Primero que nada, esta historia se desarrolla entre los años 70ts y 80ts, en un universo donde los alfas, omegas y betas conviven en plena armonía como una sociedad común, no contiene ningún cambio con respecto a las guías omegavers normales; sin mas, espero que disfruten de esta historia.

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Min Yoongi, es hijo del dueño de la empresa, Fuyu, quien se encarga de crear centros comerciales en todo Seúl. Su padre se casó muy joven para poder adquirir su herencia. La madre de Yoongi, solía ser una omega muy dulce y refinada, quien lo cuidaba y mimaba a todas horas, sin importar que fuera mal vista por las demás madres "estrictas". Claro que su mamá podía ser muy estricta, pero eso no evitaba que lo dejara disfrutar de sus etapas a su tiempo.

Al menos así era su madre, hasta que en el cumpleaños número 15 de Yoongi, después de solicitarles vía telefónica a sus padres que llegasen rápido a casa, para que pudieran ir a ver los fuegos artificiales del parque de atracciones, sus padres tuvieron un accidente de auto. Desafortunadamente, en aquel accidente su madre perdió la vida y eso dejó muy triste a Yoongi.

Su padre, después de un año de terapia superó la muerte de su esposa, y continuo solo con los cuidados de su hijo, mientras que Yoongi después de la terapia encontró algo más que a sus 17 lo liberaba de todo estrés, presión y tristeza, siendo así que todo solucionaba con un poco de sexo.

Yoongi se declaró bisexual ante su padre a los 17, el hombre a cargo de su cuidado no quiso intervenir, ya que seguramente su difunta esposa apoyaría a su hijo en todas las decisiones que tomara, por lo que el alfa dio rienda suelta a los excesos que la vida de un adolescente ─casi adulto─ puede tener. Su padre agradeció enormemente que al menos fuera responsable y siempre usara preservativos, pero, llegó a un punto en que ver que su hijo no llegaba más que a ducharse para volver a salir por días le preocupo. Así que, decidido tomó la decisión de que lo mejor sería una presencia femenina en su vida.

Min Doyung, comenzó a salir con una antigua amiga de la preparatoria, la cual se había divorciado por los malos tratos y vida tan pésima que su marido les daba a ella y a su cachorro de la misma edad que Yoongi, cuando creyó conveniente decidieron casarse, el único problema fue que no dieron aviso a sus hijos.

Jung Hoseok, es un omega común, no es muy rico ni muy pobre, su padre es dueño de una línea de hoteles, pero a pesar de tener dinero los limita mucho. A su padre le encanta fingir que todo en su vida va de maravilla, desde una esposa a la que mando a operar ─Al punto en el que él la viera perfecta─ hasta obligar a Hoseok, a ir a una escuela muy costosa solo para que hablaran bien de él.

La realidad es que una vez dentro de casa, su madre era abusada y golpeada día con día por su padre. Al adolescente Hoseok, se le reprime de todo, no puede reírse, porque es de mala educación, si baila es por "marica y débil", Los colores llamativos es porque está loco, por más que su madre lo amara, su padre en un abrir y cerrar de ojos lo destruía con solo un comentario. No está de más decir, que esa vida no le gustaba.

Era un chico de 15 años el cual estaba experimentando un "crush" con el capitán del equipo rival de Basquetbol, no podía salir del closet por miedo a su padre, así que solo se conformaba con mirarlo, hasta que aquel arrogante, egocéntrico y muy narcisista alfa comenzó a hablarle, pero solo para fastidiarle lo único que amaba.

Cada día era lo mismo, había escogido ese deporte ya que bailar no era opción, todos los días se quedaba tres o cuatro horas extra para practicar convirtiéndose en el capitán de su equipo agua, al principio todo era perfecto, al menos hasta que Min Yoongi llegó a su escuela.

El maldito era guapo, buen estudiante y excelente jugador. Los rumores decían que en la cama era una bestia y por más que Hoseok intentaba disimular no podía dejar de mirar al joven en cada entrenamiento, al grado de que lo notaron y comenzaron a fastidiar.

Min, cuando podía le proponía pasar la noche juntos, ya que por su orientación sexual no le importaría regalar una noche con un poco de buen sexo, pero ¿Qué clase de hijo sería si se larga la noche con el?, semana tras semana sacaba esa idea de su mente, al menos así fue hasta que cuando cumplió 18 años, su padre al fin se decidió y firmo el divorció, dejó a su madre en aquella casa y él se mudó de país. Aún les mandaba dinero, pero eso no era suficiente y al menos para poder comer o dormir sin generarle gastos a su madre, así que por recomendación de uno de sus mejores amigos decidió vender contenido algo subido de tono para ganar dinero sin la necesidad de trabajar por horas, lo único que tenia que hacer era grabar su delineado cuerpo sin la necesidad de mostrar su rostro.

Al menos así sucedía, hasta que su madre comenzó a hacer maletas, le dijo que se irían a vivir a su nueva casa, que estaba por contraer matrimonio con un buen hombre, que lo cuidaría a él y a su madre con el amor que se merece, incluso le propuso empezar con las clases de baile, pero eso para Hoseok le parecía molesto.

─¿Pero esta es nuestra casa? ¿Por qué no viene el a vivir con nosotros?

─Cariño, la idea es dejar esta casa para cuando tú quieras independizarte, además su hijo quiere que se conozcan y así poder comenzar una vida de hermanos ─ la peli negra abrazó a su hijo, pero fue empujada un poco por la noticia.

─¿Hermano? Dirás Hermanastro, ¿por qué no es hijo tuyo, o sí? - Hoseok miró con un puchero a su madre.

─Tienes razón, pero procura no ser grosero, es un muchacho encantador y muy amable, lo conocí ayer y hoy vendrá mi nuevo esposo a conocerte, espero se lleven bien.

─Está bien mami, mientras tu seas feliz todo estará bien, no te voy a generar ningún problema, te ayudare a preparar la cena - Hoseok abrazó a su madre y después subió a su habitación para poder darse un baño y arreglarse para la cena.

Después de terminar de ayudar a su madre con todos los preparativos para la cena, se sentó un momento en el sofá para revisar sus mensajes pendientes, encontrándose de nuevo con los odiosos mensajes de Min quien le proponía pasar un "buen rato, si es que no estaba ocupado chupando alguna otra verga"

Fastidiado de ese idiota simplemente eliminó la conversación y comenzó a ver videos, hasta que el timbre sonó y su madre emocionada corrió a abrir la puerta.

─Vamos cariño, ya llegó ─ La pelinegra se retiró el delantal y sacudió un poco su vestido rojo antes de tomar aire y abrir la puerta.

─ Esta linda mamá, tranquila─ Hoseok se paró detrás de ella para darle apoyo.

Con una sonrisa la mujer abrió la puerta recibiendo a un apuesto Alfa rubio de traje quien tenía un ramo de flores, pero en cuanto el hombre comenzó a disculparse y un joven camino tras de el Hoseok no se esperaba ver al chico que siempre lo molestaba en un traje hecho a la medida color negro, resaltando la maldita belleza de aquel patán.

─Hijo, él es Min Yoongi, será tu hermano a partir de hoy, espero se lleven muy bien.

Hoseok no reaccionó, su cara era de pánico, mientras que aquel alfa sonrió ladino al momento que extendía la mano a su ahora hermanastro.

─ Un placer conocerte, soy Min Yoongi.

Holi... espero les guste a mi me esta encantando la idea.

No se olviden de votar y comentar, nos leemos pronto golosos.

Amaya Aiko.