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Dedicatoria:

Para todos aquellos a los que les han

cortado las alas y, a pesar de eso,

siguen luchando por sus sueños.

Adam

Con el paso del tiempo aprendes a sobrellevar el dolor, eso no significa que ya no duela. Landon siempre me había dicho que siguiera viviendo mi vida Un día a la vez, intenté hacerlo, pero cada vez me sentía peor, más cansado, más solo, más vacío.

Durante el primer mes actúe de manera normal, y luego, de momento a otro el dolor vino, caí en cuenta de lo que había sucedido y ni siquiera pude sufrir el duelo al mismo tiempo que los demás, creo que fue hasta un mes después que entendí que lo había perdido, mi mejor había muerto.

Me recluí por un mes alejando a todos, incluso a Juliette, la primera persona que me hizo sentir que yo valía la pena, la chica que se esforzó tanto en que me sintiera cómodo con ella. Lo hiciste Juliette, me sentía invencible a tu lado, pero era más joven y estúpido, no íbamos a funcionar, no con toda la mierda con la que cargaba.

Después de todo lo ocurrido tomé un curso de dos años para prepararme como contador. Sí, algo ilógico considerando que nunca se me dieron los números. Ahora me sentía mejor, no es cierto eso de que el tiempo cura las heridas, pero al menos había aprendido a lidiar con ese dolor.

—Aún tenía tiempo de sobra así que quise contarte cómo estaban las cosas por acá, a menudo vengo, pero eso ya lo sabes. Hoy daremos un concierto, si te preguntas si tengo nervios, pues no, no los tengo. Soy Adam Stone ¿cuándo he tenido nervios?

«Siempre», sería algo que el diría. Observé un momento su tumba, estaba hincado frente a ella sosteniendo un ramo de flores, él detestaba las flores. Lo siento, amigo, ni en la muerte te librarás de mis bromas.

—Nos presentaremos en un club importante, esperamos impresionar a la gente, hemos estado decidiendo el nombre definitivo de la banda, eso de andar con nombres provisionales no es nuestro estilo, todos estamos de acuerdo en uno que propuse, pero no sé, no estoy ahora del todo convencido —suspiré—. La semana pasada Jonathan se puso ebrio e hizo el ridículo, hubieras visto la cara de su novia, la pobre no podía contener la vergüenza. Chloe como siempre sigue llevando hamburguesas y cerveza a cada ensayo, es como su dieta y Donovan al menos ya no pierde el tiempo en la batería, claro que solo pasa cuando está nervioso, pero ¡Hey! hemos mejorado bastante, tengo tiempo de sobra ahora que ya no estoy en el curso de contador, ¿te imaginas? ¿Yo de contador? Hasta revivirías para verlo —solté una carcajada—. Lo siento, Landon, mal chiste.

» Ojalá estuvieras aquí, hermano, seguro que te encantaría mi departamento, es la octava maravilla del mundo solo porque yo vivo ahí, mamá sigue trabajando y viajando constantemente —dejé las flores y me levanté, guardé silencio—. Tu familia está bien, Paul sigue en el hospital y tu mamá no deja de recibir pacientes en su consultorio, la pequeña banshee es feliz en la escuela, está tomando un curso de dibujo, aunque no lo necesita, eso es todo, adiós. —Fingí que me alejaba conteniendo una pequeña risa—. Es broma, no me iría sin decirte que Hailey está bien, mucho mejor en realidad, a veces me escribe o yo le llamo, te enorgullecería saber que le va de maravilla en Sydney, incluso está viendo la posibilidad de tener su propia galería de arte, tu mejor inversión fue en ella no hay duda de eso. Está bien, aunque extrañándote todo el tiempo como yo, cuido de ella a distancia, sé que me matarías si no lo hiciera..., fue bueno hablar, te contaré después cómo me fue en el concierto.

Salí de aquel lugar y me dirigí al bar de Zach, debía ver si había encontrado a alguien que nos reemplazara esta noche y darle detalles de lo que haríamos, había sido genial tener la oportunidad de formar una banda y honestamente todos teníamos talento o al menos la pasión suficiente como para esforzarnos cada vez más, que claro, no todos nuestros ensayos eran color de rosa.

Donovan perdía el tiempo en más de una ocasión cuando estaba nervioso, Chloe improvisaba a menudo y odiaba seguir las reglas, Jonathan se quejaba cuando se equivocaba de traste y quién diría que yo terminaría siendo quién pusiera orden. ¿Qué? ¿Creíste que te diría que me equivocaba en algo? No, cariño soy Adam Stone.

Mi celular comenzó a sonar.

Llamada entrante: Teclitas

—¿Vas a empezar a molestarme tan temprano? El ensayo es en la tarde.

—Hola, Adam buenos días, yo estoy de maravilla, ¿qué hay de ti?

—¿Qué quieres, Johnny?

—Tendremos que cambiar el ensayo, nos quieren en el bar un poco antes de lo planeado, solo quieren asegurarse de que todo quede listo.

Seguí caminando escuchando las explicaciones que me daba, iba de lo más tranquilo comiéndome una manzana cuando la vi salir de una tienda, seguía causando el mismo impacto en mí, era unos centímetros más baja que yo, su cabeza llegaba con facilidad a mi cuello, iba con unos jeans rotos que resaltaban su figura perfectamente bien proporcionada, su cabello caía a los lados de sus hombros, es café igual que el de su prima. En ocasiones veo un poco de Hailey en ella, llevaba un vestido en la mano, que idiota quién no notara lo perfecta que era.

—...Para que así la modifiquemos de tono, ¿qué dices? —seguía mirando como un bobo a Juliette—. ¿Adam?

—Sí, está bien.

—¿Qué diablos haces que no me prestas atención? ¿Escuchaste al menos lo que te dije?

—Ah, sí la canción.

—¿Y bien?

Oh, no, Juliette me había visto y se estaba acercando a mí, no debía parecer nervioso, yo nunca estoy nervioso.

—No la modificaremos de tono, tengo que colgar, adiós.

—Adam, espera...

Colgué sin escuchar lo que tenía que decir.

—Te sienta bien el negro, pero ¿por qué teñiste tu pelo?

Hola a ti también, pensé, incluso con ella los saludos eran diferentes.

—Necesitaba un cambio de look.

—Escuché que darás un concierto en el club al norte de la ciudad.

Pues escuchaste bien.

—¿Vendrás?

Ay, por Dios, debía tratar de disimular que estaba interesado en si iría o no.

—Sí. —Me mostró su vestido—. Veré a un director de cine allá, tendré una audición dentro de poco, me he estado preparando, esta podría ser una buena oportunidad.

—Me alegro por ti, supongo que es nuestro día de suerte.

—Sí, cosas así solo pasan una vez en la vida, ¿no?

Iba a responder cuando salió Zach con una cerveza en la mano, más alegre de lo normal.

—¡Pero si son mis chicos favoritos! —exclamó—, que bueno verlos, ¿irás al ensayo, Juliette?

—Mejor aún —respondí por ella—, irá al concierto.

Me sonrió, esa sonrisa debía bastar para alegrarle el día a cualquiera.

Concéntrate, Adam.

—Le estaba diciendo a Adam que me veré con un director de cine allá, la escuela arregló todo, creyeron que sería una buena oportunidad para mí.

—Estoy seguro que serás una actriz increíble.

—Espero serlo algún día.

Zach era ese tipo de persona que todo el mundo conoce, un hombre alto con el cabello chino, vistiendo toda su vida de manera informal, el mundo se acabaría antes de que él usara un traje, siempre estaba sonriendo, era imposible que te cayera mal y de alguna extraña manera era como una especie de padre para nosotros.

Zach le tenía un cariño especial a la banda y ni se diga de Juls —sí, Juls sin «e» —quise llamarla así ya que era divertido ver como se enojaba porque faltaba una letra, nadie más la llamaba así.

Juls era para Zach como la hija que nunca tuvo, siempre cuidaba de ella, aunque eso le molestara a veces ya que decía que estaba bastante grandecita como para que siguieran cuidándola como si fuera una pequeña.

—Los chicos vienen para acá, dicen que necesitan hablar contigo de algo importante, no deben tardar, después podrán ensayar.

Oh, cierto, el bar tenía un sótano donde Zach nos dejaba quedarnos todo el tiempo que necesitáramos para ensayar y esas cosas.

—Bueno, supongo que te veré en el concierto, Adam.

—¿Primera fila?

—Quisieras tener tanta suerte —las comisuras de sus labios se elevaron.

Se alejó de nosotros, santo cielo esos jeans le quedaban perfectos.

—¡Hey! Mis ojos están acá —movió su mano frente a mi cara.

Podía llegar a actuar como un padre sobreprotector en estos casos.

—Ya deja de mirarla y mejor entremos.

—No la estaba mirando, solo me distraje —defendí.

—Claro, déjame limpiar tu baba y después me lo repites.

¿Así me veía cuando molestaba a Landon? Cielos, lamento haberte jodido tanto, amigo.

Esperé a los chicos en el sótano, ya no era un lugar cualquiera, le habíamos dado nuestro toque y pasó de ser un sitio donde había solo basura y cajas vacías a nuestro espacio para ensayar, donde nos expresábamos libremente, donde podíamos cometer todos los errores posibles, donde día tras días nos mandábamos al carajo porque alguien hacia algo mal, pero a final de cuentas nos sentíamos satisfechos con el resultado. No era un gran estudio de grabación, pero al menos podíamos llamarlo nuestro.

—Al fin te encuentro —se tumbó a mí lado en el sillón.

—Buenas tardes, Johnny yo estoy muy bien ¿y tú?

—Yo estoy exhausta, gracias por preguntar —Chloe se sentó frente a mí y empezó a comerse su hamburguesa, Donovan no tardó en entrar y tumbarse también.

—A penas es la una, ¿por qué demonios están tan cansados?

Todos me miraron de inmediato sorprendidos como si me estuvieran diciendo ¿Es en serio? Ante mi silenció Chloe habló.

—Me he pasado toda la mañana buscando qué ropa llevaré para el concierto, menudo lío.

Aún con esa actitud con la que ella siempre cargaba de no importarle nada, seguía siendo una chica. Claramente le preocupaba su aspecto para esta noche.

—Qué dilema —fue lo único que dije.

—Yo tuve que comprar baquetas nuevas, ya sabes la ocasión lo amerita y conseguí las mejores. —Donovan seguía relajado y ni siquiera abrió los ojos.

—Y yo ni se diga, tuve que cambiar las cuerdas de la guitarra, ¿dónde estuviste toda la mañana si no es preparándote, Adam?

Pese a que nos prestarían el equipo necesario para esta noche ellos insistieron en que querían llevar sus instrumentos, no podía hacer nada al respecto.

—Donde Landon —hubo un silencio incómodo que no quise seguir prolongando—, tengo la ropa que llevaré y cambié las cuerdas de mi guitarra ayer en la noche.

Esto de ser el chico responsable apestaba. Bueno, apestaba solo en los momentos en que lo era porque honestamente había veces donde me desentendía de la banda.

—Adam Stone siempre un paso delante de nosotros —ironizó Chloe.

—Y por eso soy más listo que ustedes.

—Y es el líder —comentó nuestro baterista.

Después de que Chloe terminara de devorar su hamburguesa comenzamos a ensayar, teníamos claro el playlist que usaríamos esta noche, con suerte lográbamos impresionar a alguien importante que asistiera. Ocho canciones, hubo gritos, quejas y maldiciones, pero finalmente todos habíamos estado de acuerdo con nuestra elección.

Componer se había convertido en mi pasatiempo favorito. ¿Qué si era fácil? Claro que sí, una letra común y corriente y una melodía de lo más sencilla, componer era pan comido si tan solo quisiéramos tocar por tocar, lo que siempre habíamos querido era mostrar la parte más profunda de cada uno de nosotros, es por eso que cada letra debía ser perfecta, cada melodía y armonía queríamos que fuera la adecuada, ahí estaba nuestro gran conflicto, pero con tiempo de sobra ya habíamos logrado componer doce canciones, así que escoger ocho había sido todo un reto, bueno siete en realidad, nuestra última canción sería un cover de uno de mis grupos favoritos.

El ensayo de esa tarde consistió en lo mismo, quejas, maldiciones, arreglos que hacer etc. Y, aunque yo era lead guitar, Johnny también tenía sus momentos de solos, lo cual el día de hoy lo estresaba demasiado porque quería que todo saliera a la perfección. Cuando menos sentimos las horas ya habían pasado y era momento de alistarnos, fuimos por nuestras cosas y las llevamos hasta el club.

Al entrar quedamos fascinados con lo que veíamos, un techo inmenso de cristal, una cantidad impresionante de alcohol detrás de la barra, cada lugar acomodado perfectamente para que ni una sola persona se perdiera del espectáculo, luces neón por todas partes y al fondo la plataforma. Donovan no dejó de babear apenas vio la batería.

—Creo que me enamoré —habló Jonathan sin despegar su vista del amplificador.

—Creo que yo también.

Sí, claro el amplificador era algo precioso, pero no pude apartar los ojos de la chica que se estaba acercando hacía nosotros, con su cabello castaño suelto, un vestido que se apegaba bien a su figura, labios rojos y un escote que estaba para morirse.

—Esto es increíble, ¿ya viste el lugar? —preguntó.

La verdad es que en estos momentos yo solo tengo ojos para ella.

—Muy elegante a mi parecer, ¿qué opinan, chicos?

No obtuve respuesta porque todos habían corrido hacia la plataforma listos para conectar sus instrumentos, al ver mi expresión Juliette comenzó a reírse.

—Creo que tus chicos se sientes en el paraíso.

Ambos nos giramos para verlos, Donovan ya estaba sentado, Johnny ya se estaba conectando y Chloe daba pequeños saltos de emoción ya con su bajo en mano. En serio era un lugar asombroso, me quedé como idiota observando el micrófono listo que se encontraba en el pedestal al centro, el amplificador que usaría estaba atrás, sujeté con más fuerza la funda de mi guitarra como si apenas entendiera lo que estaba a punto de suceder.

Vamos a dar un concierto.

¡VAMOS A DAR UN CONCIERTO!

—Deberías irte a preparar —trató de contener una risa.

—¿Qué ocurre?

—Hace tiempo que no veía ese brillo en tus ojos, debes estar emocionado de estar aquí. Es tu momento, disfrútalo, Adam.

No dejó que le respondiera y se alejó, me acerqué a la plataforma como un niño con un juguete nuevo, me conecté y comenzamos a probar los instrumentos, fue impresionante ver que ya había demasiada gente afuera esperando a entrar, era un lugar muy concurrido, teníamos fans hay que admitirlo y apenas se corrió la voz de que estaríamos tocando en este club la fila de afuera se duplicó, el dueño del lugar nos había invitado porque quería darnos una oportunidad de demostrarle nuestro potencial como banda, no porque necesitara que trajéramos a más clientes. Eso era lo que le sobraba.

—Chicos, espero que se sientan como en casa —habló un hombre, traía puesto un traje azul, zapatos pulidos y un peinado intacto.

Sí, el dueño.

—Le agradecemos mucho la oportunidad, Señor Baxter.

—Me dijeron que eran buenos en lo que hacen, espero que sea cierto, estamos a punto de comenzar, prepárense.

Una oportunidad.

Solo teníamos este momento para impresionar a la gente, el dueño había dejado en el anonimato el nombre temporal de nuestra banda, primero quería ver la reacción de la gente y después podríamos llegar a un acuerdo para seguir tocando en el club, irónico ya que algunas personas de afuera ya nos conocían, nos preparamos como siempre, cada uno hacía cosas especiales antes de empezar el concierto.

—¿Pediste que pusieran la secuencia en el cover?

—Sí, Johnny —respondí mientras digitaba un poco, las luces ya se habían apagado.

—Recuerda que esas trompetas son importantes —sostuvo su bajo con más fuerza.

—Ya sé, Chloe.

—La canción de Bones

—Está en tres cuartos, Donovan —completé.

—Oye sobre la canción que te comenté...

Suficiente, me estaba costando mantener la calma como para que sus preguntas fueran lo que alterara más mis nervios.

—Escuchen —los miré—, está todo arreglado con la secuencia tanto trompetas como piano, solo vamos a tocar una canción en tres cuartos y no modificaremos el tono de ninguna, aclarado eso —suspiré—, sé que todos estamos nerviosos.

—Pues tú no lo pareces —soltó Chloe.

—Pero lo estoy, esto comenzó porque a cada uno de nosotros nos apasiona tocar, no seremos profesionales, pero eso no significa que no seamos buenos, tenemos talento, chicos, y si la gente de allá afuera no lo ve pues que se jodan, pero saldremos a ese maldito escenario a dar todo de nosotros, con nervios o sin nervios, sacaremos este concierto adelante.

Comenzaron a aplaudir como si fuera el discurso más emotivo que hayan escuchado en su vida.

—Ese es nuestro líder —Johnny fingió limpiarse unas lágrimas.

Y después de eso todo sucedió justo como debía ser, apenas sonaron los primeros acordes la gente se emocionó y gritó como si fuéramos una banda a quien todos esperaban ver, lo dimos todo.

Chloe y Johnny estaban haciendo algunos coros y Donovan estaba decidido a no equivocarse; todos gritaban, aplaudían, estaban disfrutando lo que habíamos creado y ni qué decir de nosotros, nos desenvolvimos tan bien en el escenario que parecía que era algo que hacíamos todo el tiempo, muchas veces Johnny era quien se acercaba a mi micrófono y cantaba moviendo a un ritmo perfecto sus dedos para tocar la guitarra a mi lado, era buena la dinámica que teníamos, siempre había sido así, claro que Chloe no se quedaba atrás y también se acercaba.

La novia de Johnny, Sandra, estaba en primera fila, pero lo que más me sorprendió es que Juliette también se encontraba ahí, bailando al ritmo de la música y cantando a todo pulmón, conocía de memoria todas las canciones, después entre acordes y gritos el tan esperado cover llegó.

Un golpe en la tarola y un acorde. Solo eso bastó para que todo cambiara.

La gente se emocionó y juraría que algunas personas se rasgaron la garganta por los gritos que daban, después de los primeros compases, Chloe y Johnny se unieron, interpretamos esa canción lo mejor que pudimos, la habíamos estudiado mucho tiempo y todo eso rindió frutos hoy. Las luces cambiaban de color constantemente, los gritos incrementaban, así como las voces que cantaban con nosotros la canción. Lo habíamos logrado, conectamos con la gente y les gustaba lo que hacíamos.

Who am I kidding? Now, let's not get overzealous here

You've always been a huge piece of shit, If I could Kill you, I would

But it's frowned upon in all fifty states.

Having said that, burn in hell

Tras aquel verso la música seguía, era nuestra última canción había que presentar a los integrantes sin duda.

—¡Con ustedes, Donovan en la batería! —el reflector lo enfocó y continuó centrado en su batería con una sonrisa de oreja a oreja—. ¡Nuestra bajista, Chloe! —ella dio un paso adelante para que la vieran mejor mientras sus dedos se movían sin error alguno en los trastes —¡Jonathan en la guitarra! —improvisó un pequeño solo y tras cada nombre la gente se emocionaba y aplaudía —¡Su servidor, Adam! —hablé mucho más animado —. Guitarrista y voz principal.

El ruido de ese momento era ensordecedor.

—Acompáñenme con el último verso.

So tell me how you're sleeping easy, how you're only thinking of yourself.

Show me how you justify, telling all your lies like second nature.

Listen, mark my word, one day, you will pay, you will pay,

karma's gonna come collect your debt.

Luces de colores sobre nosotros, gente emocionada pidiendo más, nuestros pechos subían y bajaban, era visible el sudor en nuestras frentes y la alegría que teníamos en ese momento, sin más una cortina negra nos cubrió por completo.

Cuando estuvimos bajo el escenario las personas se acercaban a nosotros para preguntarnos donde sería el siguiente concierto, si teníamos pensado en hacer una gira y cosas de ese estilo, se acercaban para tomarse fotos con nosotros y hacer comentarios de que habían disfrutado del show. Creo que podría acostumbrarme a esto.

—Hay alguien que quiere conocerlos —el señor Baxter nos guio a un lugar donde no hubiera tanto ruido.

Todos nos quedamos sin habla cuando estuvimos ante aquel hombre, no lucía tan viejo, pero ya tenía sus años, tampoco era muy alto, moreno, delgado, con un traje que de seguro costaba más que todos nuestros instrumentos juntos, lentes negros y un aire de superioridad evidente.

—Chicos quiero decirles que quedé sorprendido con su presentación allá afuera, me llamo.

—Marcus Wright —completé y estrechó su mano conmigo—. Representante de una de las mejores discografías del mundo, tienes la cobertura de Trackmind —él asintió con una sonrisa.

—Así es y me encantó lo que vi hoy, es por eso que quiero que su sello discográfico sea con nosotros.

Vaya, directo al punto..., espera ¿sello discográfico? ¿Con ellos? ¿Escuché bien?

—Sin rodeos, sin engaños, hemos estado observándolos y realmente tienen potencial, además ese cover que tocaron emocionó bastante a la audiencia, tienen talento y yo quiero explotarlo, ¿qué dicen?

Permanecimos en silencio unos segundos, solo para no vernos desesperados, esto es todo lo que habíamos querido, ¿cómo negarnos?

—Nos encantaría.

—¡Perfecto! Arreglaré todo entonces —me entregó su tarjeta—, ahí está mi número y la dirección de la disquera, los veo mañana a primera hora —acomodó su saco y tenía intenciones de irse, pero lo detuve.

—¿Todo listo para mañana?

Los contratos no funcionaban de esa forma. Se quitó los lentes y nos miró.

—Ya contábamos con su respuesta, chicos —nos guiñó y nos dejó ahí, el señor Baxter lo acompañó hasta la salida.

—¿Escuchaste eso? Nos han estado observando —soltó en un tono agudo Chloe.

—Le gustó nuestra música, en serio le gustó —Donovan no podía ni creerlo.

—Adam esto es lo que necesitábamos, tenías razón, podemos con esto y más.

—Será el inicio de algo grande.

* * *

Estábamos caminando por uno de los pasillos del edificio, seguramente todos con los nervios al mil, la noche anterior no fuimos a celebrar porque sabíamos que de la emoción beberíamos de más y no sería bien visto que llegáramos con una resaca.

Una mujer de mediana edad nos guio amablemente hasta la oficina de Marcus, nos indicó que nos sentáramos, tenía una ventana enorme con una gran vista, desde aquí el resto de la ciudad parecía diminuta, sus sillones eran elegantes y alrededor de la oficina colgaban los discos de oro que había obtenido, le había ido bastante bien, estuvo trabajando por años para lograrlo.

—Bueno, chicos, quiero informarles que han tomado la decisión correcta, necesito saber si hay un líder o...

—Es Adam —agregó Johnny de inmediato.

Sonrió como si ya lo supiera, estaba sentado frente a nosotros en una silla reclinable, atento a cada una de nuestras reacciones mientras bebía un poco de whisky.

—Bien, Adam, estaré más en contacto contigo para que des indicaciones al resto de la banda ¿De acuerdo?

—Sí, p-por supuesto.

Demonios, no tartamudees.

No lo estoy haciendo.

Claro que sí.

—Bueno —se incorporó un poco y colocó frente a nosotros toda la documentación —tienen ante ustedes el famoso contrato trescientos sesenta, actualizado y mejorado claro, es 2038 las cosas debían cambiar, no es necesario que firmen hoy si no quieren, solo quiero darles a grandes rasgos la información que contiene, después de esto un abogado los asesorará para que sean conscientes de lo que están a punto de firmar, los llevarán a una sala de reuniones, tómense el tiempo que crean necesario.

—¿Un abogado? —preguntó Chloe.

—Así es, pueden existir dudas sobre los términos y cláusulas del contrato, dudas sobre los derechos que nos están cediendo entre otras cosas, queremos evitar problemas así que me aseguro de que tengan completo conocimiento de lo que hay en el documento.

» A grandes rasgos el contrato implica que tenemos derecho de dirigir la forma en que se llevaran a cabo las giras, conciertos, la publicidad que tendrán, a qué lugares pueden asistir y cuáles no, nos hacemos responsables de difundir su música y mantener una buena imagen de ustedes en todo momento, así como explotarla, deberán firmar otros tres o cuatro contratos más similares a este, para dejar todo claro y una vez que lo firmen podremos comenzar a grabar.

Todos nos dimos una mirada de confusión, quizás era mucha información para digerir en ese momento, ya le externaríamos nuestras dudas al abogado, sobre todo porque éramos una banda independiente, acatar las reglas ahora de alguien más no sería fácil, pero tendríamos que lidiar con ello. Es una oportunidad que no podemos dejar pasar.

—Suena bien —habló Donovan rompiendo el silencio.

—¿Cuál es el nombre de la banda? El oficial esta vez.

Sentí las miradas de todos sobre mí, los chicos asintieron con la cabeza dejándome en claro que ya estaba decidido nuestro nombre, y estábamos de acuerdo.

—Hidden —respondí feliz.

No pude evitar sonreír, Landon seguramente se retorcería en su tumba.

Y con ustedes, Adam Stone

Actualización: Estaba revisando los datos de la historia y me doy cuenta que me leen en España, de todo corazón les pido perdón si llegan encontrar el acento de Chloe un tanto forzado,  hay modificaciones que todavía quiero hacer y si eres de España y tienes sugerencias para desarrollar mejor a Chloe, venga que te leo.

PD. También acepto recorridos por España, digo, si te apete invitarme jajaja.