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Diana no cabía de la felicidad.

Fue muy fastidioso para ella no poder hacer las cosas por si sola, pero sabía que era por su bien, al más mínimo esfuerzo sus puntos se podían ir y así, ocurrir un sangrado.

Por esa misma razón los hermanos D'angelo estaban muy al pendiente de ella, y si no eran ellos eran sus padres y suegros.

La ayudaban a levantarse de la cama, a ir al jardín o a la cocina, en cuanto a bañarse los hermanos D'angelo se turnaban para ayudarla a bañarse, ella no se molestaba por eso, claro está, es más era lo que más le gustaba, que ellos la mimaran tanto.

El tema de sus hijos era otro, estaba muy pegada a ellos, la primera semana dormía con ellos en su cama mientras Ethan y zack a cada lado de ella.

Podía amamantarlos a los dos a la vez, su leche parecía nunca acabar, tanto así que tuvo que empezar a sacarla en biberones.

Eran los bebés más tiernos que había visto pero ya se les veía el carácter que iban a tener.

-¿Estás seguro que Edan es tu hijo?-Pregunto Diana a Ethan cuando le estaba cambiando el pañal y Ethan estaba acostado en la cama viéndola.- tiene el genio de zack, mira su carita, pareciera que estuviera enojado todo el tiempo.

-Si, cien por ciento seguro- dijo Ethan sonriendo e incorporándose para darle un beso en la frente al bebé.

-Las malas mañas se pegan, no aprendas esas cosas de tu papá hijo.

Ambos rieron por el mal chiste de Ethan, pero era cierto, Edan era un niño muy tranquilo solo lloraba si tenía cólicos o cuando su hermana se sentía mal, pero de resto, no lo hacía y siempre tenía la carita sería y hasta con el ceño fruncido. Era una copia en miniatura de zack.

En cambio Zoe era todo lo contrario, también era tranquila, pero si no comía cuando ella quería lloraba hasta volverlos locos y solo quería que la tuvieran en brazos y hablándole, era una bebita que le gustaba la atención, y a los abuelos les encantaba dársela.

Eran los bebés más consentidos de la familia.

Y la prensa estaba sobre los futuros herederos del imperio D'angelo.

No los dejaban ni a sol ni sombra, hasta en las consultas con el pediatra estaban los paparazzi.

Los bebés D'angelo encabezaron la portada de la revista Moda's, eran el boom del momento. Y ni se diga el día de su nacimiento, hasta el alcalde fue al hospital a ver a los herederos D'angelo.

Diana estaba un poco incómoda por toda esa atención en los primeros días pero luego Zack, de una manera muy sutil, les dijo que se mantuvieran al margen de ellos si no querían perder su trabajo, y como no, si ellos eran dueños de más de la mitad de ese estado y partes de otros, no tuvieron más que hacer caso y hacer las cosas al ritmo de ellos.

-Tengo unas terribles ganas de ti mi reina.

-Y yo de ti mi amor, pero solo esperemos un poco más ya casi termina la cuarentena.

-Pff. Ya me duele la mano, además no es igual.

- Bueno pero... Hay otras formas de complacerte - le dijo mientras se acercaba a él y besaba sus labios.

Estaban en la cama, que era muy grande por cierto, Diana coloco una barrera de almohadas para Edan y se concentro en él nuevamente.

Ethan devoró sus labios con delicadeza pero con pasión y deseo.

Cómo la deseaba y era la mayor tortura no poder enterrarse en ella por esperar la fulana cuarentena, eran los cuarenta días más largos y tortuosos de su vida.

Diana le quitó el pantalón de pijama que tenía Ethan puesto y bajo la atenta mirada de él agarro su miembro y lo masajeo suavemente.

Ethan gimió bajo acomodándose mejor en la cama para disfrutar de lo que su mujer le iba a dar.

Diana lo metió en su boca chupando la punta de su miembro, para luego lamerlos como una paleta.

Eso a él le encantaba, de hecho cualquier cosa que ella le hiciera le encantaba.

Diana lo metió más en su boca mientras lo succionaba llegando hasta su garganta, sintió unas leves ganas de vomitar pero eso no la pararía con lo que empezó.

Le gustaba hacerle sexo oral, su semen sabía... Bien, de hecho. Era un tanto dulzon en cambio el de Zack era más salado.

-Mi... Reina, como extrañaba esto.... N.no creo q.que resistas mucho.

-Correte, quiero probarte.

-No, lo siento- dijo Sentándose y besando sus labios mientras la sentaba sobre él.

-Ethan-susurro en sus labios, mientras agarraba su cabello en un puño- solo falta una semana-dijo ella dandole acceso a su cuello para que el lo besara más a gusto.

-A la mierda esa semana que falta, te necesito y se que tú también lo quieres, déjame sentirte. Voy a hacerte el amor como te gusta.

Volvió a besarla, quería sentirla, saborearla, hacerle el amor hasta olvidar que estuvo a punto de perderla, quería enterrarse en ella y escucharla gemir.

-Es.espera, con el niño a.aqui no- dijo Diana muy excitada.

-Yo lo llevaré a su cuna- la voz profunda de Zack se hizo presente, haciendo que ella se sobresaltara sobre Ethan, acción he saco un gruñido de su parte.

-¿Desde cuando estás aquí?-dijo ella

-No mucho- dijo Zack, acercándose a la cama sin quitarle la vista a su sexy trasero que estaba descubierto.-les daré privacidad.

Cargo al niño en brazos con cuidado y luego se acercó a ella besándola salvajemente haciendo que ella gimiera, gemido que murió en la boca de él.

¡Demonios! Eso era algo que la exitaba demasiado, estar sobre el miembro de uno y besada por el otro, la hacía sentir dueña de ambos, no pudo evitar moverse sobre Ethan.

El no perdió la oportunidad y agarró a su miembro y lo coloco en su entrada.

-Uff. Mi reina, estás tan húmeda.

Se movió solo un poco para que ella supiera sus intenciones y solo eso basto para que ella se levantará un poco sin romper el beso con Zack, y Ethan la penetró haciendo que ella bajara poco a poco con las manos de él en sus caderas.

Un fuerte gemido salió de Diana, haciendo que tapara su boca con las manos no quería despertar al bebé pero le era imposible.

Sentía un leve dolor, pero también sentia que le ardía un poco, era una sensación incómoda, pero estaba muy excitada como para ponerse a pensar en eso.

-Llevate a nuestro hijo- le dijo ella a Zack.

- Lo que pidas preciosa. -le dijo él dandole un casto beso- disfruta, Zack vio a Ethan y le dió un asentimiento con la cabeza queriendo decirle con la mirada que no la lastimaras. Se dió la vuelta y salió cerrando la puerta tras él.

Cosa que Ethan no pensaba hacer, el no era de tener sexo muy salvaje, eso se lo dejaba a Zack, ese lado sado que le gustaba a su mujer Zack lo podía llenar muy bien, y eso a él no le molestaba, en lo absoluto, los tres se complementaban muy bien.

Diana volvió a sentarse en el miembro de Ethan que estaba más grueso por la excitación que tenía, Diana repitió la acción un par de veces más hasta que la sensación de molestia dentro de su vagina desapareció y solo placer era lo que sentía.

Abrió los ojos y vio a Ethan sonriendo de forma tan sexy que la puso más excitada aún. El no pudo más y la tomo de las nalgas y se arrodilló en la cama haciendo que ella enrollara las piernas en sus caderas.

Aunque tenía un par de kilitos de más por el embarazo, cosa que no le diría porque no le gustaba a ella, le era muy fácil para el moverla a su antojo para marcar el ritmo de las embestidas ella lo agarro de sus hombros y echo la cabeza hacia atrás dejandose hacer todo por el.

Una sensación en sus pechos le hizo abrir los ojos nuevamente, se sentía como cuando sus bebés lloraban por la leche, observó a Ethan y este tenía la cara muy colorada, cosa que ocurría cuando estaba muy excitado, pero está vez estaba un poco más.

El estaba viendo sus pechos, con la boca abierta respirando pesadamente por las embestidas que le daba, vio lamerse sus labios para luego ver sus pechos que estaban botando leche, gruesas gotas continuas saliendo de sus pezones mojando el tonificado abdomen de él.

Ethan no aguanto más, ver cómo sus pezones estaban erectos y goteando por alguna extraña razón lo éxito más.

Con un brazo abrazo su cintura y con el otro llevo su mano a uno de sus pechos y los chupo como si fuese un bebé. Pero no espero que cuando la leche tocara sus papilas gustativas su piel se erizara, sabía... Sabía...- Dulce, con ra.razon nuestros hijos no qui.quieren despegarse.- le dijo el entre cortadamente por las embestidas y los chupetones que les daba a cada seno. No quería desperdiciar ni una gota de su leche.

- ¡Oh, mi amor! Me voy a... Mmmm...

-Correte mi reina, correte conmigo.

Y no hizo falta más, un par de embestidas mientras le chupaba uno de sus senos acumulando la leche en su boca y se corrió junto con ella, era la sensación más placentera, llegar al orgasmo juntos, eso era algo exquisito para ambos.

Diana lo tomo de su cabello para besarlo y lo que recibió junto con el beso fue un traspaso de leche, la misma que están estaba acumulando en su boca.

-Prueba lo dulce que estás, me encanta.

-No hagas eso. - le dijo ella un tanto apenada.

-No es la primera vez que te echo leche en la boca- le dijo guiñándole un ojo- Además está sabe mejor.

Volvió a besarla y juntos se acostaron en la cama a descansar un poco, Diana poco a poco se quedó dormida en los brazos de su amado.

-Mi reina, no sabes cuánto te amo - le susurro mientras le acariciaba la espalda.

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Una semana después.

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-N.no... ¿Que...?-dijo ella frustrada porque él se había detenido justo cuando estaba apunto de llegar, y ya era la tercera vez que lo hacía, que la dejaba con esas ganas de llegar y se detenía, la estaba torturando, lo sabía.

-Te has portado muy mal preciosa. - dijo el dando una lamida en su intimidad llegando a su clítoris hinchado y chupándolo sonoramente.-no pudiste guardar tu reposo como era debido. - volvió a chupar su clítoris.

Quería agarrarlo del cabello para que dejara de torturarla y siguiera dándole más de ese rico sexo oral que le estaba dando, pero no pudo, tenía las manos amarradas con una de sus corbatas y le era imposible moverlas.

-Quieta, o será mayor el castigo.

-Ya, po.por favor- dijo sollosando. Era mucho lo que sentía, sentía que necesitaba llegar, quería su orgasmo.

Una lágrima todo por su mejilla y a Zack se le estrujó el corazón, no le gustaba verla llorar y menos para que le de placer, algo que el le podía dar sin ningún problema.

-No llores mi amor- le dijo besando sus labios y quitando el amarre de sus muñecas.

-Entonces deja de torturarme y Follame, hasme tuya.

El la volvió a besar salvajemente, con hambre de más de ella- eres mía desde el primer momento que te ví, solo te quiero para mí. - ella sabía a qué se refería, a él no le gustaba compartir lo que era suyo era sumamente celoso, la única excepción era Ethan y no había el más mínimo problema con eso, es más era como si ambos les exitada compartir la misma mujer, como si fuese una fantasía cumplida en todo momento.

- Entonces Follame, te necesito dentro de mi- le dijo ella molesta porque no hacía lo que ella quería.

- No se diga mas- y sin aviso la penetró profundo sacando un grito de puro placer por parte de ella.

El era enorme, y grueso, le gustaba recibirlo siempre pero hacía tiempo que no lo hacía con él, desde ese día que nacieron los bebés para ser exactos, y demonios, como lo había extrañado y necesitado.

Casi todos los días lo hacía con Ethan pero Zack no quería hacerlo aún, quería esperar a que terminara su cuarentena, para que ella estuviera deseosa de él, como ahora.

Sus paredes lo succionaba de una manera tal que si no tuviera la resistencia suficiente ya su hubiera corrido desde el mismo instante que la penetró.

- No sabes cuánto deseaba esto, estar así contigo, sentirte completamente.- le dijo él mientras la embestía y colocaba sus piernas en sus hombros para que pusiera entrar mejor en ella.

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Cinco años después.
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-¿Nana y mis papás dónde están? - pregunton Zoe, entrando a la cocina después de haber estado en la piscina.

- Estan en el despacho mi niña, pero no los vallas a interrumpir están trabajando y sabes que a tu papá no le gusta que lo interrumpan.

- Si, recuerdo como se puso la otra vez cuando entre sin avisar. Solo quería saber que era lo que hablaban en ese idioma tan raro.

-Era chino mi niña, pero ya sabes que no debes ir, espera a que terminen. Ten las galletas de tu hermano están listas.

-Gracias nana.

Zoe salió a la piscina donde estaba su hermano Edan en una colchoneta inflable en medio de la piscina.

-Hermanito ya están las galletas listas.

Edan salio del colchon inflable y nado hasta la orilla a comer las galletas que Zoe le había traído.

- Gracias Hermanita. ¿Papá dónde está? Dijo que vendría a nadar con nosotros.

- Están trabajando, dice la Nana, así que tenemos que esperar. - suspiro dramáticamente.

- Bueno, comamos galletas mientras los esperamos. ¿Ya pensaste a dónde quieres ir para nuestro cumpleaños?

-Nop, pero no quiero una fiesta de cumpleaños.

-Si, yo tampoco quiero.

Estaban pensando dónde irían para su cumpleaños número seis cuando Diana entro con un traje de baño de dos piezas.

Luego del embarazo quedó con una barriguita que por más ejercicio que hiciera no se fue y ni hablar de las estrías, al principio no le gustaban pero después las empezó a amar luego de que se aclararan, parecía una zebra de tantas estrías en la barriga pero, ya no le importaban, las había ganado con el embarazo de sus hijos y eso era el mejor recordatorio que podía tener.

Además de que los pechos le habían quedado unas tallas más grandes y ni hablar de las caderas y muslos que los tenía más gruesos, y sus esposos estaban encantados con el cambio de su cuerpo, si antes a Zack le encantaba su trasero ahora más y Ethan moría por esos pechos grandes, le gustaba como rebotaban cuando la follaba.

Se sentó en una de las tumbonas y vio a sus hijos hablando en el colchón inflable que estaba en medio de la piscina

-Sus papás ya vienen mis amores

-Esta bien mama- dijeron ambos niños al unisono.

Estaba quedándose dormida cuando escucho el grito de Ethan -¡BOMBAAAA!- y luego el ruido del agua.

-Papaaaa- gritaron Edan y Zoe a mismo tiempo.

- Mi amor ¿que haces fuera del agua?- dijo Zack acercándose a Diana.

-Estaba esperándolos, pero me estaba durmiendo.

- Me di cuenta, ven vamos al agua.- dijo dándole un beso y cargándola para lanzarla al agua.

- No. No. No. Bájame bájame.- dijo ella intentando bajarse.

- Oh no, es hora de que despiertes.

Y se lanzó con ella al agua.

- Estas loco- dijo nadando junto a sus hijos y Ethan.

- Mama si parecía una bomba. - dijo Edan.

- Una bomba muy bonita ¿Verdad papi?- dijo Zoe a Ethan, Diana solo le sonrió y le dió un beso en la mejilla a sus hijos. Los amaba con locura.

- Si, mi princesa - le dijo Ethan

- ¿Ya pensaron que quieren de cumpleaños? Disney, Orlando, Italia- dijo Zack comiendo una de las galletas de Edan.

-Son mis galletas papá, Zoe me las trajo. Dile a mami que te haga las tuyas.

-¿No vas a compartir tus galletas con tu papá favorito?, Además a tu mamá le quedan horribles. - le dijo Zack fingiendo indignación.

-esta bien- le dijo en un susurro- pero que papá no se entere, porque se pone celoso.

-Secreto de hombres.-le dijo Zack, chocando los puños con Edan.

- ¿Papi, que tanto secreteas con Edan?

-Cosas de hombres mi princesa- le dijo zack nadando junto a ella.- y dime ¿qué quieres de cumpleaños?

-¿Van a querer una fiesta? - dijo Ethan

Diana los veía desde una orilla de la piscina, estaba feliz, se sentía plena, completa, no necesitaba más.

Después de todo lo que vivió para poder estar con esos dos hombres, que eran el pilar de su familia, y ahora sus hijos que eran el motor de su vida, no pedía más, lo tenía todo, esposos, puesto que se habían casado hace cuatro años, dos hijos maravillosos, una hermosa casa, unos suegros espectaculares, y sus padres que estaban más unidos que nunca.

¿Que más podía pedir?, Simplemente nada, tenía todo lo que quería y necesitaba.

Pero aún les faltaba mucho por recorrer y vivir como una familia, los hermanos D'angelo se estaban expandiendo a otros países, sus hijos estaban creciendo, y quién sabe que cosas le dejara el futuro, pero de una cosa estaba segura, todas las viviría y disfrutaría con su familia, ya no estaría sola, ella era la reina de esa familia y tanto Ethan como Zack, se encargarían de darle todo todo lo que ella necesitará, quisiera y más.

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FIN.
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BUENO MIS AMORES HASTA AQUI LLEGA NUESTRA PEQUEÑA HISTORIA DE AMOR. NO QUISOERA QUE TERMINARA PERO BUENO, ASI SON LAS COSAS.

ESPERO LES HAYA GUSTADO, ME ENCANTO ESCRIBIRLA, MAS ADELANTE LA ESTARE EDITANDO PARA LOS QUE QUIERAN RELEERLA, PUEDE QUE LA TENGA EN PDF, QUIEN SABE, TODO PUEDE PASAR.

TALVEZ HAYA UN BOOKTRAILER, CUENDO ESTE LISTO SE LOS HARE SABER.

ESPERO SUS OPINIONES Y NO DEJEN DE MOSTRAR SU AMOR A MI HISTORIA CON SUS ⭐...

AGRADECIDA CON MIS FIELES LECTORES SIN USTEDES NADA SERIA POSIBLE.

@Zoylen21
@VargasVargas050
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Se me escapan unas fieles lectoras perdóneme no recuerdo sus User pero están aquí ❣️.