Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

46| Otro heredero 🧠

Cuando las grandes y pesadas puertas de madera se abrieron frente a él, Jimin necesitó de todo su autocontrol para no apartar la vista y huir con el corazón convertido en un puño. Los ojos negros, hundidos y envejecidos de su padre lo miraban inquisitivo, casi juzgandolo por haber entrado sin la autorización de su secretaria, la pobre chica estaba detrás de Jimin murmurando una tanda abrumadora de disculpas en dirección a Jihyung.

—Está bien, Soomin— su padre hizo un movimiento sutil con la mano para indicarle a la mujer que cerrara la boca y saliera del lugar —Déjalo.

Ella hizo una inclinación exagerada y Jimin sintió los tacones de aguja alejarse por el extenso pasillo, dejándolos solos. La estancia era muy similar a la que tenía Taemin unos pisos más abajo, sin embargo, ésta era mucho más amplia y sin ese olor asqueroso a vainilla industrializada, su padre no había cambiado tanto después de todo, seguía prefiriendo los olores anodinos.

Jimin depositó la carpeta que le dio el chico de cabello platinado sobre el escritorio —Aceptaré el contrato— su padre levantó las cejas, genuinamente sorprendido de oír eso. —Sólo si le devuelves a mi mamá las acciones que le quitaste.

Una leve aclaración de garganta cruzó la estancia, Jihyung no estaba nada contento con esa condición, y él supo darse cuenta de inmediato —No puedo hacer eso, hijo.

Jimin sonrió arrogante —Sí, puedes, y si le devuelves las acciones a mi madre buscaré la forma de hacer que las empresas internacionales vuelvan a cotizar tus fármacos— cuando su madre salió de la compañia, con ella se fueron también los compradores extranjeros, y al tener la propuesta de Jimin de traerlos de vuelta -algo que Jihyung nunca pudo hacer-, eso significaba recuperar las ganancias que la empresa perdió, y su padre claramente lo sabía.

—Dame la lista de los cotizantes y yo le devuelvo las acciones a...Hangmi— casi escupió con asco el nombre de su madre, haciendo que la sangre de Jimin comenzara a hervir lentamente.

—No— recogió la carpeta, como diciéndole que si no aceptaba la negociación, él se iría, y no habría vuelta atrás. —Devuelves una acción, y yo te doy un cotizante. Así hasta que le hayas devuelto todas las acciones, de lo contrario, no hay trato.

Jihyung caminó hacia él, tenía las manos unidas en la espalda, demostrando su posición de autoridad y liderazgo dentro de la empresa, Jimin tragó grueso y respiró profundo, esforzándose al máximo para no apartar la vista ni alejarse del cuerpo de su padre, el que casi le sacaba una cabeza completa de altura y le doblaba el tamaño de los hombros. —¿Cuál es mi garantía de que vas a cumplir con tu palabra?

—No hay garantía— le dijo, sabiendo que con eso colocaba en riesgo la posibilidad de que su padre aceptara el trato —Tendrás que confiar en mí. Siempre dijiste que yo tendría un puesto asegurado en tu compañia, pero nunca me prohibiste negociar algo a cambio de ese puesto.

Jihyung lo miró fijamente durante un par de segundo, escanenando el hombre en el que se había convertido su único hijo con el pasar de los años. En otra ocasión, si todo hubiera seguido tal como hace cuatro años atrás, Jimin jamás le hubiera hablado de esa forma a su padre, nunca se habría saltado la línea de formalidades, pero desde el día en que le levantó la mano a su progenitora, perdió toda credibilidad y respeto de su parte.

El mayor estiró la mano surcada de arrugas y pequeños lunareas, pidiéndole la carpeta negra de forma silenciosa —Está bien— le dio una breve y casi despectiva mirada —Tu ingreso a la compañia lo coordinará Taemin.

Él rodó los ojos, sin embargo, no podía protestar contra eso. Miró por última vez la estancia, recorriendo con su vista los cuadros de grandes emoresarios, quizás nunca tendría las mismas aspiraciones que su padre, tal vez tendría que buscar otro heredero, porque él no sabría qué hacer con tanto poder en sus manos. Pero al ver a la figura alejarse para sentarse en la silla giratoria, su corazón se encogió, porque entendió que aquel hombre se había convertido en un completo desconocido.

Hizo una inclinación para despedirse, dio media vuelta y cerró la puerta a su espalda, soltando toda la respiración que había estado conteniendo. Unos cuantos empleados lo miraban curiosos, Jimin no entendió él porqué hasta que sintió su vista borrosa producto de las lágrimas que se querían escapar sin su consentimiento. Apretó la mandíbula y comenzó a caminar hacia el ascensor de planta, tenía su corazón hecho un doloroso puño, durante mucho tiempo idolatró y amó a su padre como lo único bueno y positivo que tenía en la vida, él fue su ejemplo a seguir, quien le enseñó lo que era la ciencia y como aplicarla en el mundo para avanzar hacia adelante, para ver el futuro entre tus manos.

E ir a verlo después de tanto tiempo sólo para hablar de negocios, le dolía, le calaba en lo más profundo de su ser, porque ahora más que nunca entendía a su madre y todo lo que ella tuvo que vivir. Ver a la persona que alguna vez lo fue todo en tu mundo como un completo y vil desconocido, dolía como el mismísimo infierno. Jimin no tenía la culpa de los errores que cometió su madre -si es qué todos podían llamarse errores-, pero aún así, su padre se cargaba ciega e injustamente contra él.

—Joven Jimin— lo llamó Joonhe apenas lo vio entrar en el auto nuevamente —¿Quiere pasar por un helado?— no pudo evitar sonreír con tristeza al oír la propuesta, cuando era niño y su padre lo regañaba, Joonhe siempre lo llevaba por un helado.

—No, hyung— susurró en respuesta —Quiero ir a casa, por favor— el chófer asintió, y antes de encender el auto, lo miró por el espejo retrovisor, viendo en su rostro la mirada abatida y decepcionada de un hijo por las acciones de su padre. Jimin no podía hacer otra cosa más que sujetar el colgante, deseando que llegara la tarde lo más pronto posible para poder ver la sonrisa de gomita que tenía su mayor, refugiarse entre sus brazos y sentir que no todo estaba tan oscuro.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro