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Capítulo 41

Historia Original de LYSDijoElRM







MIKE

—¿Y por qué se estaban
peleando?

Frank preguntó una vez nos subimos en el asiento trasero de la patrulla y él en el
delantero.

—No era pelea, Frankie. En
realidad, yo estaba en mi cita.

Se puso en marcha —¿Con él?

—¡¿Cómo va a ser con él?!
Antes reencarno como secuela de rápido y furioso.

—Uy, sin dudas no era con él.
¿Con quién entonces?

—Con su hermana, pero el
pesado éste insiste en?meterse en medio.

—¿En medio como?

—Cómo el buen hermano que
soy –contestó Drake antes.

—¡Ay! Es que no se puede ser tan intenso –me crucé de brazos —Tú fastidioso papel de hermano mayor me abruma tanto, que incluso ya
olvidé con qué letra empieza el abecedario.

—Con la A.

—A la mierda con tus celos de hermano. –señalé al míoiralo nada más, Frank ni siquiera se mete en mi vida
amorosa. Aprende.

—Es diferente, Mike, tú eres un chico, él tiene una hermana. Uno no se inmiscuye del mismo modo. –justificó Frank.

—Uno no se inmiscuye, punto.

—Pues es mi hermana, y te la
vas a tener que aguantar,
–gruñó Sushar.

—Calma, Drake –trató de mediar mi hermano —Como
decía mi padre, "ama algo
como si fueras a perderlo".

—¿Decía? –Sushar me miró con sorpresa —¿Murió o algo?

—Noo –dije con algo de
espanto.

—Ah, digo solía decir porque
ya no lo dice. –Rió.

—Tarado –se acomodó en su
lugar —¿Qué tiene que ver la
frase de todos modos?

—Nada, pero es una linda
frase.

Rodó los ojos —El ridículo no
se te quita, ¿eh?

—Al igual que la guapura, ya
lo sé.

Ah, ya iba a empezar. Tomé mi celular y le pregunté a Mew dónde estaban.

Alcé mi vista —¿A dónde nos
llevas, Frankie?

—A la estación, obvio.

—¡¿Qué?! –Drake y yo gritamos al mismo tiempo.

—¿Cómo qué a la estación?
¿Por qué?

—Una señora los reportó, debo hacer un informe.

—Frankie, por dios, era una pelea en broma.

—No parecía que Drake estuviera bromeando cuando
te iba a dar con el puño –se
alzó de hombros.

—¡Drake, estúpido, nos metiste en un problema!

—¡Tú me habías golpeado
antes!

Me asomé al asiento delantero.

—Frankie, mañana tengo clases, no puedo ir a la estación.

—El cinturón de seguridad,
Mike.

Me quejé —¡Frank, en serio!

—Para tu tranquilidad, eres
menor de edad, así que te
dejaré ir con una advertencia. Pero hazte para atrás y-

—El cinturón, seguro –dije alegre, sentandome correctamente y colocando mi cinturón. Miré a Drake con burla. Revisé el celular.

—¿Me llevarías a la casa de un amigo?

—¿Me viste cara de Uber o que te pasa?

—¡Eres mi hermano y estás
conduciendo! ¿Qué te cuesta?

—Soy un policía y voy a
escoltarte hasta tu casa.

—También hablaré con tus
padres.

—¿Es broma, Frank?

Drake cubrió su boca, quería
ocultar la risa —Ustedes dos
están arruinando mi cita por
completo.

—Parece que alguien se burló
mucho antes. –Ahora Drake
se me reía.

—Son insoportables.

—¿Ves, Mikie? Yo no podría
molestarte así si fueras niña.

Saqué mi lengua hacia él —¿Ahora sí soy Mikie?

—Llegamos –estacionó. —
¡Espera ahí, yo te abriré!porque debo informar a un adulto responsable el porqué de tu arresto. –se desabrochó el cinturón.

—¡Espera! ¡¿Vas en serio?! No
le puedes decir a mamá que
estaba peleando –sujeté su
brazo —Frank, ella me va a
matar.

—Uhm.. Soy tú adulto responsable también, si lo
pensamos un poco, ¿no?

-Quizás podría guardarme este detalle por ti.

—¡Sí! Sí puedes, Frankie, sí puedes. Eres grandioso, yo sé.

Él sonrió —Pero vas a tener
que darme las gracias, eh.

—¡Ni siquiera dudaría en no
hacerlo! –palmeé su hombro
te debo una. Nos vemos. —me senté para desabrocharme. Abrí la puerta y se volteó hacia mí.

—Hey, hey, hey, ¿a dónde vas?

-Uh, a casa.

—¿Y mis gracias?

Miré a Drake, estaba
confundido.

¿Me pidió algo y no lo!escuché? El se alzó de!hombros.

Frank señaló su mejilla.

—Dame un beso de
agradecimiento.

—¡¿Qué?! ¡No quiero darte un beso!

Drake comenzó a reír —¡Anda, Mike, dale un besito a
tu hermanito!

—¡No lo haré, Frank, esto es
humillante!

—Hazlo e incluso dejaré a Drake en una celda por esta
noche. Podrás recuperar un poco el tiempo que te hizo perder con su hermana.

—Yo no-... Uh... –sonreí —Ah, eso cambia las cosas.

Qué más daba, era mi hermano después de todo.

Me acerqué a él y le dí un
sonoro beso.

—¡Entonces, hasta la
próximaaaaa! –salí del auto
antes de que él se arrepintiera.

DRAKE

Todas mis ganas de burlarme
de Mike se fueron cuando Frank dijo eso.

—¿Era broma, verdad? Era
sólo para hacer que él te diera el beso, ¿no?

—Un oficial de policía nunca
miente, Sushar.

—A la mierda, no voy a dormir en una celda. –me desabroché e intenté abrir la
puerta, pero no pasó.

—Está con seguro, amigo. Y
qué mejor, sino hubiera tenido que ir por ti y agregar fuga a los cargos.

—¿Cargos? ¿Qué cargos?

—Pelea, resistencia a la autoridad, mmm, mal
vocabulario.

—¡Hablar mal no es un delito!

—Tampoco ser tan bonito, y
aún así me siento un criminal.

—Criminal eres, pero porque
estás abusando de tu poder.
¡Déjame salir o me voy a vengar!

Encendió el auto,
ignorandome.

—La verdad es que mi turno
nocturno recién comienza y es tan aburrido estar solo en la estación, esperando por algo de acción. Será divertido tenerte de nuevo ahí.

Y pensar que este idiota me
gustaba.. Ay, Drake, qué
tarado estás. —No, no, oye...

—Tranquilo, he perfeccionado mis chistes. Tengo escrito un gran número de chistes nuevos, te van a encantar.

—¡No, no! ¡Ayudaaa! ¡Déjenme salir!

Forcejear la puerta era en
vano, lo sabía.

Dejé de hacerlo cuando mis
brazos se cansaron.

—¿Te aburres? Puedo darte
un adelanto. Knok knok.

Bufé y me recosté en el asiento.

—Pasa.

—¡No! ¡Debes darme el pie!

—El pie te lo voy a dar en la
nuca por idiota.

—¿Idiota tú o idiota yo?

—¡Tú!

Comenzó a reír y frenó.

—Tranquilo, Drake, te dejo ir.

—¿De verdad?

—Si. Pero me vas a prometer
que no molestarás a Mike por esta noche; él tiene que creer que estás en la estación,
¿sabes?

—Va a volver con mi hermana y-

—¿Y qué? Harán cosas de
enamorados, sólo dejalos en
paz.

—Si él la llega a ilusionar y
después le rompe el corazón... Debo asegurarme de que no sea esa clase de persona.

—No lo es. Te lo digo, dejalos disfrutar su juventud, y aprovecha para hacer lo mismo con la tuya. –destrabó las puertas ±Drake, no quiero enterarme que te apareciste esta noche frente a ellos. –me miró fijamente por el retrovisor —O seré yo quién se vengue.

Sentí escalofríos Brr... —Okey. –abrí la puerta.

—Algo más, porque aún tienes esos cargos, me la debes.

—Ni loco te daré un beso en la mejilla.

—Entonces ¿dónde?

—¡En ningún lado! Sólo di qué quieres y dejame de una vez.

—Quiero tu número celular.

—Creí haberte dicho la última vez que no. Adiós.

Salí y cerré la puerta con un
poco de fuerza.

—¡Drake!

Volteé, él se asomó por la
ventanilla —¿Qué?

—Por favor. Sólo quiero
conocerte mejor. Me gusta
cuando te enojas y gruñes, te
ves bonito.

—Qué halagador. –rodé los
ojos —Nuestros hermanos están saliendo o lo harán,
¿sabes lo raro que se vería
que nosotros dos también nos conozcamos? Yo no quiero salir contigo.

Se alzó de hombros —No dije
que quisiera salir contigo, sólo dije que eras bonito. Dame tu número.

Solté una risa inevitablemente, y negué —Seguro un buen policía como tú puede averiguarlo.

Me di la vuelta y empecé a
caminar.

—¡Cuando lo haga, me deberás una cita!

Sólo alcé mi mano en despedida.

Bueno, por qué no.

MEW

Aom caminaba de un lado al
otro, nerviosa.

Mike dijo que venía para acá y ella sólo tenía en la cabeza esa nueva información.

Novia de Mike.

Si, amiga, te ganaste la lotería.

Yo seguía recostado en las
piernas de Gulf. Él acariciaba mi cabello y se veía burlon ante el pánico que inundaba a Aom.

—Hey, tú. –susurré.

Me miró. Apretaba su sonrisa
burlona.

—¿Yo?

—No te rías de ella. –apreté su nariz en reprimenda.

—Auch, osito... –quitó mi mano, pero no dejó de sostenerla —No me río en burla, es que da mucha ternura.

—¿Debería reírme de ti todo el día entonces?

—Ríete, veremos quién ríe más.

—¿Te refieres a que soy
tierno?

—Mucho.

—Estás inventando, no soy tierno para nada.

—Eres muuuuy tierno.. Y me gustas mucho. –bajó lo que pudo, y supe que quería besarme, así que subí un poco y alcancé sus labios por un momento hasta que volví a caer.

—Mi novio, mi novio, mi
novio, eres mi novio.

Cantó en una melodia inventada y me hizo sonreír
como bobo.

Era una tontería y yo igual
estaba encantado.

Esto, es sin dudas, eso.

Observé tras su espalda.

—¿Uh? ¿Qué hay? –volteó a
ver. No había nada ahí.

—Sólo me aseguraba de que tu mami no estuviera viendo.

Volvió a verme otra vez, pasando su mano por mi
frente para llevar los cabellos
que la cubrían hacia atrás.

Volvió a agacharse y dejó un
beso ahí. Cerré los ojos por su
calidez, y entonces se separó.

—Qué linda piel, es muy besable.

—No inventes palabras, bobo. Si quieres besar, sólo besa.

Sonrió asintiendo y volvió a
bajar. Otra vez, cerré mis ojos, y sentí su pequeño besito en la punta de mi nariz.

—... Me gustó ese, fue dulce
dije.

El puso sus dedos en mis dos
mejillas y presionó, abultando mi boca.

—¿Eres ramen, osito? O ¿por qué me gustas tanto? quise reír, pero no me dió tiempo y bajó de nuevo, dando pequeños besitos en mis
labios.

Me soltó.

—Espero ser ramen, así que comes durante toda la
semana.

—No tienes que ser ramen
para eso... –El aún sostenía mi mano y la llevó a su pecho
ahora —Mew, en serio me gustas mucho... Uhm.. Creo que... Eres mi primer amor.

Wow

....

Wow, que alguien te diga eso
es... Wow.

—¡Dios, eso fue muy lindo!
–¿y ese grito de fangirl?

¡Ah caray! Cierto que Aom
estaba acá.

Me senté con rapidez.

—Perdón, Ao, no estábamos
ignorandote o algo así.

—No, no, no. No se preocupen. En realidad estaba disfrutando de su muestra de cariño, son muy lindos. –de repente se puso colorada y cubrió su boca —¿Creen que Mike y yo seamos así? ¡Ah! No podría, de tan sólo pensarnos en esa situación, quiero salir corriendo.

—Tranquila, Ao, tú y Mike lo harán bien –traté de tranquilizar.

—No es Mike, soy y... Yo nunca hice nada de esto.. Yo.. ¿Y si no soy buena novia?

—No hay modo de que no seas una buena novia, Aomie.
–dijo Gulf —Además, yo tampoco sé nada de esto, es nuevo para mí. –estiró su mano, dándole una caricia a mi nuca... Ah, me gustaba
que hiciera eso. —Todo con
Mew es nuevo para mi, y voy aprendiendo paso por paso con él. Sentirás cosas que nunca sentiste, y tendrás ganas de hacer cosas que
nunca... Imaginate. –nos
mantuvimos la mirada hasta
que volvió a verla —Y todo eso porque estás con quien te
gusta y corresponde tu cariño.

—Es bonito, muy bonito, te lo
juro. No tienes por qué estar
nerviosa o insegura

No pude dejar de verlo... Él era tan-

—Qué lindo, Gulf... –asintió —Me siento más tranquila ahora.

—!Aomie! ¡Chicos! –Mike
llegó —Dios, no saben el horror que pasé hace rato.

—Después nos cuentas,
continúa con tu cita y llevala
segura a casa.

Mike asintió y se acercó a ella.

Aom, de algún modo, se veía
decidida.

—Bonita, ¿estás bien?

Ella sólo caminó los pasos que quedaban y sujetó las mejillas de Mike, dándole un beso.

Gulf y yo nos miramos con sorpresa, pero Mike se veía aún más sorprendido.

—... Aomie...

—Quiero.. Uhm... Quiero que
me enseñes a ser una buena
novia.

Mike tomó sus manos y las
bajó, juntas. —Tonta... Yo te
pediría eso a ti, ¿no ves que la única perfecta aquí eres tú? –se inclinó y dejó sus frentes unidas —¿Me enseñarías a cuidarte y darte todo mi cariño? Soy un bruto, tengo miedo de hacerlo mal, ¿sabes?

Ella, tan tierna como  siempre, apretó sus ojitos cuando sonrió —Sí, Mikie, serás el mejor novio, ya lo veras.

Él negó, sin dejar de sonreír.

Se los juro, desde que lo conozco, él ha dado miles de sonrisas, pero esa, ese tipo de sonrisa dulce, sólo le pertenecería a Aom.

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