Sólo soy un idiota al que le gusta una chica y no sabe cómo acercarse sin parecer un rarito. Creí que esto podría llegar a ser romántico, una de esas historias que podríamos contarles a nuestros nietos.

¡No es que diga que sólo quiera acostarme contigo! Dios... Soy tan torpe para esto.

Lo que intento decir es que me atraes. Quiero conocerte, Ginger.