Conejos
༺𝔍𝔫𝔦𝔠𝔦𝔬 𝔡𝔢 𝔠𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬༻
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- El sol se hacía presenté, brillando tranquilamente sobre los ciudad azules, con esas dulces nubes de algodón flotando en una marea celeste, la luz golpeando con delicadeza todo lo que su existencia podía abarcar, manchando con la plenitud de una mañana tranquila, donde todo parecía estar bien, un simple día más en el que cualquiera podría quedarse tranquilamente dormido hasta tarde... Salir a correr o desayunar afuera... Quizá, una deliciosa taza de café con la que disfrutar está mañana... La calma era pacífica y en los bosques frondosos de un verde brillante se podía notar, la pacífica atmósfera ininterrumpida por el caos mañanero en las ciudades... Los suaves aromas que se encontraban mitigados por el follaje de los árboles, la brisa fresca y natural golpeando como la seda la nariz de un chico pecoso, hacían que sus sentidos se relajaran... Sentado sobre la rama de un árbol que le permitía encontrarse directamente con la luz de la mañana, mantenía sus párpados cubriendo sus esmeraldas preciosas, recibiendo de frente la cálida luz mañanera del sol dando un gran saludo a un nuevo día en el que las cosas podrían verse extrañas... Su respiración suave, se hacía notar suavemente de entre sus labios, no estaba dormido... Solo disfrutaba de la luz y calma mañanera que el bosque le traía de vez en cuando... -
Izuku:(cómo ese día...) - Un vago recuerdo de hizo presente en su mente... Pacifico y caótico al mismo tiempo. Negó rápidamente con la cabeza mitigando el recuerdo - (No pienses en eso... Ahora eres fuerte... Ahora puedes cuidarlos)
- La mirada esmeralda del Wabbit se encontró suavemente a sus espaldas, observando con una mirada sumamente nostálgica, añorante de un pasado perdido entre las cenizas de su mente... Dónde se ocultaba su felicidad... Su inocencia infantil perdida entre las llamas del dolor que atormentaba su mente. Nuevamente, negó con la cabeza con un gruñido molesto, Inclinándose hacia adelante, sus manos se sujetaron firmemente de la rama, girando rápidamente como un trapecista, se soltó para girar en el aire y caer perfectamente de pié, suspirando suavemente una vez que su mente logro encontrar su camino al presente -
Izuku:(Últimamente... Se han vuelto más y más molestos esos recuerdos...) - Dirije su mirada lentamente a donde podía ver a una mujer en particular. Similitudes conejiles tenía con el Wabbit, excepto que, ella tenía cabello blanco y ojos rojos - (... Más aún desde que esa impostora está aquí...)
- El joven conejo se veía realmente molesto con la presencia de la mujer Conejo, la heroína había insistido en regresar al menos 2 veces a la semana... Desde hace por lo menos un Mes, la rutina semanal de Izuku había cambiado debido a los constantes reclamos de Bulna en hacerle caso a la coneja... Y sus instintos animales, además de su desconfianza obligandolo a quedarse en el pequeño claro de conejos para asegurarse que no haga algo... Que no lastime a los conejos... Su mente, divida en su responsabilidad y la irá, hacían que su cabeza doliera más de lo habitual, el estrés carcomia su mente conforme los días pasaban y está "Mirko" era sumamente molesta a la hora de llegar... Esta vez, Habiendose quedado dormida con la excusa de no haber dormido bien... Se lo permitió, pero solamente por qué Bulna le dijo que sería malo dejarla en la calle de la ciudad... Un poco también por su propia consciencia -
Izuku:Ey despierta impostora!!!, Aquí no es un maldito lugar de la ciudad!! - Hizo denotar su molestia, quizá no tanto como el primer día, pero seguía soñando molestó -
Rumi:AH!, ¿Qué...?, ¿Cómo...?, ¿Dónde...? - Debido al repentino grito del muchacho se exaltó terminado por despertar en alerta, girando su cabeza a su alrededor mientras sus orejas trataban de ajustarse y percibir algún enemigo - ah..., Si... Yaaaawww, buenosh días - Se estiró suavemente para hacer que sus articulaciones chasquearan suavemente - ¿No pudiste haberme despertado más tranquilo?, Digo, no se, una invitación a desayunar habría estado bien brócoli
Izuku:Jamás... - Respondió sumamente cortante y con su mirada afilada clavada en la mujer conejo - Largo de mi bosque...
- Sin más intercambio de palabras, Izuku se dio la vuelta para caminar y apartarse de la mujer, quién negó con la cabeza suspirando/gruñendo algo irritada por la actitud del chico. Una vez el brócoli conejo se había ido, Rumi se levantó del suelo observando un poco a su alrededor, tallandose los ojos, realmente no recordaba como había llegado ahí, solamente que termino desplomandose del sueño luego de estar al menos noche, día y mitad de la madrugada despierta debido a un sujeto que tenía que encontrar, había sido difícil, pero lo logro... Aún así, el cansancio la guío a otro lugar que no era su departamento... Bueno, por lo menos el lugar era calmado y había podido dormir un poco, pese a aún tener mucho sueño y querer un café, su garganta seca era lo primero que debía de atender -
- ~BRRRR~ -
- .... Y su estómago vacío también -
Rumi:{Ugh, que hambre y que sed por dios... Me preguntó que podré encontrar para comer en este bosque} - Limpiandose un poco de la hierba que se le había quedado pegada a la ropa, noto que aún si llevaba su traje de héroe... Llevaba le chaqueta de Izuku sobre ella... Eso... Eso no lo esperaba - (Jum, parece que alguien es más amable de lo que deja ver... Aunque estoy segura que "Bulna" debió de obligarlo)
- Sin más remedio y sin señales del peliverde cerca de donde estaba, lentamente comenzó a caminar en busca de encontrar al menos unas bayas que poder comer, necesitaba encontrar también algo que poder tomar o esperar a regresar a su casa... No quería caminar realmente, pero su mente adormilada no le impediría buscar algo de alimento y bebida. Buscando en unos arbustos suavemente, no había ni siquiera algún fruto en los árboles que podía ver, lo que, claramente no ayudaba a su situación de hambruna luego de un día sin poder abastecerse de alimento debido, lo que, por consiguiente traía un terrible dolor de estómago debido al hambre, ya había pasado más tiempo sin comer con anterioridad, pero está vez, había sido algo diferente, sintiendo que llevaba al menos la semana sin comer debido a todo el movimiento que tuvo que hacer. Sin esperanza real de encontrar algo que pudiera comer, la mujer se rasco suavemente la nuca, suspirando algo cansada, comenzó a caminar para dirigirse a la ciudad, bueno, tenía su cartera así que podía comprar algo en una cafetería... -
Rumi:¿Uh?, ¿Esas son...? - Su mirada se clavo suavemente sobre un arbusto que parecía tener unos ligeros puntos azules, sonriendo con una mirada hambrienta, se acercó rápidamente al arbusto - {y yo que creí que esté lugar estaría vacío}
- ~WOOSH~ -
- ~TACK!!~ -
Rumi:¿Oye que te pasa?!, No me digas que ni siquiera puedo tomar algo para "desayunar" - Hizo comillas con los dedos debido a que unas pocas bayas no serían suficiente pero le ayudarían un poco -
Izuku:Ese arbusto no... - Su mirada sería, parecía estarse debatiendo internamente algo, cosa que ella no sabría -
Rumi:¿Uh?, ¿Por qué no?, ¿Es algún tipo de arbusto importante o algo así? - La confusión en el rostro de la coneja era claro, no entendía la situación
Izuku:Es hierba mala... Las bayas te intoxicarian y probablemente moririas... Que es un fastidio menos para mí - Ni siquiera dejo a Rumi hablar para burlarse, haciendo que la mujer se molestará un poco con el comentario tan mezquino y seco - pero... Bulna me mata si dejo que te mueras
- El joven conejo que se encontraba en las ramas de los árboles, suavemente tomo algo que estaba amarrado a su cinturón, lanzandoselo a la mujer de piel morena quien atrapó dicho objeto, era una bolsita de tela hecha a mano, Rumi no pregunto de dónde salió está bolsita, pero estaba bien hecha y parecía estar bien cocida. Mirando con clara confusión al chico conejo, este bajo del árbol, sacado una bolsita idéntica, el peliverde abrió su bolsita para dejar ver que en esta tenía alguna bayas variadas, fresas, moras azules y moras comunes, con algunas verduras como lo era la lechuga -
Izuku:Tienes bayas, lo que estabas buscando... Ahora vete, tengo cosas que hacer... - De nueva cuenta, se giro sobre sus talones y dio un buen salto, comenzando a moverse rápidamente por los árboles -
Rumi:Si, Gracias por la comida... "de nada" - Fingió la voz del pecoso, suspirando con cierta irritación mientras abría la bolsita, como dijo, tenía variedad de frutos rojos - {genial}
- ~HORAS DESPUÉS~ -
- La mañana paso con tranquilidad neutra, la leve humedad provocada a base de ligeras lluvias en los días hacían que el bosque tuviera un olor magnífico y relajante para cierto pecoso peliverde que se encontraba parado sobre la copa de un árbol, disfrutando de la calma apaiguante que calmaba su alma y serenaba su mente agrietada, tratando de reparar los grandes daños que hubo antes... Tratando de reparar lo que se rompió ese día... Su mente atormentada por los recuerdos "olvidados", simplemente buscaba la cura del dolor para su corazón maltrecho... Cura que parecía imposible de encontrar para este punto de su vida donde se encargaba de alejar a cualquier que pensara en siquiera acercarse a su morada... No quería volver a confiar... No podía volver a confiar en los humanos... No iba a permitir que eso volviera a ocurrir, ni ahora, ni nunca... ¿Pero estaba bien cerrarse de esa forma...?, Recordaba las palabras del ratón que parecía Teletubbie "No puedes pelear con los humanos... Ellos al final terminarán ganando no importa que hagas"... Quizás no fueron sus palabras exactas, pero el mensaje fue más que claro... Los humanos conquistan, las demás especies obedecen y sufren por sus estúpidos ideales que arruinan a la naturaleza... Tanto caos, ¿Para qué...?, No lo sabía, no le importaba, pero de algo estaba seguro... No iba a permitir que hieran a los suyos de nuevo... Y está fue suficiente razón para querer sacar a patadas a Mirko, no quería nada que ver con los héroes extraños que se acercaban cada día más y más estúpidos tratando de hacer "Justicia" -
Izuku:{Egh... Que estupidez tan grande...} - Sus murmuros llegaron únicamente a sus propios oídos, indiferente de hablar consigo mismo, siempre fue liberador en cierta forma -
- Cayendo sobre lo que parecía el tejado de un viejo pozo, suspiro suavemente ante la zona que llevaba tiempo visitando, en este viejo pozo donde los animales solían caerse y morir... O así sería de no ser por qué iba casi a diario a revisar que ningún animal se cayera ahí, lo había tapado varias veces, pero en época de lluvia era donde se llenaba regalándole un lugar del cual beber a los animales que no querían alejarse demasiado de sus árboles o su territorio predilecto, después de todo, sería mejor tener un sitio donde tomar agua sin la necesidad de tener que ir demasiado lejos y arriesgarse a que los depredadores los atraparan. Izuku se asomó por el gran agujero, cerrando sus ojos para concentrar su audición, esperando escuchar el eco de algún sonido de auxilio producido por algún animal, si es que aún era capaz de producir alguno, segundos pasaron y no escucho absolutamente nada, aún así, debía asegurarse de que ahí adentró no hubiera algún animal inconsciente, por lo que sin pensarlo 2 veces, se lanzó dentro del pozo que tenía un tamaño ideal como para que cayera sin preocuparse por terminar completamente raspado. Cayendo con la punta de sus, dejo que sus talones tocaran el suelo con suma suavidad, sus rodillas absorbieron el impactó completamente y lo disiparon hasta que no fue más que un aterrizaje tan suave como la caída de una pluma, Aldo de polvo se había alzado debido a la corriente de aire que había provocado, pero nada que abstruyera su visión dentro del pozo, observó a su alrededor en busca de algún pequeño animal que haya quedado inconsciente, sin embargo encontró todo completamente limpió y sin ningún animalito que requiriera ayuda en estos momentos, asintiendo para si mismo, se agachó para volver a dar un gran salto saliendo de ese pozo en el que se encontraba -
- Lejos de ahí, Rumi se encontraba caminando en la dirección que daba a la ciudad, observando un poco el verde follaje de los árboles a su alrededor cubriendo el cielo azulado, podía ver la luz traspasar las hojas sin complicación, obstruian un poco su vista del hermoso cielo con aquellas nubes tan esponjosas que este día había, pese a que la temperatura comenzaba a bajar lentamente, sin podía decir que estaba lo suficientemente cálido como para que requiriera utilizar algún tipo de abrigo en estos momentos. Su paro continuo completamente tranquilo y sin complicación alguna, alzando un poco los brazos para estirarse y de esta forma quitarse el dolor de sus agarrotadas articulaciones por la falta de movimiento, suspirando de forma placentera al escuchar sus articulaciones chasquear finalmente, comenzó a moverse con cierta cautela común en su andar, pese a que tuviera una personalidad explosivo y muy llamativa por su tono de voz fuerte, aún mantenía un perfil neutro mientras se encontraba fuera de la labor. Tarareando un poco, maldijo mentalmente por no haber llevado su teléfono consigo, sus audífonos estarían bien en estos momentos, pero no había mucho que pudiera hacer con ello -
Rumi:(Aún me preguntó, ¿Qué lo habrá hecho ser tan vinagre?) - Pensado en el peliverde y su forma de ser, río ante la ironía pues ella era realmente enojona en ciertos puntos - (¿Qué lo hará actuar de esa forma...?) {Wabbit... Mnnnh}
- Moviéndose a un paso calmado mientras observaba a su alrededor, esperaba obtener alguna respuesta de sus visitas continuas a la morada del conejo alfa, manteniendo una mentalidad levemente positiva aún si normalmente se dedicaba a molestar al jovén, parecía tener al menos unos... 18 años si su altura y complexión decían algo, sin embargo debería de asegurarse con eso, jamás podría estar lo suficientemente segura -
Rumo:(Eff, como sea, romperme la cabeza pensando en algo de lo que ni siquiera tengo idea no va a ayudarme... Pero el no me dirá absolutamente nada a menos que termine obligándolo)
- El chico tenía talento en la pelea, era veloz, fuerte y parecía formar estrategias conforme la cosa iba avanzando, sin embargo era demasiado confiado e inexperto. A su mente llegó el momento en el que pensó que sería un combate sencillo, rápido y que terminaría con algún hueso roto... Bueno, el le rompió la nariz y termino bastante rápido, pero... Únicamente había ganado por qué ella no se lo tomo en serio en ningún momento, solamente vio a un adolescente al que patearle el trasero de regresó con su mamá y termino siendo ella la pateada, se sintió humillada sin duda, sin embargo, aún había mucho de lo que pensar conforme el muchacho parecía estarse acostumbrando lentamente a su presencia -
Rumi:(¿Quizá Ryuko podría ayudarme con esto?, ella es mejor que yo para socializar e incluso convivir, dios, si que en lugar de conejo parezco un gato por el amor a las zanahorias) - Liberando un suave suspiro, continuo caminando sin prestarle tanta atención como debería de ser a su caminó -
- En los bosques, el joven de cabellos verde esponjado y ojos esmeralda brillante se encontraba parado con una mirada amenazante dirigida a aquellos locos que le gruñían de forma amenazadora en su dirección en general. Parado con sus pies plantados al suelo, sus brazos cruzados y sus ojos entrecerrados fijos en los del lobo alfa que se encontraba mirándolo de forma amenazadora... Izuku dio un fuerte pisotón haciendo que el sueño se agrietara lo suficiente como para que una grieta se extendiera hasta quedar bajo el lobo alfa, esto por consiguiente hizo que los lobos comenzarán a retroceder lentamente en busca de salvar sus pellejos de las patadas de aquel conejo alfa -
Izuku:Les dije que no los quería cazando en su territorio... Larguense antes de que los saque yo mismo de una sola parada que los regrese a su territorio y los voy a encerrar a todos en esa cueva si es que no abandonan este lugar... - Sus brazos cruzados daban a entender que solamente sus piernas serían utilizadas en caso de no hacerle casó -
Lobo Alfa:<Grrrr... Maldito niño Wabbit... Solo espera un momento y verás que acabaremos con esto muy pronto> - La molestia era más que palpable en los gruñidos del lobo, comenzando a caminar lentamente hacia atrás siguiendo la pequeña manada de la cual estaba a cargo, alejándose rápidamente del monstruo conejo -
Izuku:Jumf... Estoy ansioso por verlos fracasar... AHORA NUNCA VUELVAN AQUÍ! - Viendo como es que los lobos corrían velozmente al escuchar su grito molesto, levantó con su pie derecho una roca pequeña antes de patearla con fuerza dándole en el trasero a aquel lobo alfa - {Tsk... Jodidos depredadores que entran a mi territorio} inútiles
- Dándose la vuelta, simplemente comenzó a caminar alejándose de aquella zona que estaba más cerca a la zona de los lobos, donde todos los lobos se encontraban acechando en busca de su siguiente presa a cazar. Pero no importaba cuan buenos cazadores fueran, meterse al territorio de Izuku siempre fue y siempre sería una mala idea siempre y cuando Izuku estuviera por ahí presente y cuando no, sus trampas hacían el trabajó deseado -
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