara.
—Creo que ya todos sabemos porque las chicas se fueron —suspiré—. Perdón —hablamos al mismo tiempo los chicos y yo, las chicas se miraron confundidas, quise ser el primero en hablar—. Dos mujeres como ustedes son muy importantes en mi vida —las miré a ambas—. No llegué a tenerles un odio profundo, pero si les guardé rencor mucho tiempo, lamento no haber averiguado esto antes.
—No fue tu culpa, creo que nuestra actuación fue buena, solo queríamos lo mejor para ustedes, y no quería que nada te pasara, amor —miró a Dono—. Tenían información de mi padre, él también tenía mucho que perder, también lo siento.
—Todo olvidado —aseguré.
Juls tomó mi mano, no dijo nada, pero ese simple acto bastó para que yo entendiera todo.
—También lo siento —habló Johnny—. Ambas merecen una disculpa, Chloe te guardé rencor un tiempo, no sé cómo es que después de todo lo que pasamos juntos pude creer que en serio querías hacer las cosas por tu cuenta, cuando nos dijiste que era por nuestro bien pensé, ¿de qué podría protegernos? Ahora veo que había mucho en juego, Juliette —la miró—. Me duele decirte que yo sí llegué a odiarte por lo que le habías hecho a Adam, ya había pasado por tanto y creí que no se equivocaba contigo, lo hubieras visto, se aferró a que no serías capaz de hacer algo como eso, fue el único que creyó en ti todo el tiempo, debí imaginar que lo único que querías para él era solo lo mejor, en serio lamento haber sido tan egoísta y siento haber rechazado la llamada, ese día que se anunció su relación con Sabrina, yo tenía su teléfono, él no te colgó, fui yo y no sabes cómo me arrepiento.
—¿Qué hiciste qué? —me sorprendí.
—Está bien —interviene Juls—. Lo entiendo, solo querías proteger a tu amigo, quizá hubiera hecho lo mismo, también lo siento, chicos, soy consciente de que no solo lastimé a Adam sino a todos ustedes, no quería irme de esa manera, espero que todo pueda quedar olvidado.
—Bueno, pues también tengo que disculparme por muchas cosas, Juliette, siempre supe que había algo raro detrás de tu partida, jamás imaginé que era algo de esta magnitud, ahora entiendo que Adam jamás se equivocó contigo, ninguna otra chica hubiera hecho lo que tú hiciste por él, sé que en parte también nos protegiste a nosotros y no sabes cuán agradecidos estamos por eso, espero que puedas perdonarme.
—Todo perdonado.
—¿Y mi disculpa? —habló la morena.
—¿Cuántas veces tengo que decirte que lo siento?
—Las que sean necesarias, amor —le sonrió.
—Lo siento —sonaba sincero.
—Lo sé —se inclinó para darle un beso corto—. Ahora que las cosas están aclaradas, creo que tenemos que irnos.
—¿A dónde? —pregunta teclitas.
—A darles su espacio a estos dos —habla como si fuera obvio—. Es claro que tienen mucho que aclarar.
—Los esperamos afuera de la cabina, chicos.
—Nada de estar escuchándonos, ruidosa.
—Trataré de mantenerme al margen.
Los chicos salieron de la cabina y nuevamente el silencio reinó.
—Yo... —hablamos al mismo tiempo—. Déjame empezar —pedí—. Siento mucho lo que pasó, el haberte gritado, el haberte tratado tan mal, eras la última persona que merecía ese trato de mi parte, todo lo que has hecho este tiempo ha sido protegerme.
—Fallé, me fui porque tampoco quería que tuvieras una recaída y mírate, tuviste que lidiar con un proceso de desintoxicación peor que el de Hailey, no estuve ahí para ti.
—Tampoco estuve solo si es lo que te preocupa.
—No quería dejarte —de nuevo pude ver la sinceridad en sus ojos—. Jamás quise hacerlo, pero me dijo que si tu expediente salía a la luz entonces tu carrera se arruinaría y que Trackmind ya no los querría, temía que tuvieras una recaída y cuando me enteré de que la tuviste no tienes idea de lo mal que me sentí, pasé días pensando en si había hecho lo correcto, jamás estuve con Cory, la relación, el beso, todo fue un plan, necesitaba convencerte de que en verdad había dejado de quererte, pero te mentí, porque el único a quién siempre he amado es a ti, Adam —derramó una lágrima y noté que yo estaba haciendo lo mismo.
—Debí haberme aferrado un poco más a nosotros, debí investigar antes lo que estaba pasando, tuve que haber ido a Nueva Zelanda y buscarte, te juro que jamás dejé de amarte, no hubo un solo instante en que no pensara en ti, en cuanto te extrañaba o en cuanto te necesitaba, y cuando volví a verte, me asusté, temía que fueras a irte de nuevo, pero en el fondo siempre me aferré a la idea de que en algún momento todo estaría bien y ya no habría nada que se interpusiera entre nosotros, lamento no haber luchado más.
Y me dolía hasta el alma no haberlo hecho.
—Lo hiciste, te esforzaste, cada noche que me mandabas un mensaje, cada nota de voz que enviabas diciéndome que cambiarías lo que yo te pidiera con tal de que volviera, te aferraste a nosotros todo este tiempo —sonreí de lado y tomó mi rostro en sus manos—. Mira el lado positivo, el álbum de pieces es hasta ahora el mejor de la banda.
Eso en realidad me hizo sentir peor.
—Juls, lo que dije en esas canciones
—Lo sé, sé que no las sentías en realidad, no todo —dejó su frente sobre la mía—. Ya no hay nada que se interponga —se inclinó más para abrazarme.
Me sentí completo en ese instante.
—No sabes cuánto te extrañé —hablé abrazándola con fuerza.
—Y yo a ti.
—No más secretos —supliqué.
—No más secretos —se apartó de mí y me besó—. Te amo, Adam, te juro que te amo.
—Te amo, Juls, con cada parte de mi ser —entendí que tenía que hacer algo—. ¿Me acompañas?
—Sí.
—Ni siquiera sabes a dónde iré —reí un poco.
—No me importa si quieres ir al otro lado del mundo, iré contigo.
Me levanté y estiré mi mano, la aceptó con mucha facilidad, salimos de la cabina y encontramos a los chicos llorando.
—¿Qué te dije de escuchar mi conversación, Chloe?
—Es que eso fue —sonó su nariz—. Eso fue muy lindo, ustedes me hacen creer en el amor, chicos, por favor duren toda la vida.
Ese es el plan.
—Tengo que irme.
—¿A dónde? —se levanta Dono limpiando las lágrimas y Johhny copia su acción.
—Con Maya.
No entienden qué es lo que haré, pero igual me siguen, por suerte en cuanto llegamos con ella dice que le acaba de cancelar su invitada así que tiene ese espacio para mí, les pido a los chicos que se queden ahí y no interfieran.
El camarógrafo hace la cuenta regresiva con sus dedos y activa los drones, ya estamos al aire.
—Después de este corte comercial muchos han estado a la esperada de nuestra invitada, pero tuvo un percance, sin embargo, traigo algo que les encantará, me encuentro con nada más y nada menos que Adam Stone.
Se escuchan lo gritos y aplausos de la audiencia.
—Gracias, Maya.
—Adam, estamos en la sección de revelaciones y secretos, ¿vienes a confesarte acaso?
—Algo por el estilo.
Noto como todos están atentos a cada palabra que digo.
—Dinos, ¿de qué se trata?
Por dónde empezar.
—Sé que hay varios de nuestros Hidders por aquí, ¿verdad?
—¡Sí! —exclaman a una voz.
—Creo que si alguien merece nuestra sinceridad son ustedes —suspiro—. Nos han obligado a mentirles.
—Por suerte hemos venido a aclarar todo —Johnny entra.
—Y queremos ser sinceros, chicos —habla la morena y todos se emocionan al verla.
—Y hay más de un chisme por aquí —Dono está jalando a Juls y la obliga a sentarse a mi lado.
—Wow, Hidden viene con todo este día, estamos ansiosos por saber de qué se trata.
Explicamos lo que había ocurrido, no mencionamos la parte en donde Marcus manipuló a Chloe y a Juls, pero dejamos en claro que eso de la relación falsa con Sabrina había sido su idea, los Hidders se sorprendieron por lo que había pasado con Marcus, claro que aclaramos que ya no sería representante de Hidden y que ahora solo debíamos esperar para saber cuál sería el destino de Hidden.
Hablamos sobre los problemas de todos, lo que el idiota estaba usando para manipular a las chicas lo dijimos tal cual en el programa, expliqué que sí estaba relacionado con problemas de drogas, pero que como podían ver estoy en mucho mejor estado ahora, Johnny habló un poco de sus ataques de ira, Dono de los problemas que llegó a tener con la ley y los escándalos en los que Chloe se veía envuelta, Juls aclaró que la relación que tuvo con Cory también fue una farsa, fue divertido ver la cara de alivio de nuestros Hidders cuando supieron que en realidad no me había engañado, después de todo ellos tampoco habían perdido la fe en ella y me alegraba por eso.
—¡Demasiada información, chicos! —exclama, Maya—, pero en serio agradecemos que hayan compartido esto con nosotros, significa mucho para sus Hidders.
—¡Gracias, chicos!
—¡Los amamos!
—¡Hidden por siempre!
Se escuchaba que gritaban varias personas de entre la audiencia.
—Queremos saber, porque en serio nos carcome la curiosidad, ¿volviste con Juliette?
Ella me mira con una sonrisa de oreja a oreja.
—Sí, después de todo creo que no podemos esconder el amor que sentimos el uno por el otro —entrelaza su mano con la mía
—Los entiendo, ya habían sufrido demasiado como para que no tuvieran su final feliz, estamos muy contentos por ustedes, ¿qué creen que pase con la banda?
—Aún no lo sabemos —responde Dono.
—Esperemos que solo cosas buenas.
—Esperemos —Johnny se ve esperanzado.
—¿Y noticias de que Chloe regresa a la banda?
—Quisiéramos que fuera sencillo, pero hay mucho que arreglar aún antes de dar esa noticia —habla la aludida.
—Entendemos, ojalá que pronto haya nuevas noticias, gracias por venir este día y por darnos los mejores secretos y revelaciones ¡Un aplauso para estos chicos!
La gente nos despide con aplausos y palabras de aliento y el chico grita ¡Corte! Me siento más tranquilo después de haber dicho todo eso, espero que no nos cueste la banda, pero fuimos sinceros, es lo único que importa.
—Muchas gracias por salvarme, chicos, llegaron en el momento preciso.
—No hay de qué, gracias por dejarnos ser parte de la sección.
—Ay, por favor, Adam —le restó importancia—. Hidden siempre es bien recibido aquí y lo saben, cuando quieran venir no duden en que tendremos las puertas abiertas para ustedes.
—Te lo agradecemos, Maya —comenta Chloe y salimos de ahí.
—¿Y ahora qué? —pregunta Dono
Llamada entrante: Dueña de Trackmind.
—Registré el número, es la dueña de Trackmind.
—¿Y a qué esperas? Madre mía, Adam responde.
—Hola.
—Adam, me alegra escucharte, ¿cómo estás?
—¿Cómo estoy?
—Tengo acceso a las cámaras de cada edificio, había estado notando un fallo en particular con las cámaras de la cabina y las de la oficina de Marcus, mandé a que lo arreglaran, ya tengo pruebas suficientes para que no vuelva a poner un pie en ninguna disquera, te lo aseguro.
—¿Sospechaba de esto?
—Desde hace tiempo, también estuve haciendo mi investigación, sería bueno que habláramos todos.
—Me imagino que se refiere a una llamada grupal.
—No —escucho que ríe un poco—. Daré el anuncio esta noche de mi identidad, pero necesito mostrarles a ustedes primero quién soy.
—¿Es-está bromeando?
Este es por mucho el día más loco de toda mi vida.
—En lo absoluto, aunque hay algo que me gustaría comentarte.
—Dígame
Todos están confundidos porque es raro que me ponga nervioso, pero es que la dueña está hablando conmigo y me dice que quiere que sepamos su identidad antes de que toda la empresa se entere, ¿ustedes no se sentirían alagados?
—Necesitan una nueva bajista.
—Sí, hablando de eso me gustaría
—Oh, descuida, yo también quiero que Chloe vuelva, pero necesitará audicionar, dile que prepare una canción, los estaré esperando en el auditorio del edificio, que llegue, toque y ustedes sabrán si aún tiene la chispa necesaria para ser parte de Hidden.
—De acuerdo, vamos para allá.
—Un último favor.
—El que sea.
—¿Puedes traer a tu padre?
Era el favor más extraño que me habían pedido, sus razones tendrá.
—Por supuesto, le diré que vaya.
—Gracias —colgó la llamada
—¿Y bien? —preguntaron todos al mismo tiempo.
—Quiere vernos —hablé incrédulo.
—Te refieres a que enviará a otro representante para que hable con nosotros, ¿no?
—No, teclitas, quiere conocernos en persona, revelará su identidad esta noche, quiere que seamos los primeros en saber quién es.
—¿Y qué más te ha dicho? Es que ¿os lo podéis imaginar? La dueña quiere conocernos, tremendo honor.
—Quiere que consigamos otra bajista, dijo que también quiere de vuelta a Chloe, pero necesita que audiciones.
Pocas veces he visto a Chloe pálida, esta es una de esas veces.
—¿Qué audicione? —su voz sonó un poco más aguda
—Ella estará allá presenciando todo, dice que nosotros tomaremos la decisión final, quiere ver si aún tienes la chispa necesaria para ser parte de Hidden, es lo que dijo.
—Esto es una locura —comenta Juls a mi lado—. ¿Y qué esperan? Vayan.
—Ah, no —tomé su mano—. Tú vienes conmigo.
Le entregué las llaves y se sorprendió aún más.
—¿Por qué me las das?
—Porque tú conducirás, tengo que avisarle a mi padre y no puedo hacerlo mientras manejo, ¿verdad?
Los chicos detrás de nosotros se sorprenden, si fueran caricaturas apuesto a que su mandíbula estaría hasta el suelo.
—A mí nunca me dejas conducir tus autos.
—Y probablemente nunca lo hagas, Dono, tienes un don para estrellarlos.
—¿Y qué hay de mí?
—Eres muy ruidosa como para que te deje hacerlo.
—¿Y yo?
—Teclitas, no finjas demencia ya has conducido mis autos, durante mi desintoxicación usabas mi auto para ir por la comida.
—Pero no he usado ese —señaló el auto negro de enfrente.
—Pues espera tu turno, ¿lista, amor?
—He esperado por esto toda mi vida —habla emocionada y sube al auto.
Todos suben mientras que yo le escribo a mi padre.
Yo: Deja de beber y vuelve al estudio, estaremos en el auditorio, la dueña quiere que estés con nosotros.
Por suerte responde rápido.
Papá: ¿La dueña quiere que esté ahí? Veo que aún no me conoce y ya cayó en el efecto Stone.
Yo: Date prisa, ya vamos para allá, Chloe hará su audición.
Papá: ¿De nuevo? Creí que regresaría así sin tanto problema.
Yo: Órdenes son órdenes.
Papá: Me sorprende tu profundidad.
Yo: Solo ven para acá.
Papá: Relájate ya voy en camino.
Yo: ¿Estás usando el celular mientras conduces?
Papá: Hijo, cálmate estoy usando los comandos de voz, tengo mis ojos puestos en la carretera, no moriré ni nada por el estilo.
Yo: Pues más te vale, es más te prohíbo que mueras, las cosas se están acomodando y al fin empiezo a sentirme completo de nuevo como para que tengas un accidente.
Papá: Interesante forma de decir que me quieres, te veo allá.
Sin darme cuenta ya hemos llegado, Juls no deja de sonreír, sus manos siguen en el volante, los chicos bajan, pero ella no lo hace.
—¿Qué pasa?
—¿Puedo volver a conducir? Es que este auto es una maravilla.
Me da tanta ternura verla así, en serio no tiene ni idea de cuánto la extrañaba.
—Por supuesto, pero ahora tenemos una audición que realizar, ¿vienes?
—No me lo perdería.
Entramos al auditorio y nos sentamos en una mesa que tiene detrás tres sillas.
—Bienvenidos, chicos, tomen asiento por favor —habla una mujer que está sentada en la oscuridad.
—No alcanzas silla, Juls —finjo estar decepcionado—. Tendrás que sentarte en mis piernas.
—Tengo que admitir que extrañaba ese tipo de comentarios.
—Lo sé.
—Pero hay varios asientos detrás de ustedes, me quedaré cerca de ti, descuida.
—¿Puedo hacerte cambiar de opinión?
—Nop.
—Bien, disfruta el espectáculo.
Mi papá entra corriendo y se sienta a un lado de Juls, a los pocos segundos Chloe entra con su bajo en mano y sube al escenario, le tiemblan un poco las piernas.
—Mi nombre es Chloe Moreno, vengo a audicionar para ser parte de Hidden, de nuevo, la canción que presentaré es una que compuse hace un tiempo, justo cuando me fui, se llama I think of you —miró a Dono
La canción empezaba como algo sencillo, era simple lo que hacía con el bajo, quedamos asombrados una vez más con su voz, tan perfecta, tan melodiosa, y era notorio el sentimiento que le estaba poniendo a esta canción.
The only thing I want to do is get back to you.
La única cosa que quiero hacer es volver contigo.
Stay by your side without concern
Quedarme contigo sin preocupación
I have to keep the seret that destroyed us
Tengo que guardar el secreto que nos destruyó
No, it's not right. How much would you risk for fame?
No, no está bien ¿Cuánto sacrificarías por la fama?
I have to be honest with you, with you
Tengo que ser honesta con ustedes, contigo.
The truth is that every day I think of you
La verdad es que cada día pienso en ti.
Era una canción lenta, aunque siento que quedaría genial si Johnny la acompañara en el piano, no cabe duda de que se ha sabido lucir usando solo el bajo y su voz, está más que claro que tiene talento y, sobre todo, que aún tiene la chispa para ser parte de la banda.
Is not enough? I did it to save us
¿No es suficiente? Lo hice para salvarnos
Is not enough? I should have done more
¿No es suficiente? Debí haber hecho más.
I want to go back, but I fear what might happen
Quiero regresar, pero temo lo que pueda suceder.
Maybe it's not enough, but every day I think of you.
Tal vez no es suficiente, pero cada día pienso en ti.
Sigue tocando, sé que se siente libre, que ya no hay presión, es una canción corta así que solo agrega un verso más y vuelve al coro haciendo un par de arreglos tanto en la voz como en su instrumento, termina de tocar y se enfoca en la mujer que yace en las sombras.
—La decisión la toman ellos, querida.
Vuelve a mirarnos.
—Es una difícil decisión, creo que perdiste un par de veces el tiempo —hablo para molestarla.
—Y creo que yo escuché una desafinación —me sigue la corriente Johnny.
Dono solo trata de contener la risa.
—Aceptaré su decisión, sea cual sea.
—No hay mucho que pensar, ruidosa, para mí es un sí, obvio quiero que regreses y esa canción estará en el quinto álbum no está a discusión.
—Bien —sonríe.
—Para mí es un sí, tienes talento lo sabes, estaré encantado de que regreses con nosotros.
—Gracias, Johnny —su mirada cae en el chico alto que la ve como si fuera la novena maravilla.
—No hace falta decirlo, pero para mí es un sí, Hidden no estaría completo sin ti.
Juls se emociona y empieza a gritar.
—¡Esa mi es amigaaaa! ¡Woohoo! —mi padre le sigue la corriente y empieza a aplaudir también.
—Veo que tomaron su decisión —habla la mujer poniéndose de pie—. Me alegra que estés de vuelta con la banda, Chloe.
—Muchas gracias.
Comienza a bajar un par de escalones acercándose cada vez más hacía nosotros hasta que finalmente la vemos.
¡Sorpresa! Ninguno de nosotros la conoce, pero sé que la he visto en alguna parte, es una mujer que, aunque sabemos que tiene sus años se ha sabido mantener joven, rubia con el cabello lacio a diferencia de mi madre, es delgada, viste formalmente, mantiene su vista en una sola persona, mi padre.
—Hola, William
—Ellen —habla en un hilo de voz.
Esperen, esperen, no puede estar hablando en serio.
—¿Ellen? —pregunto—. ¿Esa Ellen de la que me hablaste?
—Es un placer conocerte, Adam.
—¿De qué me perdí? —habló Johnny.
—Cuando eran jóvenes, mi papá y Ellen estaban enamorados.
—¡¿Qué?! —soltaron al mismo tiempo todos.
—Tengo que explicarles —nos indicó que tomáramos asiento mientras que ella jalaba una silla para sentarse frente a nosotros—. Supongo que tienen dudas.
—Bastantes —aseguré—. Y la primera que necesito que me responda es si en verdad vio talento en nosotros o si nos escogió por el romance que tuvo con mi padre.
—Entiendo que temas que no hayas logrado nada, Adam, pero es todo lo contrario, los escogí por su talento, de hecho, me ofrecí a representarlos hace tiempo, esperando que dejaran botado a Marcus, quería ver si tenían lealtad como aseguraban y saber si valía la pena arriesgarme con ustedes.
El recuerdo de ese día vino a mi mente.
—Eso estuvo increíble —habló una mujer cuando el resto de bandas se alejaron.
No estaba seguro de si era alguien de las bandas, todos lucían jóvenes y bueno... ella no tanto, llevaba una sudadera negra con unas letras en el centro TM, quizá era una fan.
—Me llamo Ellen —estreché su mano.
—Adam un placer.
—Verás, Adam, vi que lo que hicieron allá arriba fue asombroso, en serio tienen talento.
—Muchas gracias —el resto de los chicos se acercaron.
—Hidden —nos miró—. Me gustaría que su sello discográfico fuera conmigo.
Vale, nos tomó por sorpresa.
—Lo sentimos —intervino Johnny ante mi silencio—. Ya tenemos un contrato con otra disquera.
—¿Y no les interesaría cambiarse de disquera? Tendrían más dinero y saben que entre disqueras podemos llegar a ciertos acuerdos.
—Lo siento... —esperó una repuesta Chloe.
—Ellen —aclaró.
—Ellen, la verdad es que ganamos bastante bien para ser una banda nueva y cambiarnos sería como
—Traición —concluyó Dono y yo asentí.
—Si bien no todo ha sido color de rosa, la disquera con la que firmamos fue la primera que vio nuestro talento, se arriesgó y apostó por nosotros y una de las tantas cualidades de la banda, es que somos leales.
—Es lo que veo —sonrió como si fuera la respuesta que quería escuchar—. Si algún día llegan a cambiar de opinión, aquí tienen mi tarjeta.
—Gracias.
—Un placer, Hidden —dio media vuelta y se marchó.
Entonces fue como si todo tuviera sentido por fin.
—TM —hablé—. Eso decía tu sudadera el día que nos conocimos, es la abreviatura de Trackmind —ella asiente.
—Hay una explicación para todo, ¿quieren la versión larga o la corta?
—La larga —respondimos a una sola voz.
—Comenzó contigo, Adam.
—¿Conmigo?
—Hace un par de años abrí una convocatorio en Trackmind para que chicos que tenían ganas de cumplir su sueño pudieran hacerlo realidad, recibí cientos de propuestas, pero ninguna cumplía las características que solicitaba, tú enviaste tu material, ¿recuerdas?
—Sí, pero jamás respondieron, supongo que tampoco les agradé.
—En realidad hubieras sido el único en quedarte dentro de Trackmind como solista, enviaste las canciones en las que habías estado trabajando antes de crear la banda, la cosa es que, tu material jamás llegó a mis manos.
—¿Cómo es eso posible? —habla Dono sorprendido.
Juls está a mi lado sosteniendo mi mano y escuchando cada palabra que dice Ellen.
—En aquel entonces Marcus trabajaba conmigo, era algo así como mi mano derecha, no hubiera sospechado de él, se había ganado mi confianza, tiempo después descubrimos que estaba trabajando para su propio beneficio, modificando contratos, y metiendo a la empresa a personas que ni al caso, creí que quería un aumento, solo debía pedirlo, fui demasiado ingenua al pensar que un hombre como él podía cambiar, lo mandé a que fuera representante de una disquera, tendría reconocimiento, podría ser más libre en ese espacio, además de que no podía envolverme tan pronto en polémicas de porque lo despedí, eso le habría traído mala reputación a la disquera y era lo último que quería.
—¿Y qué pasó después? —Johnny se ve más interesado con cada palabra que escucha.
—Contraté a otra persona quién se hizo responsable de arreglar el desastre que había hecho Marcus, me fiaba mucho de su criterio al momento de escoger a nuevas personas para las disqueras, el chico que contraté encontró el archivo que enviaste Adam, escuché lo que compusiste, la manera en la que hablabas, me llevé una gran sorpresa al descubrir que eras un Stone, desafortunadamente, para cuando me enteré que tenías el potencial para ser parte de Trackmind ya era tardé, los meses habían pasado y cuando quise contactarte porque me enteré que habías formado una banda
—Nosotros ya habíamos firmado con Marcus —concluí.
—Exacto, en teoría seguía siendo yo la jefa, supuse que Marcus quería llevarse el crédito por representar a una banda que desde un principio dejó en claro que tenía las capacidades para triunfar, jamás creí que tenía un propósito oculto detrás.
» Ese día del evento los busqué y quería confirmar que no me había equivocado con ustedes, a pesar de que notaron el idiota que era Marcus no quisieron traicionarlo y se quedaron con él, no podía simplemente ordenar que se cancelara su contrato con Marcus para que firmaran conmigo porque yo no soy así, noté el éxito que estaban teniendo y creí que era todo lo que le importaría a Marcus, que Hidden fuera la mejor banda de todas, pero en el fondo los quería con Trackmind, hubiéramos hecho cosas brillantes, al no poder lograrlo decidí que les daría todo mi apoyo, porque sé que no hay banda que lo merezca más que ustedes.
—Y nos volvimos sus favoritos —hablé con una sonrisa de lado.
—Usted planeó las giras —comenta Dono.
—Así es, sabía que algo no estaba bien, no podía creer que Chloe se había ido sin una razón coherente, estoy al tanto de todo y sé que no hubo ninguna disquera de Finlandia que la haya buscado, hice mal las cosas desde un principio al quedarme cegada por la bondad que creí ver en Marcus, es por eso que contraté a un detective que me diera los datos de todos ustedes, para ser tan cercanos y unidos no podía entender que se hayan separado de alguna manera, me encargué de que los conciertos fueran en zonas donde habían crecido, creí que podrían encontrar la forma de solucionar sus problemas y con suerte la banda volvería a ser la misma de antes.
—España —habló en un hilo de voz.
—Para que pudieran verte, Chloe, con suerte Adam te convencía de regresar a la banda, no tenía ni idea que había algo más fuerte detrás que te obliga a permanecer allá.
—Los Ángeles.
—Creí que te gustaría arreglar las cosas con tu padre y estar un rato con tu madre, Johnny.
—Canadá.
—Hasta donde sé arreglaste las cosas con tu familia y no solo eso, sino que también se dieron el lujo de golpear al pobre Charlie.
—¿Charlie? —casi se ahoga con su propia saliva.
—Larga historia, amor, te la cuento después.
—Falta uno —agrega Juls.
—Hidden ya había dado varios conciertos en Bridgen, creí que la única forma de que arreglara las cosas contigo era si se veían y eso no iba a pasar si tú seguías en Nueva Zelanda, Juliette, es por eso que insistí en que Hidden fuera parte de la película.
—Encontrarnos trajo varios problemas —aseguré.
—Están juntos ahora, ¿no es así? —observó nuestras manos entrelazadas—. Quería que al menos un Stone pudiera quedarse con la chica que quiere, ya que yo no tuve el valor de volver por tu padre —esta vez lo miraba a él—. Y no sabes cuánto lamento no haberte dicho que te amaba, debí hacer las cosas bien y lo único que hice al final fue huir.
—Tenías un padre al que cuidar, mira el lado positivo —habla con su voz gruesa—. De habernos quedado juntos no habrías descubierto el talento de mi hijo —suspiró—. Aunque nunca es tarde para empezar de nuevo.
Papá también merecía ese final feliz, quedándose con la chica que quiere, se nota en la forma en que la mira que aún está enamorado de ella, no tengo duda de eso.
—Supongo que lo hablaremos después —se centró de nuevo en nosotros—. Después del accidente de Adam supe que algo definitivamente no estaba bien, creí que la rivalidad con Jeremy era algo natural, pero el accidente dejó en claro que va más allá de eso, recibí informes de lo que Marcus había estado haciendo, la manera en que manipulaba las cámaras, él se encargó de golpear también a Adam, amenazó a Juliette y a Chloe para que se fueran y dejaran a los chicos, metió a su sobrino al mundo de la música y yo como ciega me dejé engañar creyendo que Chaos solo quería tener fama, todos se aliaron para destruir lo único que se interponía en su camino: Tú, Adam.
—Y aun así fallaron —aseguró Juls.
—Correcto, aunque pasaron meses de sufrimiento, hoy Hidden está mejor que nunca, Chloe volvió a la banda, Adam estás con la chica que siempre has querido, Marcus ya no será un problema de ahora en adelante y cancelé el contrato de Chaos, si quieren seguir siendo músicos tendrán que buscarse otra disquera y quiero ofrecerles el estudio que ellos dejaron.
—¿Cómo? —parpadeé confundido.
—Quiero que Hidden firmé su contrato con Trackmind si es que están interesados, también le pedí a Trevor que se mudara de edificio, si no les importa él podría seguir siendo su productor, ¿qué dicen?
Esto era, era más de lo que siempre había pedido, no podía creer que Ellen en serio nos estuviera pidiendo que formáramos parte de Trackmind, es como un sueño hecho realidad, de verdad que no tengo palabras que puedan expresar cómo me siento justo ahora.
Siento la mirada de todos sobre mí.
—Esto siempre ha sido una democracia —me encuentro hablando.
—Tenemos un líder —comenta Dono.
—Lo que sea que escoja será lo mejor para nosotros —su novia sostiene su mano.
—Así que la decisión es suya.
La mirada de Ellen se enfoca solo en mí.
—¿Y bien líder? ¿Qué escoges?
—Firmaremos nuestro contrato con Trackmind, no tengo palabras para agradecerle todo lo que ha hecho por nosotros desde el principio, no la vamos a decepcionar.
—Sé que no lo harán, pueden irse —se levanta y mi padre copia su acción.
—¿Podemos hablar? —le pide.
—Vamos a la oficina.
Él se pierde junto con ella en las sombras.
—Aaaaaaah —grita la ruidosa y mira a Donovan.
—Aaaaaaah —Dono le corresponde y ahora mira a Juls
—Aaaaaaah —gritan al mismo tiempo.
Johnny yo intercambiamos miradas y nos unimos al grito.
—Aaaaaaah
—Chicos tenemos que celebrar, sí que es verdad que ha sido un día de locos, pero nada mejor que unas cervezas y unas hamburguesas deliciosas.
—Vayamos a celebrar —sigue la corriente su novio.
Nos acercamos a la entrada principal y por primera vez no hay paparazzi's y en serio lo agradezco.
—Adam —me mira Juls—. Deberías cambiar ya la pijama.
—No es pijama, solo es un pantalón de algodón y una playera, ni quién sospeche.
Nos acercamos a los autos listos para subir y largarnos a celebrar, pero la voz de un hombre nos detiene y nos giramos para verlo. Genial, es un policía.
—Creo que tendremos que celebrar en otro momento —hablo cerca de Juls.
—¿Señor Stone?
—Oficial, ¿en qué puedo ayudarlo?
—Necesito que la señorita Chloe Moreno, Juliette Graves y usted me acompañen.
—¿Para qué? —interrumpe la morena.
—Deben dar su declaración, sabemos que ustedes tres estuvieron bastante relacionados con los problemas que el Señor Wright causó.
—Solo es declaración —miro a los chicos quienes lucen preocupados—. Después de eso podremos irnos, ¿verdad?
—Por supuesto.
—Bien. Johnny, avísale a mi padre que estaré en la comisaria.
—Adam —me detiene Dono
—Tranquilo, poste, la cuidaré bien.
Subimos a la patrulla y noto que las chicas a mi lado están tan nerviosas que no dejan de temblar, llegamos a la comisaria y bajamos del auto, Juls camina sosteniendo mi mano y Chloe del otro lado se aferra a mi brazo, cruzamos un pasillo que parece interminable y al final solo vemos una luz blanca.
—No quiero morir.
—Chloe, relájate.
—Vamos hacia una luz blanca, ¿tú qué crees que pasará? —interviene Juls.
—Juls, estaremos bien.
Cuando llegamos al fondo vemos a un montón de personas caminando de un lado a otro, es un espacio inmenso, seguimos caminando y encontramos un pasillo donde cada par de metros se encuentra un vidrio grande, entramos al cuarto de interrogatorios.
—Hablé con sus abogados, los están esperando.
Chloe me da una mirada mientras abre la puerta.
—Estaré aquí para cuando salgas y te llevaré con Dono, una noche tranquila ustedes dos no les vendría mal —me miró más relajada—. Ruidosa, todo estará bien —asiente y entra.
—Su turno, señorita Graves —abro la puerta por ella.
—Si te hacen algo cualquier cosa
—¿Los golpearás? —interrumpe con una sonrisa burlona.
—Sé que estamos en una comisaria, pero no dudes que lo haré —me acerco a darle un beso corto—. No es nada del otro mundo, son solo preguntas y ya, ¿de acuerdo?
—Bien —suspiró con pesadez—. Te amo.
—También te amo.
Entró y cerró la puerta, el oficial estiró su mano indicándome que la puerta de enfrente es la mía, al entrar el oficial también la cerró.
—¿Dean Catcher?
—Adam —se levantó para que estrecháramos nuestras manos—. Trackmind no se fío de que alguien de la disquera de Marcus te representara así que vengo yo.
—No sabía que eras abogado.
—Y el mejor.
Tomé asiento.
—¿Primera vez en un lugar como este? —pregunta el oficial revisando unos documentos.
—Desafortunadamente, no.
—Bueno, al menos conoces la rutina.
Empezaron con preguntas simples, les conté un poco de cómo conocimos a Marcus, la forma en que nos convenció para que firmáramos el contrato y como algunas cosas se complicaron después de eso.
—Y respecto a su novia, ¿tenía idea de que él la había obligado a irse?
—No, me enteré tiempo después cuando decidí contratar a un detective.
—Mencionaba que el detective no pudo conseguir el audio de las grabaciones.
—No.
—¿Por qué le creyó entonces?
—Primero porque es su trabajo, no ganaba nada diciéndome mentiras, además, me envió los archivos con los que Marcus amenazó a las chicas, mismo que ya se enviaron a esta comisaría, no creo que necesite más pruebas.
—Tenemos las suficientes, desde el momento de su accidente sus amigos nos notificaron que algo extraño había ocurrido.
—¿Revisaron las cámaras del estacionamiento del apartamento de mi cliente? —habla Dean con seguridad.
—Así es, las personas que se encargaron de golpearlo no fueron muy inteligentes, distinguimos sus rostros con facilidad, entre ellos aparecía Jeremy que fue interrogado ayer por la noche, y ya tenemos a Marcus, bien eso sería todo por ahora, ya se están tomando acciones legales.
—No irá a la cárcel solo por haber golpeado a mi cliente —pone los ojos en blanco como si tratara de decirle «¿Cuáles acciones legales?»
—No, Jeremy quizá salga bajo fianza, pero el Señor Wright tiene más cosas por las que pagar, se le culpa de difamación y malversación entre otras cosas, puede que él sí tenga que ir a presión por ello.
—O salir bajo fianza.
—Será costosa.
—Puede pagarla —intervengo cruzándome de brazos.
—Tendrá órdenes de restricción, no habrá de qué preocuparse.
—Como si esas cosas funcionaran.
—Funcionarán, apuesto a que no querrá volver a estar en prisión.
—¿Es todo? —cuestiono.
—De momento, pueden irse.
El oficial abre la puerta y sale, Dean me acompaña y las chicas salen a los pocos segundos y se acercan para abrazarme.
—No quiero pasar por eso de nuevo —habla Chloe.
—Y no tendrás que hacerlo —aparece Dono acercándose a ella y abrazándola.
—¿Todo bien? —miro a la castaña frente a mí.
—Eso creo, fueron muy insistentes en algunas cosas, ¿podemos irnos?
—Por supuesto.
Salimos de la comisaria, Donovan se lleva a Chloe, antes de irse me dice que mi padre me llamará más tarde y que Johnny ha ido con Sandra para contarle todo lo que ha pasado, subo al auto con Juls y lo pongo en marcha, estar aquí nos ha llevado horas.
Pasamos a comer un poco, algo ligero, trato de evitar el tema de la comisaría, jamás pensé que algo como eso la fuera a impactar tanto.
Cuando terminamos de comer la llevo con sus padres, me he encargado de enviarles un mensaje, ¿ustedes no tienen a sus suegros registrados aun cuando ya terminaron con su pareja? ¿No? Que raros.
—Me trajiste a casa —me mira confundida—. ¿Por qué?
—Sé que cuando te fuiste, dejaste de nuevo tus cosas en la casa de tus padres, y que solo te llevaste ropa a Nueva Zelanda.
—Sí.
—Sonará apresurado, de nuevo —trató de contener mi risa—. Aun estás a tiempo de decirme que no quieres volver a mudarte conmigo, o puedes bajar conmigo y traer de nuevo tus cosas a casa.
—Casa —repite feliz.
—Mi hogar es donde estás tú.
Se queda callada y puedo jurar que no hay nada más precioso que estarla viendo a los ojos, saber que después de tanto, al fin está conmigo, justo como debía ser.
Abre la puerta del auto y me sorprende su entusiasmo, se agacha para volver a verme.
—¿No vienes? Tengo muchas cosas que empacar.
Dios, en serio la amo tanto.
Sus padres se alegran de verme de nuevo, comentan que es un alivio que al fin su hija haya tomado la decisión correcta y se haya quedado conmigo, me sentí satisfecho cuando dijeron que Cory les caía bien, pero que me preferían mil veces a mí. Sí, al músico. Algunas cosas siguen justo como las dejó, acomodadas en el cuarto.
—Me encargaba de lavar la ropa de vez en cuando —comenta la mujer recargándose en el marco de la puerta—. Sabía que en algún momento querrías venir por esto —observa el cuarto con nostalgia.
La cajuela del auto tiene espacio suficiente como para guardar todas estas cosas, igual dice que vendrá después y verá que sirve y que no, terminamos de guardar lo que falta y me encuentro de nuevo frente a sus padres, una vez más ella se despide y se adelanta al auto.
—Nos alegra que haya regresado contigo —su padre suena seguro.
—Yo también —la miré rápido—. No imagino mi vida sin ella, les aseguro que estará bien.
—Cuídala más que a tu vida —amenaza su madre.
—Ni siquiera tienen que pedírmelo.
—La última vez te pedí que no hubiera sorpresas como embarazos.
—Y no lo está, señor, se lo aseguro.
—Pero esperas que
—Sí, señora —interrumpí—, espero que algún día lo esté, aunque hay algo que quisiera comentarles.
Me quedé un par de minutos explicándoles lo que pensaba y el cómo me sentía con ella sin mencionar que expliqué un poco de lo que quería hacer, cuando volví al auto ella me miraba esperando que dijera algo, cosa que no hice.
—¿Qué? —encendí el auto.
—¿De nuevo te amenazaron?
Curioso, esta vez no me habían dicho que podría morir desangrado y nadie lo sabría.
—Son tus padres, ya sabes lo sobreprotectores que pueden llegar a ser.
—¿Dijeron algo que te pudiera incomodar?
—No, nada.
—¿Seguro?
—Amor, estoy seguro, ahora —puse mis manos en el volante—. ¿Quieres ir a alguna parte? ¿Por más comida? ¿Ropa? ¿Una nueva cama?
—Solo quiero ir a casa —se coloca el cinturón—. Y dormir cuanto pueda. No tendrás problema, no te has quitado la pijama, yo aún tengo ropa.
—No será problema que te la quite descuida.
—¡Adam!
—No puedes negar que soy bueno haciéndolo.
—¿Qué parte? —me miró completamente roja.
—La parte de quitarte la ropa —añado entre risas—. Es claro que en el sexo soy bueno.
—Que humilde.
—Hay que decir las cosas como son, ¿acaso miento?
Se mordió el labio.
—Eres muy bueno.
—Tú no te quedas atrás, recuerdo que te movías como una diosa y cuando estabas g
—Entendí, amor, soy buena.
—Buenísima y estás igual.
—Solo conduce —negó como si no tuviera remedio.
Otro de los guardias se encargó de ayudarnos con las cosas de Juls, dejó todo en nuestra habitación y se retiró, estuvimos un buen rato terminando de acomodar las cosas que habíamos traído, ropa, accesorios personales, algunas cosas que usaba cuando ensayaba etc.
—¿Cómo te sientes? —me atreví a preguntar cuando terminó de doblar la última prenda—. Me refiero a con todo esto, la verdad, la comisaria, el volver a mudarte conmigo.
—Estoy —lo pensó un momento—. Feliz de volver contigo.
—Juls —tomé su mano y nos sentamos al borde de la cama.
—No fueron agresivos, no me gritaron y estoy segura de que a Chloe tampoco, pero eran insistentes, tuve que darles detalle de todo lo que me había dicho Marcus, lo que vi en los expedientes y como tuve que lidiar con el hecho de haberme ido, no fue lindo, Adam, me la pasé muy mal, había días en dónde no podía dormir, no quería comer, ni siquiera me podía concentrar, debí haber luchado un poco más, lo sé, pero todo sucedió tan rápido, lo único que quería era que
—Yo cumpliera mi sueño —completé—. Quizá nunca me alcance la vida para decirte cuanto lo siento, no debí haber desconfiado de ti.
—Todos me dijeron que no lo hiciste, aún después de ver la entrevista, el artículo de la revista, confiaste en mí.
—Pero después te dejé ir así sin más, si hubiera sospechado que algo estaba mal
—No, no lo digas, no viviremos de «el hubiera» todo lo que importa es el presente, estamos juntos y ya no habrá nada que pueda cambiar eso, es justo como dijiste, te amo y me amas, eso difícilmente cambiará.
—Eso lo sé, estamos destinados a estar juntos, y vaya que el destino se entretuvo con nosotros un rato. También la pasé mal, ¿sabes qué es lo único que estaba pensando mientras pasaba el proceso de desintoxicación?
—¿Qué cosa?
—En ti, intentaba olvidarte de alguna manera, ja, como si fuera posible, mi subconsciente siempre me llevaba la contraria y se aferraba a tu recuerdo, cada noche, cuando todo me dolía, cuando no tenía fuerza si quiera para levantarme decía «Juls hubiera querido que mejorara» así que, aunque no lo creas, me motivaste todo este tiempo sin saberlo.
—Aunque me fui, no fue muy valiente de mi parte.
—Has hecho lo que pocos se atreven a hacer: amar. Y has amado con tanta intensidad que estuviste dispuesta a sacrificarlo todo por una persona, eres más valiente de lo que crees.
—Siempre encuentras las palabras correctas.
—Bueno es que ahora tengo una buena motivación.
Quería acercarme para besarla, pero antes de siquiera poder inclinarme llamaron a mi puerta.
—¿No irás a abrir?
—Nah, puede esperar.
—La última vez que pasó algo así descubriste que Johnny se había quedado sin apartamento.
Volvieron a tocar.
—Ahora está con Sandra, quién sea puede esperar.
—Adam.
—Juls —la miré como un angelito, no cedía —bien, iré a abrir.
Me levanté para ver de quién se trataba.
—¡Adivinen quién trajo la cena!
—Papá.
Juls salió para saludarlo.
—Oh, no tenía idea de que tenías compañía, ¿vuelven a vivir juntos?
—Sí —responde.
—Menos mal que he traído comida suficiente.
—¿Qué traes?
—Comida china, tu favorita —sonríe.
Ponemos todo en la mesa y nos sentamos, no es la primera vez que cenamos juntos, papá ya había tenido la oportunidad de conocer a Juls de una manera más civilizada.
—¿Qué tal les fue en la comisaría? —lo golpeé en la pierna con la mía y captó de inmediato—. Oh, ¿ese es un rollo primavera? —lo tomó y empezó a comerlo.
—¿Qué tal te fue a ti con Ellen?
De inmediato sonrió, vaya, vaya.
—Todo bien —aclaró un poco la garganta.
—¿Solo bien? —enarcó una ceja.
—Estuvimos charlando un poco, hablando de lo mucho que habíamos cambiado y de que nos extrañábamos.
—¿Y cuándo saldrán?
Se le ve emocionada, no ha dejado de ser curiosa.
—¿Cómo sabes que saldremos, Juliette?
—Ustedes los Stone tienen un don para convencer a las chicas.
—No me pusiste las cosas tan fáciles a mí —me quejé.
—Alguien tenía que ser la primera chica en decirte que no —ríe—. Y bien ¿Cuándo saldrán?
—Mañana, la invitaré a comer.
—Que romántico.
—Otro Stone teniendo su final feliz —palmeo su hombro—. Me alegro por ti, papá.
Nuestros celulares empiezan a sonar, Ellen ya está en vivo, enciendo la televisión y ya hay cientos de reporteros a su lado, me sorprende que luzca tan tranquila, yo en su lugar ya me hubiera quedado ciego.
—¡Ellen! ¿Te sientes satisfecha con lo que has logrado?
—Por supuesto —responde con una sonrisa—. Mantuve mi identidad oculta todo este tiempo porque quería que Trackmind fuera importante para las personas, pero no por la persona que la dirige sino por la visión que tenemos, queremos apoyar a músicos y eso se ha logrado.
—¿Por qué revelarlo justo ahora?
—Creo que era necesario, es difícil que alguien a estas alturas no conozca a Trackmind, me siento orgullosa de ser una mujer mexicana que logró todo esto por su cuenta, creo que era hora de que lo supieran.
—¿No naciste en Inglaterra?
—No, nací en México, a los tres años me mudé para Inglaterra con mis padres y tiempo después conseguí empleo allá, mis padres se mudaron a Bridgen y tiempo después vine con ellos con una sola cosa en mente: cumpliría mis sueños.
—¿Crees que el hecho de que se sepa quién eres afecte en algo a la disquera?
—En lo absoluto, creo que lo que pasará es que ahora asociarán a TM conmigo, pero es algo con lo que puedo lidiar.
—Nos enteramos de los nuevos integrantes de la disquera.
—Es un placer para mí anunciarles que Hidden formará parte ahora de Trackmind.
—¿Ves talento en ellos?
—Por supuesto, sé que lo tienen y pienso que sigan desarrollándolo con nosotros, si me disculpan, tengo asuntos que atender.
Terminó la grabación de Trackmind.
—Sí que supo conservar el secreto —habla mi novia.
—Bastante bien, me alegra que ahora estés con ella, hijo, Hidden se lo merece.
—Sí, al fin estamos donde pertenecemos.
El resto de la noche se nos fue en risas y anécdotas que nos hicieron soltar más de una carcajada, esta noche no había nada que me preocupara.
Tenía a mi padre conmigo, al amor de mi vida, firmaríamos con Trackmind, no podría pedir más, bueno, solo una cosa, poder compartir con ella el resto de mi vida.
¿Se esperaban qué fuera ella?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro