LO QUE QUIERO PARA NAVIDAD
EJEMPLO DE ETAPA DOS
PARA EditorialAmethyst
Algunos niños se burlan de mí. Me dicen: no tienes nada. ¡Qué crueles son!
Yo sé porque se burlan: Tienen miedo, perdieron la esperanza y la magia, ellos están tristes. Se sienten solos pero, siempre les digo que son mis hermanos y hermanas. ¡No estamos solos!
Soy un niño diferente que habla diferente. Si yo les cuento que tengo poderes, que vengo de otro lugar muy, muy lejos no creen. Nunca me creen.
Que sí. Que tengo. Una vez se lo conté también a Mamá. Ella no es solamente la mía, es la de todos los niños que viven conmigo acá en el orfanato Esperanza. Bueno, a ella se lo conté pero ay, no me acuerdo como se llama mi planeta. Mamá dijo que se llama China. Y no es. ¡Es otro nombre!
Yo no le creo. Mamá intenta nombrando otros planetas, y se frustra conmigo. Aunque puedo hablar en mi idioma, ¡y nadie me entiende! Me río de sus caras cuando pasa, me sale a veces cuando me enojo. Solo mi hermanita me entiende.
Ah, ella no es mi hermanita de verdad, solo que venimos del mismo planeta. Tampoco recordamos como llegamos a este lugar. O al menos yo mentí. Mentir está mal, yo sé. Los niños no deben mentir, pero tengo miedo de que me hagan daño por hacerlo.
Yo no quiero eso.
Y no sé leer. Todos saben menos yo y mi hermanita. Pero sí sé escribir en mi idioma. ¡Ahí sí les gano a todos! En el otro no. Mamá lo llama coreano. A mí me da risa lo raro que es el abecedario, sus palitos a veces me recuerdan a personitas y casitas. Hay uno que es solo un cuadrado, arriba le dibujo un techo. O un círculo, en ese una carita sonriente.
Mamá me reta cada vez que hago eso.
Y ahora que se acerca la Navidad, Mamá motiva a todos que escribamos la cartita para Santa. La primera vez no sabía quién era ese hombre. Se llamaba Santa Claus y no Santo Claus, quien nos iba a traer regalos. Me enojé con él por no traer nada de la carta, y pregunté porque volaba renos por el mundo, si podía tener un avión o un helicóptero.
Pero cuando me trajo mi primer autito, empecé a entender. Me emocionaba ahora querer recibir sus regalos este año.
Con un lápiz, escribo lo que quiero para Navidad: muchos, muchos juguetes. Muchísimas para mí, mi pequeña hermanita u todos mis hermanos. ¡Una montaña bien grande, grandota de regalos!
Mi hermanita llorando viene a decirme que solo escriba en la suya: una mamá y un papá. La abrazo bien fuerte y froto su espalda porque tiene tos, siempre tiene.
—Es un lindo deseo, Lian.
Sonreímos y nos vamos a dormir.
En el fondo quiero un papá y una mamá también. ¿Cómo le digo que a nosotros no nos quieren, somos de otro planeta? A veces me siento triste si pienso en eso. Sin querer, mi llanto despierta a otro hermano que se llama Jin Young. Viene a acurrucarse conmigo en mi cama, hace frío y me intenta calmar con una canción tonta para bebés.
—Que fea canción. —Intento no reírme.
—Pero dejaste de llorar, leru leru.
Me saca la lengua, por eso le pico la frente con el dedo. Se queja bajito y se soba, yo lo ayudo porque me hace sentir mal pegarle.
—¿Te cuento un secreto, Jackson? —comenta tan de repente.
—¿Qué?
—Quiero irme de aquí.
—¡Obvio, tontín! ¡Todos queremos irnos con un papá y mamá, Jin Young!
Él suspira, chista por mi grito.
—No, quiero huir. —Suspira de nuevo—. Mamá no es buena como crees y esto no es un orfanato como crees. Cada primero de enero, nadie se va con familias, se van con... Con cerdos.
—Yo sé —contesto tras un largo silencio—: Si sé. Digo que no me acuerdo pero si me acuerdo como llegué acá. Es que si soy muy listo, a ellos no le gusta los niños listos... Y tengo poderes, ¿recuerdas?
—¿De verdad tienes poderes? Debe ser mentira.
Jin Young me ve raro al preguntar, con los ojos más chiquitos, como cuando tenemos que leer la letra más pequeña o algo está muy lejos.
—No es mentira, yo tengo. Sí tengo, Jin Young —digo reprimiendo mi irritación—. Es que no podía mostrarlo. Creo que tú también tienes, quizás eres un conejo.
A pesar que nadie cree en mí, se lo demuestro cuando dejo asomar mi verdadera forma. No puedo comunicarme así, soy un poco pequeño en comparación a mi tamaño real. Lo entiendo, veo en sus ojos que está aturdido. Sorpendido de verme tan adorable con orejas felinas, patitas esponjosas y uñas afiladas. Mis ojos brillan, me gustan porque puedo encontrar todo en la oscuridad. Ronroneo enseguida por el calor de sus brazos, acurrucándome.
Pese a que la conmoción lo obliga a dormirse, vuelvo a mi forma original.
Soy un gatito de Hong Kong. Mi dueño me abandonó después de pegarme mucho. Solo quiso quedarse con mi mamá porque es linda, no recuerdo que dijo ella. Supongo que se quiso quedar. No sé. Dolía todo, no supe que hacer, quedé perdido. Luego otros extraños me llevaron con ellos, creyeron que me durmieron con una aguja y los escuché hablar.
Trafican animalitos, como yo.
Y mi hermanita iba conmigo en el mismo camión.
¡Así que! Lo que quiero para Navidad, no son regalos. Mentí en mi primera carta para Santa, hice otra secreta. A un mentiroso lo lastiman y a uno que dice la verdad también.
Lo que quiero realmente para Navidad es ayudar a escapar a todos mis hermanos.
Esa es la fecha para irnos.
Es el plan de un año entero. Me costó mucho pero se inicia el incendio después de la cena, el postre, los juegos y los cantos. Si el reloj marca las doce es Navidad. Nuestra hora.
Todos nos vamos cuando Mamá se quema como las brujas malas de los cuentos, esos que siempre nos contaba.
PIE DE PÁGINA.
PROTAGONISTA: Jackson Wang, GOT7
PALABRAS: 1000
TEMÁTICA: Navidad.
GÉNERO: Drama & fantasía.
NOTAS:
De alguna manera acabé usando metáfora de animales y fantasía, quedó rArO ya sé, es el ejemplo que hay (?) Igual intentaré explicar simples curiosidades.
UNO: Ellos no recuerdan sobre sus poderes debido a los traumas emocionales, claro, esos que quedan en muy hondo. Sus padres o dueños eran tan crueles en sus formas animales, que prefieron olvidar la transformación cuando ellos fueron vendidos a los traficantes.
DOS: La idea era que los niños fueran los animales del horóscopo chino. Jackson cree que era un gato, en realidad es el cachorro de un tigre sin saberlo. Por eso Jing Young se impresiona y se desmaya (se obliga a dormirse como dice Jackson).
TRES: Como leemos la perspectiva de un niño, algunas cosas se debían explicar de otra manera.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro