Tienen que comentar para que actualicé bbs, así nomas de a gratis no funciono.

No les pido plata... aunque si quieren darme no me quejo  JAJAJAJA, pero lo que yo quiero es comentarios 😭😭😭

Si comentan mucho en este cap, llegó con el otro en menos de dos días o hasta de un rato ajsjjs.

COMENTEEEEEEN 👹👹👹👹

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Sunoo salía de su entrenamiento, era un poco más duro que en su anterior escuela, eso era divertido.

Caminó mirando su teléfono, mirando hacia el suelo, sin recordar que debía verse con Ni-ki para el proyecto de biología.

-¡Sunoo!- otra vez, esa voz algo gruesa que alegremente llamaba a su nombre.

Cuando levantó la vista, Ni-ki, ese alfa con aroma a lavanda y café saludó en su dirección levantando su mano.

-¿Ahora qué?- el omega lo miró sin ganas.

-Tenemos que hacer la maqueta ¿no recuerdas?

-Ah... cierto- le era difícil poner atención a muchas cosas, por lo que si no estaba concentrado, se olvidaba todo muy rápido.

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-¿De cuáles quieres?-preguntó Ni-ki mientras veían todos los snacks que había en el supermercado.

-Está bien cualquier cosa, no tengo mucha hambre- dijo sin darle importancia, pero Ni-ki al parecer no creía lo mismo.

-Pero no comiste nada en el descanso, tampoco llevaste almuerzo y solo tenías agua para pasar tu entrenamiento- lo miró -Escoge cualquier cosa.

-No tengo dinero.

-Hace rato ya te dije que yo pagaría- colocó en sus manos el carrito de supermercado.

Sunoo no dijo nada, pero habían dos razones por las que no quería escoger algo.

Uno, se sentía tan mal por gastar dinero que no es suyo en él, por comer comida que no era suya, por echar a perder cosas que no le pertenecían. Y dos, no quería hacerle sentir a Ni-ki que le tenía confianza porque no era así y comprar su comida era un favor, los favores crean confianza y acercan a las personas, él no quería nada con ese chico, a lo mucho ser su compañero, pero para nada su amigo.

-No trates de hacerte al héroe- Sunoo soltó el carrito de compras -que haya comido o no, no es tu puto problema.

-Pero somos amigos y yo me preocupó por ti, es por eso que--

-No somos amigos- dijo Sunoo sin mirarlo -no eres más que otro compañero, y yo solo soy un compañero más para ti- le dirigió una mirada, haciendo que sus ojos choquen -no me preocupas, no me interesas, no me agradas, tampoco haré que esperes por mi, no quiero ser tu amigo.

Un silencio se hizo presente entre ellos dos, hasta que Ni-ki habló.

-Hasta que escojas algo para comer, no nos iremos de aquí.- sujetó su mano, impidiéndole a Sunoo irse.

-¡Ya sueltame!- sacudió su muñeca, esperando que sea suficiente para librarse del agarre, pero no, Ni-ki al parecer igual era fuerte, a parte de que ser un alfa le ayudaba, pero al usar ropa oleada no me veía su cuerpo, por ese apretón en su mano, sabía que no tenía escapatoria.

-Puede que tu no quieras que seamos amigos, pero yo sí y sí voy a esperarte, solo estas asustado ¿no es así?- Ni-ki le devolvió esa intensa mirada a los ojos -puedo ver que también te sientes solo, aquí la cosa es que yo combato esa soledad de una manera diferente a la tuya.

-No digas cosas como si me conocieras.

Dejo de forcejear, dejando que Ni-ki solo sostenga su mano con un poco de agarre.

-Eres como un zorrito salvaje- mientras sujetaba su mano, caminó hasta la sección de carnes -yo cocinaré para ti  ¿Cuál te gusta más? ¿Pollo? ¿Carne? O ¿Cerdo?

-Pollo... ¿Ya puedes soltarme?

-No, es para impedir que escapes.

Que tipo más raro.

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Sunoo, a pesar que dijo no tener hambre, sentía su boca agua cuando olió el rebozado del pollo que Ni-ki estaba fritando para él.

Y sí, Ni-ki no soltó la mano de Sunoo hasta que llegaron hasta el interior de su casa.

Aunque toda la escuela veía a Sunoo como un matón o un delincuente, Ni-ki lo veía como un zorro bebé que fue acogido por él, como era salvaje, tenía miedo y se defendía tratando de morder, pero en realidad no quería hacer daño a nadie, solo quería estar a salvo.

-Eres molestoso- dijo Sunoo comiendo de las papas fritas que Ni-ki había acabado de hacer.

-No más que tú- respondió el alfa, feliz de que Sunoo ya este más relajado.

Mientras esperaba a que el pollo termine de cocer, se giró para ver a Sunoo y como ese tenía una suave y bonita sonrisa delineando sus labios.

Se quedó mirándolo un  momento, cuando no estaba gritando o peleando, en verdad que Sunoo era un chico muy pero muy lindo.

Con sus pestañas oscuras y pobladas, a parte de ser largas delineando sus ojos rasgados, sus pupilas color miel que comparaba una nariz respingada y linda, mirando de cerca, se dio cuenta que Sunoo tenía pecas en sus mejillas, pecas muy suaves y a parte de sus labios pomposos, aunque se veían algo secos, seguro que eran suaves.

-¿Tengo algo en la cara?- Sunoo se extraño cuando se percató que Ni-ki lo veía desde hacía ya un rato.

-N-no...- se puso nervioso, sobresaltandose en su lugar -aunque...- se acercó a él y con su pulgar limpió su labio inferior -ketchup.

Sí son suaves.

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-¿Entonces si te gustó?- Ni-ki preguntó viendo a Sunoo terminar todo el plato de comida que le había dado.

-Sí... algo así.

-Tengo postre- recordó que ayer hizo tarta de chocolate y que sobró un poco -¿Te gusta el chocolate?

Las mejillas de Sunoo adquirieron un suave color rosa cuando pensó en lo delicioso que era el chocolate.

-Ah.. Un poco- dijo desviando la mirada -¿Tienes algo?

-Solo tarta.

El omega no pudo evitar que una sonrisa se forme en sus labios cuando vio la rebanada de una tarta húmeda y con relleno.

Esto no ayudaba en querer alejar a Ni-ki lo más posible, no ayudaba en nada.

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Aunque no quería admitirlo, Sunoo estaba muy cómodo en la casa de Ni-ki, era hasta mágico que en ningún momento se haya puesto a la defensiva.

-¿Entonces estaba rico?- el alfa apareció con dos vasos de jugo de manzana.

-Sí... digamos que sí- no admitiría su derrota.

-Vamos, tenemos que terminar de hacer la maqueta.

-Ah, cierto.

Sunoo se había olvidado por completo que tenía una asignación por terminar, estaba tan cómodo que no esperaba eso.

Y mientas subían las gradas, se empezó a escuchar gotas cayendo del cielo, la lluvia había empezado.

-Pensé que lloverá mañana- Sunoo dijo.

-El cielo estaba nublado, pero pensé que sería más tarde.

Llegaron hasta la habitación de Ni-ki,  donde primero dejaron las bebidas en una mesita hasta acomodar los materiales para empezar a armar esa bendita maqueta.

-Bien, entonces primero es la base y-- cuando dio un paso, se tropezó con la alfombra del suelo, haciendo que caiga para adelante pero no sin antes tratar de sostenerse de algo y que lo único que encuentre sea una bufanda colgada, tirando de ella cayendo junto con el perchero en su encima.

Hubo un pequeño silencio, pero entonces pudo escuchar una suave risa que cada vez se hacía más sonora.

-JAJAJAJAJA, pero que tonto- Sunoo reía desde su lugar, mirando a Ni-ki debajo de todas esas ropas, fue tan divertido de ver.

Mientras Ni-ki, solo pensaba en más maneras de hacer que esa bonita risa se escuche más veces.

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-Moriré en cualquier momento- Sunoo ya no sentía sus manos de tanto usar pegamento y pinturas.

-Me duele el brazo- Ni-ki estaba moldeando las partes del cerebro en lo que Sunoo pintaba y pegaba las partes específicas.

Faltaban los detalles y pegar todas las cosas que Sunoo ya había pintado.

-Paguemos esto de una vez- Sunoo quería terminar de una vez, el sufrimiento estaba alargandose.

Pero antes de que Sunoo coloque siquiera pegamento en la pieza, un muy fuerte trueno se hizo escuchar, junto a un rayo que iluminó si habitación y así, la luz se fue.

-Mierda... ¿Tienes batería en tu celular?- Sunoo solo contaba con un pequeño porcentaje de batería como para que la linterna encendiera.

-Nop.

-Entonces descanso- Sunoo dejó lo que hacía y fue a lavarse las manos aún en la oscuridad.

Ni-ki se sentó en su cama, viendo cómo la lluvia empeoraba cada vez más y dentro de unos segundos vio como otro trueno resonó fuertemente.

Y pasaron dos segundos hasta que su puerta se abrió, dejando ver a un Sunoo algo asustado y agitado.

-¿Todo bien?- preguntó Ni-ki.

-S-sí... ¿Por-porqué no lo estaría?- Era evidente que tenía miedo.

-Bueeeeno- dijo el alfa con una sonrisa -Esperemos a que la luz vuelva.

-Sí...

Sunoo de sentó de igual manera en la cama, la cama era de dos plazas, así que aprovechó en acostarse un momento.

El omega nunca pero nunca podía dormir bien, siempre tenía insomnio al esperar no encontrarse con su madre.

Miró el techo cerrando sus ojos por un momento.

Y cuando menos lo esperó, quedó dormido tan rápido como se había acostado.

-¿Tu crees que podrás volver a tu casa?- preguntó Ni-ki dándose la vuelta, pero solo estaba un Sunoo dormido plácidamente en su cama.

Aguantando una pequeña carcajada, se acostó a su lado, empezaba a hacer frío así que los tapó con una de las sábanas sueltas que habían ahí.

Ni-ki igual empezaba a tener sueño, el sonido de la lluvia afuera y Sunoo felizmente dormido a su lado eran las causas.

Cerró sus ojos y dentro de dos minutos estaba dormido.

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Huele bien...

Sunoo estaba medio dormido, buscando de dónde provenía es aroma, no era comida, pero le gustaba.

Sin abrir sus ojos sintió algo cálido y cómodo a su lado, parecía una almohada, sin dudarlo se acostó y se abrazó a esa almohada.

Que calentito...

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Ni-ki despertó por la presión de algo en su pecho, no era pesado pero le confundió que haya algo ahí.

Cuando bajó su vista, era Sunoo quien estaba dormido y sujetando con fuerza su camiseta con una de sus manos, impidiéndole alejarse.

No lo iba a despertar, se veía tan cómodo ahí.

Lo que sí hizo fue acomodarse para acoger en su calor a Sunoo, dándose media vuelta y colocando su otro brazo para rodearlo, quedando Sunoo dormido en su brazo izquierdo.

Nada mal.

Cami~