Contenido adulto.

(Mas o menos)

9:35pm.

Su piel se eriza y su cuerpo se calentaba, a media que iba dejando besos por su pecho.

Su respiración se cortó, cuando llegue a su zona V, pero solo lamí desde ahí hasta el comienzo de su pecho. Llegue a su cuello, mordí, gimió.

-Mi-michelle...-gimió. Sonreí.

Ronroneo y lamo su cuello. Hecha su cabeza para atrás dándome espacio. Muerdo suave.

-¿Listo?-murmuro en sus labios, mirándolo a sus ojos confusos.

-¿Para que?-pregunta.

-Para ser completamente mío-sonrío, y muestro mis grandes colmillos.

Él los ve y se asusta, tensándose.

-Tranquilo

Beso castamente sus labios, así hasta relajarlo y bajar por su mejilla, suspira, llego a su cuello, aspiro profundo.

-Te amo...

Muerdo.

Jadea.

-Mi-mi-chelle...

La sangre salió por las heridas y sentí que de mis colmillos salia un liquido que pasaba por los orificios

-Michelle...-gimió apretando mis caderas.

Me aleje de a poco, los hoyos fueron cerrándose.

Me acerque a su labios.

Soltó un suspiro y cerró los ojos.

-Duerme bien amor-murmuré en ellos.

Tome su labio inferior, lo mordí halándolo.

Sonreí.

Me levante y limpie su herida y la sangre. Después me acosté a su lado para descansar. La acción no empezaba dentro de mucho y necesitaba descansar antes.

***
6:45am.

Pase el vestido blanco de seda por encima de mi cabeza, cayó hasta debajo de mi trasero, acomode las finas tiras y el notorio escote. Ya lista salí del cuarto, no sin antes darle una mirada a mi amado, aún dormido.

***
10:55am

Pude escuchar como se quejaba mientras despertaba. Sonreí. La temperatura subía de apoco en su cuerpo, él lo notaba, y por eso escuche como se levantaba e iba al baño. Lleve la taza de café a mis labios y bebí.

Media hora después escuche sus pasos bajar por las escaleras, su excitación hacia nacer la mía. Su aroma llego hasta estar en la cocina.

Se acercó.

-Buenos días-susurró en mi cuello, pasando sus manos por mi vientre.

Cerré los ojos y mordí mi labio inferior.

-Buenos días-murmuré muy bajo.

Sus manos me acariciaron el vientre, bajando mas, se metieron dentro del camisón y no retuve el suspiro que salió de mis labios.

Gemí.

Sus dedos me acariciaron justo en mi zona débil, subiendo mas la temperatura. La excitación.

-Daniel...

Mordió debajo de mi lóbulo.

-Elle...

-A-ahh...

Tocó mas fuerte.

Tome sus manos para sacarlas pero fue mas rápido y me giro, me acercó a él.

Me sentó encima de la encimera, atacando mi boca. Jadee en la suya.

Su boca reclamaba a la mía con ferocidad, deseo y pasión. Sus manos me apretaron a él, tomándome del trasero. Podí sentir su erección a través de nuestras diminutas ropas.

Mordió mis labios, gemí. Se alejó y me miró a los ojos.

Los tenía oscurecidos, llenos de lujuria, de amor.

Me acerque a sus labios y los roce con los mios. Sentía sus manos recorrer desde mis caderas hasta mi trasero, de ahí a mis muslos, acariciándolos.

Su toque me erizaba la piel, la encendía. Y no pude no suspirar cuando sus labios escurridizos se metieron en mis bragas y poco a poco las bajaba.

Sus labios rozaron los mios.

Y sus manos se metieron ahí dentro, acariciándome, volviéndome loca.

-Daniel...-beso mi cuello y lo lamió.

Enrede mis piernas en su cintura y me aleje buscando sus labios. Los bese desesperada. Mucho tiempo sin estar unida a él de esta forma era desesperante.

-Michelle-gruñó.

Tomo mis caderas, me acomodó.

Lo sentí.

Gemimos.

Sostuvo mis muslos y dio fuertes embestidos.

Su grandeza me hacia gritar y gemir.

Cada vez mas estaba por llegar y nuestras respiraciones agitadas, el sonido de nuestros cuerpos chocar, era lo único que se escuchaba, además de nuestros sonidos vocales.

-¡Mi-chelle! Ah...

-Ouhh... Ahh... ¡AH!

Apreté sus hombros y él mis caderas.

Gritamos cuando el climax nos llegó.

Daniel recostó su cuerpo en el mio y yo en la pared. Ambos agitados.

-Esto no termina aun amor...-su lengua lamió mi lóbulo.

Mi boca se abrió pero no emitió sonido alguno.

***
10:12pm.

Aun mojados, Daniel me lanza en la cama, reboto.

Sus manos tocaron mis rodillas y bajo por mis muslos mojados, acariciándome, calentándome. Aunque, ya lo estábamos, mucho. El día a sido largo pero muy placentero.

Daniel era muy activo y muy amoroso.

Toque su cabello y cerré los ojos mordiendo mi labio inferior.

-Ah...-suspire.

Su rostro estaba allí, en mi zona, y su lengua no podía ser mas escurridiza porque no.

Sus manos apretaron mis muslos. Gemí.

-¡Daniel!

Mordió.

-¡Ahh!

Mi vientre se contrajo, ya casi...

Se detuvo. Lo mire mal pero sus labios chocaron con los mios penetrándome fuerte, haciendo que ahogara un grito en sus labios. Apreté sus hombros.

Nos voltee, quedando encima de él. Lo bese mas, con urgencia, con deseo, con amor.

Me aleje. Moví mis caderas, gimió apretando mi cintura. Seguí, ambos gemíamos y jadeabamos. Lo sentí profundo, sus sonidos provocaban que me moviera mas, sus manos ahora en mis senos me proporcionaban mas placer. Alborote mi cabello mojado, mojándonos.

-Dan...

-Elle...

-¡AHH!-gritamos. Me moví mas rápido, apoyándome en su pecho, el cual rasguñé un poco.

Apretó mi trasero. Salió y entró. Nos tensamos. Salió y entró. Llegue, grite. Salió lento, entró fuerte. Gruñó y llegó.

Suspiramos y me recoste en su pecho. Ambos con respiraciones agitadas.

Nos quedamos en silencio. Me moví alejándome, acostándome a su lado. El silencio era cómodo, ambos controlábamos nuestras respiraciones y la calentura bajaba.

Una de sus manos jugaba con mis dedos y la otra acariciaba mi cintura. Todo en total calma.

-Estoy cansado-murmura como adormilado.

Levanto la miraba, sus ojos estaban cerrados, y estaba algo rojizo.

-Te amo-beso su mentón.

-Yo también amor-balbucea.

Acaricie su pecho, respiraba lento. Se durmió.

Di un toque en su nariz, la arrugó. Me acomodé. Me sentía completa, feliz. Todo estaba bien, pero sabia que ya vendrían los problemas y los que no también.

*** Al día siguiente...

Mientras masticaba un chicle leía unos papeles. Papeles de la manada. Papeles que tenia que firmar. Papeles y papeles que me provocaban dolor de cabeza. Por fortuna Daniel estaba conmigo, él jugaba con un cubo de colores, totalmente distraído. Solo me ayudaba cuando se lo pedía.

-Oye, mira-levante la mirada a Daniel, que sostenía una hoja-Esto requiere tu firma como confirmación-me lo pasa.

-¿De que?-pregunto y leo.

-Sobre unas nuevas cabañas-asiento aun leyendo. Firmo.

Un buen rato después, término y con ayuda de Daniel, acomodamos todos los papeles. Pero cuando casi acabábamos, tocan la puerta del despacho.

-Adelante-digo.

La puerta se abre y entra mi padre.

-Llegó esto-extiende su mano con un sobré blanco.

-¿De que es?-pregunto. Daniel lo toma, lo mira y me lo pasa.

-De Delia Blacke-responde-¿Quien es?-curiosea.

Abro el sobré.

-Alfa de una manada amiga-contesto.

Este 4 de Noviembre es mi cuadragésimo aniversario, y tengo el honor de invitar a toda la familia CollingWood.

Espero puedan asistir.

Saludos, Delia Blacke.

Gray Moon.

-Tenemos una fiesta-sonrío mirándolos.

-No tengo ganas de fiestas hija-dice mi padre suavemente.

-¿Te sientes bien papá?-le pregunto preocupada.

-Si, solo que me esta atacando ya la vejez-bromea, reímos.

-Esta bien-miro a Daniel-Pero tu si me acompañarás-demando seria.

-Ok-ríe con mi padre, divertidos.

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¡¡Ohhhhh!!

¡Momento intenso señores! (mas o menos)

Nos leemos después.

Últimos capítulos... ¡OhDios!