Punto absoluto

[ ¡Que teñirá el mundo de sangre! ]

—————————— Hell's Kitchen.

El auto militar se detuvo en un callejón y finalmente los jóvenes pudieron respirar con calma luego de todo lo que había sucedido. Izuku estaba recuperándose lentamente luego de separarse de aquel alienígena.

— No puedo creerlo... — dijo Peter observando el cadaver de Marinette.

— ¡¿Y que carajos le sucedió al gato?! — exclamó alterado Miles — ¿¡Se le zafo un tornillo!?

Felicia bajo del auto y se acerco para observar a la catarina quien tenia sus ojos aun abiertos. Aquellos ojos azules que antes brillaban con intensidad ahora yacían apagados.

Hardy deslizo la palma de su mano sobre los ojos de Ladybug y los cerro.

— Esto no debió de pasar... — hablo Izuku — Todo esto fue mi culpa. Debieron matarme cuando tuvieron la oportunidad y tal vez....

— No, esto no fue tu culpa. Los simbiontes te afectaron la mente y eso no era excusa para matarte.

— ¡Mira lo que provoque! — le grito el peli verde señalando a su alrededor — Y ahora... la ciudad esta siendo destruida, Marinette esta muerta y Cletus posee un simbionte.

Un portal fue conjurado y del mismo salieron Strange, Wong y She-Hulk. A juzgar por su apariencia les habían pateado el trasero.

— Ahora si se arruino en proporciones cósmicas — dijo Stephen.

— ¿Que fue lo que le paso? — pregunto el arácnido refiriéndose a Adrien.

— Akuma, todo el dolor y tristeza que trato de dejar atrás finalmente detonaron con lo que le sucedió a ella — dijo Wong.

Eso explicaba las cosas. El gato negro había sido corrompido por un Akuma de Hawk Moth.

— Esto es lo que trataba de evitar... — volvió a hablar Strange.

El ex hechicero supremo recibió las miradas de todos los jóvenes presentes.

— ¿De que hablas? — pregunto Peter.

— Esa noche con el ataque de aquel duende, una visión se me fue revelada. El mundo siendo consumido por una luz cegadora que recorrió toda la galaxia — relato — se suponía que esos eventos se desencadenarían con la muerte de la señorita Stacy.

El hechicero hizo una pausa y observo a Peter. La peli blanca también miro al arácnido y recordó los otros acontecimientos que sucedieron en la torre del reloj.

— Pero fue gracias a tu esencia que dichos eventos no ocurrieron en ese entonces.

— ¿Esencia? Espera... Me estás diciendo que....

— Si. Tu moriste a manos de uno de los herederos — confeso confundiendo pero a la vez sorprendiendo a todos.

Peter había muerto.

Pero estaba vivo.

El castaño se recargo un poco en la pared, estaba sintiendo nuevamente esa sensación en su pecho.

El como le arrancaban su corazón.

"Para ti, yo soy Kindred"

Esas palabras resonaron en su cabeza.

— Wow, wow, wow — esta vez hablo Miles interrumpiendo — ¿Quieres decir que Peter esta muerto? Pero esta aquí...

— No se todos los detalles a profundidad. El vigilante errante fue breve a la hora de explicarme lo sucedido — dijo Strange confundiendo aun más a todos — pero gracias a lo que paso y que afortunadamente fue arreglado. Dichos eventos fueron removidos y reubicados.

— ¿Vigilante errante? ¿De que hablas?

Strange ignoro esa pregunta.

El hechicero conjuro la linea del tiempo, solo que esta era diferente a lo que fue la vez anterior. Era un hilo dorado y no un flujo de energía blanca como anteriormente era.

— ¿Ven eso? — señalo el hechicero.

El hilo dorado fue visto por todos. Dicho hilo estaba desvaneciéndose pero regenerándose de forma constante.

— Es nuestro universo luchando por no desaparecer en algún futuro cercano. El responsable ya sabrán quien es.

— Adrien — dijo Izuku.

La linea desapareció.

— Nuestros libros tienen pocos datos sobre los Miraculous o prodigios — hablo Wong — pero según las escrituras quien posea las dos joyas alcanzara un poder mas allá de la muerte. Dicho poder le otorgara la oportunidad de pedir un deseo.

— Wong y yo creemos que lo que trate de hacer Agrest con las joyas, será lo que desaparezca nuestro mundo.

— "Un precio que pagar" — dijo Peter llamando al atención, el joven suspiro y recompuso su postura — eso es lo que me dijo Marinette, quien pida un deseo con aquel poder tendrá que pagar un precio.

— ¿Por revivirla? Eso no tiene sentido. Solo por traerla de vuelta.... ¿nuestro mundo será destruido? — Strange se llevo sus manos hacia su barbilla para pensar, no tenía sentido.

Hubo un silencio largo.

Wong también se quedo pensando. Hasta que una idea llego a su mente. El hechicero supremo conjuro nuevamente la línea del tiempo cosa que dejo confundido a Stephen.

— ¿Que haces?

— Experimentando...

Acerco su mano al hilo dorado y tiro de el revelando los acontecimientos qué sucedieron en dicho momento.

Era la noche que murió Gwen Stacy. Posteriormente Wong tiro nuevamente del hilo y sé revelo el momento de la muerte del capitán Stacy.

— Vas a hablar o...

— ¡Aja! — exclamo emocionado cosa que confundió a todos.

—————————— En algún lugar de la ciudad.

Chat Blanc contemplo la ciudad siendo consumida por aquella masa negra que se unía a los edificios. Apretó sus manos de la rabia al recordar quien era el responsable de todo aquello.

Pero mas ira le dio al saber que aquel monstruo le había arrebatado a la persona que aun le quedaba y le importaba con todo su corazón.

El chico se sentó y suspiro.

— Tranquila My Lady... solo es cuestión de poco tiempo — hablaba solo — estarás a mi lado nuevamente... ¡Si! — exclamo — y nada nos va a separar...

— Adrien...

— ¿E? — el joven se dio la vuelta para observar lo que había detrás.

Una persona se manifestó delante de el.

— ¿Por que solo el salvarla a ella? Puedes salvarnos...

Otra persona se manifestó al lado de la que hablaba con el gato blanco. El chico miro muy sorprendido lo que estaba pasando.

Adrien se levanto y comenzó a caminar lentamente.

— Así estaremos juntos.. ¿No quieres que vuelva a tu lado?

El rostro de la persona que le hablaba se le fue revelado. Era Gwen Stacy, envuelta en una extraña energía blanca.

— Gwen...

Desafortunadamente todo lo que Adrien estaba viendo a través de sus ojos no era real, no había ninguna entidad a su alrededor. Era el hablando hacia la nada.

Su mente jugandole una mala broma.

— ¿Puedo traerlos de vuelta?

— Puedes salvarnos de nuestro destino gatito, puedes salvar a mi padre, a mi y a Marinette.

Chat Blanc formo una sonrisa en su rostro, parpadeó nuevamente y Gwen junto a su padre desaparecieron de aquel lugar. El chico miro hacia los lados pero no vio rastros de la joven.

— ¡Si! ¡No lo había pensado! — el joven exclamó emocionado — Si consigo los aretes, podré revivir no solo a Marinette. ¡Puedo revivir a Gwen y a su padre! ¡Y todos estaremos juntos de nuevo!

A espaldas del héroe salieron múltiples simbiontes alienígenas que subieron al edificio. El chico extendió su mano hacia atrás y pulverizo a las personas con alienígena que iban a atacarlo. Su rostro tenia una sonrisa dibujada, era atemorizante.

———————————— Hell's Kitchen.

— Ay no... — hablo Strange.

— ¿Ahora que pasa? ¿¡Que hará Adrien!? — hablo Felicia alterada.

— Sea lo que sea que el intente hacer provocará que un punto absoluto en el tiempo sea restablecido — explico Wong.

— ¿Punto absoluto? — hablo Jennifer Walters confundida — ¿A que se refiere con eso?

— Un punto absoluto es un evento que debe de pasar si o si en nuestro mundo. Cualquier intento de interferir o restaurar lo que ya a pasado provocaría que toda nuestra realidad y universo se destruya — dijo Strange alarmando a todos — Los prodigios tienen un poder descomunal, como dijimos antes: son tan poderosos que superan al poder de la muerte misma.

— Si Chat Noir, llega a conseguir su deseo condenaría nuestro mundo. Esta es una amenaza de escalas inimaginables — continuo Wong — por todos los medios debemos de impedir que consiga los aretes de Ladybug.

— Todos los medios... — hablo Izuku — espera... ¡¿Matarlo?!

— Como ultimo recurso si es que no llegamos a nada al dialogar con el — contesto Strange — no podemos permitir que nuestra realidad colapse.

Otro silencio largo invadió el ambiente. Peter estaba híper ventilándose, otra vez tendría que pelear con uno de sus amigos y ya estaba harto de eso. Pero también estaba asustado por todo lo que podría pasar si no lograban recuperar al gato negro.

— Parker...

El arácnido se preocupo mas al recordar que Cletus seguía suelto con un simbionte alienígena. Eso solo le recordó que la ciudad estaba en completo caos y con una masa negra recorriendo la misma.

El castaño siguió ignorando a Strange y se dispuso a escalar hasta la cima del edificio que estaba a su lado.

— Yo me encargo — hablo Miles.

El joven de Brooklyn se acerco a la pared, coloco sus dedos y escalo detrás del joven de Queens quien seguía subiendo mas rápido que el debido a la experiencia.

Peter llego hasta la cima y camino lentamente hacia adelante para observar el Empire State a la lejanía, se detuvo a los pies del borde.

Dicho edificio estaba siendo rodeado por la masa negra creando una extraña figura acompañada de pequeños tumores y el otro extremo estaba en llamas.

Miles finalmente llegó al lugar donde se encontraba su mentor, su mascara improvisada ocultaba su rostro pero por su expresión corporal era fácil  deducir que estaba aterrado por la altura.

— ¡Ah! — exclamo tocando el piso, el castaño lo miro— ¡Seguridad! ¡Si!

— ¿Miedo a las alturas?

El joven de Brooklyn miro hacia abajo observando que se encontraba muy arriba. El pánico se estaba apoderando de el pero lo disimulaba. Peter rio por ello.

— Si, entiendo el sentimiento. Tuve que subir a la cima del Empire State para superarlo, lastima que ahora este en ese estado.

— Si, si... — decía con nerviosismo Miles — ¿Tienes miedo?

— ¿Parece que no? ¡Estoy super asustado! ¡Solo mira a tu alrededor! — gritaba — ¡Esto esta muy mal! ¡Y eso sin mencionar que el universo se puede ir al carajo si no evitamos que el gato entre en razón!

Morales permanecía callado, el ver la actitud que tenia el castaño solo lo preocupaba mas y mas.

— Pero podemos detenerlos: parar este ataque y evitar que Adrien pida su deseó.

— No se... si esta vez podamos ganar.

— ¡Debemos intentarlo! Salvemos a la ciudad y detengamos a Adrien. Han pasado por cosas peores...

Peter volvió a mirar la ciudad. Era horrible el verla de esa forma, siendo consumida por aquellos alienígenas. El chico apretó sus puños y suspiro, al menos debían de intentarlo.

— Hagámoslo.

Morales asintió. Luego recordo que seguian enciman del edificio.

— Oh y... ¿cuando me darás mis propios lanza telarañas para balancearme y eso?

— Ya llegaremos a esa parte pero...

El simbionte del castaño se retrajo de sus manos revelando sus guantes rojos. Peter se los quito y le entrego sus lanza telarañas a Miles.

— Te servirán de ayuda a la hora de querer arrojar cosas — dijo Peter, Miles los tomo — ¡No son para balancearse! No quieres terminar como Izuku...

— ¿Y te refieres a...?

— No quieres saberlo — contesto al recordar la vez que el peli verde los uso, los destruyo y se estampo contra un anuncio.

El joven de Brooklyn se coloco los lanza telarañas y los miro asombrado luego le hablo a Peter.

— Sabes que necesitaremos mas ayuda para no solo detener a Cletus y Adrien.

— Lo se pero creo que eso puede estar cubierto. Necesitamos comunicarnos con Fury.

— Deben de haber restablecido ya las comunicaciones. Solo debemos de buscar una radio o algo — contesto Morales.

Peter observo las calles a su alrededor tal vez podrían usar o encontrar algo que hubiera por la zona. Afortunadamente se topo con cierto edificio que había visitado junto al rubio de ojos verdes.

— Muy bien, espero que el señor Murdock este de servicio aun. Miles regresa con los demás y diles que se reúnan en Nelson y Murdock.

El arácnido no dijo mas, salto para balancearse y dirigirse hacia las oficinas del diablo de Hell's Kitchen mientras era observado por el joven de Brooklyn.

Miles miro hacia las calles a su alrededor y luego hacia abajo.

— No creo que sea tan difícil — se dijo a si mismo intentando ganar valor — tu puedes Miles...

Miles cerro sus ojos y camino para bajar.....

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.....Por las escaleras.

——————————— Lugar de la semilla.

La estructura hecha a base de aquella masa negra estaba finalizando. Cletus Kasady camino frente aquella estructura, había estado escondido desde su último encuentro con los héroes.

Sentía que aquel lugar lo llamaba.

El asesino camino y entro a través del arco que había en forma de entrada, quedó sorprendido al ver a los simbiontes alienígenas que estaban reunidos en aquella zona.

Todos lo observaron y se pusieron a la defensiva.

— Uy... lamento la intromisión — dijo Cletus — la puerta estaba abierta y solo estaba de paso.

— ¡Mátenlo! — exclamo uno de los alienígenas.

Cinco de aquellas bestias se lanzaron al ataque pero antes de poder tocar a Kasady estos fueron atravesados por la cuchilla de Carnage.

El simbionte rojo asesino absorbió a los alienígenas haciendo que se unieran a su cuerpo y con ello este agrando su forma. Los cuerpos de los portadores cayeron al suelo y los alienígenas se abalanzaron sobre ellos para comerse su carne.

— ¿Alguien mas? Puedo darles mas comida.

— Tu... — hablo otro ser.

Cletus miro de donde provino la voz, era Toxin el cual estaba custodiando lo que parecía un trono.

— ¿Quieres pelea? Con gusto te sacare las entrañas de tu cuerpo.

Toxin se acerco lentamente hacia Carnage quien alargó su mano la cual tomo forma de espada. El otro simbionte se arrodilló sorprendiendo mucho al asesino.

— Por fin a llegado... mi rey.

— ¿Rey? — exclamó confundido Cletus quien retrajo la espada.

Alrededor del asesino mas simbiontes fueron arrodillándose ante el. Podría ser muy raro que alienígenas se arrodillaran ante un simple humano pero Cletus no era un simple humano cualquiera.

Era alguien loco, sadico y malvado el cual estaba disfrutando lo que sucedía a su alrededor.

— Tu eres el rey de negro... aquel que gobernara todos los mundos bajo su mando — hablo Toxin.

— ¿Gobernar? Eso suena tentador...

— ¿Cual es su siguiente movimiento rey de negro?

Cletus camino entre los alienígenas hasta llegar al trono que había en aquella sala. Se sentó en el y observo a sus sirvientes.

— En primer lugar: No soy el rey de negro — dijo dejando confundidos a sus súbditos, su mano nuevamente se alargo revelando su espada roja.

— ¿Entonces quien es?

Múltiples tentáculos rojos aparecieron sobre la espalda del asesino y estos se incrustaron sobre el trono volviéndolo del mismo color.

— Somos Carnage.

Sus tentáculos lo elevaron en el aire hasta quedar enfrente de un ventanal donde entraba la luz del sol dandole un aspecto mas divino al asesino.

Reflejandolo como un dios.

— ¡El rey de rojo! ¡Que teñirá el mundo de sangre!

Los festejos de los simbiontes no tardaron en llegar a los oídos de Carnage quien sonrió perversamente.

Esto era el climax de su tan anhelada venganza presentandose ante el.

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¡UUUU! ¡Esta cosa se esta prendiendo mas de lo que ya esta!

Espero les halla gustado el capítulo y si fue así, lo agradezco con su comentario o voto.

¡Nos vemos en la siguiente parte, chaoooo!

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El arácnido llego a las oficinas de abogados de Matt Murdock, entro por la puerta principal y subió las escaleras hasta llegar a la puerta de oficina.

Peter escucho voces a dentro.

— ¿Señor Murdock? — habló mientras abría la puerta.

En la lobby estaban Karen y Foggy quienes hablaban entre si pero fueron interrumpidos al ver al Hombre Araña con el traje negro.

— ¡AH! ¡Lo tiene, lo tienen! — grito Karen quien tomo un trofeo de su mesa y se lo arrojo a Peter.

— ¡Oigan, oigan! — decía Peter esquivando lo que le lanzaban — ¡Soy normal enseri—-aghhh!

Una calculadora lo golpeo en la cara cortesía de Foggy. Matt salió de su oficina rápidamente, tenia puesto su traje a excepción de su mascara de diablo.

— ¡Ey, ey! ¡Déjenlo es normal!

— ¡¿Hablas enserio?!— exclamo Foggy.

Otra persona salió detrás de Murdock, una persona que Peter conocía a la perfección.

— Muy enserio — dijo Eddie Brock quien miro al arácnido.

Ambos individuos intercambiaron miradas, Peter estaba sorprendido creía que Eddie había muerto con la caída del Herricarrier. Pero se sentía aliviado el ver que estaba bien y vivo.

Eddie suspiro.

— Bueno... — volvió a hablar Brock — ¿Cual es el plan... hermano?

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