Historia Original de @LYSDijoEIRM

GULF

Él me besó de nuevo.

¿Quién es Yaya Urassaya? No lo sé, en este momento sólo pensaba en los dulces y suaves labios de-

¡¡¿El timbre está sonando?!!

Abrí mis ojos con pánico y le
di un empujón. Él se mostró
sorprendido.

—¡Lo siento, esto no está bien!

Entré en pánico, ¡¿qué estaba
haciendo?! ¡¿Qué cosa le había pedido?!

No puedo creer que comencé
a temblar y estaba a nada de
llorar.

—¿Gulf? T-Tranquilizate, estás alterandote mucho –se
vió preocupado.

—Lo siento, lo siento, no controlo mi cuerpo, no sé
porqué tiemblo.

Esto está mal.

¿Esto está mal?

Quizás estoy asustado porque
esto está mal.

—Gulf, no llores. –trató de calmarme y se me acercó
sujetando mis brazos.

Me zafé con brusquedad.

—No debiste besarme... Yo.. Yo no debí besarte. –estaba confundido, yo estaba
confundido. —Te dije que no
era gay y me besaste igual.

—Lo siento, lo siento, no
llores. –miró a la puerta
cuando pasos se escucharon.

—¡No les digas, no le digas a
nadie!

—Gulf, fue sólo un beso.

—¡Fue mi primer beso!

El abrió la boca pero la volvió
a cerrar.

Por la puerta entraron varios
alumnos riendo y hablando
entre sí.

Cómo si hubiera estado a punto de morir, aproveché
para salir corriendo.

MIKE

—D'Angelo, eres el único que
no entregó el cuaderno de
comunicados, y el profesor me los encargó.

Yaya, se paró frente a mí con
una actitud que yo sentí algo
indiferente.

—¿Y si no te lo doy, qué? Me
vas a pegar?

Se expresión cambio a enojo —Bien sabes que ese estúpido se lo merecía.

Jadeé —¿Vienes a decirme a mí que mi mejor amigo se
merecía un golpe y encima le llamas estúpido? Mira el
tamaño de esos huevos.

Se alzó de hombros —¿Y qué
harás? Nada puede ser peor
que una nota del director, así
que.. –le restó importancia.

—¿De verdad que tú no tienes problemas verdaderos, eh? –me levanté rápido con la mirada seria y ella retrocedió unos pasos —¿Sabes lo que haré?

—¿Qué?

—Te daré mi cuaderno –se lo extendí y ella pareció relajarse. Lo tomó.

—Gracias...

Me alcé de hombros y salí del
salón.

Pero ¡¡AYI!

¿Por qué siempre me pasa esto a mí?

Algo me chocó y caí al suelo.

—¡Mierda! –sentí que siguió corriendo sin siquiera
disculparse —¡Claro, seguro,
me fijaré por donde voy a la
próxima! –lo miré. ¿Ese no
era Gulf?

Yaya me vió en el suelo y salió hasta la puerta, mirando también al chico.

Pasé a segundo plano para ella cuando lo confirmó.

—¿Gulfie?

Pasó por encima de mí y corrió en su dirección.

Pfff, Mike D'Angelo, mejor quédate viviendo en el piso.

—¿Necesitas ayuda?

—¿Ah? ¡Bonita! –ella jugó con sus dedos —En realidad
puedo pararme solo, pero me
vendría bien la ayuda –estiré
mi mano.

Me ayudó a levantar.

—Seguí a Gulf, pero fue muy rápido. Creo que estaba
llorando, –dijo preocupada.

—¿En serio? Uh, bueno, su
amiga fue por él. Será mejor
no abrumarlo entre todos. –
miré por el pasillo entre todos esos alumnos. —¿De casualidad no viste a Mew, ¿o sí? –El chico de la exposición.

—Ya sé quien es. Salió del baño después de Gulf.

—Miró hacia allá –supongo que debería estar cerca.

—¿Lo siguió también?

Me miró —Uhm, no lo parecía. –volvió a mirar a lo largo del pasillo, queriendo divisarlo.

—Hey, Aom, ¿verdad?

—Sí. Miles, ¿cierto?

Reí —No, por Dios. Soy Mike.
Miiiiike.

—Ya, estaba entre esos dos.
Pero cuál de los dos suena
más Tailandes. –se alzó de hombros —¿Me das tu número?

Alzó sus cejas —¿Eh? ¿De verdad lo quieres?

—Si te lo estoy pidiendo...

—Es cierto. –se golpeó la cara
con la mano.

Santo cielo, qué tierna se vio.

—Mike. Mew llegó.

—Mike, la cagué feo... Quizás.
Eh, disculpa, ¿nos darías un
momento? –le habló a Aom.

—Ah, sí, está bien. Nos vemos
–saludó con su mano y se
marchó.

—Espe... Ah... –miré a Mew — Acabas de cortarme un ligue.

—¿Un ligue? Creí que Goy-

—Después te cuento sobre
Coy y el novio que no sabía que tenía.

—¿No me jodas, en serio?

—Sí, pero no quiero hablar
de eso, ¿qué hiciste? ¡Oh! Gulf pasó corriendo hace un momento. Parecía llorar, pero como Yaya lo siguió, no lo hice.

—De eso quiero hablar.. –
cubrió su cara —No me!regañes, pero... –se acercó a
mi y susurró —Yo lo besé.

—¡¿QUÉ?!

GULF

¿A dónde quería correr?

Estaba encerrado en la escuela.

Peor, estaba confundido y
ahogado dentro de mi propia
cabeza.

¿Por qué dejé que me besara?
¿Por qué le pedí otro?

Si quería hacer que me
olvidara por un momento de
Yaya, lo logró, porque ahora
todo tipo de pensamientos
corrían por mi cabeza y nada
tenían que ver con ella.

—¡Gulfie!

Dios, no.

Restregué mis ojos y me di la
vuelta hacia ella —Yay, ¿aqué
pasó?

—Estabas llorando.

—No lo estaba.

—Sí lo estabas, yo te vi. No
empieces a mentir ahora. –
sujetó mi brazo —¿Qué te
pasó, Gulfie? puedes decirme.

¿Podía decirle?

Dios, tenía tanto miedo.

Ella pensaría mal, ella lo
confundiría o se enojaría
conmigo o no sé, sólo tenía
mucho miedo.

Pero ella es mi mejor amiga, y es bien sabido lo mal que me hace ocultarle cosas...

— Yo... Yaya...

—Dime. –estaba realmente
preocupada.

No puedo, no puedo decirle.

—Sólo... Fui a disculparme con Mew y-

—¿Disculparte? Tú no tienes
nada por lo que disculparte. Él debería disculparse
conmigo.

—Tú fuiste quien lo golpeó.

—ÉI dijo cosas tontas antes.

—Nada justifica que-

—Oh, espera, ¿lo estás
defendiendo? –me soltó —¿
Por qué lo defiendes? Yo soy
tu mejor amiga.

¿En serio ella está volviendo
esta conversación su conversación?

—Eso no es un argumento, Yaya, no tenías porqué pegarle.

—¡Me tenía harta!

—Pues sólo lo ignoras y ya.

Recuerda que ese golpe dice
más de ti que de él.

—¡Deja de regañarme, dios!

—¡¿Entonces para qué soy tu amigo si no lo hago?! Si no te hago notar tus errores. ¡Dios, Yaya, date cuenta de las cosas por una vez! ¡Bajate de esa nube! jMira un poco a tu
alrededor! ¡¡Estás matandome y no lo notas!!

—¡¿Qué?! ¡¿Y esto que tiene
que ver contigo?!

Cerré mi boca.

Estaba abrumado y diría cosas que no quería, bueno, quizás sí quería, pero no debía.

—No me siento bien, Yaya, le diré a mami que venga a
retirarme.

—¿Qué tienes Gulf? –sostuvo mi brazo cuando me moví, pero me solté.

—Me siento mal, ya te dije.
Déjame un momento solo, por favor.

MEW

—No, a ver, repitemelo porque estoy que no me lo creo.

—Sólo vi la oportunidad y lo
besé.

—Eso se llama aprovecharse.

—Lo sé, pero... Él no me apartó y.. –miré mis manos
porque no podía verlo a la
cara, de repente me sentí
avergonzado. —Y me pidió
otro.

—¡No es cierto! –dijo incrédulo.

—¡Shhh! Mike, nadie, nadie
debe saberlo. Le dije que no
le diría a nadie. A ti porque
confio te lo estoy diciendo.

—Y no diré nada, pero,
entonces ¿es un secreto entre
ustedes?

—No lo sé, no lo creo. Más bien fue algo del momento. Yo... No queria que pasara asi, simplemente... No sé, ay, Mike casi no sé porqué lo hice.

—¿Casi?

—El después se asustó y salió
corriendo.

—¿Por un beso?

—Porque era su primer beso.

—Noooo.

—Sí –froté mi cara —Él no
querrá verme nunca más en la vida.

—Entonces ve a verlo tú –me dió un golpe —disculpate. Buscalo al salir de clases y
habla con él.

—Está bien, eso haré.

—Uhm, Mew...

—¿Qué?

—¿Casi?

—Sólo fue un tonto impulso.