Una semana después 1 de septiembre 1995

Luego de una semana que paso bastante rápido de día, pero muy lenta de noche para el gusto de Antares. Los sueños la siguieron hasta el colegio, creyó que quizás al no estar en la mansión Black estos dejarían de atormentarla, pero resulto todo lo contrario. Se despertaba como a las 4am y luego no lograba conciliar el sueño o había veces que tenia miedo de dormirse, no le gustaba las cosas que veía, pero había otras que la hacían sentir cómoda. Entre esos 3 meses, logro saber que se trataba de una perspectiva de un chico y por su vestimenta se basaba de algún Slytherin, creyó que quizás se trataba de una broma de algún ex estudiante... pero, ¿Cómo lograría entrar ese hechizo en ella si hacia una semana de su estancia en Hogwarts y los sueños son desde antes? Sin más, descarto su idea.

Dejo su libro de dibujos en su mesita y se dispuso a dirigirse al baño para asearse, anhelaba que llegara este día. Extrañaba tanto a sus hermanos y a Rolf, solo esperaba que Orión quedara   en Gryffindor, pero era más que obvio que sucedería. Lo que no sabia es que sucedería con el pequeño Lycoris.

Luego de alistarse, salio de su cuarto y fue hasta la sala de estar, ahí ya se encontraba Lucas y Aidan, Cordelia siempre era la ultima en levantarse. Se acerco hasta el sillón donde estaba Lucas y se dejo caer al lado de este, cuando levanta la vista del libro le hizo una seña con la cabeza para que apoyara la suya en sus piernas, ella sabia que significaba mimos en el pelo, ni loca se negaba a eso y no tardo ni menos de 10 segundos que ya le había hecho caso. Mientras Aidan, tenia una maceta en frente suya tratando de hacer florecer una flor, de eso se trato su semana, aprender a manejar sus elementos.

Todos podían hacer cosas pequeñas, Lucas logro elevar una bola hecha de agua de un jarrón, Antares con el chasquear de sus dedos podía prender velas, Cordelia logro hacer un mini remolino de viento con hojas y Aidan se puso como meta hacer florecer todas las plantas que había en la sala. Luego de un rato, apareció Cordelia y los cuatro se dirigieron a la mesa de la sala, apenas se sentaron el desayuno se hizo presente y una carta para todos, cada uno agarro una.

Se trataba de lo mismo que habían escuchado la noche anterior, por boca de la vicedirectora. Más reglas, pero estas ya eran generales:

*Desayuno y almuerzo serán en las mesas de sus respectivas casas, la cena la compartirán en la mesa de los guardianes del gran comedor.

*Ser el ejemplo para el resto de sus casas.

*No meterse en problemas.

*No podrán revelar el manejo de sus elementos a nadie, no hasta que sepan controlarlos al 70%.

*Ser justos con los estudiantes de años menores

No eran muchas reglas, pero las suficientes para que Antares y Aidan larguen un suspiro. Los otros dos los miraron con confusión.

-¿Qué sucede?- largo la hufflepuff con el seño aun fruncido

-No meterse en problemas... justamente yo no se cuanto aguante- soltó la leona, mientras que el chico slytherin asintió y comento-Yo tampoco soy muy bueno en mantenerme al margen de las reglas, no son mi fuerte

El ravenclaw negó con la cabeza mientras sonreía- Bueeno, tendrán que mantener las apariencias por lo menos la primera semana, luego veremos como los controlaremos.

Un capítulo cortito por ahora🤭