Ambos chicos tragaron saliva audiblemente. Frente a ellos y tras un escritorio de madera caoba unos ojos ambarinos los miraban con reprimenda. -Entonces ¿Me explicarán por qué vino una ambulancia esta mañana?

-¿Por qué tendríamos que saber nosotros? Ni que fuéramos sus asistentes- Kat pisó disimuladamente a Eliot bajo la mesa con la intención de que guardara silencio pero el chico solo gruño con molestia al momento en que le dirigía una mirada de odio -¡¿Qué te pasa?!

-¿Podrías cerrar la boca?

-¿Por qué? ¿Es que te molesta que tenga mejores argumentos que tú?- La chica soltó una risotada sarcástica.

-Incluso mi mascota da mejores argumentos que tú y eso que no habla. De seguir así de infantil todo será peor para ambos.

-Claro, claro, habla la misma que ha puesto cangrejos en mi litera esta mañana- Eliot señaló uno de sus brazos donde apenas tenues rasguños eran visibles - Esos demonios marinos casi me arrancan los brazos, técnicamente estaban toqueteándome.

La pelirroja soltó una carcajada, definitivamente su plan había salido justo como lo había previsto, cambiar todos los objetos que Eliot utilizaría para sus bromas por otros parecidos pero inofensivos había sido una de sus mejores ideas, ellos no habían sospechado nada y por la madrugada ella había podido entrar fácilmente con algunas de las niñas para hacer las verdaderas bromas. Lo único malo fue cuando por cosas de la vida aquellos cangrejos se negaron a abandonar el cuerpo de Eliot y los demás tuvieron que recurrir a los paramédicos quienes pasaron alrededor de una hora tratando de desprenderlos.

-Admítelo, fue gracioso- Pareciera que una sonrisa fugaz cruzo por los labios del chico pero instantáneamente su cara volvió a ser la misma molesta de antes haciendo pensar a la pelirroja que solo lo había imaginado.

-Ustedes son un caso perdido. Chicos, saben que en estos momentos he estado bastante ocupada y presionada con los preparativos para la boda y los documentos del campamento ¿No podrían tratar de llevarse mejor solo en este pequeño tiempo? Yo los quiero pero últimamente se están comportando demasiado problemáticos, todos aquí sabemos que esta no ha sido la primera vez que viene la ambulancia o los bomberos en lo que va de la semana y eso que es miércoles- Ambos bajaron la mirada avergonzados, Hayley tenía razón, ella ya tenía bastante trabajo con el campamento y su futura boda a solo unas cuantas semanas en la cual se suponía que se convertiría en la esposa de Tyler, el hermano de Eliot. Esa noticia había hecho felices a muchos pues tras casi diez años de noviazgo finalmente se habían atrevido a dar el gran paso.

Entonces Kat recordó la última vez que los bomberos habían tenido que recurrir a un llamado de emergencia por parte del campamento, había sido el lunes, ese día ella y Eliot habían sido sancionados para limpiar la cafetería por haber ocasionado una guerra de pintura en la clase de artes plásticas y por desgracia alguno de ellos tuvo la "maravillosa idea" de cocinar algo rápido como aperitivo y tras muchas peleas terminaron ocasionando un incendio de grado menor de donde solo Kat había logrado salir por completo pues cuando ocurrió ella estaba a metros de distancia de la puerta -La vez del incendio yo lleve agua aunque odiara a Eliot, merezco méritos.

-Solo llevaste agua- Murmuro el chico entre dientes -Y ni siquiera para apagar el fuego, solo te sentaste en el afuera de la cocina a tomártela con cara de consternada.

Hayley suspiro frustrada llevando las manos a su rostro, en ese tiempo no había cambiado nada ni siquiera su personalidad distraída o su aspecto jovial, Incluso Kat había llegado a pensar que en todo el tiempo que paso estudiando fuera de la ciudad seguía siendo exactamente la misma chica despistada que los cuidaba todas las tardes. -Bien, solo vayan a cuidar a sus niños, en unas horas comienzan las actividades y juegos. Ah y ¿chicos? Traten de no meterse en tantos problemas

Ambos asintieron para después salir del despacho, sin duda su rivalidad continuaría solo que tratarían no incendiar nada para la próxima....