Capitulo II: Despedido (Einar)
Cuando la curandera salió del cuarto, entró la reina.
Estaba avergonzado, me había enamorado de la persona a la que debo odiar.
-Eres idiota o que? La dejaste escapar! -Me gritó la reina
-Lo siento su majestad, pero era la única manera en la que me podía mantener con vida.
Ella se acercó y me abofeteó.
-Te enamoraste de ella. Por eso se fue a quien sabe dónde!
Me sonroje, aunque no sabía por qué era: por recordar sus hermosos ojos o por vergüenza.
Su majestad me miro con desaprobación.
-Creo que ni Christian podría haberme decepcionado peor. Anda, estás despedido.
Me la quede mirando, perplejo. Las palabras que uso simplemente me hirieron.
Christian había dejado morir a su padre porque temía por su vida propia. La misma noche que Kira Fasuto había robado sus joyas y destruido al amor de su vida. El caso es que Christian fue desterrado, solo acompañado de diez guardias.
-Que estás haciendo ahí parado? Muévete!
Me levante corriendo, agarre un libro y me fui.
"Einar!" Me preguntaran, "por qué un libro? Qué hay de todas tus pertenencias?"
Verás, querido lector, ese libro griego es lo más valioso que tengo. Claro que no se leerlo, pero debo encontrar a alguien que lo sepa.
Tras varias horas de caminar, comprobé la situación en la que estaba. El frío iba aumentando poco a poco, y, aparte del libro, no traje nada. El hambre aumentaba poco a poco. Mis piernas se debilitaban y mis párpados se cerraban.
Decía encontrar refugio.
Y rápido.
No me di cuenta de una pelirroja cabellera escondiéndose tras las sombras... hasta que fue demasiado tarde.
-Kya!
Una voz femenina sonó detrás de mi, al mismo tiempo que veía el pie de alguien y me dejaba inconsciente.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro