"La genética entre especies finalmente está dando resultados", informó Connors a su superior mientras observaban a Freddy, a quien le habían administrado el tratamiento y le habían regenerado la extremidad. "He podido usar el ADN del lagarto para ayudar a Freddy a regenerar su extremidad".

"Es increíble", dijo Ratha al ver los resultados de todo ello.

"No, es un trabajo duro", afirmó Connors. "Y es un paso más hacia el laboratorio de primates".

"No tenemos tiempo para cada paso", le informó Ratha.

—¿Poco? —pregunta Connors—. A menos que quieras que pasemos a los ensayos con humanos de una vez.

"Tienes que empezar los ensayos con humanos", le dice Ratha a Connors. "Ahora".

—No, no lo haré —promete Connors—. ¿Dónde conseguirías a gente que se ofreciera como voluntaria?

"En lo que a mí respecta, es para una vacuna contra la gripe invernal", responde Ratha mientras toma uno de los frascos. "El Hospital de Veteranos es un buen lugar para empezar".

Connors no podía creer lo que estaba diciendo y no tenía idea de qué decir al respecto. "No puedes hablar en serio".

"Claro que lo hago", afirmó Ratha, y Connors se mantuvo firme en su afirmación.

"No lo haré", le promete Connors.

Ratha suspiró y le mostró la fórmula. "No te preocupes. De todos modos, la fórmula es nuestra". Luego se guardó la fórmula en el bolsillo. "Dile adiós a ese brazo que siempre soñaste tener".

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En un laboratorio oscuro, Otto estaba viendo imágenes de Spider-Man peleando con Shocker, Electro, Escorpión y Ventisca. Parece que puede luchar contra todo lo que le arrojan.

"Spider-Man. No sé por qué mi jefe parece tan interesado en ti. Pero quiere que te capturen y eliminen". Otto susurró a las docenas de imágenes de su lucha y vio que todos los que había contratado para eliminarlo habían sido un completo fracaso para él.

En ese momento, una pantalla cercana se apaga y revela una figura en las sombras. "¿Más observación, Octavius? Me estás haciendo perder el tiempo, desperdiciando mi dinero en recursos que fallan".

"No te preocupes, Merodiador. Ya casi estoy allí", le promete Otto al siniestro benefactor. "Confía en mí. Lo que aprendí de su batalla contra Ventisca..."

"Confié en ti. Te di todo el tiempo del mundo. ¿Y qué nos ha dado? ¿Escorpión? ¿Ventisca? Todos estos recursos y no has podido capturar a este súper que está empezando a generar controversia sobre las leyes que prohíben a los superhéroes. Si regresan, podría significar problemas. Para todos nosotros. Traigan a Spider-Man. Acaben con su reinado de terror. Por cualquier medio necesario".

Luego la pantalla se apagó y Otto se quedó pensando en lo que dijo Merodiador.

Bueno, como dice el viejo refrán: si quieres hacer algo bien, hazlo tú mismo.

—Espera a que lo tenga en mis manos —susurró Otto para sí mismo.

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Peter estaba vagando por la ciudad, esperando que sucediera algo. Las cosas habían comenzado a volverse muy tranquilas.

Es difícil saber si fue algo bueno o malo.

Tal vez debería irse a casa y esperar a que llegue el traje nuevo de Edna. Es decir, básicamente no lleva puesto nada más que un trozo de trapo roto al que llama traje.

Entonces sus sentidos decidieron activarse justo cuando alguien agarró su pierna y lo arrancó del edificio, estrellándolo de cara contra el suelo.

"Ay". Dijo Peter mientras miraba y vio que lo que lo agarró era una garra de metal que estaba unida a...

¿Qué carajo?

Peter estaba muy confundido en cuanto a que lo que estaba viendo era un hombre con cuatro garras de metal gigantescas unidas a su cuerpo.

"Spider-Man, permíteme presentarme", dijo el hombre mientras comenzaba a arrastrar a Peter por la acera mientras intentaba con todas sus fuerzas liberarse del brazo, pero fuera lo que fuese esa cosa, era fuerte.

Era lo suficientemente fuerte como para tener problemas para quitarlo.

—¿Sabes qué? Esto se está volviendo insoportable —comentó Peter—. Pasé de ser un tipo que podía golpear muy fuerte a un tipo con poderes eléctricos, a un maldito escorpión, y luego al primo de Mr. Frío, y ahora... ¿qué? ¿Qué se supone que eres? ¿Algo así como un calamar?

"Merodiador quiere que te eliminen. ¡Estoy aquí para asegurarme de que finalmente se haga bien!", le promete Otto a Peter mientras usa su otro tentáculo para agarrar su otro brazo.

"¿Qué? ¿Quién es Merodiador?", pregunta Peter, nunca antes había escuchado ese nombre. "Y segundo, ¿en serio? Porque por lo que parece, tengo la ventaja". Luego giró su cuerpo, enredando los tentáculos antes de patear a Otto, lo que hizo que sus brazos permitieran que Peter se soltara.

"¡Eres una plaga insignificante!", gritó Otto mientras intentaba agarrar de nuevo a Peter, pero este solo hacía varias volteretas hacia atrás para alejarse lo suficiente de su agarre cada vez que intentaba atacar.

"¿A quién llamas insignificante?", preguntó Peter mientras esquivaba rápidamente otro ataque y aterrizaba en el costado del edificio. "Entonces, ¿qué apodo divertido debería ponerte? ¿Capitán Burla? ¿Hombre Langosta?"

"¡Soy doctor!" declaró Otto mientras rápidamente fue a golpear la pared, pero fue seguido por Peter pateando la garra, saltando sobre la línea unida a la garra y la espalda de Otto y saltó para darle un rodillazo en la cara al médico.

"¿Ah, sí? ¿Ahora se las están dando a cualquier psicópata loco?", pregunta Peter mientras dispara una hebra de telaraña a la parte posterior que sujetaba los brazos, pero inmediatamente la bloquea con sus brazos y tira de Peter hacia atrás y lo agarra por el cuello.

—¡No estoy loco! —declaró Otto mientras se disponía a atacar con el otro brazo y Peter lo agarró antes de que pudiera empalarlo y se lo arrojó a la cara—. Soy el ocaso de tu existencia sigilosa.

—Amigo, nadie que no sea un criminal demente hace referencia a las películas de Twilight —le informó Peter mientras le daba un puñetazo a otro brazo y se apartaba del camino antes de que otro pudiera salir de debajo de él—. ¡Espera! ¡Eso es, Doctor Octopus! ¿Qué te parece? Simplemente sale de la lengua, ¿no?

"¡No te burles de mí!", exigió Otto mientras atacaba a Peter, quien saltó fuera del camino, lo que le permitió a Otto estrellarse contra una pared de ladrillos y llegar a una calle concurrida donde todos corrieron y gritaron aterrorizados.

"¡Ah, pero ese es mi movimiento habitual!", afirmó Peter mientras rápidamente agarra una tapa de alcantarilla y se la arrojaba a Otto, tal vez para dejarlo inconsciente como lo hizo con Ventisca, pero eso no salió como estaba planeado ya que simplemente terminó con Otto agarrándola y estrellándola contra el concreto.

Entonces Peter lanzó una red y se balanceó antes de que Otto tuviera la oportunidad de alcanzarlo y atraparlo.

"Debería haberlo hecho yo mismo desde el principio, en lugar de confiarle la tarea a Gargan", afirmó Otto.

—Espera, ¿eres tú quien contrató a Escorpión? —preguntó Peter, ya que esa era una información nueva que nunca había conocido—. ¿Y cuál es el interés que tú y ese tal Merodiador tienen en mí?

"Yo me preocuparé por él. ¡Tú preocúpate por mí!", dijo Otto mientras agarraba dos autos e intentaba aplastar a Peter con ellos, pero él saltó y los esquivó una vez más.

Pero esta vez, Otto estaba planeando eso mientras usaba sus otros dos brazos para agarrar a Peter y envolverlo alrededor de ellos.

—Bueno... esto está empezando a ponerse inquietante —comentó Peter mientras Otto lo acercaba.

"Eres mucho más impresionante en persona", elogió Otto justo cuando escucharon las sirenas y vieron que la policía había llegado al lugar y apuntaba a los dos individuos.

"Nunca en mi vida me alegré tanto de ver a los policías", dijo Peter con un suspiro de alivio. "Parece que finalmente se te acabaron los rincones, Doc Ock".

"Oh, tengo muchos atajos que tomar", prometió Otto mientras los policías abrían fuego contra los dos, lo que provocó que Otto se protegiera con sus brazos y dejara caer a Peter nuevamente.

Peter se tomó el tiempo de atarle las piernas metálicas antes de saltar y golpearlo en la cara, haciendo que Otto cayera hacia atrás. Peter entonces vio algo pegado a la parte posterior de su cuello que parecía parpadear.

—Oye, ¿sabes cómo le gusta llamarme a mucha gente? —preguntó Peter mientras corría hacia Otto y saltaba y daba volteretas sobre sus brazos—. ¡Un dolor de cuello!

Peter entonces saltó sobre Otto y le envió un gigantesco puñetazo en la nuca, destrozando todo lo que estaba allí y destruyendo lo que controlaba los brazos y haciendo que Otto colapsara en el suelo.

"Uf, genial, por fin. Ya sabes, estos bichos raros se están convirtiendo en una molestia cada vez mayor". Peter vio entonces que los policías venían a por él otra vez. Pero también vio que algunos se estaban centrando en Otto, y no en él.

Incluso vio que algunos se alegraban de verlo. Supongo que salvar la ciudad de un monstruo con el poder de congelar el planeta tiene sus ventajas.

Pero como no quiere correr ningún riesgo, Peter empieza a alejarse y deja atrás a la policía y al recién nombrado Doctor Octopus.

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Connors todavía estaba trabajando, mirando su brazo faltante antes de llegar a una conclusión.

Al entrar a su lugar de trabajo, tomó un frasco nuevo de la fórmula y se lo inyectó y gruñó después de sentir la mezcla de ADN en el suyo.

No tengo idea de las consecuencias.