Habían pasado días y Alec todavía repetía la grabación de los latidos.

Estaba sentado, cerca de una ventana, viendo a los mundanos pasar. Estaba lloviendo, pero eso no detenía al mundo.

Alec podía escucharlos, incluso sin necesidad de repetirla. Estaban grabados en su memoria. Se acurrucó más en el sofá donde estaba, llevando una de sus manos a su vientre. Sus dedos extendidos, moviéndose suavemente sobre su piel, sobre el pequeño bulto ahí.

Cerró sus ojos y pensó en ese día, el que ocasionó todo. Sólo tenía sed y fue imprudente al tomar algo sin preguntar y lo ahora lo agradecía, lo volvería a hacer...

Recordó las caricias de un Magnus sorprendido, los besos, el roce de sus cuerpos desnudos, Magnus entrando en él... Hubo una sonrisa en sus labios, conforme se lo imaginaba, se lo preguntaba. ¿Cómo sería si hubiera sido al revés? Si él hubiera tomado a Magnus, ¿cómo se vería su hermoso brujo embarazado?

¿Cambiaría algo para él? ¿No estaría tan feliz como ahora?

Ni siquiera lo sintió entrar a la habitación. O caminar hasta él. No hasta que se sentó a su lado y lo envolvió en un abrazo, una de sus manos uniéndose a la suya sobre su vientre. Sintió sus labios en su mejilla, más que un beso, fue el roce de su sonrisa. Le abrió sus recuerdos de ese mismo día, sus sentimientos, lo que sintió al hacer el amor con él, y después la angustia al saber que tomó la pócima, y peor cuando se puso mal y tuvo que llamar a Catarina.

"Y a pesar de todo, yo tampoco me arrepiento de esto. Lo llamé "accidente" no porque no lo deseara, hijos contigo es un sueño que no creí posible, pero agradezco que sucediera. Es hermoso que estemos hoy aquí, que estés bien, que esten bien, que estemos los cinco bien".

Alec no había dejado de sonreír, pero las palabras de Magnus aumentaron esa sensación feliz en su pecho, en su vientre -aunque esos tal vez eran sus hijos-, sus ojos se abrieron encontrándose con los de su brujo. -Por el Ángel, cuánto amo tus ojos, Magnus. Que uno de nuestros hijos los tenga será una bendición. Ver esos hermosos ojitos en alguien más. Cada día. Creo que es nuestro pequeño cazador de sombras quien va a heredarlos, porque, ya sabes... No serán ni brujos ni cazadores normales.

Magnus sonrió, recordando la visión de sus hijos. Feliz de que Alec no se sintiera mal porque uno de sus hijos tuviera "ojos de demonio". -Lo normal es aburrido, no es nuestro estilo, Garbancito... Me gustaría llamarlo Raphael, si no te molesta.

Alec frotó su nariz con la de Magnus y dejó un fugaz beso en sus labios. -Claro que no. Sé lo que Raphael Santiago significó para ti. Te importaría si...si ese brujito de ojos azules...

El ronroneo de Magnus lo detuvo. Alec lo miró con sorpresa.

-Lo siento. Es que voy a tener hijos. Uno será brujo, como yo, y tendrá tus ojos. Esa mirada de cielo tuya, Alexander Esto más que una poción de amor, parece de los sueños. Es un sueño todo esto. Y por supuesto, puede llamarse Max, mi amor.

Alec sintió los dedos de Magnus acercarse a los suyos sobre su vientre, rozarse juntos, y se negó a entristecerse. Dondequiera que Max estuviera, su hermanito debía estar feliz por ellos.

-¿Y nuestra princesa?

-Hermosa también. Con esa piel tan pálida como la tuya.

Alec sintió esa "pálida piel" calentarse. -Creo que tendrá unos ojos dorados, muy parecidos a los tuyos. Pero me refería a su nombre, ¿cómo la llamaremos, Magnus?

CONTINUARÁ...

Hemos llegado a 100k de lecturas 😱 gracias por eso ❤

¿Ya saben cómo se llamará?

Pregunta, ¿prefieren a Alec o Magnus embarazado?
Yo tengo de ambas, ya saben:

Embarazo de Alec: Hermoso accidente, Hijo de la luna, El silencio del amor, La estrella de Magnus, Equals

Embarazo de Magnus: Encadenados, Mi único

Embarazo de ambos 😱: Felicidad compartida

¿Cuál ha sido mi historia mpreg que más les ha gustado y por qué? 😻