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Sunoo estaba sorprendido, tanto que su cuerpo no reaccionó, estaba quieto en su lugar mientras los ojos de Sunghoon miraban a Ni-ki.

Sunghoon beso a Sunoo para que Ni-ki se diera cuenta de la importancia de un título, ya se lo había explicado con palabras, pero parece que necesitaba acciones más drásticas.

Ni-ki no hizo nada, se quedó en su lugar con ganas de golpear a ese tipo, pero sin hacerlo realmente.

-¿Hacen esto no?- dijo Sunghoon cuando se separó de Sunoo que todavía estaba en shoock -tomas su mano- sujetó la de Sunoo -y caminan por ahí.

-Per--

-Yo no siento nada por Sunoo- dijo Sunghoon -pero de todos modos podemos hacerlo si queremos- dijo ahora con una sonrisa -¿Lo hago otra vez?- a la falta de respuesta de Ni-ki, Sunghoon tomo el rostro de Sunoo en sus manos quien ya algo más consciente quiso alejarse un poco.

Pero ahí fue cuando un golpe chocó contra la mejilla izquierda de ese alfa recesivo.

Sunghoon cayó al suelo y Ni-ki sujetó el cuello de su camisa amenazando con lanzar otro golpe.

-Aléjate de mi--

-¿Tuyo?- preguntó Sunghoon -¿En serio es tuyo?

Ahí Ni-ki comprendió.

Entonces Sunghoon sonrió y se quedó en el suelo mientras Ni-ki comprendía la importancia que tenía un título en una relación.

Sunoo no era suyo, no era su omega, podía hacer lo que con él con quien quisiese solo porque quiere y sin la necesidad de sentir nada.

Comprendió el sentimiento de dolor y confusión que Sunoo sintió todos esos días cuando no sabía nada de él, había entendido antes, pero recién pudo comprenderlo.

Ni-ki soltó lentamente la camisa de Sunghoon, alejando su puño de su rostro con un labio partido.

-¿Lo entiendes ahora?- preguntó Sunghoon -ya que con palabras no lo hacías, tuve que darte ejemplo.

-Digamos que estamos a mano- soltó del todo su camisa y volteó a donde debería estar Sunoo quien ya no estaba ahí.

Había huido, otra vez.

-Hey ¿Estás bien?- preguntó Jay quién con Jungwon vieron todo sin decir nada mientras comían de los bocaditos que trajeron.

-Sí, he recibido peores golpes en mi vida- sacó su teléfono que tenía un mensaje que decía "Estoy ya dentro ¿Estás en el patio?" -Pueden seguir, predije que algo así pasaría así que invité a alguien para hacerme compañía.

-¿Seguro que no estás herido o algo? Es que sigues en el suelo- Jungwon estaba agachado tocando el rostro de Sunghoon con su dedo índice.

Antes de que contestara, ese chico beta y lindo, de una escuela prestigiosa y que amaba el verde apareció.

-¿¡Qué pasó!?- dijo ese chico corriendo ni bien vió a Sunghoon en el suelo -¿Estás bien? ¿Te duele? Tengo curitas, ven, yo voy a  sanarte.

Ahí Jay y Jungwon se miraron antes de irse de ese lugar para dejarlos solos.

-Jake, tengo que contarte lo que pasó hoy.

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.

Ni-ki no sabía dónde podría estar Sunoo, nadie lo había visto salir así que seguía dentro ¿Pero dónde?

Era de noche y el patio no estaba iluminado como el interior, estaba oscuro y solo lo iluminaba la luna y una que otra linterna de teléfono de algunos grupos de amigos que se alejaron de la fiesta.

No sabía a dónde ir, estaba preocupado y con deseo de poder explicar todo lo que estaba atorado en su garganta desde hace días.

Buscó al rededor de 20 minutos. Por los pasillos oscuros, por las gradas donde se tropezó al no ver la cantidad de estas y los baños.

Algunas aulas estaban cerradas, otras no, pero de todos modos, era el único lugar donde no había revisado.

Esperando que esté abierta, se dirigió a su aula, haciendo a un lado la puerta corrediza con éxito.

Iluminó el interior con la luz de su teléfono y en la mesa de fondo, a la derecha al lado de la ventana, Sunoo estaba sentado y cuando lo vió, se paró con rapidez tratando de escapar de nuevo.

-Hey, no- Ni-ki soltó su teléfono, teniendo ambas manos para poder sostener a Sunoo al menos un momento.

Sunoo era rápido, era ágil y con bastante técnica, pero estaba oscuro.

Cuando chocó con un pupitre a la hora de tratar se escapar, en esos tres segundos que tuvo de desequilibrio, lo habían atrapado.

Mientras Ni-ki sostenía sus muñecas, Sunoo estaba en el suelo esperando librarse de más manos del alfa.

-Por favor, basta- dijo Sunoo desde el suelo, ya sin fuerzas para luchar, sin fuerzas para nada.

-Escúchame...

-¿Para qué?

-Por favor...- dijo Ni-ki mirando los ojos de Sunoo, quien inevitablemente conectó miradas y en el momento mismo, se rindió.

No dijo nada, pero para Ni-ki fue un "entonces habla".

-He estado enamorado de ti desde el primero momento en que me miraste, he estado pensando en tus ojos cada día de cada semana desde que nos conocimos, cada vez que miro las flores busco el color que más me hace recuerdo a ti y te doy una para ponerla en tu pelo.

-Pero--

-Hay alguien del club de costura, un chico que es bueno con las telas y agujas.

Sunoo sintió su corazón oprimirse al escuchar de él.

-Ah... ¿Recuerdas ese peluche que te regalé el primer día que fuimos a la feria?

-Era bonito...

-Fue destruido por cosas malas... pero... creí que sí lo reconstruía para ti... ahm... creí que te gustaría.

Ahí la mirada de Sunoo dió un cambio drástico.

-Sé que estuvo mal no decirte lo que hacía pero era una sorpresa para ti, sé que odias pedir algo y-y sé que sabes que yo te daría todo.

El omega estaba callado, ya no ponía resistencia.

-No siento nada absolutamente nada por ese chico, nunca pero nunca ha pasado nada, absolutamente nada, y nunca pasará por el único hecho de que él no es tú y yo solo te amo a ti.

-¿Me amas?

-Cada día, cada hora, cada segundo y cada vez que te miro lo reafirmo, talvez porque lo digo demasiado perdió el significado ¿No?... pero te amo.

-Pero él es más delicado.

-¿Y eso qué? No me gusta que sean así.

-¿Te gusta que sean más rudos?

-Me gusta cualquier cosa, mientras seas tú, cualquier característica, cualquier altura, color de pelo, ojos, estilo de ropa, mientras seas tú.

Ni-ki soltó las manos de Sunoo con suavidad, invitándolo a irse si es que aún quería hacerlo.

-Y-yo en verdad.... en verdad creí q-que te fuiste con alguien más... estaba tan enojado... tan molesto contigo p-porque te di todo...

Sunoo no se fue, en vez de eso, sin cubrirse el rostro,  se mostró tan débil y vulnerable como era en ese momento.

-Y aún con todo eso... no pude odiarte...- su labio temblaba mientras las lágrimas salían de sus ojos -Estoy feliz de que... aunque yo me fui, me seguiste.

Aún con sus lágrimas en sus ojos, sonrió.

-Nunca voy a dejarte ir... aunque me ruegues- Ni-ki levantó a Sunoo para poder abrazarlo -soy egoísta... quiero que seas feliz... pero conmigo.

-Eres un tonto- sujetó la corbata de Ni-ki y clavó un beso en sus labios.

Sunghoon lo había besado, pero no sintió nada más que duda por la acción misma, fue corto pero lo suficiente para que sepa que ese choque de labios que acababa de tener con Ni-ki, siquiera podía expresar con palabras todo el sentimiento que tenía en ese momento.

Estaban en un aula oscura, en plena noche y con poca luz en su radio de visión.

-Sunoo.

-¿Si?

-¿Puedo ser tu novio?

El omega sonrió ampliamente mientras todo en su mente se volvía a estar en orden.

-Puedes.

Aquella fiesta, donde antes de que Ni-ki y Sunoo se retiren, bailaron el vals, abrazados y juntos como ambos habían deseado estar esas dos semanas.

-Te amo- susurró Sunoo, con miedo de decirlo, pero seguro de ser correspondido.

- Te amo- contestó Ni-ki mientras balanceaba sus cuerpos mientras la música seguía sonando.

No eran el centro de la pista, ni los mejores bailarines, tampoco eran los mejores vestidos, ni los miraban.

Pero mientras estaban abrazados, parecía que sólo eran ellos dos en esa pista.

Aún faltaba darle el regalo a Sunoo y fundirse en besos mientras se abrazaban con necesidad.

Pero eso podía esperar.

Cami~