Había pasado un día desde la llamada de Taehyung.
Hoy era martes, el día en que el primo de Yoongi y mejor amigo de Jimin, vendría a cenar.

Luego de que nana Sook avisara la llamada de Taehyung y que los dejara solos, Yoongi le aconsejo que tome la llamada en la casa y que el se quedaría vigilando a los niños. Jimin se despidió besando sus labios y camino de regreso. Una vez ahí fue a la sala de televisión y atendió la llamada de su amigo.

Hablaron por unos buenos minutos y se pusieron al día.
Taehyung llevaba dos meses en el extranjero por una campaña y luego simplemente se decidió por quedarse allí. Jimín lo entendía, luego de lo que había ocurrido unos años atrás la vida de Taehyung había estado dando tumbos y rodeos, no encontraba estabilidad y prefería no tener contacto con mucha gente.

Pero desde esa llamada todo cambio. Pregunto por sus sobrinos, por su primo y por Jimin. Mando besos y saludos. Además de avisar que estaba en un avión hacia Corea y que iría el martes a las 19:00 PM para cenar juntos.

Eso había dejado a Jimin mareado. Primero porque era martes. Los niños tenían clases y lecciones, toda la semana ocupada. El jardín de Jihoon más sus clases de natación. El cuidando a la pequeña Yeji y Yoongi en el trabajo. Además de que los niños tenían una hora de dormir estricta en las semanas. No era un día adecuado para una cena de reencuentro pero había visto a Taehyung tan pocas veces desde el nacimiento de Yeji que no podía negarle algo como eso. Aunque sea el comienzo de semana y posiblemente sus hijos se duerman tarde, emocionados por ver a su adorado tío Taehyung.

Aunque aún no había hablado con Yoongi. No le había avisado ni consultado. Pero el creía que no habría problema. Su marido había anunciado que se tomaría toda esa semana de descanso con su familia.

Pero eso no era lo que le preocupaba. Lo que le preocupaba era la presencia indeseada de su primo. Yoongi y el se llevaban como agua y fuego. Nunca habían tenido ni la más mínima muestra de afecto familiar entre ellos.

Aunque en el fondo Yoongi si estimaba mucho a Taehyung y el menor igual.

Parte de esa gran brecha era por la elección laboral que había elegido Taehyung. Con su gran dote para lo empresarial, toda su familia había esperado que siguiera esa carrera y se metiera en el negocio familiar. Pero el menor era la oveja negra, el rebelde. El que siguió sus propios pasos y pasiones. Eligiendo el modelaje como su sustento económico y luego triunfo en el extranjero.

Aunque Yoongi había odiado esa elección de su primo. Pero después la vida le jugó una mala pasada. Teniendo como esposo y padre de sus hijos a un modelo.

Jimin siempre se burlaba de él por eso.

Hoy era martes. La hora rondaba por las Once AM. Ya habían desayunado en familia, Jihoon estaba por volver del colegio en cualquier momento y Yeji tomaba una siesta. Jimin sabía que era el momento indicado para dar aviso a Yoongi de la visita que tendrían esa noche.

Dándose fuerzas mentalmente el doncel tocó dos veces la puerta del despacho donde su marido revisaba unos papeles que parecían serios.

-Amor...- Ni siquiera entendía porque le ponía tan nervioso comentarle el acontecimiento de la noche.

-Cariño, dame unos segundos para terminar de leer esto y firmarlo, ya estoy contigo.

Murmurando un bajito "Claro" Jimin se deslizó hasta detrás del escritorio donde el otro cuerpo estaba sentado y observo el gran ventanal donde había un par de fotos familiares apoyadas allí. Unas de su boda, de él en sus embarazados y otra reciente que tomaron cuando Jihoon cumplió sus cuatro añitos. Eran tan lindas que sintió su corazón llenarse de un cálido sentimiento.

Escucho un carraspeó que lo hizo volverse a ver a su marido que ya había girado en su silla y le preguntaba que necesitaba.

Bien, Jimin conocía demasiado bien a su marido. Por algo lo era y por algo llevaban unos maravillosos años juntos. La noticia no le agradaría para nada, mucho menos siendo de imprevisto, pero haría lo que pudiera para que no se ponga de tan mal humor.

Por eso comenzó con sentarse en sus piernas, de costado, y dar unos leves masajes en su nuca como distracción. Además de dar la sonrisa más dulce y manipuladora que tenía.

-Te conozco muy bien, Min Jimin, sé que estás tramando algo.- Yoongi negó mientras Jimin seguía dándole esa sonrisa y dejaba picos por sus mejillas-. Sé que algo tienes entre manos, anda. Dímelo.

Jimin dio un resoplido ofendido y giro sus ojos-.¿Es que acaso no puedo ser cariñoso con mi esposo sin sentirme presionado?

El mayor lo miro unos segundos sin decir completamente nada mientras lo sujetaba mejor de las caderas para que no se realicé. Luego la esquina derecha superior de su boca comenzó a subir hasta dejarlo dando una sonrisa arrogante. Se acercó unos centímetros hasta que sus narices se tocaron.

-Ese hechizó que has usado para tener a todos en tu pequeña y gordita mano, funcionaba solo en nuestros primeros años como pareja. Ya soy inmune Min Jimin. Así que deja de embobarme y dime qué tienes entre tus manitas, hermoso.- Así no se podía y menos si le sonreía de esa forma.

-Ash, contigo no se puede. Solo quería endulzar el golpe.- Rodando los ojos dijo-. Bien como sea, estoy embarazado.

Si no fuera porque el también se había sujetado de los apoya brazos en la silla de Yoongi, se hubiera caído de golpe ante el movimiento brusco del mayor. Yoongi lo miraba impactado sin entender. Completamente congelado.

-¡¿Qué?!

Jimin río encantadoramente mientras negaba y se cubría la boquita de melocotón con la mano-.¡Es broma! ¡JaJaJa debiste ver tu cara!

-¡Eso no se hace Jimin! Pude haberte lastimado por la sorpresa al girar la silla de esa manera.- medio gruño, medio hablo-. Ten más cuidado.

-¡Ya! Pero no te enojes, solo quería molestarte. En fin, era para relajarte antes.- Su marido seguía mirándolo mal pero el ya estaba sonriendo contento por su travesura-. Vendrá tu primo y mi mejor amigo, Taehyung, a comer. Esta noche.

-¡¿Qué?! De qué estás hablando.

-Ash, ¿por qué gritas?- Reprochó mientras se acomodaba en el regazo contrario-. Eso era por lo que llamó ayer en la mañana, quería avisarnos que estaba tomando un avión y que se hospedaría en un hotel para visitarnos, al parecer si va a volver esta vez. Dijo estar buscando un apartamento.

Yoongi aún lo miraba algo pasmado por la noticia. Tenía la mirada algo sería y pérdida. Inconscientemente sus manos acariciaban sus caderas como un gesto cariñoso mientras cuestionaba las razones por las que su primo quisiera venir a cenar esa noche. Es decir, no le molestaba saber de él, habían pasado meses desde la última vez que tuvo una visita de su parte, pero aún así era extraño. Taehyung había estado perdido por el mundo en su modelaje y muy ocupado.

-¿Te has enojado?

La vocecita dulce de su doncel lo saco de sus pensamientos y lo hizo mirarlo. No estaba enojado, solo sorprendido y algo aturdido también. Pero solo eso, al fin y al cabo si quería a su primo.

-No cariño, solo me tomo por sorpresa. Nada más.

Levantó su mano para acariciar una de las mejillas regordetas que tanto amaba y mientras compartían un dulce beso comenzó a sentir calma.

Separándose con un chasquido, volvieron a mirarse a los ojos y Yoongi dijo.- Creo que necesito un baño relajante.- mientras Jimin se ponía de pie Yoongi había comenzado a moverse hacia la mesa-. Ve y prepara uno para nosotros, terminaré de archivar estos papeles y estaré contigo. Tu me has estresado con esta sorpresita que te tenías escondida y serás quien me ayude.- advirtió mientras miraba divertido la reacción de Yoongi.

-¡Oh si! Claro. Pobre, pobre Yoongi. El sufre mucho.- exageró mientras escuchaba las risas del otro.- ¿Algo más su majestad?- Preguntó fingiendo estar forzado a tomar un baño que de hecho le encantaría compartir.

-Nada más, puedes ir yendo, insolente. Lo quiero listo para cuando llegue, ¿Estamos?- escucho que Jimin murmuraba alguna ofensa de forma gruñona mientras reía.

Apenas el doncel se giró en dirección a la puerta sintió una mano fuerte y pesada ser azotada contra su culo. Luego el ligero apretón en la zona y como la palma se despegaba. Negó con su cabeza mientras sonreía y miraba hacia el causante del golpe que también lo observaba sonriendo. Para cuando llego a la puerta su voz lo freno.
-Y Jimin...?

-Si?

-Te amo.

Volví. 💜

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