Disfruten el cap.

PERO NO SE OLVIDEN COMENTAR 👹👹👹

COMENTEEEEEEN 👹👹👹👹👹

(Ahora Sunoo y Ni-ki tienen 18 años para cumplir con las nuevas normativas y que no me eliminen el fic 😔)

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-¿Estás seguro?- dijo Ni-ki, subiendo su mirada, pues estaba apoyado en el pecho de Sunoo.

-Sí...

Las manos de Ni-ki empezaron a acariciar su cintura, mientras besaba muy suavemente sus labios.

El alfa de 18 años estaba nervioso, Sunoo sí le gustaba pero las situaciones imaginarias que tuvo con él hasta ese momento eran de citas, paseos nocturnos, besos en la escuela, pero en verdad lo que estaban haciendo si que se sentía bien.

Mientras Sunoo temblaba un poco, por todo lo que estaba sintiendo en ese momento, estaba asustado, pero feliz y aliviado de saber que aquel alfa lo quería.

Ni-ki bajó sus manos de su cintura a su cadera, debajo de su ropa interior.

-T-tú... ¿Alguna vez ya lo hiciste?- preguntó Sunoo subiendo su rostro otra vez.

-No, nunca- besó su cuello, bajando a su clavícula hasta llegar a sus pezones -si algo no te gusta, dímelo de inmediato.

-¡Oh!- Sunoo se sorprendió cuando el alfa metió a su boca uno de sus botones rosados, empezando a chupar y frotar contra su lengua.

-¿Se siente mal?

-N-no... ¡Ah!- apretó la camiseta de Ni-ki entre sus manos.

Mientras chupaba uno, el otro lo estimulaba con sus dedos, apretando y estirando un poco, sin saber si eso era lo correcto de hacer, pero lo hacía.

En eso, su otra mano acariciaba sus muslos, subiendo su mano y bajándola, sintiendo cómo Sunoo comenzaba a temblar y tener pequeños espasmos.

Sunoo en su vida se había masturbado siquiera, no se sentía lo suficientemente lindo, cada vez que se miraba, le daba asco.

En sus 18, casi 19 años de vida, era la primera vez que se sentía importante y delicado, no sentía que debía empujarlo para que le dé su espacio.

No sentía la necesidad de gritarle para que se aleje, no sentía miedo de que se burlara de él, no sentía la necesidad de darle un golpe para que deje de molestarlo, en vez de querer su espacio, quería compartirlo con Ni-ki.

Pero seguía sintiendo un:

No demuestres que te gusta.

Trataba de no sentirse tan bien, trataba de fingir que casi no sentía su toque.

-Voy a seguir- dijo Ni-ki, metiendo más su mano dentro de su ropa interior.

-Bien- dijo Sunoo, tomando aire, tratando de no hacer ruidos extraños como los de hace un rato.

Los dedos de Ni-ki alcanzaron sus nalgas, separándolas a la par, sintiendo cómo el espeso líquido del lubricante natural empezaba a caer.

-No puedes ocultarlo- Ni-ki sonrió mirando a Sunoo. -Esto te gusta mucho.

-No... no es cierto.- desvió su mirada, dejando de mirar a Ni-ki.

-Claro que lo es, solo mírate- metió un dedo dentro, haciendo que Sunoo merda el interior de su labio para no soltar algún ruido.

-Solo... s-solo no se siente mal.

-Esto te encanta- empezó a besar su pecho mientras ese dedo se seguía moviendo -Te gusta tanto que te da pena admitirlo.

-M-mentira.

-¿Ah si?- entonces metió un dedo más, siendo ahora dos los dedos que se introducían con lentitud en su interior -¿Duele?

-No...

En verdad, sí, un poco, pero decir que le dolía le hacía sentir algo débil.

-Bueno- Ni-ki sabía que Sunoo se estaba haciendo el fuerte, que trataba de hacerle saber que no sentía o que le daba igual, pero Ni-ki ya sabía qué hacer, no era un tonto.

Entonces metió un dedo más, sin aviso y sin preguntarle si dolía o no, pero sintió los espasmos en el cuerpo contrario y como Sunoo tenía la vista para arriba, no podía ver sus expresiones.

Debía dejarlo sin salida.

En un solo movimiento lo dejó acostado debajo de él, con las piernas abiertas para él.

Que hambre.

Sunoo cubría su rostro con sus antebrazos, impidiéndole a Ni-ki ver su rostro sonrosado y lleno de placer.

-¿No vas a mirarme?- Dijo el alfa, sacándose su camiseta y bajando sus pantalones.

-¿P-para qué o qué?

-Bueno, al menos no puedes decir que no.

Mientras Sunoo procesaba esas palabras, y cubría su rostro, no lograba entender a qué no se podía negar, pero sintió cómo esos dedos salían de su interior, haciéndolo temblar un poco.

Pero pronto sintió algo más grueso y grande alinearse.

Antes de que pueda reaccionar o decir algo, un dolor más grande y una sensación completamente extraña se apoderó de él.

-¿Aún no sientes nada?- preguntó Ni-ki -tomando una de sus piernas para colocarla en su hombro -porque yo siento muchas cosas.

Aunque Sunoo no lo miraba, el alfa miraba el cuerpo de Sunoo con una sonrisa y con las orejas rojas.

Sunoo ahogaba sus gemidos en su garganta, sin dejar que salgan.

Al menos hasta que fue más profundo.

-¡Ah!- Sunoo descubrió su rostro, sus manos se fueron para arriba de su cabeza, sin soportar el agonizante placer en el que se estaba metiendo.

Primero dolía, luego se sentía raro mientras dolía, y el dolor tomaba un sentimiento muy raro dentro de él, era algo que no pensaba poder experimentar.

Él era el que decía.

"Sí él "sexo" es tan bueno ¿Porqué no existe "sexo 2"?"

Pero no sabía de lo que hablaba.

-E-espera- Sunoo trató de alcanzar a Ni-ki con una mano, dirigiendo por fin su mirada a él -Se siente... s-se siente raro.

-Tomaré eso como un "sigue"- y tomó la muñeca de la mano de Sunoo, empujando más adentro, viendo cómo su rostro se transformaba a uno distinto.

Sus cejas tomaron una expresión preocupada mientras uno de sus ojos se cerraba más que el otro y miraba para abajo, sin creer lo que estaba pasando, mientras sus labios se mantenían abiertos.

-¿Cómo se siente?- preguntó Ni-ki con la respiración algo agitada, sí se había masturbado antes, pero nunca nada se había sentido como estar dentro de alguien y en ese momento de Sunoo, su interior era suave, cálido, viscoso y muy estrecho.

Vas a cortarme la verga de lo estrecho que estás.

-¡Oh!- Sunoo no pudo responder a su pregunta, uno de sus brazos era jalado y el otro sujetaba la almohada que estaba detrás de su cabeza -¡Espera!

¿Él sexo se siente así de bien siempre?

-Responde- embistió más profundo, le gustaba cuando Sunoo se portaba así de engreído, pero en esa situación, cuando literalmente ambos están teniendo su primera vez, no estaba de humor para que Sunoo tenga ese humor.

-¡Ah!- las lágrimas de tantas emociones se juntaron en sus ojos.

-¿No vas a responder?- soltó su muñeca y sujetó su cadera con ambas manos, levantándola un poco para tener más control, o eso creía, era su primera vez después de todo.

-¡Y-yo no-- sintió algo muy al fondo dentro de él, como si su estómago estuviera lleno -O-oh... ¡¡Ah!!

-Entonces ¿Te gusta?- su respiración estaba más agitada, le encantaba hacer eso con Sunoo, le encantaba Sunoo.

Y como no obtuvo respuesta rápida, empezó a embestir más fuerte que antes, más duro, más rápido, haciendo que la cama empiece a rechinar y que el pelo de Sunoo rebote.

-¡E-espera!- las lágrimas bajaban por sus mejillas, no se sentía mal, nada mal, ni un poco.

-Entonces dí cómo te sientes- no paraba ni relajaba el ritmo o la intensidad.

-¡Ah!- de un momento a otro, empezó a sentir un cosquilleo en su vientre, muy parecido a cuando tiene muchas ganas de ir al baño, pero se sentía algo diferente. -¡Espera!- miró a Ni-ki, quien no tenía intenciones de esperar.

-¿Por?

Entonces las cejas de Sunoo se fruncieron y trató de alejarlo, tenía ganas de ir al baño, en su vida había tenido una eyaculación, por lo que no sabía cómo se sentía antes de eso.

-¡Por favor!- dijo Sunoo -¡D-deten-- ahora la sensación era mucho más intensa y Ni-ki no se detenía ni un poco -¡Ah!- con sus débiles manos golpeó su pecho, sin tener resultados.

-¿Cómo se siente?

-¡Ah!- sus manos bajaron hasta las de Ni-ki, donde arañó un poco sus antebrazos -¡¡Ah!!

Mientras Ni-ki embestir con fuerza, Sunoo tenía la mejor primera experiencia que se podría tener.

-Y-ya no puedo.... ¡Y-ya no-- y entonces su espalda se encorvó, sus piernas empezaron a temblar y sus brazos del mismo modo, corriendo se entre ambos abdómenes.

Ni-ki al sentir sus paredes tan estrechas y el calor contrario apretando contra de él, hizo lo mismo, embestido profundamente para correrse en su interior.

Sunoo tenía 0 de educación sexual, le daba miedo por lo que nunca pensó experimentarlo.

-M-me gusta...- dijo Sunoo en voz baja -me... me gusta...

Ni-ki solo recobró su sonrisa mientras apretaba el cuerpo de Sunoo entre sus brazos, en un fuerte y cálido abrazo.

-Me gustas, Sunoo- dijo Ni-ki, esta vez, Sunoo correspondió su abrazo -¿Qué te parece hacerlo otra vez?- besó su mejilla.

-¿Vas a hacerlo más lento?- preguntó -Para... p-para estar más tiempo juntos...

-Claro- aunque Sunoo trataba de ser fuerte, aún tenía miedo.

-Abrázame- dijo Sunoo, cuando vió que Ni-ki quiso separarse -Abrázame más.

-Sí...- lo sostuvo, pero cambió de posiciones, volviendo a dejar a Sunoo encima, aún estando abrazados.

Sunoo se sostenía con fuerza mientras sus labios se encontraron suavemente.

-Hazlo a tu ritmo- Ni-ki acarició sus muslos, dándole a entender qué debía hacer.

Sunoo solo se separó un poco para acomodarse y tratar de sentir ese vaivén dentro de él, movía su cadera de adelante para atrás, logrando su objetivo.

-¡A-ah!- ahora tenía ese espacio para pensar un poco más, porque cuando Ni-ki lo embestir con fuerza, siquiera podía pensar en otra cosa que no fueran las sensaciones.

Entonces, recordó uno de los pocos consejos que su madre le dio cuando estaba entre ebria y sobria.

"Nunca creas lo que un alfa te dice mientras están en la cama"

Pero cuando Ni-ki hablaba.

-Te quiero, Sunoo- el alfa besaba su cuello -me gustas tanto.

No podía evitar creerle.

¿Porqué me gustas tanto?

Sunoo sintió lágrimas llenarse en sus ojos, pero no lágrimas de placer, sino de un extraño sentimiento de melancolía, felicidad y miedo.

-No me dejes...- dijo Sunoo mientras movía sus caderas -p-por favor...- los sollozos se combinaron con sus palabras -No... no me dejes.

-No voy a dejarte- abrazó la cintura de Sunoo. -Así que tu tampoco me dejes- aún con Sunoo encima, empezó a embestir suavemente, subiendo la velocidad de a poco.

-N-no me dejes ¡Ah!- su labio inferior temblaba -N-no dejes de ¡Ah! D-de quererme... p-por favor.

Entonces Ni-ki aumentó la velocidad, haciendo que las uñas de Sunoo se enterraran en su espalda, mientras las manos de Ni-ki se marcaban en su cintura.

-T-te quiero- Sunoo dijo suavemente, como si no quisiera ser escuchado, pero queriendo decirlo de todos modos -Te quiero, Ni-ki.

Así fue como la primera experiencia sexual de Sunoo se convirtió en más que simple sexo, en ese momento, estaban haciendo el amor.

No me lastimes.....

Me tardé, pero en mi defensa, estaba construyendo lo que resta de la historia y cómo todo tiene que tener sentido, este cap es muy importante para lo que resta del fic, por lo que me enfoque en ponerle todo el sentimiento que se merece. Gracias por comentar, nos vemos a la próxima.

Cami~